Autora: Stephany Morales

Usuario: Stephmormar

Cuando los tiempos se volvieron difíciles, bajaste la cabeza. Deseaste con fuerzas hacerte un ovillo y dormir profundamente hasta que esto terminase.
La presión, la dificultad, lo caótico de la situación; todo se acentuó de una manera tan injusta que ahora luce imborrable ante tus ojos.

Sé que quieres continuar, sé cuánto anhelas salir adelante. Quisiera darte un consejo. De mano a mano, de víctima a víctima.
Las cosas parecen perdidas, pero incluso los lugares más escondidos han sido encontrados.

Eres una pieza importante en este tablero, y para terminar con este juego es necesario que te mantengas fuerte, y que muy erguido e hinchado de orgullo mires al cielo y recuerdes que no estás solo. Ten presente que incluso para las jugadas más simples, hasta las más arduas, existe una estrategia.

Quiero escucharte gritar que harás lo posible, porque de ti depende.
Así, cuando la dificultad vuelva, puedas mirarla a los ojos y adquirir la valentía de enfrentarla con todas tus fuerzas. De no perder tu brillo, tu poder, todo aquello que te caracteriza.

Soy consciente de que has perdido demasiado, incontables situaciones se han salido de nuestras manos ante esta situación. Hoy en día es difícil ver el lado positivo de la vida, lo sé; pero hoy es el día perfecto para tomar al toro por los cuernos y darle un giro nuevo a esta experiencia.

Recuerda que cada final es la oportunidad de un nuevo comienzo, y recuerda que por cada pérdida que te atormente, nuevas cosas llegarán a tu vida. Nuevas personas, nuevas oportunidades.
¡Descúbrete! Prueba que tantas cosas maravillosas puedes llegar a lograr con tan solo el filo de tus dedos, descubre la inmensidad de tu imaginación y todo lo que la creatividad te brinda. Arriésgate a aprender nuevas cosas, y descubre qué cosas te apasionan. Cuando encuentres aquello que te inunde el pecho de amor, de felicidad y emoción, entonces te percatarás de que no todo está perdido.

Vive por las personas que se fueron, ama, lucha y no te des por vencido.
Tienes la capacidad de ello y más, por el simple hecho de ser tú; y cuando las puertas vuelvas a ser abiertas, te esperaré con los brazos extendidos para recibirte con un fuerte y vigoroso abrazo de victoria. Por todo lo que has logrado, y por todo lo que puedes lograr, ámate.

¡Sí es posible!