Me había preparado mentalmente para la bomba, pero ni con eso pude controlar que mi corazón se rompiera al ver a Cam desesperado por no perderme.

Desaparecí un fin de semana con él, imaginando que podía estar toda una vida así con él. En mi intento de escapar de mi asquerosa realidad, de crearme un sueño en el que pudiera tener más tiempo.

Porque de echo, si se supone que lo tenía.

Aun faltaba una semana para iniciar el plan. Rompería con Cam por teléfono, era tan cobarde que no podía decirle esas cosas horribles a la cara. Cuando vi por los espejos el auto de Nyx, supe que las cosas no iban bien. Supe que no había más tiempo y que debía hacerlo ya. Nyx logró confundir a Cam lo suficiente para que yo me llevara el folder que robe de su habitación y estaba en mi mochila ahora. Y cuando fue tiempo de ponerme mi disfraz, no me toqué el corazón para hacerlo quedar como el malo. No dejé que mis sentimientos me ganaran. No lo dejé con salidas. No dejé de ser el demonio más cruel y siniestro. Y resistí, para salvarlo.

Una vez Nyx arrancó, me derrumbe. Me hice bolita en el asiento del copiloto, llorando desconsoladamente, apretando mis puños hasta enterrarme las uñas. Un intento de evitar salir del auto e ir a gritarle que todo era mentira y yo era la culpable de lo malo en su vida. Para parar a mi cuerpo que corriera a él a pedirle perdón por el daño que le he causado y pedirle que me diese una oportunidad.

Lo peor, esto solo comenzaba. El caos que estaba viviendo no era nada en comparación a lo que seguía. Porque dejaríamos de ser humanas, para convertirnos en los seres más sanguinarios y crueles que jamás han existido. Las probabilidades de morir eran altas, y aun había cosas que debía hacer.

***Texto borrado**

💙