Capítulo 11
El plan consiste en una trampa en donde yo soy la carnada, pero hay más. Con la información que tienen los guerreros, adueñarse del poder requiere de unos cuantos pasos. El monstruo debe estar parado en la hora justa y en el lugar indicado. Debajo de este tiene que haber un dibujo ritual, y el guerrero más fuerte debe clavarle una daga ceremonial en la cabeza. De esta manera, el Gran Señor sería expulsado y eliminado de nuestro mundo.
—No entiendo cómo harán que sepa que estoy aquí. —Me quedo parada delante de la transcripción en el suelo y miro hacia los árboles en los que todos se esconden—. ¿Acaso recuerdan que ese bicho tiene conciencia?
—No es tan inteligente, si se deshace de sus seguidores —contesta Terir, uno de los guerreros.
Tienen un punto, es un monstruo después de todo.
—Puedes hacer ruido —acota Darey—. Aunque de todas formas es obvio que conoce tu aroma. Vendrá, estamos expuestos aquí.
Cierto, la última vez que lo vi, estábamos en el bosque.
Veo que los árboles se mueven, entonces me paralizo. Tengo miedo, pero no voy a huir. Debo garantizarle un futuro próspero a mi hijo. Rompe las ramas que quedan, entonces lo visualizo otra vez ante mí.
Sus ojos rojos me observan, abre su hocico mostrando sus dientes, colmillos por los cuales cae una gran cantidad de saliva.
—Pi... lar. —Su larga lengua se mueve por sus caninos.
¿Qué esperan estos? ¿Qué me desmaye?
Me sobresalto cuando acerca su garra, pero varias sogas llegan al enorme bicho y un poco de alivio aparece en mí. Aunque no mucho, teniendo en cuenta que todavía me está observando y sus largas uñas están tan cerca de mi cuerpo.
—¡¡Rápido!! —grita Darey, levantando la daga, y yo retrocedo.
Cuando el monstruo ve que doy pasos hacia atrás, a los guerreros se les dificulta sostener las sogas, así que me detengo, manteniendo la compostura para que puedan matarlo.
Mi esposo le clava la daga, entonces el bicho, chilla, dejando un alarido desgarrador entre los presentes. La garra que se mantenía suspendida hacia mí, termina cayendo mientras un enorme viento es proporcionado hacia Darey, como si una energía entrara en él.
Los gritos cesan, y todo se vuelve silencio.
Yo mientras editaba el capítulo: Qué buen capítulo 💖
Hay que tener en cuenta que esto lo escribí en noviembre, así que me emociono como si nunca lo hubiera leído, amo mi memoria de pez jajaja
Adiós al monstruo, pero... tenemos otro monstruo, el dueño del título ❤️
Aunque bueno, hay más de un monstruo en esta historia, y no necesariamente tiene que tener la forma de uno.
Saludos, Vivi.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro