Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Un pasado injustificable

No cabía razonamiento en él, no podía pensar con claridad, no dejaba de llorar, sentía el calor en su rostro tan vivido y doloroso, y estaba a punto de quedarse sin aire porque olvidó por un segundo, cómo respirar con normalidad.

Estaba en el estacionamiento de la gran casa de su padre, intentando calmarse antes de entrar, pero ni siquiera su largo viaje en automóvil, le ayudó a bajar la angustia y la impotencia que lo consumía, porque cada recuerdo de ese día pasaba por su cabeza, desde su última tarde juntos, a esa tragica nota de voz llena de promesas y con una dolorosa despedida.
Lo imaginaba, hasta podía ver las imagenes de toda la tortura que habría pasado, porque su Yoongi no era alguien que se daba por vencido tan fácil, y saberlo, le dolía aún más.

Tragó con fuerza, y fue veloz al entrar al gran hogar de su padre, su secretaría y guardias hicieron el intento de detenerlo, asustados por su rabiosa presencia, pero nada lo detuvo de ingresar a la oficina donde siempre se encontraba, sacando su confiable arma de algún lugar de su cinturón, y apuntándolo sin miedo alguno a acabar con su vida, ya cansado de estar bajo sus órdenes, harto de vivir solo con lo mínimo de ese hombre, dolido porque había encontrado a la única persona que lo veía más allá de su famoso rostro, y se lo arrebató de tal horrible modo, sin siquiera dudar un poco.

La reacción de su padre no fue inesperada, se mantuvo sereno y tranquilo, lo único que llegó a hacer por simple inercia, fue levantar sus brazos, atento a cada uno de sus arriesgados movimientos.

No podía pensar en nada, su mirada se encontraba fija en la de su serio padre, y solo cuando él cambio su gesto cotidiano, a una notoria molestia, notó que no se encontraban solos en la habitación, y que dos hombres ajenos apuntaban a su sien, sin temor alguno de defender a su jefe, hasta de su propio hijo.

—Ustedes, ¿por qué amenazan a mi hijo?— Su voz, casi se sintió desfallecer cuando la oyó, su agarre flaqueó, y cuando quiso incorporarse una vez más, tras verse acorralado por esos dos hombres, notó que ya no le apuntaban, y hasta que estaban abandonado la oficina, sin poder creer la orden de su gran jefe —Seokjin, baja el arma, complicas las cosas.

Ahora le hablaba a él, y de un segundo a otro, Jin perdió todas sus fuerzas, su cuerpo temblaba por completo, y como siempre lo era a su lado, se sintió vulnerable, al punto que su cuerpo comenzó a fallar y su voz no tenía intenciones de salir para responderle.

—No, lo que hizo... ¿por qué?— Su padre se acercó a él, con su imponente presencia, rodeando su escritorio, paseando su vista sin que lo notara, por su rostro su rostro, ese aterrorizado que le recordaba a la de su difunta y amada esposa.

Seokjin no lo notaba, pero ese hombre recordó por un segundo todo lo que había hecho, y lo entendía, comprendía la ira que consumía a su hijo, porque era exactamente lo que el sintió, el dolor de perder a quien amas por alguien más. No podía permitir que ocurriera de nuevo, aunque su única solución fuera el terror y el total control.

—Cuando te cedí mi puesto, te dije que sería difícil, y permitiste que él se involucrará como si no fuera nada. Lee casi te mata, ¿cuántas veces te he dicho que no muestres vulnerabilidad?— La seriedad de su voz, mostraba sus palabras como un regaño, y Seokjin no sabía cómo reaccionar, solo se mantuvo inmovil en su lugar, con la mirada gacha, y con su arma ya apuntando al suelo —Ese chico, te volvía débil, fueron a por Kim Taehyung, gracias a que tú lo permitiste. Intentaba protegerte con mis consejos, Seokjin— Nunca le había hablando de tal forma, hasta Jin pudo jurar que oyó un halo de preocupación sumamente extraño en él, pero no podía dejarse llevar por eso, no quería que su mente aceptara que eso era verdad.

—No, fueron ellos quienes lo secuestraron, fuiste tú quien me forzó tomar el cargo. Yo no quería... No, no quiero seguir con esta vida... Espere mucho para decirtelo, pero... Voy a dejar la empresa familiar, mi trabajo en el medio, y me ire lejos de aquí... Con Yoongi. Esto se acabó— Uso cada centímetro de valentía que le quedaba para confesarle esa verdada, toda su energía se fue en ese firme enfrentamiento, y por primera vez, pudo ver una expresión diferente en su padre, una que jamás creyó posible, una de irremediable y distintiva sorpresa.

Estaba desconcertado y hasta aterrado, escucharlo fue igual a ese recuerdo que últimamente no dejaba de atormentarlo. El día que ella quiso dejarlo para huir con su amante, fue exactamente igual.

Intentó abandonarlo, luego de todo el esfuerzo que dispuso en su matrimonio, de formar con todo su amor a su amada familia, de darle a sus dos pequeños hijos, ella estaba acabando con todo lo que le llevó años formar, solo por un amor cualquiera, uno que jamás entendió, uno que nunca aprobó.

Estuvo histérico, molesto, y furioso. La encerró en su habitación por días, sabiendo que nadie se lo impediría, que tenía poder sobre ella, sobre su familia, sobre todos, hasta del asqueroso de su amante, a quién no dudó en asesinar. El miedo la cambió, los días en forzosa soledad la marcaron, y sin darse cuenta, acabó con la mujer que amaba, solo dejando un halo de lo que alguna vez fue, volviéndola la madre y esposa seria que sus dos hijos recordaban, una de mano dura, voz estricta, y sin felicidad alguna.

Se arrepintió de por vida por dejar que conociera a alguien más, de siquiera permitirle el sentimiento de amar a alguien que no fuera él, un alguién que no la querría como él lo hizo, y sobre todo, se arrepintió de no imponer su doloroso amor con el terror que todo el mundo le tenia, con el que todos lo respetaban. Un amor enfermizo que aún tenía por hijos.

—Jin, todo lo que has hecho, va a perseguirte de por vida, no importa a dónde o con quien vayas, jamás podrás librarte de esto— Juraba que nunca oyó su nombre de ese forma tan familiar, por parte de ese hombre, y también que jamás lo abrazó como lo estaba haciendo en ese momento, debilitando su fortaleza, acabando con su valentía, y volviéndolo un pequeño niño de nuevo, uno que lloro en sus brazos por lo doloroso que fue oír eso.

Ya estaba manchado de tanta sangre, que no tenía retorno, aunque creyera ingenuamente que podría ser feliz, con alguien que veía más allá de su físico, con alguién que lo amaba por sobre todo, no era capaz de seguir, de remontar todo lo que había logrado, de lo que se creía capaz.

Seokjin terminó por salir de esa oficina, con su arma totalmente cargada, con un enojo disperso, y con su alma destrozada.

Ya no sabía lo que haría, y justo como ese hombre quería, volvió a dudar de toda su vida, y fue de nuevo, el manipulable hijo que su padre siempre crió.


💐


Amistades, este es el capítulo con menos YoonJin que he hecho, pero tiene más historia que muchos otros. Es que ya tocaba una vista rápida al pasado de este señor, para tener un poco de contexto de por qué es como es. Él de verdad ama a sus hijos, pero está sesgado, carece de muchas capacidades emocionales y pues nada, me gustan las cosas justas, y cada quien va a obtener lo que merece aquí. Nada más.

En fin, aún tengo mucho en lo que trabajar, pero ya nos vamos acercando al reencuentro y uff, aún pienso en como sera porque hay tantas posibilidades.

Gracias por leer. Besos, besitos, besotes.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro