Mientras Camila entretenía a Valeria hablando con ella, Eva aprovechó a echarle en su bebida un poco de escopolamina*, y así potenciar el efecto de ésta. El plan de las dos muchachas iba sobre ruedas. Querían drogar a la joven y dejarla totalmente sin voluntad y que cuando despertara no se acordara de nada. Valeria en ningún momento sospechó de sus dos compañeras. Sabía que Camila era capaz de cualquier cosa, pero no podía pensar en que fuera capaz de tanto, por eso se relajó.

Cuando finalmente Valeria perdió el conocimiento, entre las dos amigas la llevaron a la habitación de invitados. La echaron en la cama y la desnudaron, dejándola en ropa interior. Justo Valeria recibió un mensaje de Pamela preguntándole cuándo iba a ir a casa, y Camila le contestó haciéndose pasar por Valeria diciéndole que se quedaba a dormir en casa de Eva porque había bebido algo de alcohol y no le había sentado muy bien. A Pamela le pareció algo raro, pero sabía que su hermana se había ido al cumpleaños de la tal Eva, y si le había sentado mal lo que había bebido, no le pareció mala idea que durmiera en casa de su compañera.

Camila aprovechó para hacerle fotos. Pensaba dormir con la chica y de paso sobrepasarse ya que la tenía toda para ella, pero Eva no se lo permitió. Eso ya era pasarse de la raya y no quería participar en eso con Camila, así que no le quedó otra a ésta que dormir en el sofá. Pero antes de irse a dormir las dos, vistieron de nuevo a Valeria, para que cuando ésta se despertara, no se diera cuenta de nada.

A la mañana siguiente, antes de que Valeria despertara, Camila buscó el correo de la madre de Diana del bufete, el cual no le resultó complicado encontrar, y le mandó las fotos que le hizo a Valeria con un correo que se acababa de crear. La joven tenía claro que había llegado el momento de que Valeria y Bianca dejaran de reírse en su cara. Ahora iba a ser ella la que se riera de ellas. Les iba a dar su merecido a las dos. Ellas habían jugado con fuego y ahora les tocaba quemarse.

A Valeria le costó despertar, pero cuando lo hizo estaba completamente aturdida. Tenía una resaca considerable y no entendía por qué, puesto que ella creía que la noche anterior había bebido más bien poco.

Cuando se desperezó por fin, le costó reaccionar y saber dónde estaba. Se acordaba que la noche anterior estaban celebrando el cumpleaños de Eva. Pero no sabía por qué se había quedado a dormir en casa de ésta, porque lo que tenía claro que en su casa no estaba. ¡Joder!, no se acordaba absolutamente de nada.

Valeria se levantó de la cama y se dirigió al comedor. Ahí se encontraban Camila y Eva desayunando.

-Hola bella durmiente, vaya horas de levantarse. Ya no llegamos a la clase de las once.

-Joder, no sé qué me ha pasado. No entiendo nada, ayer no bebí tanto como para que me haya despertado tan tarde, no me acuerdo de nada y encima me duela la cabeza que parece que me va a explotar. Eva, ¿Tienes algo para el dolor?

-Sí, claro. Ahora te traigo algo. ¿Quieres desayunar con nosotras?

-No, me iré para mi casa a cambiarme de ropa e iré a la próxima clase. Si me doy prisa llego. Aunque no sé si lo mejor es irme a dormir durante toda la mañana, porque estoy fatal.

Y es lo que hizo la joven. Se fue rápidamente de allí y se dirigió a su casa. No quería estar más tiempo del necesario con Camila y Eva.

Esa mañana Bianca se despertó de muy mal humor. No había pegado casi ojo por tener a Valeria en su cabeza. Era ya hora de darse una ducha, vestirse y bajar a desayunar con su hija.

Ya en el desayuno, Bianca no pudo evitar preguntarle si sabía algo de Valeria.

-No mamá, no me ha escrito. Espero verla en la universidad. Ya le preguntaré.

-Muy bien hija. Espero que esté todo bien. Yo me voy ya al trabajo que hoy tengo un día ajetreado. Además hoy es fácil que salga a tomar algo con varios abogados.

-Umm, ¿entre ellos Noelia?

-Sí hija. Tenemos que celebrar que Carlos ganó un juicio complicado. Él nos dijo que nos invitaba después del trabajo a tomar unas copas. Así que ya te escribiré a ver al final qué hago.

-Vale mamá, diviértete si sales. Te lo mereces. Y ten cuidado con Noelia.

-Jaja, mejor dicho que tenga cuidado ella conmigo...

Bianca le dio un beso a su hija, fue a lavarse los dientes y se marchó corriendo hacia el trabajo. Antes de poner el coche en marcha, miró el móvil para ver si tenía algún mensaje de Valeria, pero le desilusionó no ver ninguno. Estaba nerviosa por saber qué había hecho la joven durante esa noche. Sólo le faltaba morderse las uñas.

Valeria se fue corriendo a su casa. Pamela ya se había ido al instituto. La joven se tomó un café rápido. Se dio una ducha de cinco minutos, y se fue rápidamente hacia la universidad. Había perdido las dos primeras clases y no quería perderse ninguna más. Pero además no se encontraba nada bien. Tenía pensado escribirle a Bianca cuando estuviera por fin tranquila en la universidad, entre una clase y la otra.

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*Escopolamina: O la llamada burundanga. Es conocida como la droga zombi al ser capaz de reducir la voluntad y la memoria de las personas que están bajo sus efectos. Esta droga es utilizada por lo delincuentes para llevar a cabo delitos como el robo o la agresión sexual.

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