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Tercera Persona P.O.V.
Antes de la llegada de Daenerys y los aliados a Rocadragón
EN EL DOMINIO
Mientras Lady Olenna ya estaba a mitad de camino para Rocadragón. Después de la batalla de la carretera de oro, Ser Bronn saca a Jaime Lannister de las profundidades de Blackwater Rush, y a la orilla, después del intento fallido de Jaime de matar a varios Dothraki. Bronn le dice a Jaime que la única razón por la que lo rescató es que nadie puede matar a Jaime hasta que Bronn reciba la recompensa que le deben a los Lannister. Jaime, bombardeado, comenta el poder destructivo de Drogon solo liberado, pues vieron el tamaño y la envergadura de este cuando los sobrevoló para llegar a Altojardín, y se da cuenta de que están en gran peligro si Daenerys despliega los tres en futuras batallas. Bronn asegura que no estará por aquí para tal asalto, ya que Jaime lamenta su deber de informar lo que le sucedió a Cersei. Bronn cree que sería más seguro para él saltar de nuevo al río que lidiar con la ira de Cersei.
Mientras tanto, en la Carretera del Oro, Tyrion Lannister evalúa la batalla, viendo a los soldados Lannister que no huyeron ni se fueron capturados. Los prisioneros de guerra están siendo rebañados por los Dothraki a Daenerys, y Drogon encaramado detrás de ella amenazante y majestuosamente. Daenerys apela a ellos, planteando los rumores extendidos sobre ella por la reina Cersei, y las advertencias de brutalidad que la Reina dragón traería -quemando casas, y asesinando a familias. Ella asegura que no está aquí para asesinar, sino para destruir la rueda de poder que rueda sobre los ricos y pobres por igual, para beneficio de nadie, sino gente como Cersei Lannister. Ella les ofrece una opción : dobla la rodilla y únete a ella en su búsqueda para hacer del mundo un lugar mejor que nunca, y ser prisioneros hasta que la guerra acabe y les demuestre que puede ser una buena Reina para Poniente. Tyrion la mira impresionado al oír esto pues creyó que los quemaría a todos a cenizas. Sólo unos pocos se arrodillan al principio; Drogon, aparentemente insultado por su negativa a aceptar el mando de su madre, les grita y rápidamente ceden. Sin embargo, Randyll Tarly, su hijo Dickon, y un puñado de hombres se niegan. Daenerys convoca a Randyll hacia adelante, donde insiste en que ya tiene una reina. Tyrion recuerda que no se comprometió con Cersei hasta hace poco, y que ella asesinó a la reina, casi destruyendo la Casa Tyrell para siempre. Observa que las lealtades de Randyll son "flexibles" a las que Randyll responde que no hay opciones fáciles en la guerra. Le dice a Tyrion que Cersei es al menos una verdadera persona de Poniente, y que Tyrion es un pariente, habiendo matado a su padre, así como apoyando a un extranjero, trayendo salvajes a su continente. Daenerys acepta la respuesta de Randyll, y se prepara para llevar a cabo una sentencia pidiendo a los Inmaculados que capturen y apresen a aquellos que se negaron a doblar rodilla. Luego emprenden el viaje de regreso a Rocadragón, donde debía enfrentar el trato realizado con la Reina Loba y también agradecer por su consejo pues de este modo no perdió ninguna aliada.
Mientras tanto
EN INVERNALIA
En el Godswood en Invernalia, Bran Stark se ensuela en una bandada de cuervos para volar sobre el Muro hacia las Tierras de Siempre Invierno. A través de los cuervos, ve el ejército de los muertos dirigido por los Caminantes Blancos y el Rey De la Noche, viajando hacia el el norte para recobrar fuerzas y organización. Su reconocimiento continúa hasta que el Rey Nocturno ve a los cuervos, en los que Bran corta la conexión. Le dice a Maester Wolkan que necesitan enviar cuervos a la vez.
Más tarde, en la cámara del consejo de Invernalia, Arya Stark observa al regente Jon Nieve presidiendo una reunión de los señores del norte. Diciendo que la Reina en el Norte debe permanecer en el norte, Lord Robett Glover y Lord Yohn Royce de El Valle de Arryn implican que cometieron un error en su elección de gobernante y que él toma el poder en ausencia de su media hermana Lyanna Stark. Sin embargo, Jon insiste en que Lyanna Stark es su verdadera gobernante que está haciendo lo que ella cree que es correcto para su pueblo y que él es su regente. Después de la reunión, Jon confiesa su frustración en los señores del norte con Arya, quien halaga a Jon por manejar diplomáticamente sus preocupaciones en lugar de cerrar a los señores. Arya piensa que no debe dejar que los señores se salgan con la suya insultando a Lyanna e insinúa asesinarlos. Jon no está de acuerdo, en lo que Arya llama la atención sobre el hecho de que Jon ha cambiado mucho desde que se alejaron el uno del otro tantos años atrás, pues ahora parecía más calculador de lo que ella creía. Perturbado por la racha homicida de su hermana menor y herido por las acusaciones, Jon le dice a Arya que tiene "trabajo que hacer".
Mucho más tarde, Arya acecha a Petyr Baelish mientras camina por los terrenos de Invernalia. Ella lo sigue a sus aposentos personales y lo ve charlando en la puerta con Maester Wolkan. Ella escucha a Petyr preguntándole a Wolkan si está seguro de que "esto" es la única copia. Aseguró que lo es, Petyr responde que "Lord Nieve le agradece por sus servicios". Petyr entonces entra brevemente en su habitación, y se va una vez más. Arya entra en la cámara de Petyr y rebusca a través de su estudio y muebles. Escondida bajo su colchón, encuentra un pergamino. Este resulta ser el pergamino que Sansa escribió hace mucho tiempo a su difunto hermano Robb Stark instándolo a doblar la rodilla al rey Joffrey Baratheon. Arya, sin saber que Sansa había escrito la carta bajo coacción de Cersei en un intento de salvar a su padre Eddard Stark, parece horrorizada. Ella enrolla el pergamino y se escapa de la habitación, ajeno a un meñique sonriente observando desde detrás de una pared.
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