VIII

¿Recuerdas me dices?

Y miro tu cara,

vieja, arrugada.

Y miro tus ojos.

...

Y miro tus ojos.

Es esa mirada...

son tus ojos negros,

me embebo en tu alma,

reflejo mi vida en esa...

en esa mirada.

¿Recuerdas me dices?

Y rueda una lágrima

por mi cara vieja,

vieja y arrugada...

Y miro tus ojos.

...

Y miro tus ojos,

es esa mirada,

recuerdo que un día

me vi reflejada

en tus ojos negros,

bebí, de sus llamas.

¿Recuerdas me dices?

y enjugas mis lágrimas

que ruedan y empapan

mi rostro y mis ansias,

porque sé que un día

fuiste mi esperanza,

porque sé que existes,

porque sé que nada

podrá separarme

de esa mirada.

¿Recuerdas mi vida...?

¿Recuerdas princesa?

¿Recuerdas cariño

que nunca hubo nada

que nos separara?

Y recuerda mi cielo...

recuerda que nada,

ni el tiempo,

ni la ausencia,

ni la lejanía,

ni nada

podrá separarme

jamás de tu alma.

Y miro tus ojos

y siento tu amor.

Y miro tus ojos

y siento

y recuerdo,

y siento

y te anhelo,

y siento

y sé que te tengo.