Jungkook siguió al mayor a través del lobby del hotel una vez se bajaron del transporte que habían rentado en el aeropuerto, planeaban estar al menos una semana en París, por lo que la mejor opción era rentar un auto para poder movilizarse y no tener que estar dependiendo de los tiempos del transporte público. 

El azabache era un cirujano de trauma, estaba acostumbrado a siempre pensar un paso más adelante de lo demás, por lo que tener un auto a su completa disposición era una medida de seguridad que estaba tomando en caso de que algo pudiera sucederle a su hyung.

Taehyung se acercó a la recepción para solicitar una habitación sin dejar que su dongsaeng tuviera oportunidad alguna de pagar.

-- Hola, buenos días, bienvenidos a La Clef Louvre Paris --dijo la rubia mujer detrás del mostrador con un ligero acento francés-- Mi nombre es Alexandra, ¿en qué los puedo ayudar?

-- Buenos días, tenemos un reservación a nombre de Jeon Jungkook para una habitación --musitó el mayor recargándose contra el mostrador, el azabache lo observo divertido, ni siquiera se había percato cuando el de cardio había hecho la reservación.

-- Un momento por favor --pidió la dependienta tecleando en la computadora-- Aquí esta, Jeon Jungkook, habitación de lujo doble, dos camas, reservada para una semana, ¿es correcto? 

Taehyung asintió-- -- Aunque me gustaría cambiarla a una suite presidencial, ¿tiene alguna disponible?

-- Las suites con las que contamos tienen una sola cama kingsize Sr. Jeon, ¿tienen algún inconveniente con eso? --inquirió Alexandra pasando su mirada de un chico al otro, el azabache se había mantenido callado hasta ahora, solo observando el elegante lobby del hotel y toda la decoración que este tenía sin perder el hilo de la conversación.

-- Ninguno, estoy seguro que al señor Jeon no le molestara compartir cama conmigo --respondió Jungkook guiñándole un ojo-- ¿Tienen servicio a la habitación las 24 horas?

La chica asintió sin levantar la vista de la pantalla, una sola mirada del azabache había bastado para hacer que sus mejillas se sonrojaran, era sin lugar a dudas el chico más apuesto que había visto en mucho tiempo, pero había una línea que no podía cruzar al ser su huésped, eso sumado al hecho del hombre castaño que parecía fulminarla con la mirada.

-- Si, el hotel cuenta servicio a la habitación las 24 horas, sala de desayuno y hora de té, y uno de los gimnasios más grandes de la ciudad, el cual podemos mostrarle sin ningún inconveniente --explicó la mujer con un discurso bien preparado mirando fijamente al menor aún con un ligero rubor en sus mejillas pero al mismo tiempo con una mirada coqueta en su rostro-- Las suites cuentan con sala, un pequeño comedor y cocina, y amenidades de la mejor calidad, así como una vista privilegiada del distrito Louvre desde su balcón.

Taehyung quién había notado el coqueteo de la muchacha sin ningún tipo de negativa del azabache quien no estaba respondiendo sus intentos pero tampoco parecía reacio, es más, parecía divertido con la situación. El castaño acercó el cuerpo del contrario rodeando su cintura con un brazo antes de depositar un beso en su mejilla. 

-- Creo que al sr. Jeon y a mí nos encantará quedarnos aquí --aseguró Kim sonriendo-- ¿Puedes modificar nuestra reservación de una vez para que podamos subir a estrenar la habitación? 

La mujer tras el mostrador palideció con el comentario-- Lo siento señor, en un momento.

Una vez modificada la reservación y realizado el check in ambos chicos subieron al ascensor en silencio con solo el sonido del aparato y la ligera música de fondo. Jungkook llevaba ambas maletas permitiéndole al mayor abrir la puerta con comodidad. 

-- ¿Por qué le dijiste eso a Alexandra? --preguntó Jeon entrando a la habitación con su mirada recorriendo todo el espacio-- Fuiste algo grosero.

-- ¿Alexandra? 

Jungkook asintió-- La recepcionista.

 -- Ah, estaba coqueteando contigo frente a mí, eso hubiera sido muy grosero si fueras mi novio --musitó Kim quitándose los zapatos antes de comenzar a recorrer la habitación con calma, no era tan grande como a las que estaba acostumbrado en corea, pero si era mucho más elegante y funcional.

-- Si, si fuera tu novio, pero no lo soy --señaló el menor divertido-- ¿Acaso estás celoso hyungie?

El castaño lo fulminó con la mirada-- No, pero no quiero que traigas a alguien a nuestra habitación, no se supone que hayas venido a ligar Jeon.

-- Creí que querías tener un trío --se burló el azabache retrocediendo a tomar el pomo de la puerta-- Podría volver y preguntarle a qué hora termina su turno, quizás este disponible para unírsenos. 

Taehyung cruzó la habitación en tiempo récord, giró al menor tomándolo del brazo y lo guió hasta la cama donde lo aprisionó contra el mullido material de esta usando su cuerpo-- Me niego.

-- ¿Qué sucede cariño? --inquirió el de trauma pasando los brazos por la cintura del mayor, acercándolo aún más a él si era posible, eliminando cualquier espacio entre sus ambos-- ¿No quieres compartirme? Creí que ese era tu plan.

Kim gruñó antes de besarlo con fuerza, en un beso duro, mordiendo y maltratando los labios cerezas de Jungkook, quien no se opuso para nada al contacto, respondiendo con un beso igual de fuerte, con sus manos amasando el trasero del mayor sin ningún tipo de pudor.

-- No voy a compartirte --musitó Taehyung contra la boca del contrario-- Y ahora voy a follarte hasta que te des cuenta que no necesitas a nadie más.

Jungkook rió-- ¿Así? ¿Y si me niego? 

El castaño respondiendo con una embestida en falso, causando que el menor gimiera ante el roce de sus erecciones-- ¿Lo harás Jungkookie? ¿Vas a negarte a mí? 

Jeon respondió enredando sus muslos alrededor de la cintura del mayor, mientras su boca volvía a colisionar contra la del cardiaco-- No, no lo haré.

Taehyung se levantó con cuidado de la cama intentando no despertar al azabache quien dormía boca abajo con su cuerpo completamente desparramado sobre el colchón, sin percatarse del estado del mayor, mismo que no podía lograr conciliar el sueño con los miles de pensamientos comiéndole la cabeza. Recogió su bóxer del suelo, colocándoselo antes de sentarse sobre una de las sillas fuera en el balcón, no estaba seguro de que hora era exactamente, pero por la obscuridad de la calle y el nulo tránsito de personas podía jurar que era de madrugada. 

Un sonido dentro de la habitación llamó su atención después de un rato y pudo observar al menor removerse sobre la cama, estirándose en todo su esplendor, a pesar de que Jungkook era dos años menor, el azabache se las había arreglado para ser un poco más alto que él. 

Kim lo observó por un buen rato, intentando recordar como era su vida antes de conocerlo, Taehyung había sido muy extrovertido toda su vida con una personalidad tan intensa que incluso podría llegar a parecer falsa o molesta, por eso mismo las amistades no solían durarle demasiado, Taehyung se había sentido muy solo por mucho tiempo sobre todo en casa al haber crecido bajo la sombra de su hermano mayor.

Kim Seokjin había sido un prodigio desde niño logrando cualquier cosa que se propusiera, mientras que Taehyung nunca fue lo suficientemente brillante para recibir la misma atención de parte de su familia, por lo que cuando sus padres intentaron obligar al castaño a seguir los pasos de su hermano, este decidió emanciparse de su familia cuando solo tenía 19 años, teniendo que coordinar una carrera eterna en medicina y trabajos de medio tiempo para pagarla. 

Habían sido tiempos difíciles para Taehyung, así como muy solitarios por su falta de tiempo, hasta que llegó un bonito chico de ojos brillosos y labios color cereza, quien desde el primer momento había logrado coincidir de una manera tan bonita con él. Jungkook también era estudiante de medicina y al igual que él no tenía mucho tiempo libre, por lo que solían pasar tiempo juntos estudiando, casi sin hablar, la mayor parte solo haciéndose compañía, y desde entonces Kim Taehyung jamás volvió a estar solo. 

Cuando Hyungsik le dijo que tenía un astrocitoma, cuando le explico su diagnóstico, Taehyung estaba aterrado, no estaba pensando en si mismo en ese momento, estaba pensando en como iba a reaccionar el menor, estaba tan malditamente aterrado de dejar a Jungkook solo. 

-- ¿Qué haces aquí afuera hyung? --murmuró el azabache tras de él colocándole una manta por sobre los hombros, sacándolo de sus pensamientos de golpe-- Vas a enfermarte.

-- Bueno, no puedo estar más enfermo de lo que ya estoy. 

Jungkook gruñó-- Taehyung...

-- Bien, lo siento, solo quería un poco de aire fresco --respondió sonriendo levemente al menor-- ¿Por qué no vienes a hacerme compañía? 

-- Dame un momento, déjame ponerme algo o se me va a congelar el culo --musitó Jeon haciendo al mayor carcajear.

-- Yo puedo calentar ese trasero si quieres, no tengo ningún problema --se burló Kim abriendo los brazos, invitando al de trauma a sentarse.

Jungkook salió hacia el balcón vistiendo únicamente un pans gris con el torso descubierto permitiéndole al contrario ver su trabajado abdomen y los tatuajes que adornaban su torso y brazo, el menor sostenía una sudadera a juego en una mano y un par de cojines en la otra. Movió una de las sillas hacia un lado buscando crear más espacio y colocó los cojines sobre el suelo antes de sentarse.

-- Ven aquí hyung --pidió. Taehyung sonrió antes de levantarse de la silla, sentándose justo frente entre las piernas del menor-- Alza los brazos, voy a ponerte la sudadera.

-- No soy un bebé Jeon --se quejó el de cardio haciendo caso a la instrucción.

El aludido rió-- No dije que lo fueras Kim.

Una vez el mayor estuve medio vestido, el azabache usó la manta que traía para cubrirlos a ambos, con Taehyung recargado contra su pecho mientras veían el cielo comenzar a aclararse, ninguno de los dos decían nada y sabían que no lo necesitaban, solo estaban ahí juntos disfrutando la compañía del otro como en los viejos tiempos.

Jungkook se encontraba sentado en el pequeño comedor de la habitación con su computadora abierta sobre la mesa y el teléfono sobre la oreja, estaba de licencia por vacaciones pero aún así quería estar al pendiente de sus pacientes y residentes de vez en cuando.

-- Muy bien, dime que tal esta el Sr. Lee --pidió el azabache al chico del otro lado de la línea, Taehyung se encontraba sentado frente a la televisión sin prestar mucha atención, solo dedicándose a matar el tiempo haciendo zapear entre los canales puesto que no entendía el idioma local-- Bien, recuerda realizar visitas constantes Yeonjun, el Sr. Lee necesita constante supervisión en sus quemaduras antes de que el Dr. Mark pueda operarlo, ten especial atención con él por favor. 

El castaño no podía escuchar las respuestas del pequeño residente pero le encantaba escuchar al menor hablar de su trabajo, sabía cuanto le encantaba a Jeon lo que hacía, él había nacido para ser cirujano. 

-- ¿Qué dice Lalisa de fondo? --cuestionó Jungkook al teléfono causando que Taehyung frunciera el ceño al escuchar el nombre de la rubia, jamás había sido su persona favorita, sobre todo porque se dedicaba a hablar mierda de cualquier miembro del personal que pudiera, mientras fingía ser una chica tranquila y respetuosa cerca de Jeon-- Pásamela, no entiendo que dice. 

Kim sabía el enamoramiento que la chica tenía con su amigo, aunque aún no lograba descubrir si era porque le atraía involucrarse con su superior y recibir de alguna forma los beneficios o porque de verdad le gustaba Jungkook, sea cual sea la respuesta, la rubia parecía tenerle cierto rencor al castaño por su cercanía con el de trauma, y si había algo que a Taehyung le gustaba era molestarla.

El castaño se levanto del sillón sin hacer mucho ruido, acercándose al menor mientras este seguía al teléfono.

-- Estoy bien Lalisa, creí que tenías dudas del trabajo, no deberías hacerme ese tipo de pre-preguntas --balbuceó Jungkook al sentir al contrario sentarse en su regazo, la cabeza de mayor fue directo a su cuello comenzado a depositar suaves besos en el-- Si, si, pero soy tu superior y estoy de vacaciones.

Taehyung comenzó a moverse sobre el regazo del menor causando que este gimiera bajito, intentando que la chica tras la línea no pudiera escuchar lo que estaba sucediendo.

-- Dame un momento --pidió tapando la bocina del teléfono contra su pecho-- ¿Qué se supone que haces hyung? 

-- Estoy aburrido bebé, y quiero que me mimes --puchereó Kim sin detener sus movimientos.

Jungkook jadeo antes de unir sus hambrientos labios con los del de cardio olvidando por un momento la llamada, un par de golpes en la puerta anunciaron la llegada del desayuno que habían pedido obligándolos a separarse.  

-- Servicio a la habitación --gritó una voz masculina desde detrás de la puerta.

-- Déjame ir por el desayuno Tae --pidió el jefe de trauma proporcionándole una nalgada al mayor.

Taehyung negó besando una última vez los labios de Jeon antes de separarse con un chasquido ruidoso-- Iré yo amor, deberías terminar tu llamada, mándale mis saludos a Lalisa. 

El azabache observaba comer al de cardio habían pedido un desayuno francés que consistía en una serie de panes con mantequilla, mermelada o miel, bocadillos de jamón y queso derretido, y una serie de bollería que incluía bollos, caracolas y croissants acompañados de una taza de café y otra de té para Taehyung. Viéndolo así a simple vista, comiendo abundantemente como era su costumbre con una expresión relajada en el rostro mientras escribía en una pequeña libreta, podría jurar que se encontraba totalmente sano, pero luego recordaba la verdadera razón de su viaje y toda la tranquilidad desaparecía.

-- ¿Qué haces hyung? --inquirió Jungkook tomando un sorbo de su café.

-- Estoy revisando que deseos podemos cumplir aquí en París --respondió Kim sin levantar la vista del papel-- Creo que podríamos empezar con el tatuaje, podemos salir a pasear por París y entrar al primer estudio que encontramos.

-- De ninguna jodida manera.

-- ¿Por qué no? --preguntó el mayor frunciendo el ceño-- ¿No estás de acuerdo con el tatuaje?

-- No es eso, es tu cuerpo hyung y puedes hacer con él lo que quieras, además yo tengo tatuajes, ¿recuerdas? --aseguró el de trauma señalando su pecho con una de sus manos, continuaba vestido únicamente con un pans gris mientras su torso permanecía desnudo, revelando los tatuajes que comenzaban en su hombro y recorrían todo su brazo derecho-- Con lo que no estoy de acuerdo es con entrar a cualquier estudio, jamás permitiría que te tatuarás en cualquier sitio, necesitamos conocer las credenciales del lugar, verificar que sea limpio y profesional, además de obviamente ver el trabajo del artista.

-- ¿Tanta por un tatuaje? --inquirió el mayor puchereando-- Probablemente me haga algo muy pequeño.

-- No importa el tamaño, créeme me lo vas a agradecer cuando no termines con una infección, llegan con frecuencias a urgencias con alguna --aseguró Jungkook acercándose a observar la lista por sobre el hombro del castaño -- Te propongo algo, podemos ir a comprar ingredientes para el deseo número 8 mientras encuentro un buen estudio de tatuajes, ¿te parece?

Taehyung asintió-- Aunque vas a tener que ayudarme con la cena, soy terrible en la cocina.

-- El punto del deseo es que tu cocines solo --aclaró el menor terminándose el restante en su taza de café de un solo trago-- Pero puedo enseñarte a hacerlo.

-- ¿Seguimos hablando de cocinar gukkie? --musitó mordiéndose el labio.

Jungkook rió-- Eres insaciable Kim, dame un respiro tenía mucho tiempo sin recibir.

El mayor se encogió de hombros-- Esta vez podría ser mi turno.

-- Suena tentador pero tenemos cosas que hacer --admitió Jeon buscando una camiseta en su maleta-- Anda a vestirte bonito, voy a llevarte a pasear.

-- Eres un aguafiestas Jeon --gruñó Taehyung terminando su tostada-- Solo acepto porque de verdad me gustaría conocer París.

-- Estamos en la ciudad del amor hyung, quizás encuentres al chico de tu lista --recordó Jungkook.

-- Si, quizás --respondió el mayor observándolo. 

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