Los enviados del Santuario no sabían como reaccionar en este momento.

Frente a ellos, estaba de pie el mismo Dios Odín. No su representante en la Tierra o reencarnado en un cuerpo humano. Sino en su cuerpo de carne y hueso. Seiya y Shun más que nadie podían asegurarlo, porque la presencia y poder que sentían del Dios era la misma que sintieron de Hades cuando lo vieron en su cuerpo verdadero en los Campos Elíseos, pero menos asfixiante y oscura que la del Rey del Inframundo, tal vez porque no estaba viéndolos con desprecio y con intenciones asesinas.

No sabían que hacer exactamente. ¿Debían arrodillarse? Parecía lo apropiado frente a un Dios de gran poder y presencia.

-No es necesario que lo hagan- dijo Odín, adivinando los pensamientos de los humanos. -Puede que sea un Dios, pero no soy al que veneran, y no necesitamos de tantas formalidades, vinimos aquí a ser amigos, ¿no? Por lo que las formalidades sobran-.

Un poco sorprendidos por la actitud calmada y relajada del Dios, los Caballeros dejaron su intento de reverencia para verlo bien.

-Lo lamentamos, Dios Odín, es solo que... no sabemos bien como tratar con otros Dioses... sobre todo con aquellos que no quieren matarnos- dijo Nicole.

-Me lo imagino. Los Olímpicos siempre están deseosos de batallas- dijo Odín. Fijo su vista en Seiya. -Tu eres Pegaso, ¿verdad? Aunque creo que ahora eres Sagitario-.

-S-Si...- dijo Seiya. -Es un honor conocerlo en persona-.

-El honor es mío. Nunca podré agradecerle a Athena, a ti y a tus amigos por lo que hicieron por Asgard y mi representante-.

-No fue nada, además que no hubiera podido lograrlo sin su armadura- despecho el elogió. -Aunque...- miro al Dios de arriba y abajo. -No se parece mucho a la estatua que hay-.

-Seiya...- Nicole miro molesto a su Caballero por ese comentario inapropiado.

-¡Jojojojo!- Pero en vez de sentirse molesto u ofendido, Odín río con ganas. -Lo se, esa estatua fue hecha cuando era más joven, la edad no ha sido tan amable conmigo, ¿verdad?- Se rasco su barba. -¿Pero donde están mis modales?- Miro a sus acompañantes. -Hay que hacer las correctas presentaciones- estiro la mano hacía la mujer. -Ella es Rossweisse, una Valquiria. Ella es mi acompañante y asistente en este tipo de reuniones-.

-Es un gusto conocerlos, Caballeros de Athena- Rossweisse hizo una pequeña reverencia de saludo. -Es un honor por fin conocerlos-.

-¿Una Valquiria de verdad? Increíble...- exclamo asombrado Ban.

-¿Sabes de nosotros?- Pregunto Katya con curiosidad.

Rossweisse asintió. -Si, los Caballeros de Athena son muy populares entre las Valquirias, aun más después de su batalla con los Dioses Guerreros hace años. Es un gran placer finalmente conocerlos- dijo, con una pequeña sonrisa de emoción.

Odín estiro la mano hacía Bud. -Y creo que ya conocen a mi guardaespaldas-.

-¡Bud!- Shun fue el primero en reconocer al Dios Guerrero, alegrándose mucho de verlo.

-Es un gusto volverte a ver Andrómeda. No, ahora eres Virgo, ¿verdad? No me sorprende. Alguien de tu fuerza sin duda esta entre la élite del Santuario- dijo Bud.

Bud de Alcor Zeta fue uno de los Dioses Guerreros que Seiya y sus amigos lucharon hace años. Es el hermano gemelo de Syd de Mizar. En Asgard, tener gemelos es señal de mala fortuna para la familia, y para evitar una desgracia, Bud fue el gemelo abandonado en los fríos bosques, pero rescatado por un leñador y criado como su hijo, hasta que el destino lo hizo reencontrarse con su hermano gemelo de niños, reconociéndolo por una daga igual a la que tenía, y que era lo único que relacionaba a la familia de la cual desconocía hasta ese momento.

Cuando se volvió un Dios Guerrero, fue escogido como el Dios Guerrero de Alcor, la estrella gemela de Mizar, pero que siempre era opacada por el brillo de su estrella hermana, siendo conocida como su sombra. Lo mismo paso con los hermanos. Mientras Syd era uno de los valientes Dioses Guerreros, Bud no podía aparecerse ni a sus camaradas, solo Hilda sabía de su existencia.

Cuando Syd fue al Santuario y lucho contra Aldebarán, ambos estaban igualados, pero por la fuerza física y experiencia superior del Tauro, tenía más probabilidades para ganar, por lo que Bud, en un ataque a traición, golpeo a Aldebarán atrás en la cabeza, dándole la oportunidad a su hermano de derrotar al toro dorado.

También estuvo en las sombras cuando su hermano fue a Japón a acabar con Athena, pero no lo ayudo o mostro su presencia cuando su hermano fue rodeado por los, en ese entonces, Santos de Bronce y se vio obligado a huir.

Cuando Shun derroto a Syd, Bud iba a darle un golpe a traición que lo mataría, pero Shaina salvo a Shun al saber la verdad de los gemelos por parte de Marín, quien fue informada por Aldebarán, quien noto el Cosmos de Bud cuando lo golpeo.

Aunque la Amazona de Plata no fue rival para el poderoso tigre, Ikki, recién recuperado de su batalla con Mine, llegó y lucho contra Bud. La lucha de ambos fue feroz e igualada, hasta que el Fénix descubrió la historia de su enemigo, pero por su hallazgo, fue atrapado por un moribundo Syd, quien revelo que todo este tiempo sabía de la existencia de su hermano y le dijo que él y sus Padres en realidad lo amaron todos estos años, y que aunque su muerte estaba asegurada, moriría feliz al dejarle a su hermano el titulo de Dios Guerrero de Mizar.

Fue esa revelación lo que descongelo el frío corazón de Bud, revelando el amor que tenía por su hermano, y no pudo acabar con Fénix porque también significaría atacarlo.

Al final, Syd murió por las heridas de su batalla con Shun, y Bud se llevo su cuerpo, sin importarle que ya no tenía resistencia para soportar el frío clima de Asgard.

Hubiera muerto por ese frío y las heridas de su combate. En otro tiempo tal vez fue así, pero en este...

-¿Cómo sobreviviste, por cierto? Ikki dijo que tus heridas eran serias aquella vez- pregunto Seiya.

-Y sin duda hubiera muerto, pero de no ser por la voz y el Cosmos del Dios Odín, que me dio fuerzas para resistir hasta que la batalla termino y pude ir a un lugar para sanar mis heridas- explico Bud, mirando a su Dios con sumo respeto y devoción. -Y no solo eso, sino que desde que esa batalla, el Dios Odín ha estado presente más que nunca en la tierra de Asgard, no solo en Cosmos, sino enviando Valquirias como Rossweisse y más seres místicos para ayudar a mejorar el estilo de vida para las personas de Asgard. Realmente es una bendición por la cual todos estamos eternamente agradecidos-.

-No hay nada que agradecer. El pueblo de Asgard en la Tierra me ha sido devoto y fiel todos estos siglos, es justo que los recompense, más aun cuando han sufrido mucho por mi culpa. Los ignore durante mucho tiempo, y eso los dejo vulnerables a los planes de un Dios externo- dijo Odín con lamento.

Ser el líder, o Rey de todo un Panteón no era fácil, había que dirigir su propio reino y los afiliados, hacer que cada Dios haga su papel correctamente, controlar a los Dioses más problemáticos y revoltosos para que no hagan una tontería que dañe a los humanos, controlar las diferentes razas místicas a su servicio y mantener la parte mística de su región en secreto para los humanos ordinarios.

Y esa tarea es mucho más difícil cuando eres el Rey de no uno, sino de 9 Reinos distintos, y que en algunos tu autoridad apenas es escuchada, como en el caso de Helheim, que es gobernado totalmente por su nieta. Aunque tiene a las Valquirias y otros Dioses a su servicio, el trabajo pesado y más importante siempre recae en él.

Y por todo eso, al ocuparse de las razas más importantes y el bienestar continuo de Asgard en el cielo, descuido al que esta en la Tierra. Los mortales que lo veneraban sufrieron por los incandescentes fríos del lugar y tuvieron que apañárselas solos, pero nunca perdieron su fe en él.

Lo hizo sentir orgulloso y avergonzado por partes iguales. Orgulloso al ver lo fuerte que eran los humanos al soportar por siglos el tormentoso clima frío, y avergonzado porque sufrieron mucho mientras él no los escuchaba y eso los dejo expuestos a ser usados por otro Dios, lo que provoco una tragedia que fueron las muertes de valerosos guerreros, cuyo único crimen fueron engañados al creer que seguían su voluntad.

Aunque uno podría decir que no era su culpa, que tenía responsabilidades más importantes que preocuparse por los humanos, y cualquier Dios no se preocuparía por ellos, Odín no era cualquier Dios. No solo era el líder del Panteón Nórdico, sino que también era un Dios que se preocupaba por todos los seres, humanos incluidos. El que los ignorara y Poseidón aprovechara su ausencia para usar a su gente en su plan era completamente su culpa. Lo peor es que fue otro Dios quien se encargo de eso, no él.

No tenía nada contra Athena. Todo lo contrario, estaba agradecida por su ayuda y su alianza con ella era un gusto que no desaprovecharía, pero se lamentaba que tuviera que arreglar un problema de su gente, aunque algunos podrían verlo que era su responsabilidad, por ser la Diosa protectora de la Tierra, y porque el problema fue causado por un Olímpico.

En si, Odín no tiene nada contra los Olímpicos, aparte de cierta tensión entre ambos Panteones al ser los únicos que dominan el Cosmos. El único con el que tiene algo sería con Poseidón por obvias razones.

-Unos cortos años no servirán para compensar mi ausencia y que no escuchara las voces de mi pueblo por siglo, pero me aseguraré de compensarlo-.

-Y le aseguro que la Dama Hilda y todo el pueblo de Asgard esta agradecido con usted, Lord Odín- dijo Bud.

-Si no fuera muy impertinente, ¿puedo hacerle una pregunta, señor Odín?- Pregunto Nicole.

-Claro, chico-.

-Cómo es que esta...- elevo su mano apuntando al Dios barbón de arriba abajo. -Aquí...-.

Lo que quería decir era como Odín estaba presente físicamente. Los Dioses que dominan el Cosmos no pueden estar en la Tierra con sus cuerpos físicos, porque su poder y autoridad alterarían la naturaleza del mundo, causando desastres. El tipo de desastre dependía de cual sea la autoridad que gobernaba un Dios. Un ejemplo sería que, si Poseidón ascendiera a la Tierra con su cuerpo verdadero, los mares de todo el mundo se alterarían y podrían crear Tsunamis con su sola presencia.

Eso sin duda causaría muchas muertes, pero también dañaría el planeta, y a pesar del odio de los Olímpicos a los humanos, ninguno quiere destruir el planeta azul, solo a sus habitantes. Por eso es que eligen luchar con contenedores humanos o representantes de su poder.

Odín pudo entender lo que intentaba decir el Patriarca, a lo que esbozo una pequeña sonrisa de abuelo. -Ciertamente no podría presentarme con mi cuerpo a la Tierra, pero no estamos en la Tierra, ¿verdad?-.

Todos los Caballeros se miraron entre si, sin saber que decir.

-En los reinos de otros Dioses, o en este caso, el Inframundo, independiente de que Dios o raza lo domine, puedo estar en presencia con mi verdadero cuerpo debido al gran mana y las energías que hay en la atmósfera- explico, como si fuera un abuelo contándoles a sus nietos. -Por eso yo y cualquier otro Dios podemos estar en el Inframundo con nuestros cuerpos, pero no en la Tierra, donde el mana de la atmósfera se ha ido mermando con los siglos, al punto de que necesito un representante para ejercer mi autoridad sin que repercuta en daños-.

-No sabía eso...- murmuro Nicole. Esto abría muchas preguntas, y hasta posibilidades que solo podía imaginar.

-Pero, Amaterasu y Susanoo han estado muchas veces en la Tierra y nada a pasado- señalo Seiya, recordando cuando estaba con ambos Dioses, ya sea en el Santuario, los pueblos vecinos, o en el mismo Japón.

-Lo que explique solo aplica a los Dioses con dominio del Cosmos, o aquellos que son tan poderosos que pueden deformar la realidad con su poder. El resto de Dioses y las razas sobrenaturales no tienen esos problemas, más allá de tener que controlar su energía o ponerse sellos para limitar sus poderes, aunque solo aplica a los más poderosos que entrarían en el top 10-.

-¿Top 10?- Pregunto Ban.

Rossweisse respondió esta vez. -: Las razas sobrenaturales tienen un ranking de poder, en donde tienen seleccionados a los 10 seres más poderoso del mundo de entre todos los Panteones y razas. Aunque hay muchos puestos empatados. Lord Odín ocupa el tercer puesto, que es el más empatado de todos-.

-Pero para ser honestos, ya no soy lo que era. La edad me ha pegado duro. Actualmente estaría entre el cuarto o quinto puesto. Mi hijo Thor ya me supero en poder bruto y en fuerza- se golpeo el hombro, como si de un viejo con dolores de espalda se tratara.

En ese momento, Azazel, Sirzechs y Michael se unieron al grupo.

-¡Hola, viejo! ¿Cómo te va?-.

-Pero si es el niño problemático número uno. ¿Te has portado bien?- Devolvió Odín el saludo de Azazel con el mismo humor.

-He sido bueno últimamente-.

-Es un honor poder tenerlo presente, Odín-dono. Lamento no haberlo recibido como se debía- se disculpo Sirzechs por su falta de recibimiento.

-No te preocupes, estoy informado de lo que paso- Odín hizo un movimiento de mano, restándole importancia. -Pero veo que los niños se vuelven más problemáticos en cada generación-.

-Supongo que si- dijo Michael con una sonrisa.

Odín dio una mirada pasajera al salón de baile, que a este punto estaba casi vacío, salvo por los Clanes Gremory y Sitri, que se quedaron por los hermanos de sus líderes.

-Vine porque me intriga los Rating Game de los Demonios y deseo verlos, además que la oferta de una posible alianza suena tentadora para escucharla al menos, pero podemos discutirlo mañana- dijo Odín.

-Agradecemos su entendimiento. ¿Le parece mañana al medio día?- Pregunto Sirzechs.

-Bien por mi-.

-Ya que estas aquí, para no desaprovechar la noche, ¿qué te parece si vamos a beber, como en los viejos tiempos, viejo? Conozco un buen bar que me hace descuento- ofreció Azazel.

-Como negarme a esa oferta- acepto el Dios con una sonrisa, sorprendiendo a los Seiya y los demás. ¿Realmente acepto beber como borracho?

-¡Lord Odín! No debe de aceptar esas ofertas, podría provocar una mala imagen a nuestro Panteón- dijo Rossweisse. Ella casi no tenía quejas de ser la acompañante y asistente de Odín, pero a veces si puede ser difícil. Nadie se imaginaría que el Dios Odín tuviera ciertas... mañas.

-No seas tan seria, Rossweisse. Hay que vivir la vida como si fuera el último día, y eso se aplica sobre todo a la gente vieja como yo-.

-Aun así...-.

-Por ser tan seria es que sigues sin novio-.

La peliplata se quedo congelada, como si las palabras hubieran sido una flecha que le perforo el corazón.

-Aquí vamos de nuevo...- suspiro Bud, tapándose el rostro con una mano, ya acostumbrado a la escena que vendría.

-Kuh...- Rossweisse cayo de rodillas al suelo y empezó a llorar. -¡Es verdad! ¡Soy una mujer que sigue estando soltera a pesar de mi edad! ¡Moriré sola! ¡Buuuuuaaaaaah!-.

La pena ajena no bastaba para describir lo que veían...

-¿Qué hacemos en esta situación?- Le pregunto Shoko al Patriarca.

-...No lo se-.

-¿No esta exagerando?- Pregunto Ban, solo para recibir un codazo de Katya.

-Cállate, tu no entiendes lo que una mujer sufre por eso- dijo la Saintia, apoyando totalmente el sentimiento de dolor y soledad de la valquiria. Ella también sufría del mismo pesar.

Estos tontos nunca entenderían la difícil vida de una mujer que lucha y asciende en su trabajo, pero pierde en el campo del amor al no encontrar al indicado por estar rodeada de tontos musculosos e irresponsables.
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(Al día siguiente)

Después de la noche muy movida para algunos, se reunieron en la mansión Gremory para discutir ciertas cosas.

La primera sería que Seiya volvería al Santuario con el Patriarca y los demás, quedándose Shun con ellos en su lugar. Shoko se suponía que iba a volver con ellos, pero la pelirroja necesitaba arreglar unas cosas, así que se quedaría un poco más.

Eso último solo se lo explico a sus aliados del Santuario, quien confundidos, aceptaron. Seiya era el único que sabía de que asuntos hablaba Shoko, pero decidió guardar silencio. Lo único que podía hacer por ella es desearle suerte y apoyarla.

Lo segundo era que en una semana se daría el primer combate del torneo de los Rating Game, donde los primeros en enfrentarse serían el grupo de Rias contra el de Sona. Un encuentro muy deseado por las personas del Inframundo entre dos herederas con gran potencial, provenientes de familias queridas y respetadas y que se han involucrado en los últimos sucesos importantes de las Facciones.

Claramente, el encuentro fue arreglado por los hermanos de ambas. No había pruebas pero tampoco dudas.

Después, los líderes de las Tres Facciones se reunieron para hablar sobre como un integrante de la Brigada del Khaos logro entrar al Inframundo y que nadie, salvo los Caballeros y los propios líderes, se dieran cuenta. Claro, al final no paso nada malo y el asunto se soluciono sin problemas, pero que un criminal estuviera en el Inframundo, cerca de un territorio donde mucho poder político se reunió sin que los guardias o seguridad la detectara, solo demostró lo deficiente que era su seguridad.

Otro punto son que ahora con la fiesta y entrenamiento de los chicos terminados, iban a volver al Mundo Humano a descansar. Se quedarían en el Inframundo hasta el comienzo del torneo y su primera pelea, pero después, cada familia de herederas volverían al Mundo Humano a descansar y atender sus deberes mundanos como las tareas de vacaciones. Cuando sea el turno de Gremory o Sitri de luchar, simplemente se transportarían al lugar de encuentro con un Círculo Mágico.

De paso, se le dijo a Issei que mientras él y sus Padres estuvieron afuera, Sirzechs mando a remodelar su casa, ya que querían usarla como punto de reunión para que los líderes y otros de las Facciones se pudieran reunir a conversar y tener un lugar en el cual descansar.

Como la remodelación tuvo el permiso de los Padres de Issei y el que le dijo eso era el Maou Lucifer, el castaño ya no podía negarse.

Ahora mismo, dentro de una habitación en la Mansión Gremory que simulaba a una sala de reuniones, Seiya estaba con Rias y su clan para discutir sus planes para el Game de mañana.

-Muy bien, me voy a ir pronto y ya tengo las maletas listas, así que empecemos con la reunión- hablo Seiya alto y claro. -En una semana será el Rating Game contra Sona y su familia, y aunque son amigos, no quiero que eso les impida pelear-.

-Por ese lado no se preocupe, Sensei. Sona podrá ser una gran amiga que nos a ayudado, pero siempre será una rival a la que hay que superar- dijo Rías con determinación, siendo apoyada por toda su nobleza.

-Bien, me alegra ver que tienen el espíritu para afrontarlo- dijo el castaño. -Empecemos por...- miro a Issei. -Issei, me alegro que desbloquearas tu Balance Breaker, mejor momento no hubo-.

-Gracias, Sensei- dijo Issei, feliz por lo que sería el primer halago de Seiya a su persona.

-¿Que ventajas y limitantes tienes con el Balance Breaker? Es importante conocerlas para saber cuanto puedes hacer-.

-Bueno... mi fuerza, velocidad y resistencia aumentan mucho más que cuando la use contra Raiser, y tengo alas de dragón, aunque aun no las he probado, y no soy muy bueno volando- explico. -Y hacer la transformación me toma algo de tiempo-.

-¿De cuanto?-.

Levanto dos dedos. -De 2 minutos, mientras sucede eso, no puedo usar mi Sacred Gear sin duplicar mi poder o transferir. Lo segundo, es que solo puedo una vez al día, y si cancelo la transformación antes de que esta termine, me quedaré sin energías-.

-¿Cuánto tiempo puedes mantener tu Balance Breaker?-.

-1 hora, pero el tiempo decrecerá si uso mis poderes-.

Toda esta información no la había aprendido él mismo, sino fue Ddraig quien le dijo todo esto, tras analizarlo al alcanzar el Balance Breaker anoche. Al parecer, Ddraig podía sentir las capacidades del Balance Breaker y saber cuanto de su poder adquiría su portador. Según Ddraig, el tiempo de duración y sus fuerzas aumentaran a medida que se haga más fuerte y las limitantes se reducirán, pero todo eso tomaría tiempo, experiencia y entrenamiento.

Seiya analizo la información. Los 2 minutos de tardanza para uno podría verse como corto, pero en una pelea, todo puede terminar en menos de un segundo, y Sona ha demostrado ser muy inteligente, por lo que su opción lógica sería eliminar a Issei, quien se a convertido en el miembro más poderoso de la nobleza de Rías.

Sagitario miro a Koneko. -¿Cómo están tus poderes de Nekomata, Koneko?-.

-Puedo usarlos para aumentar mi fuerza y magia con el Senjutsu y lanzar bolas de fuego de este elemento, pero nada más- reconoció la peliblanca.

Por negar tantos años su verdadero ser y poder, Koneko no ha podido aprender a usarlos como se debe, menos dominarlos. El entrenamiento con Shoko ayudo mucho al proceso, pero solo en lo físico. El Senjutsu era un elemento más espiritual y diferente del Cosmos, por lo que Seiya y Shoko no podían ayudar mucho en ese lado.

Tal vez si Koneko tuviera un maestro que le enseñara de Senjutsu y Doujutsu, como otro Yokai que fuera un experto en esas artes, ella podría desbloquear todo su potencial. Pero eso sería para después, ahora tiene que trabajar con lo que tiene.

Seiya miro a Rías. -¿Cuanto sabe Sona de las habilidades de tu nobleza, y cuanto sabes tu de la de ella?-.

-Ella tiene conocimiento leve sobre las armas de Issei, Kiba, Akeno, Asia y Xenovia, ya que el Rating Game contra el equipo Phoenix fue público, además del Sacred Gear de Gasper y las habilidades Yokai de Koneko. De quien mejor conoce las habilidades son de Akeno y las mías por el tiempo que nos conocemos. No se mucho de las habilidades del resto de su nobleza más allá de Saji, Tsubaki y ella misma. La formación de Sona son Rey, Reina, 1 Torre, 1 Caballo, 2 Alfiles y 2 Peones que juntos valen los 8 totales- respondió Rías a detalle.

-En términos de conocimiento, Sona te supera al conocer ya las habilidades de todo tu equipo, aunque ambas están igualadas en cantidad de miembros-.

-Así es- confirmo la pelirroja.

Por fuera, se podría decir que Rías tenía ventaja al tener en su equipo a Dragón Emperador Rojo, a dos ex-sacerdotisas, una es portadora de una Espada Sagrada y la otra tiene un Sacred Gear con habilidad curativa muy potente, a un portador de Espada Sacro-Demoniaca, a una Nekomata y un Dhampiro con una Sacred Gear que para el tiempo de una persona, pero no había que subestimar a Sona. Saji tiene ahora todas las partes del Rey Dragón Vitra y la Sacred Gear de Tsubaki era perfecta como contraataque, y no conocen las habilidades del resto de su nobleza, sumado al intelecto de Sona, podría esperarles una sorpresa desagradable.

-De acuerdo...- sacando un plumón, uso la pizarra que tenía atrás e hizo un gran círculo, donde comenzó a escribir y hacer unos dibujos. -Azazel me explico como funcionan los Rating Game, y me dijo que tipo de luchadores son cada uno, así que intentaré explicárselos de la mejor manera para que entiendan-.

En el círculo, dibujo la cara de todo el Clan Gremory en ciertos espacios que estaban escritos una especie de clases: las caras de Rías y Akeno estaban en el extremo izquierdo, donde al lado estaba escrito "Magia". En "Técnica", que estaba en la zona inferior del círculo, estaba la cara de Kiba y cerca del centro estaba la cara de Asia. En el lado derecho estaba escrita "Soporte", y en la parte superior del círculo escrito "Poder". Koneko estaba en el extremo del círculo de esta última, mientras que Issei estaba un poco abajo de ella, por el lado de Soporte y Xenovia estaba también en el lado de "Poder", más en el centro.

Gasper era el único afuera, en un cuadro que estaba escrito "Especial".

-...Qué dibujos tan feos-.

-...Otro comentario como ese y darás 100 vueltas alrededor de la mansión con 300 kilos de peso, Xenovia-.

La peliazul apretó los labios para no hablar. Calladita se ve más bonita.

-Según Azazel...- Seiya se volvió a concentrar en su tarea. -En los Rating Game, existen 4 tipos de luchadores: Magia, Técnica, Poder y Soporte. Creo que no hace falta explicar cada una. Cada participante entra en una de esas dependiendo de sus capacidades- hizo una seña a las caras de Rías y Akeno. -Por ejemplo, Rías y Akeno son del tipo Magia al ser esa su única forma de luchar, mientras que Koneko y Xenovia son del tipo Poder, al ser sus capacidades exclusivas de combate cuerpo a cuerpo- hizo un círculo alrededor de la cara de Issei. -Issei es del tipo Soporte, pero al haber despertado su Balance Breaker, también entra en la clase de Poder. Kiba es de Técnica, al ser su especialidad la velocidad más que la fuerza y por sus técnicas de espada. Asia y Gasper son del tipo Soporte por las habilidades de su Sacred Gears, aunque Gasper también se acerca al tipo Técnica-.

-Me sorprende que aprendiera tan rápido como funcionan las clasificaciones de los Rating Game- comento Akeno, impresionada.

-Azazel nos enseño a Shoko y a mi sobre este tema durante el mes de entrenamiento, y tampoco es tan complicado de entender. Por ejemplo, yo y la mayoría de los Caballeros del Santuario seríamos del tipo Poder, pero también hay algunos como Shun y Hyoga que se inclinarían más al tipo Magia, o mi hermano Shiryu, que sería tipo Técnica- respondió Seiya, para después mirar a Rías. -¿Sabes algo sobre los tipos que tiene Sona?-.

-Se que su equipo se inclina de Técnica hacía Magia- respondió la pelirroja.

-Mientras que ustedes se inclinan más al tipo Poder. Podrían abrumar a los Sitri con su poder, pero a la larga sería ineficiente-.

-¿Por que?- Pregunto Issei.

Fue Rías quien explico. -: Es porque en los juegos, algunos tipos tienen ventajas sobre otros a la hora de pelear. Los tipo Técnica tienen ventaja sobre los tipo Poder, mientras que los tipo Magia tienen ventaja sobre los tipo Técnica y los tipo Poder tienen ventaja sobre los tipo Magia, siendo los Soporte los más débiles al ser, como el nombre lo dice, soporte para el resto de los miembros del equipo. La mayoría de miembros de tipo Soporte compensan esa debilidad al también inclinarse al tipo Magia-.

-Me recuerda un poco a la clasificación de tipos de Pokemon- pensaron Issei y Seiya al escuchar esa explicación.

El antiguo Pegaso tosió, recuperando la atención. -Es como dijo Rías, pero la técnica tiene cierto limite y puede fallar si es abrumado por un gran poder, pero pasa lo mismo a la inversa. Incluso, pueden haber excepciones en los que un tipo que sea más débil al que enfrenta puede vencerlo si tiene una habilidad que le de ventaja o si es más listo-.

-¿Cuántas probabilidades cree que tenemos de victoria?- Pregunto Rías, queriendo saber si tenía posibilidades altas o bajas de ganar. Así podría organizar una mejor estrategia.

-Diría que... un 60/40 a su favor creo. Pero no te bases en probabilidades para ganar, porque las probabilidades no importan en una pelea, sea cual sea el tipo, lo que importa es tu deseo de ganar y a no rendirte-.

Rías vio que era cierto, podían decirle que tenía un 100% de probabilidades de victoria, pero eso no importaría, porque en una batalla, lo que cuenta es la habilidad, fuerza e inteligencia de una persona. Y sobre todo, la perseverancia y deseo de ganar. En esas cosas tenía que basarse.

-Lo tendré en cuenta, Sensei-.

-Oiga... ¿no es un poco injusto que nos este explicando todo esto, y no al equipo Sitri?- Pregunto Kiba, siempre tan justo.

-No te preocupes, mientras yo estoy aquí, Azazel esta en la mansión Sitri explicándoles lo mismo, hasta puede que mejor al conocer estos juegos más que ello-.

Ósea que su rival les toco un experto profesor del tema para ayudarlos, mientras que a ellos uno novato y que es más de músculos que de estrategia... sus probabilidades están bajando.

-No importa lo que la Presidenta nos mande, simplemente derribaremos su estrategia con nuestro poder- hablo Xenovia con optimismo.

-Cabeza de musculo...- murmuro Koneko.

-Ara, ara, Xenovia. Con esa actitud, pareces más una Torre que un Caballo- dijo Akeno.

Su comentario que fue puramente bromista y un poco burlesco, despertó una chispa de inspiración en Rías. La pelirroja vio la pizarra con los dibujos de clase, luego a Xenovia.

-Caballo... Torre...- una idea estaba formándose en su mente. -Deberé llamar a Ajuka-san-.

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(Más tarde)

Shoko estaba de pie para despedir a Seiya, Nicole y al resto. A su lado, estaba Shun con su armadura puesta, acompañados por Sirzechs, Azazel, Penemue y Michael para despedirlos.

-Fue un gusto conocerlos a todos, y fue un placer asistir a su fiesta- dijo Nicole a modo de cortesía a los tres líderes.

-El placer fue nuestro. Mándele nuestros saludos a la Diosa Athena, y les deseamos suerte para que su pronto conflicto con el Dios Ares termine sin percance- dijo Sirzechs con respeto.

-Sabe que si necesitan algo, las Facciones están dispuestas a ayudar- dijo Michael.

-Y se lo agradecemos, pero este es un asunto que involucra solamente al Santuario, no queremos involucrar a seres exteriores, menos cuando pueden sufrir represalias por nuestra culpa- dijo Nicole.

Ares era conocido como el Dios de la Guerra, pero mientras Athena es la Diosa de la Guerra estratégica, Ares es el Dios de la Guerra sangrienta. Disfruta las batallas y mata a quien se le interponga, guerreros o inocentes. En las épocas de las historias, legiones de espartanos incendiaban ciudades, mataban a niños y adultos por igual y violaban mujeres en su nombre.

Alguien así es capaz de comenzar una matanza contra cualquiera que intentara ayudar a Athena en su lucha.

Esta era una lucha exclusiva que Athena y sus Caballeros debían enfrentar contra uno de sus némesis. No sería una lucha fácil, pero como siempre, triunfarán sobre el mal.

-Te extrañare, Seiya- dijo Shoko, siendo más honesta con sus sentimientos.

-S-Si... yo también- dijo Seiya nervioso.

Shun alzo una ceja. ¿Paso algo entre ambos? Una posibilidad se le vino a la mente... pero no podía ser... ¿o si?

-Lástima que se termino nuestro tiempo de investigación, quería probar algunas cosas- suspiro Azazel al ya no poder estudiar el Cosmos de Seiya.

-Aun tienes a Shun. Si hay alguien que sabe más que nadie del Cosmos, es él-.

-¿Qué?- Al peliverde no le gusto mucho el brillo en los ojos de Azazel.

Pero el brillo se apago de momento cuando fue jalado por la oreja por Penemue. -Compórtate, Azazel. Ahora más que nunca debes comportarte, ¿o quieres que el Dios Odín te vuelva a dar una paliza?-.

-¿Otra más?- Pregunto Seiya con una sonrisa.

-Si. Este idiota solo aprende a las malas-.

-¡Apenas tenía 5 siglos de haber caído! ¡Era joven, arrogante y estúpido!- Replico Azazel.

-¿Eras?- Exclamaron Penemue y Seiya al unísono. Lo de joven lo creen, pero las otras dos no.

-¡¿Qué pasa con este ataque doble?!-.

Los labios de Penemue esbozaron una delicada sonrisa, soltando la oreja de su jefe y viendo al castaño. -Fue refrescante conocer a alguien tan poderoso y que no sea un arrogante ni un patán, disfrute de este tiempo-.

-Lo digo igual. Puedes ser muy seria, pero también tienes un lado lindo- elogió Seiya, siendo sincero y puro con su halago.

Los labios de Penemue se estiraron un poco más al escucharlo. -Y también agradezco la ayuda de aquella noche... espero poder verte lo más pronto posible-.

Sirzechs, Michael Ban y Katya levantaron la ceja por tan curioso intercambio de palabra, Azazel sonrió pícaramente, Shun abrió un poco los ojos, Nicole espero a que terminaran para irse y las alarmas internas de Shoko reaccionaron, aunque rápidamente se apaciguaron al creer que Seiya solo hizo un gesto para ayudarla y nada más, que estaba siendo dramática, eso era todo. Claro que si.

Con unas despedidas más de cortesía de los líderes de cada grupo, Sirzechs transporto a los Caballeros y Patriarca a las afueras de su Santuario con un Círculo Mágico.

-¡Sirzechs-san!- Llamo Shoko al Maou cuando los líderes se retiraban.

Michael, Azazel y Penemue miraron curiosos al pelirrojo y Shun hizo lo propio con la pelirroja, ambos hicieron el mismo gesto para que siguieran. Cuando se alejaron lo suficiente, el Maou miro a la Saintia.

-¿Qué sucede?-.

-Etto... ¿tienes tiempo? Me... gustaría hablar contigo-.

Sirzechs sonrió suavemente, pero por dentro festejo como loco. Su otra hermana menor quería hablar con él. Hubiera esperado que tardara más, pero se alegraba que no fuera así.

-Claro que si, siempre estoy disponible para mi familia. Ven, necesitamos un mejor lugar- dijo, demostrando un poco de la emoción que sentía.
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(En el Santuario)

En los recintos de la Diosa Athena, las cosas van... a ponerse interesantes.

-¡¿En serio Kiki hizo flotar a tu mayordomo?! Es difícil creerlo-.

-Cualquiera lo pensaría al verlo ahora, pero Kiki era muy bromista de niño. Tatsumi aun sigue quejándose de eso hasta hoy-.

Amaterasu había llegado al Santuario para una reunión personal con Athena hace una hora y han estado charlando de cosas triviales en una sala privada. La sala estaba decorada con las telas y adornos más finos, y las Diosas charlaban acompañadas de una buena comida por la que los chefs se esforzaron.

Y aunque Athena había estado disfrutando de charlar tranquilamente con otra Diosa que no intentara matarla, algo que casi nunca hizo en toda su existencia, sabe que Amaterasu no ha venido solo a socializar. No es la Diosa de la Guerra Estratégica por nada. Desde que llegó, Amaterasu trajo una caja de madera con sellos Sintoístas pegados, además que su mirada parecía ir de vez en cuando a la puerta de la sala, como si esperara algo o a alguien.

Saori dejo la copa de vino semi-vacía de la cual había estado tomando. Era hora de ir al punto. -Aunque me alegrara mucho que vinieras y pudiera relajarme al charlar contigo, Amaterasu, se que no viniste solo a socializar- señalo la caja que traía.

-La Diosa de la Estrategia, ¿eh? Si, tienes razón...- dijo Amaterasu, enderezándose. -La verdad, es que he venido también por asuntos políticos, relacionados a nuestra alianza-.

-¿Pasa algo con nuestra alianza?- Pregunto, preocupada por el tema.

-Nada grave o que la ponga en peligro, sabes que yo y mis hermanos estamos encantados con esta alianza- se apresuro a decir la Diosa pelinegra. -Pero aun tras 9 años, hay Dioses que cuestionan la legalidad de la alianza, porque aunque se formo y tratado y eso, aun hay muchos que no ven con buenos ojos que nos aliemos a una Diosa de otro Panteón. Lo ven un tanto... inestable. No ayuda a que todo tu ejercito tenga el poder de acabar con nuestros soldados fácilmente, lo que hace que estén más intranquilos-.

-Hm...- Saori entendió ese razonamiento. Aunque era uno sin justificación, nunca faltaban los paranoicos que creían que ella hacía una alianza solo para aprovecharse de ellos y eliminarlos después. No es que pensara hacer algo atroz, pero ellos no lo sabían o no querían entenderlo. -¿Y que propones?-.

Amaterasu se aclaro la voz, intentado sonar lo más profesional posible antes de decir su plan, que solo era el método más fácil y accesible para su objetivo real: ganarse el corazón y cuerpo de su amado castaño.

-Fácil y sencillo: un matrimonio arreglado entre uno del Santuario, y un Dios de mi Panteón-.

Saori parpadeo, sorprendida por la opción, aunque al pensarlo fríamente era lógico: los matrimonios siempre han sido usados como herramientas políticas para que dos facciones diferentes consoliden una alianza.

-Amaterasu, estoy halagada, pero sabes que prometí un voto de Castidad, y aunque han pasado siglos, no voy a romperlo-.

-¡Claro que no! Se lo importante que es para ti mantener este voto, no me refería a ti- aclaro la Diosa. -Me refería a que uno de tus Caballeros Dorados sea el que se case-.

Otra vez Saori fue sorprendida, pero por otra razón.

La Diosa del Sol aprovecho el silencio de la pelilila para seguir con su idea. -Si uno de tus Caballeros Dorados, que son la Elite de tus guerreros, se compromete con una Diosa importante de mi Panteón, mostrara a los que se oponen lo serio que nos tomamos esta alianza y que queremos que sea duradera. Suena bien, ¿no?-.

Saori recupero la compostura para responder: -Aunque veo la lógica y beneficios, no puedo aceptarla, Amaterasu. Yo estoy en contra de los matrimonios arreglados. Si dos personas deciden casarse, quiero que sea por su decisión y porque se aman, no por asuntos políticos-.

-Pienso igual, no te preocupes. Mi plan es hacer que ambos pasen cierto tiempo juntos para que se dan la oportunidad de conocerse y enamorarse, así, el matrimonio, aunque sea político, sería también por amor. No digo que escojamos a dos personas y los casemos a la siguiente semana. Que se tomen algunos meses para aprender más del otro y enamorarse-.

Bajo ese pensamiento, no sonaba una mala idea. Aunque no le gustaba la idea de forzar a dos personas unirse, si se enamoraban, entonces la boda no iría contra sus principios.

-¿Pero quienes? Algunos de mis Caballeros tienen pareja. Uno hasta esta casado, y tampoco quiero que la Diosa que escojas sea una que trate mal al esposo por ser un humano, o le impida cumplir sus responsabilidades conmigo-.

-Ya tengo a los candidatos para ambos lados, y no te preocupes por sus responsabilidades. Tu Caballero seguirá cumpliéndolas, salvo que tendría algunas otras más, pero nada que le impida tener que elegir entre tu Santuario o mi Panteón-.

A Saori le sorprendía lo planeado que tenía Amaterasu, además de notar... cierta emoción. ¿Tanto le alegraba esto?

-Y... ¿a quienes has elegido para tu plan?-.

-Por mi lado, a mi misma- se puso una mano en el pecho.

Athena abrió los ojos como platos al escucharla. -¡¿A ti?! ¡¿Hablas en serio?!-.

-Por supuesto que si- a Amaterasu no le extraño la sorpresa de Athena. Ella debió esperar otro candidato a ofrecer, no a si misma. -Esto para probar cuan enserio voy con la alianza. No dejaré que haya cuestionamientos a mis decisiones- hablo con firmeza.

-Pero... ¿obligarte a casarte con uno de mis Caballeros no es ir demasiado?- Pregunto preocupada. Amaterasu era una de los pocos Dioses que podía llamar amiga, y no quería que tomara una mala decisión solo por conflicto menores. -Estoy segura que debe haber otra forma para afianzar más nuestra alianza...-.

-No te preocupes, Athena. Se que puede parecerse que me estoy sacrificando, pero no es así. Es todo lo contrario- comento una sonrisa. -Esto es por mi propia decisión y deseo casarme con el hombre que me robo el corazón-.

Esas palabras sorprendieron aun más a Saori. ¿El hombre que le robo el corazón? ¿De que estaba...? Sus pensamientos fueron cortados al instante. Solo había una persona que podía encajar en ese termino.

Pero... no podía ser... no, no podía... no debía...

-...¿A quien elegiste para casarte?- Su voz salió menos firme de lo que le gustaría. Aunque la pregunta que hizo fue tonta, porque era obvio cuál sería el nombre

-Elegí al más poderoso, valiente y guapo de tus Caballeros Dorados: nadie más que Seiya de Sagitario- Amaterasu dijo el nombre con tan cariño y amor como si fuera una adolescente enamorada de un cantante famoso y apuesto. -Nadie se opondrá a que sea él por lo que hizo por nosotros al derrotar a Kagutsuchi, y Susanoo y Tsukuyomi apoyan totalmente mi idea. De hecho...- tomo la caja que trajo. -Esto es para él, es un arma sagrada que lo eligió como su portador. Se que los Caballeros no pueden usar armas, por eso pensé en hablar contigo para que me prestes por unos días a tu Caballero de Aries para...-.

-¿Por que él?- Pregunto Athena, interrumpiéndola. Su cabeza estaba gacha y los mechones de su cabello tapaban la vista a sus ojos.

Amaterasu se tomo un segundo en responder por la abrupta interrupción. -Ya lo dije: estoy enamorada de él. Creo que empecé a interesarme en él desde el asunto de Kagutsuchi, y desde entonces he tomado mi tiempo de conocerlo y quererlo por lo que es: un hombre que esta dispuesto a todos por los que ama- explico sus sentimientos con calma. -Si piensas que lo veo como un juguete al que usar y desechar, te equivocas. Realmente quiero tener algo serio con él. Incluso...- Amaterasu se tapo el rostro hasta la nariz cuando sus mejillas comenzaron a sonrojarse. -Incluso formar una familia-.

No quería reconocer abiertamente lo enamorada que estaba de Seiya, o que desde hace un año ya había planeado como sería su boda con él, o que hasta ya tenía pensado la cantidad de hijos y sus nombres: dos niños son perfecto, un niño y una niña.

Saori apretó su mano en el reposabrazos de la silla en donde estaba sentada, resquebrajándola por la fuerza de su agarre. -Eres una Diosa y él un mortal. Aunque tus sentimientos sean verdaderos, su tiempo de vida son diferentes-.

-Escuche que los Caballeros pueden vivir hasta unos pocos siglos, pero entiendo lo que dices. No me preocupo por eso, quiero vivir en el ahora y que el futuro se cuide solo, pero puedo hablar sobre el tema con él. Hay muchos hechizos que permiten la longevidad para un humano durante siglos y...-.

Saori ya no escucho a Amaterasu, estaba más ocupada tratando de que controlar sus emociones para que su Cosmos no se elevara y asustara a todos sus guerreros.

-Eso... es algo que no puedo decidir por mi cuenta, Amaterasu. Seiya debe tener la última palabra, y si...-.

TOCK TOCK.

Toda la conversación fue interrumpida cuando dos golpes resonaron afuera de la puerta. Saori agradeció interiormente la interrupción y le grito a la persona que pasara.

Mii entro en la habitación usando su armadura. Dentro del Santuario, usaba su armadura o una toga griega, pero fuera, cuando estaba en modo sirvienta, usaba un traje de Maid.

-Disculpe la molestia, señorita Athena, pero el Patriarca Nicole y sus guardaespaldas llegaron- informo la rubia.

-¿Seiya y Shoko volvieron con ellos?-.

-Solo Seiya-san. Shoko tenía unos asuntos que arreglar en el Inframundo. Volverá en una semana. El Patriarca le dio permiso de extender su estancia-.

Aunque extrañada de la razón de Shoko de quedarse más tiempo, no dijo nada. Confiaba en la pelirroja y la conocía lo suficiente para saber, que lo que sea que la mantenga aun en el Inframundo, es de suma importancia.

-¡Perfecto!- Amaterasu aplaudió. El tiempo no pudo ser más perfecto. Aunque quería hacer que Seiya tomara las cosas lento, las constantes preguntas de Athena evitando darle una respuesta a su oferta hicieron que cambiara un poco de planes. -Vamos a recibirlo-.

Apenas dio un paso tras llegar a las afueras del Santuario, Seiya sintió un escalofrío. La fuerza cósmica le decía que algo malo le esperaba.
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N/A: Hasta aquí el capitulo. A todos les gusta el drama, ¿verdad? Espero que si.

Ya presente a Odín y a Rossweisse. Como dije antes, este Odín no será pervertido, pero no le faltara humor. No explicaré tanto el tema de Asgard y como funcionan los 9 reinos en el fic, no hasta llegar al arco de Loki. Además de explicar como Odín esta con su verdadero cuerpo. Un argumento que no usaré por última vez.

Lamento tanto mi tardanza, pero estuve ocupado con la universidad y mis otros fanfics. Igual agradezco la paciencia.

Una cosa que tiene de buena DxD es que explican bien como funcionan sus Rating Game y sus participantes. No todas las batallas son perfectas, pero igual se disfrutan.

¿Quieren ver la pelea de Rias y Sona, pero diferente, o me la salto? Dependiendo de la respuesta, definirá en que se centrará principalmente el siguiente capitulo.

Y justo cuando Shoko se declaro, Amaterasu hace su jugada, pero Saori no parece tan feliz con la idea, y todo se sazona aun más con el regreso de Seiya al Santuario. Vaya drama.

Aparte del lio amoroso de nuestro Caballero favorito, voy a dejar a los Santos a un lado de momento para concentrarme en otro grupito y otros temas más hasta llegar a la batalla contra Diodora, donde Issei se vuelve loco.

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.