Llevo varios minutos despierta pero no he querido moverme, especialmente porque no quiero terminar con el momento ahora que sé como se siente y que no sé cuando vuelva a repetirse otra vez.

Es raro que de repente quiera admitirlo pero... ¿Puedes despertar sentimientos por una persona en menos de veinticuatro horas de haberlo conocido? No necesitaba la respuesta porque ya la sabía solo que no sabía si era lo correcto.

-¿Estás despierta? -Escuché su voz ronca y suspire-

-Estaba pensando como quitar tus brazos de mi cintura de la manera más agresiva posible pero no me dio tiempo -Dije levantándome una vez me soltó-

-Bien -Dijo mirándome- Creo que no te va a gustar si te ves al espejo pero lo mantengo, te ves preciosa.

Me levanté corriendo de la cama ignorando las punzadas en mis pies y me mire al espejo del tocador. El fue tras de mi, podía verlo parado en el marco de la puerta de brazos cruzados en el reflejo del espejo.

-Oh por dios -Dije analizando mi cabello- Se está expandiendo, es como una enfermedad ¿Crees que sea contagioso? -Dije mirándolo, estaba sonriendo-

-No creo que sea contagioso, aún tenemos planes para hoy pero si quieres posponerlo... -Negué sacudiendo la cabeza-

-Encontrare la manera de adaptarme, voy a prepararme, no te muevas de aquí.

-¿No deberías desayunar algo primero? -Solté una risa mirándolo con burla-

-Como se nota que nunca has sido un universitario, vete enterando, yo no desayuno, ahora espérame aquí.

De hecho no era tan difícil verme de una forma bonita, no iba a aceptarlo pero sus halagos habían hecho que pensará que no estaba tan mal. Nunca había sido algo además de castaña en toda mi vida, era cierto, pero eso no significaba que me viera mal, de hecho me sentía atractiva.

Mire a Taehyung, había sentido su mirada todo el tiempo desde que había salido de la ducha.

-Te ves bastante contento, que raro.

-No soy un amargado, es obvio que no lo sepas pero soy el alma de la fiesta -Hice una mueca- 

-¿Te soy sincera? No soy muy fan de las fiestas pero aún así he ido a algunas y nadie que sea el alma de la fiesta es como tu.

-¿Se supone que eso es un insulto? -Preguntó divertido-

-Es un insulto sin duda alguna -Dije volviendo a mirarme al espejo-

-Tal vez es porque no has ido a una conmigo -Dijo encogiéndose de hombros- Las chicas con esa experiencia no vuelven a pensar igual sobre los hombres -Sonreí como si me hiciera gracia y lo mire-

-Claro, seguramente piensan que no quieren volver a ver a un hombre en su vida, ahora si ya terminaste de presumir tonterías deberías llevarme a donde tenemos que ir.

-¿Segura que quieres ir así? -Dijo dándole un repaso a mi vestimenta-

Yo me miré de igual forma, no había nada de malo en mi falda rosa y mis zapatos de charol.

-No iremos a ver a la reina Taehyung, 

-Bueno, pero no digas que no te lo advertí -Me encogí de hombros esperando de verdad que no fuera a mencionar un "Te lo dije" en todo lo que quedaba del día- ¿Estás lista? -Dijo acercándose más a mi, asentí con la cabeza-

Tomo mis manos entre las suyas y la frialdad de estás me tomo por sorpresa, seguía preguntándome que se sentiría no estar vivo y si de hecho no sentías nada por eso mismo pero no creía que preguntarlo me ayudara en algo más que en echarme para atrás.

-No te separes de mi ¿Está bien? Puede ser peligroso que estés sola en este lugar -Suspire esperando que lo que iba a decir no fuera a ser tan significante-

-No es como que quisiera estar lejos de ti de todos modos -Dije encogiéndome de hombros- Sabes sobre este lugar más de lo que sé yo así que te haré caso, aunque solo por esta vez.

-Muy bien, aquí vamos...

No sé exactamente si esperaba encontrarme en un lugar brillante con mucho ruido o algo parecido pero la oscuridad que me recibió por su puesto no estaba entre mis planes. Lo único que me mantenía a raya ante mi deseo de querer gritar era sentir la fría mano de Taehyung con la mía.

Que gracioso el hecho de que muchos encontraban confortable la calidez de una persona y yo me estaba sintiendo segura por la frialdad, supongo que son las consecuencias de sentirme atraída por un ser inmortal.

-Bueno, no era el lugar que estaba pensando para mi muerte pero supongo que es lo que gano por confiar en un desconocido -Dije con tranquilidad, después de todo no estaba asustada solo algo nerviosa-

-Si tuviera que matarte ya lo hubiera hecho Jisu -Dijo empezando a caminar y llevándome con el de la mano-

-Bueno, permíteme dudar de eso pero conociendo mis encantos quizás te haya resultado difícil hacerlo -Me encogí de hombros aunque no pudiera verme- Era algo inevitable -Lo escuché reír, que bueno que no se diera cuenta que bromear era mi manera de lidiar con los nervios-

Empecé a ver luz, creo que era fácil hacerlo cuando venía de la absoluta oscuridad, aunque en un principio pensé que solo eran mis ojos acostumbrándose al nivel de luz me di cuenta que no era así al ver los candelabros.

-Rustico -Dije de repente al verlos colgados uno tras otro a cada lado de las paredes de piedra iluminando el camino- Me gusta, creo que es adorable -Mire a Taehyung quien sonreía mientras me miraba, seguramente esperaba algo así de mi parte-

-No tienes idea de donde estamos ¿No? -Abrí la boca sorprendida como si hubiera tenido la revelación de mi vida cuando en realidad no tenía idea-

-¡No me digas que me trajiste a conocer a tus padres! ¡Taehyung! Es demasiado pronto, ni siquiera me has propuesto ser su novia -Y eso por supuesto lo hizo reír-

-Tonta -Dijo negando con una sonrisa- Te encanta jugar conmigo, supongo que no te importará enterarte de en donde estamos hasta que lleguemos a nuestro destino -Hice una mueca, aunque probablemente me lo merecía-

Caminamos por el largo pasillo que parecía no tener final, no sé si se suponía que tuviera idea de donde estábamos aunque se me ocurrían un par de cosas.

No era muy difícil escuchar los pasos, lo raro era no ver a nadie, me extrañe cuando Taehyung se detuvo y de repente las paredes a los lados empezaron a temblar. Di un paso atrás como reflejo pero Taehyung se mantuvo en su lugar mientras las paredes se movían.

Un nuevo pasillo se abrió por completo, los pasos ahora tenían sentido porque decenas de personas empezaron a salir por el tomando distintas direcciones, apreté la mano de Taehyung inconscientemente.

-Está bien, entre tanta gente no nos notarían -Dijo mirándome y suspire-

Lo seguí porque de todas formas no es como que pudiera hacer otra cosa y raramente tuvo razón, las personas de traje formal ni siquiera nos miraban aunque empecé a cuestionarme si eran personas.

-No son personas -Dijo como si estuviera hablando en voz alta- Son demonios ingenuos.

-¿Se supone que sepa la diferencia entre un demonio que no es ingenuo y uno que si lo es? -Negó sin mirarme- Bueno entonces tal vez deberías explicarme.

-No tienen alma, no tienen percepción de nada y únicamente siguen ordenes, no tienen mucho poder tampoco por lo que tienen que transportarse por aquí -Asentí, así que seguramente esto era como un pasaje entre mundos-

-Genial, ¿Falta mucho para llegar? Por más que trato solo veo un pasillo sin fin al igual que el anterior solo que esta vez está lleno de demonios.

-Solo un poco más.

Está vez cuando las paredes empezaron a temblar de nuevo me quede en mi lugar y sentí como Taehyung me miraba, esperaba haberlo impresionado aunque sea un poco.

Está vez las criaturas -Porque ahora dudaba que fueran humanos- No caminaron hacia el pasillo que dejábamos atrás, esta vez nosotros entramos y las paredes volvieron a cerrarse, nos encontrábamos en algo parecido a un pueblo, el techo alto aún era rocoso por lo que supuse que estábamos bajo tierra. Había tenido la confianza de que nadie nos miraría de nuevo pero esta vez me equivoque porque todos empezaron a ver a Taehyung, supongo que lo conocían, luego me miraban a mi, repasaban mi atuendo y ponían cara de hastió, como si no pudieran soportar los colores.

Tal vez si tuviera problemas de confianza podría sentirme inhibida pero por otra parte recibía miradas de envidia por parte de algunas criaturas, tanto hombre como mujeres y aunque seguramente mucho de eso se debía al agarre que mantenía con el vampiro que se veía seguro de todo en su vida iba a atribuirme algo de eso a mi misma.

-Ahora no pasamos por desapercibidos.

-Es culpa de tu ropa -Dijo antes de empezar a caminar de nuevo aunque con menos prisa-

-Claro que no, te miran con deseo como en la discoteca y estoy segura de que mi ropa no hace eso.

-Bueno en ese caso a ti también te miran con deseo -Rodé los ojos- 

-De cualquier forma a ti... -Me quede callada cuando paramos de repente porque alguien se puso frente a nosotros-

-Taehyung... -Dijo la chica pelirroja en un ronroneo mientras lo recorría con la mirada- Hace mucho que no te veía por aquí -Taehyung suspiró como si desde ya estuviera harto-

-Yaoki... Si, he estado algo ocupado -Entonces la chica me miró-

Era como si tuviera el propósito de intimidarme con su mirada, tenía una vestimenta mucho más oscura, provocadora y madura que la mía pero de cualquier manera eso no significaba que iba a dejar que me hiciera menos. así que mantuve mis ojos fijos en los suyos y ladee la cabeza y aunque podía estarla retando me estaba resultando un poco divertido.

-¿Quién es ella? No te veo hace cuatro días y ya te conseguiste una nueva chica -Dijo con una sonrisa provocadora- En realidad no me extraña.

-¿Toda la gente aquí es así? -Pregunte mirando a Taehyung, quien al escucharme me miró con una pequeña sonrisa-

-¿A que te refieres con "Así"? -Preguntó Yaoki, sabía que eso sería suficiente para que a una "Persona" como ella se le bajaran los humos-

-Solo digo, el que seas un demonio o vampiro o lo que sea que eres no hace que los malos modales te queden bien, estoy frente a ti así que si tienes la capacidad de reconocer que no soy un perro podrías hablarme directamente, Taehyung no es un secretario y tampoco tiene porque responder a tus preguntas, tenemos un lugar al cual ir así que si no te molesta salir de nuestro camino...

En su mirada solo había vergüenza, no había sido mi intención humillarla pero había conocido a chicas como ella antes y si no hacía yo el movimiento lo humillación habría recaído sobre mi. Miró a Taehyung como si el fuera a decir algo en su beneficio.

-Ya la escuchaste -Dijo encogiéndose de hombros- Tenemos que irnos, así que te veré por ahí Yaoki.

Un segundo después la rodeamos, podía sentir su mirada en mi espalda pero de todas formas no iba a girarme, era cierto que teníamos algo que hacer y que era mucho más importante que su interrogatorio.

-Eso estuvo maravilloso, aunque debí haberlo visto venir ¿Acaso es el rubio que se está apoderando de tu alma? -Negué mirándolo con una sonrisa-

-El color de cabello no tiene nada que ver con mi carácter y antes de que la curiosidad me consuma, dime ¿Dormiste con ella? -Suspiró, tal vez se esperaba mi pregunta y si no lo hacía parecía no molestarle en absoluto-

-Un par de veces -Dijo casualmente- Pero no fue nada muy importante -Esta vez la que suspiró fui yo-

-Hombres... Nunca es nada importante -Negué con decepción- Pensé que por ser un vampiro serías diferente aunque no sé en que me base para hacer una suposición.

-¿Sabes lo que dicen? -Lo mire atentamente- Que cuando un vampiro siente algo más que placer sexual a un ángel le da un calambre en su ala derecha -Lo miré con burla-

-Y pensé que no podías ser más ridículo... Ahora, dime que no dormiste con el chico de cabello plateado que viene hacia aquí porque a el no creo poder espantarlo -La sonrisa de Taehyung se desvaneció a medida que hablaba y se giro casi en el mismo momento en el que el sujeto llegó hasta nosotros-

-Señor Taehyung -Dijo el chico con voz tranquila y me miró por un momento con un poco de confusión- Señorita... -Dijo inclinando la cabeza- ¿Podría permitirme un momento a solas con el señor? Debo hablar sobre un tema pendiente -Mire a Taehyung esperando su negativa pero ni siquiera me miró, incluso soltó mi mano y supuse que estaba bien que me alejara un poco-

-Estaré por allá -Dije señalando la primera tienda que encontré aunque Taehyung solo tenía su mirada en el hombre, me pregunté de que se conocían pero esa sería una duda que tendría que resolver luego-

Cuando entré a la tienda me di cuenta que vendían ropa sofisticada y elegante como mucha de la gente estaba vistiendo afuera, si tuviera dinero tal vez compraría algo más acorde al lugar pero eso terminaría dándole la razón a Taehyung

Observe un vestido negro precioso de terciopelo con una apertura en la pierna cuando una mujer mayor se me acercó.

-Señora Min -Dijo mirándome con asombro- No la veía hace décadas -Ladee la cabeza preguntándome si tal vez la señora me estaba confundiendo con alguien más-

-Yo no...

-¿La están persiguiendo de nuevo? -Dijo mirando a todos lados- ¿Está bien? Creo que debería volver a su casa -Asentí, una parte de mi también lo creía-

-Si... pero el camino es largo -Dije sin tener idea de si era bueno decirle la verdad- 

-Oh no se preocupe por eso, venga conmigo -Dijo tomándome por la muñeca y halándome con ella-

Cuando me metió en un vestidor empecé a preocuparme realmente.

-Esta es la forma más rápida de llegar -Dijo moviendo el espejo de su lugar y dejando a la vista un enorme hoyo en el que podía entrar yo sin problema- Solo siga caminando hasta llegar a la puerta y toque.

-Pero Taehyung...

-Oh, el joven Taehyung la encontrará allí, no se preocupe -Dijo antes de prácticamente empujarme en el pasillo oscuro- Recuerde, solo debe caminar.

Y antes de que pudiera reaccionar y ver la mala idea que había sido puso el espejo en su lugar y decenas de candelabros volvieron a encenderse justo como cuando llegue aquí pero esta vez estaba sola y todo esto no me daba una buena vibra.