Me levante de mi sucia cama y me bañe, me vestí y me fui al comedor. Hoy era martes, hoy nos dan una sopa misteriosa, que normalmente no sabe rica, arroz, carne de cerdo y una fruta, normalmente el jugo es de mora, pero hay casos donde el jugo es diferente y lo mejor de todo, si tú quieres, puedes comer el postre, un pudin, los martes siempre se han diferenciado todos los días por poder comer pudin. Fui a la cola para poder comer, era bastante larga, tenemos a muchas personas, pero tenemos comida para todos, además tenemos cultivos para sacar comida, por si en algún momento se nos acaba las provisiones. Cogí mi comida, le agradecí a mi amigo el cocinero y me senté, en un lugar donde nadie me podría molestar, porque para mí, no hay nada peor, que me hablen mientras como, así que normalmente me hago alejado de todo el mundo, pero hoy fue diferente, una persona que no conozco se acercó a mí y se sentó en mi mesa, espero que no haga preguntas.

- hola, mi nombre es Emilio un gusto – no le respondí, ni siquiera lo vi a la cara – como te vi tan solo quería acompañarte.

- déjame solo, estoy disfrutando mi comida.

- lo siento, pero eres ciertamente misterioso y como no tengo nada mejor que hacer, me acerque a ti.

- soy una persona normal como tú, como todos a tu alrededor, solo tengo buena puntería y soy inteligente, fin, ahora vete.

- me quedare callado, voy a comer y después de esto me dirás unas cosas, vale.

- está bien, solo si después me dejas en paz.

- obvio, lo que pasa es que soy el nuevo compañero del grupo delta y como dicen que eres el mejor, tengo cierta curiosidad hacia ti, por eso la pregunta.

- solo cállate y déjame comer, luego si quieres te cuento todo lo que quieras, pero déjame comer.

Él se calló, gracias, que persona tan irritante, pero no lo culpo, yo siempre han dicho que yo soy el mejor de todos, yo no sé si esto es cierto, aunque me halagan que digan eso. Después de un tiempo, termine de comer, lo más rico era el pudín y pude comerlo en paz, además hoy voy a hacer una misión muy peligrosa y si muero, que mi última comida sea deliciosa y que la pueda disfrutar. Yo lo miré fijamente y sonreí.

- ¿Qué quieres saber? Solo te responderé una pregunta.

- ¿Pueden ser dos?

- ahí va la primera y si, le queda una – el ríe sarcásticamente.

- vamos hablar seriamente.

- está bien, hazme dos preguntas, pero solo dos.

- ¿Qué se siente salir en las misiones? Ya sabes, yo como soy nuevo, no se mucho y quiero saber eso.

- es fácil, es un miedo, tú sabes que cuando sales, puedes morir, sabes que en cualquier momento puedes morir, así que eso te hace disfrutar pequeños momentos, como comer en silencio, sin que nadie me moleste, pasar tiempo con las personas que quieres, además cuando sales, lo único que te mantendrá vivo, es tu inteligencia, tu habilidad y las ganas de querer volver, cada vez que salgas, piensa en la persona que más quieres que este aquí, y hazlo por esa persona, yo cuando salgo me digo, voy a volver, lo hare por tal persona ¿entiendes?

- algo así, entiendo el punto, que siempre tenga la persona que quiero en mi mente para dar lo mejor de mí.

- exacto, veo que entendiste, bueno, dime la siguiente pregunta.

- claro, ¿Cómo llegaste aquí? ¿Qué hiciste antes de estar aquí?

- vaya, eso es muy largo, pero te lo contare, así que ponte cómodo, y por favor, no llames a nadie más, solo tu escucharas esta historia, no me interrumpas y ponte cómodo, porque te lo contare, si quieres que pare, solo dime y ya, recuerda que en una hora voy a una misión importante, no sé si tú también.

- sí, yo voy a esa misión.

- entonces, creo que perderás todo este tiempo escuchando mi historia ¿estás seguro de esto?

- sí, no tengo mejor que hacer, además me estas intrigando mucho, quiero que me cuentes todo.

- está bien, lo hare – tomo un poco de aire – íbamos con mi familia para un paseo, no recuerdo donde íbamos, no recuerdo mucho de esos días, creo que la mitad me lo invente, pero es lo único que tengo, esos días son un recuerdo borroso, que tengo que recordar varias veces para no olvidar. Un auto nos chocó, el caro se voltio, yo salí de él y mire a mi alrededor, como toda la ciudad era un caos, recuerdo gritos, la gente corriendo y las personas mordiéndose, dispararos y muchas cosas, yo me quede quieto, analizando todo, el miedo me tenía paralizado, todo el lugar enloqueció, luego vi como una persona se acercaba a mí, él no tenía piernas, pero de alguna manera seguía vivo, nunca creí que eso era un zombi, siempre pensé que eso era pura ficción, pero no lo era. Mi cerebro reacciono, no podía creer que esto era verdad, pensaba que era un sueño, pero no me iba a quedar quieto averiguarlo, así que corrí, creo que me metí a un parqueadero de un edificio, no estoy muy seguro de eso, pero lo que si estoy seguro es que termine dentro de un edificio, agachado y con miedo, no sabía que estaba pasando, apenas podía pensar, mis piernas estaban temblando, me senté en una cama y no podía moverme de ahí, me quede un tiempo quieto y en total silencio, escuchando los gritos, disparos, autos chocando, incluso se me dificultaba respirar, yo me repetía en mi cabeza, es un sueño, esto solo es un simple sueño, nada de esto está pasando – pare unos segundos para tomar mi jugo – luego escuche la puerta abrirse lentamente, mi cuerpo se paralizo y solo pude ver como se abría, el miedo era inmenso, pensaba que era mi fin. Por suerte, me equivoque, solo era una persona con un rifle, el me vio y se acercó, mi miedo se disminuyó, pero no desapareció, porque no sabía cuáles eran las intenciones de la persona. Él se acercó a mí y me puso una mano en mi hombro y me dijo ¿Estas bien? Yo no podía responder, solo me quede callado, no sé qué dijo después, solo recuerdo que me dio una pistola y me dio unos consejitos, aprendí sobre el seguro y varias cosas del arma, luego lo seguí a él, porque tenía un maldito rifle y necesitaba que alguien me defendiera, así que no tenía nada mejor que hacer, además si se pasaba conmigo y empezaba a hacer cosas raras, le pegaba un tiro. Salimos al pasillo y mierda, había muchos zombis, el empezó a disparar mientras yo encontraba un lugar donde salir, probe cada puerta, hasta que una abrió, pero, había un zombi en la puerta y como mi "amigo" estaba ocupado disparando como loco y gritando, tuve que matarlo, saque el arma y le dispare hasta matarlo, esa fue mi primera muerte hacia un zombi, entramos al cuarto, y cerramos el cuarto con seguro, pero no podíamos quedarnos aquí, debíamos seguir moviéndonos, hasta llegar a un lugar seguro – tome un poco de aire, me estaba cansando de tanto hablar y esto solo es el principio – escuchamos unos golpees en el armario, el abrió y de ahí salió un zombi, él se alejó y le disparo, varias veces, pero ese era diferente, el zombi no moría, era inmortal, así que lo que decidió es arrancarle la cabeza con el arma, le pego varias veces en la cabeza hasta que no tuvo más cabeza, él pensó que lo había matado, pero no era así, porque lo cogió de la pierna y lo hizo caer y se acercaba a él, él le disparo todo el cargador del arma para soltarse, pero no pudo, al final el zombi le cogió la cabeza y se la aplasto. Luego el zombi se levantó y camino, como no tenía cabeza, no podía ni ver ni escuchar, con las manos se ubicaba, tocaba todo lo que podía, y así se podía ubicar. Yo rápidamente abrí la ventana y baje por las escaleras de incendio, al final corrí, todo lo que pude y lo más rápido que pude, no podía creer lo que vi, aunque, no me resultaba extraño, este día ya era bastante raro – tome otro sorbo de mi jugo – luego encontré un auto, con las llaves puesta, así que me subí y lo prendí, ya estaba más seguro, pero un zombi se puso adelante mío, así que lo arrolle, el problema es que no se murió, seguía vivo y me concentre tanto en el que no vi el camino y me termine chocando, el carro se volteo y estaba en un bosque, no recuerdo mucho como llegue ahí, yo solo me solté el cinturón y salí de ahí, ese mugroso zombi aún estaba vivo, pero estaba atrapado, no se podía mover, así que yo rápidamente escape de ahí, no recuerdo bien que paso después, solo sé que un soldado me encontró y me llevo a un barco, con varias personas, era un lugar seguro, porque los zombis no podían llegar a nadar, así que todo estaba bien. Allí conocí a dos grandes personas, uno llamado Alex, un hombre con bonitos ojos, un buen culo y un cuerpo bastante bien, pero su hermana, era perfecta, su culo era mejor que el de su hermano, su pelo cuando estaba suelto lo volvía loco, no era tan largo y era de color negro, esos ojos tan hipnotizantes, su físico que me dejaba asombrado, y su voz, tenía la voz de un ángel, tan bello y hermoso – una sonrisa se marcó en mi rostro – era tan hermosa, era lo más bello que había visto o una de las cosas más bella que había visto, así que me acerque a ellos y me hice amigos de ellos, quería que esa hermosa mujer fuera mía, su nombre era Juliana, hasta el nombre es precioso, pero si me quedaba con su hermano estaba bien, cualquiera de los dos me gustaba, pero tengo más preferencias por ella que por él. Todo iba tan bien, mi vida era tan feliz y tan contenta, hasta que todo salió mal, los que cuidaban el lugar vieron películas de zombis, porque revisaban si tenían mordidas o rasguños y si esto era así, los llevaban a una celda para encerrarlos y ver qué pasa, pero no revisaron a los animales. Lo que supe es que había un gato zombi, que mordió a su dueña, rápidamente mataron a la dueña, pero el gato escapo y eso era un gran problema, todos nos pidieron estar en nuestros cuartos y si saliéramos sin permiso, nos matarían. Pasaron los días y no hubo noticias, hasta que sonó una alarma y todos salimos de nuestros cuartos, nos dijeron que la nave está en peligro, que tenemos que evacuar, todos salieron corriendo, empujando a todos, pero lo peor no era la gente que estaba apurada, que puede que hayamos matado a personas pisándola, no, lo peor fue que varias personas se convirtieron en zombis y empezaron a morder y a matar a los otros. Por suerte, pude salir con Juliana del bote, pero – tomé un poco de jugo, ya se me estaba acabando mi jugo – su hermano no salió del barco, no sé si fueron las personas o los zombis que lo mataron, pero no salió vivo de ahí. Luego de eso, nos escondimos y vivimos en la ciudad, solo yo y Juliana, en ese tiempo, me enamore más de ella, era tan, perfecta, amable, cariñosa y chistosa, es la mujer perfecta para mí, o eso yo pensaba, todo era tan bonito, pero un día, mientras ambos dormíamos, unas personas nos agarraron y nos encerraron en prisiones separadas, pero aun podíamos hablar, hasta que un día, nos vendieron, ya no éramos personas, éramos objetos de valor, a mí me cambiaron por alimentos y a ella por munición y armas, pero, nos compraron personas diferentes, así que me alejaron de mi princesa Juliana – me termine mi jugo y mi voz cambio a una un poco más triste – a partir de ahí no la he vuelto a ver, me entrenaron en combate y en el manejo de armas, por las noches soñaba con ella y seguía luchando por ella, bueno también aprecio mi vida y la quiero seguir viviendo, pero mayormente era por ella. Luego de un tiempo me volví un experto, pero seguía siendo un esclavo para ellos, pasaron los meses, no sé cuántos, creo que un año, pero pude escapar, un día, hubo explosiones y una guerra en el lugar, yo aproveché esto para escapar, cogí mi arma y tres granadas, mientras se mataban yo corrí de ahí, lo más rápido que pude y lo más lejos, pero no estaba solo, alguien me siguió, como vi que no era ningún peligro, lo deje seguirme, con un tiempo me volví amigo de él, ya que era con el único que podía hablar, me termino cayendo bien y fuimos amigos, nosotros fuimos a un supermercado para tener una fuente de alimentos cerca, al final, todo estuvo bien, la pasamos muy bien, hasta que un día, unos exploradores llegaron, para recuperar comida, yo obviamente les apunte con el arma, no sabía cuáles eran sus intenciones – tome un poco de aire – ellos me dijeron que son exploradores, que están buscando a una persona y explorando el lugar y nos explicaron que son de una pequeña ciudad y que si queremos nos iban a llevar, yo por obvias razones acepte, era seguridad y amigos, pero primero teníamos que encontrar a esa pequeña persona, así que tuvimos que seguirlos. Luego de unas horas, encontramos un motel, donde estaba nuestro objetivo, al parecer, alguien moribundo llego a la ciudad y les suplico que vaya donde su hermana, le dio la dirección y fueron, no sabemos si está viva o si se fue, pero nuestra misión era buscar en todos los cuartos hasta encontrarla, además le dieron una foto para saber si era ella. Luego de un rato de buscar, la encontramos, pero ella ya había muerto, no sabemos si por deshidratación o por desnutrición, porque no tenía un tiro de bala ni sangre en el cuarto, le cerramos los ojos y nos íbamos de ahí, pero, uno de los estúpidos exploradores escucho algo, nos dijo que lo sigamos, que escucho un ruido y podría ser una sobreviviente, así que fuimos a la puerta, pero el solo entro, el vio a un zombi comiéndose a sus intestinos, él se alejó de ahí, para no causar problemas, pero un zombi lo agarro y le mordió el cuello, él le disparo, hasta matarlo, pero, eso llamo a varios zombis y nosotros tuvimos que correr, yo active una granada y se los lance y exploto, matando a varios zombis y dándonos unos valiosos segundos para poder escapar. Al final nos escondimos y él nos contó todo lo que paso, por eso es lo que había visto, luego el otro explorador le disparo en la cara, matándolo, yo le empecé a decir lo estúpido que era eso, que no sabíamos nada de ese virus, incluso puede ser inmune al virus, luego nos peleamos, pero mi amigo nos paró y dijo que no deberíamos pelear, que ya tenemos muchos problemas como para pelear entre nosotros, nos calmamos y nos dormimos por horas, nos desertábamos para hacer vigilancias, el siguiente día, agarramos todo y fuimos al lugar casi sin problemas, nos dejaron entrar, entregamos todas las armas y el explorador le explico todo a los demás. Yo me convertí en un soldado en muy poco tiempo y llevo aquí como tres años, intento cambiar ciertas cosas aquí, pero no quiere, y si preguntas, mi amigo es el cocinero, a veces sale para tomar aire o para coger ingredientes, pero para nada más, esa es mi historia, ahora cuéntamela tuya.

- la mía es simple, cuando paso el apocalipsis estaba en mi cuarto, cuando todo paso, me quede viviendo un tiempo ahí, cuando alguien me salvo, ahí pase a un lugar como este y me hice amigo de un espadachín muy bueno, que por cierto es de nuestro grupo, viví un largo tiempo ahí, hasta que una guerra entre las personas solo destruyo y nos largamos, nos habían dicho de este lugar, decían que era bonito y al final vinimos aquí y esta es mi historia.

- bueno, fue un gusto amiguito, nos vemos después, descansa y pasa tiempo con tu amigo.

- lo hare y una última pregunta.

- dijimos dos, no tres.

- vamos, por favor, solo una más y no te molesto más.

- está bien, pero esta vez es la última ¿dime?

- ¿aun tienes la esperanza de volver a ver a Juliana? Porque cuando hablabas de ella se te formaba una sonrisa – yo sonreí – en este momento lo estás haciendo.

- pues sí, sinceramente sigo teniendo esperanza de verla, aunque puede que ya está muerta, pero aún no pierdo la esperanza, pero ya tengo ojos en otras personas, no tan hermosas como ella, pero no están nada mal – el río -nos vemos.

- fue un gusto, hasta luego, nos vemos en la misión.

- claro que si – cada uno se fue a diferentes lugares, es un chico agradable, puede que sea mi amigo.