Kiba, Irina y Xenovia estaban enfrentándose a los Magos en el suelo mientras Vali se encargaba con mucha facilidad en los Magos que estaban flotando en el aire. Mientras cortaban a los Magos, que desaparecían al recibir alguna herida, Irina se acerco a Xenovia.

-¿Por que no me dijiste la verdadera razón de porque te fuiste?- Ella había tenido esa pregunta desde que su amiga se volvió un Demonio y volvió al Vaticano sola.

-No podía dejar que sufrieras el mismo destino que yo- respondió Xenovia, esquivando algunos disparos mágicos antes de usar el gran poder destructivo de Durandal para acabar con dos de los Magos que la atacaban. -Si hubieras sabido la verdad, también te hubieran expulsado de la Iglesia... y no quería ver tu cara al escuchar que Dios estaba muerto todo este tiempo-.

Irina hizo una mueca de dolor. Ella fue informada de la muerte de Dios un día después de volver al Vaticano con las piezas de las Excaliburs, el mismo Michael se presento ante ella para informarle. Esa revelación casi la devasta, era como si su mundo y todo lo que creyera hubiera sido destruido. Fueron las bondadosas palabras del Arcángel que la mantuvieron cuerda; pero incluso ahora siente un gran vacío y dolor al escuchar eso.

Cerró los ojos al entender que Xenovia nunca traiciono al Vaticano, sino que al revés y porque no había otra opción... fue una verdadera estúpida al pensar que su amiga era malvada cuando solo intento protegerla.

-¿Irina?- Llamo Xenovia cuando el silencio de la castaña se hizo un poco largo.

Irina abrió los ojos más determinada. -No podemos dejar que esta reunión sea interrumpida, ¿verdad? Si la paz es declarada hoy, incluso los Demonios serán nuestros aliados-.

-Y la voluntad de Dios, puede ser nuestra fe- termino Xenovia con una sonrisa. -¡Luchemos por nuestra amistad!-.

-¡Si!-.

Un estruendo se hizo escuchar por toda la escuela y cerca de donde estaban los líderes de las Facciones con los Demonios congelados, se levanto una gran cantidad de humo y seis siluetas salieron saltando del humo, dispersándose por el campo.

-¡Salpicadura Angelical!- En el aire, Mii giro alrededor suyo, creando y esparciendo con su cosmos burbujas a su alrededor, antes de dejar de girar y con su pierna izquierda, mandarlas contra el Espectro.

-¡Siente el Hacha del Minotauro! ¡Gran Hacha Aplastante!- Concentrando todo su Cosmos en su brazo derecho, Gordon agito su brazo como si atacara con un hacha, cortando las burbujas antes de que lo tocaran.

Mii aterrizo en el suelo luego del choque se produjo entre todos que hizo dispersarlas a todas por el terreno de la escuela para enfocarse en sus respectivos combates.

-¿Corto mi técnica?- Pregunto sorprendida.

-Tus burbujitas no son nada ante la gran Hacha del Minotauro- se jacto orgulloso Gordon. -Te aplastaré con la fuerza de mi hacha- con fuerza en las piernas que desquebrajo el suelo debajo suyo, Gordon se lanzo con una gran fuerza y velocidad contra Mii.

-¡Meteoros de Equuleus!- Shoko lanzo su técnica característica, y que al igual que Seiya con los de Pegaso, no deja de usar a pesar de ya no ser la Saintia de Equuleus.

Sylpheed salto, impulsado por las alas de su armadura, esquivando los meteoros.

-¿Esa es la fuerza de las Saintias de Athena? Solo son unas chiquillas débiles. ¡Así es como se pelea!- Sylpheed se arrojo contra Shoko, empujándola y avanzando con ella. Rompiendo la pared del edificio principal de la escuela y atravesando varios muros hasta quedar al otro lado.

Shoko se hinco al ser empujada por el Espectro luego de que su espalda choco y atravesó varias paredes. No es lo peor que ha pasado en una pelea.

Un soplo de viento sacude los mechones de su cabello rojizo. Shoko intenta levantarse, pero siente que su cuerpo no le responde bien, empieza a sentirlo algo pesado.

-Veo que el veneno de Basilisco ya empieza a afectarte- observo Sylpheed.

-¿Veneno?- Repitió Shoko.

-Es una habilidad que yo, como la Estrella Maligna de Basilisco tengo. Solo mi señor Radamantys y ese Caballero de Dragón fueron los únicos que no se vieron afectados por mi veneno gracias a sus grandes cosmos. Pero tu, una mujer de rango Plata, tendrás la mayoría de tu cuerpo entumecido por mi veneno- explico el Espectro, abalanzándose contra Shoko y tomándola del cuello para estrellarla contra el suelo.

En el techo del viejo edificio del Club del Ocultismo, Penemue daba rápidas y precisas estocadas hacía Queen, apuntando a puntos vitales. El Espectro, con una sonrisa burlesca, esquivaba todas las estocadas.

-No puedo creer que tenga que enfrentarme a una sucia Ángel Caído, que humillación- se quejo Queen.

-No deberías subestimar a los Ángeles Caídos- Penemue preparo su espada para otra estocada. Esta vez, concentro energía sagrada en el filo de su arma.

Queen noto eso y dio un brinco hacía atrás para esquivarlo, pero Penemue no lo dejo irse tan fácil y salto hacía él, dándole una estocada que lo derribo, rompiendo la parte frontal del techo y cayendo delante de la entrada del Club.

Queen se apoyo en sus manos y vio molesto a Penemue que lo veía desde arriba. Ese ataque no le hizo casi nada de daño, pero no soportara que alguien lo humille de esta manera.

Poniéndose de pie, Queen ataco con las ramas de su Sapuris que se estiraron, Penemue salto para esquivarlo y prediciendo donde caería, Queen ataco con otra de sus ramas, la Ángel Caído se protegió con un escudo mágico que fue destruido fácilmente y ella fue golpeada, siendo empujada, pero logrando aterrizar en el suelo.

Queen la miro con arrogancia y superioridad... Penemue escupió un poco de sangre. El golpe de esa rama fue más fuerte de lo aparentado. Estiro su cuello, haciendo que suenen los huesos... hora de ponerse serias.

Queen miro sorprendido cuando esa Caída desapareció de su vista, sintiendo un gran viento a sus espaldas, concentro Cosmos en las ramas de su Sapuris.

-¡¿Qué te parece esto?!- Penemue se había movido a gran velocidad para estar detrás del Espectro. Cuando este se dio vuelta para encararla, ella apunto su espada a su pecho; pero antes de que hiciera contacto con el pecho de la armadura, las ramas envolvieron la hoja de la espada, deteniéndola.

-¿Un ataque por la espalda? ¿En serio? Eso es de novatos- se burlo Queen.

-Veo que de tus amigos eres el más débil, así como el menos listo- se burlo Penemue.

-¿Qué dijiste? Tu, escor...¡AAAGGGH!- No termino de hablar, ya que sintió una corriente eléctrica por todo su cuerpo.

En la mano de Penemue que sostenía la empuñadura de la espada, salían descargas y energía sagrada que era combinada con las descargas.

-Puede que no este al nivel de Baraquiel al combinar rayos y energía sagrada, pero tampoco soy muy inferior- comento para si misma. Pateo a Queen, alejándolo de ella. Se puso en pose de combate, separando un poco las piernas y elevando su espada a la altura de su rostro.

-¡Maldita mujer!- Queen ya se había cansado con jugar con ella, usaría todo su poder para cortarle la cabeza. -¡Gillotina...!-.

-¡Eres muy lento al atacar! ¡Danza de las 7 estrellas caídas!-.

Mandrágora había levantado sus brazos para realizar su técnica y cortarle la cabeza a la Caída, pero Penemue fue más rápida. Se lanzo hacía Queen y disparo a 7 estocadas que superaban la velocidad del sonido por mucho y estaban cargadas de mana: una estocada en cada brazo, una en cada pierna, una estocada en cada riñón, y la última era hacía el centro el pecho. Al dar el séptimo golpe, Queen fue lanzado a chocar contra la pared del edificio principal, derribando la pared.

Kiba corto a uno de los Magos y otro iba a atacarlo por detrás, pero...

-¡Dragón Shoot!- Fue derribado por un ataque. Kiba reconoció con alegría la voz.

-¡Issei-kun!-.

-¡Chicos, ¿están bien?!- Pregunto Issei, llegando con Rias, Koneko y Gasper.

En el cielo, Azazel silbo impresionado. -Para que usara una de sus técnicas de espada, Penemue si que se esta esforzando, aunque se nota que lo esta pasando bien-.

-¡¿A donde crees que estas mirando?!- Katerea lanzo un hechizo mágico explosivo contra Azazel.

En respuesta, este lanzo varias lanzas de luz. Ambos ataques chocaron en el aire.

Athena, los Santos Dorados y los Líderes de las Facciones veían los distintos combates pasar. Ellos estaban rodeados de Magos. Al inicio ellos los habían atacado, pero sus ataques les fueron rebotados por el Muro de Cristal. Así que dejaron de atacar y empezaron a hacer planes para eliminar esa barrera, pero nada de lo que hacían siquiera debilitaba el Muro de Cristal, y Kiki no estaba ni cansado en mantenerlo.

-Esos Espectros son fuertes, con razón Shiryu tuvo problemas en enfrentarse a los tres en el Inframundo- dijo Seiya.

-Cada uno esta al nivel de un Santo de Plata un poco sobre la media, las chicas no lo tienen fácil- observo Mei. -Aun así me sorprende que esa Ángel Caído pueda mantener la pelea con un Espectro-.

-No hay que subestimar a Penemue. En fuerza física y habilidad, ella es incluso superior a Azazel- dijo Sirzechs. Durante la Gran Guerra de las Tres Facciones, él solo enfrento una vez a Penemue cuando ambos eran más jóvenes, pero fue de los combates más difíciles que alguna vez tuvo.

Issei, Rias, Koneko y Gasper se acercaron al lugar donde estaban los líderes reunidos. Al verlos acercarse, los Magos los atacaron. Kiki abrió un espacio, por donde Seiya salió. Con un ataque "Khen" a la velocidad de la luz, derroto a todos los Magos, haciendo que los Demonios entren al interior del Muro de Cristal.

-Va-Vaya...- comento Issei sorprendido al ver con que facilidad, Seiya derrotó a todo un grupo de Magos.

-Veo que lograron su objetivo- comento Saori, viendo al Medio Vampiro. -Ahora hay que hacer que el tiempo vuelva a la normalidad-.

-Y-Yo... ¡no se como hacerlo!- Exclamo Gasper, no teniendo idea de que hacer para desactivar lo causado por su propio poder.

Mei tuvo una idea para darle valor. Fue algo que su maestro le hizo a él. Tomo a Gasper del cuello con una mano y lo puso a la altura de su rostro para verlo a los ojos.

-¡Ya espabila de una vez! ¡Si tanto miedo tienes de tu poder y que la gente te rechace, contrólalo! ¡No sirve de nada llorar! Eso no solucionara tus problemas!- Mei bajo a Gasper. -Si quieres dejar de vivir con odio y temor, entonces madura-.

Varios Magos habían aparecido para aprovechar el hueco que Kiki aun mantenía abajo para atacar en un intento de eliminar a los Líderes de las Facciones; pero Mei estiro el brazo izquierdo, usando las Ondas Infernales, le quito las almas a todos esos Magos.

-¡Gasper! ¿Estas bien?- Pregunto Rias, había usado toda su fuerza de voluntad para no atacar al Santo de Cáncer por hacerle eso a un miembro de su nobleza.

-É-Él tiene razón- dijo Gasper, sorprendiendo a Rias mientras este se levantaba. -Yo... lastimo a la gente porque no se controlar mi poder. Yo... yo no quiero que nadie más me odie, quiero... ¡quiero proteger a mis amigos! Así como ser un hombre tan fuerte como Mei-san. ¡Yo también soy un hombre!-.

Los ojos de Gasper brillaron intensamente mientras un aura rosa rodeaba su cuerpo. En un segundo, el aura que envolvía el lugar se esfumo, y las personas congeladas volvieron a poder moverse.

-¿Ara, ara? ¡¿Qué paso?!- Exclamo Akeno, mirando a todos los lados.

-¿Que... fue lo que sucedió?- Se pregunto Sona, mirando confundida a los presentes.

-¡Yo... lo hice!- Celebro Gasper con alegría, antes de caer inconsciente, siendo atrapado por Rias.

Mei sonrió al ver el esfuerzo de Gasper. -Lo hiciste bien, niño-.

Mientras Sirzechs le explicaba la situación a los recién descongelados, las Saintias seguían en sus luchas.

Mii esquivo apenas una ráfaga de corte del ataque de Gordon. Tenía unas leves heridas en su rostro y su armadura estaba algo manchada. Ya había recibido el golpe del Hacha del Espectro, y aunque fue amortiguado, sabe que de haberla recibido de lleno, hubiera muerto.

-Todo lo que puedes hacer es huir del filo de mi hacha. Que oponente más débil resultaste ser- exclamo Gordon.

Mii sabía que no podía esquivar los ataques por siempre. Le había asegurado a la señorita Athena y a los Santos Dorados que ella derrotaría a su enemigo, y no fracasaría.

Un plan vino a su mente, era arriesgado, pero si funcionaba, garantizaría su victoria.

-¡Salpicadura Angelical!- Volvió a lanzar su técnica de burbujas; pero esta vez solo lanzo algunas burbujas, mientras que mantuvo a la mayoría flotando a su alrededor mientras avanzaba hacía Gordon con el escudo de Ballena delante.

-¿Decidiste morir de frente? Entonces te complaceré. ¡Gran Hacha Aplastante!- Gordon dio un golpe de hacha con su brazo derecho, cortando las burbujas y chocando su brazo con el escudo de Mii.

Un choque de Cosmos se produjo. El Hacha del Espectro contra el Escudo de la Saintia. El cosmos de ambos intentaba sobreponerse al otro, hasta que hubo un ganador. Gordon mando hacía atrás a Mii, dejándola boca arriba en el suelo. Su escudo estaba lleno de fisuras.

-No lo hiciste mal, mujer. Como recompensa, te mataré rápidamente- Gordon levanto su brazo para terminar la pelea, pero se dio cuenta que estaba envuelto. -Estas son... ¿burbujas?-.

Ve que las burbujas lo rodeaban como una espiral. No sabe en que momento llegaron a rodearlo sin que se de cuenta. Luego recuerda en choque recién.

-Tú... ¡hiciste que colisionáramos para que estas burbujas me rodearan!-.

Mii, con un poco de sangre cayendo de su frente y algo agotada, se puso de pie como pudo y miro a su oponente.

-En efecto. Me arriesgue, pero confié en la defensa de mi escudo y de mi armadura para asegurar mi victoria-.

-¡Pues unas burbujas no me detendrán!- Gordon elevo su cosmos para cortar a las burbujas, y a la rubia en dos.

Mii también elevo su cosmos, ella estaba decidida a no perder ante nadie, aunque sea solo una Saintia. No puede fallarle a la señorita Saori.

-¡Gran Hacha Aplastante!-.

-¡Maelstrom Celestial!-.

Elevando su cosmos lo más alto posible, Mii lanzo una patada horizontalmente, creando con su Cosmos un torrente de agua que fue contra Gordon, que por lanzar su ataque dejo su guardia abajo.

El Espectro recibió la poderosa ráfaga de agua de lleno, y como las burbujas aun lo envolvían, estas explotaron con violencia, destruyendo partes de sus Sapuris. Combinado con el Maelstrom, fue suficiente para caer muerto ante Mii.

Sus dos compañeros sintieron el choque de cosmos y como el cosmos de Gordon desapareció.

-¿En serio perdiste, Gordon? Qué patético- dijo molesto Sylpheed.

-Como era de esperarse de Mii... no puedo ser menos que ella en esta pelea- Shoko, con algunas heridas en su rostro y un poco de sangre en su boca por los constantes estrellamientos que el Espectro le hizo por no poder mover su cuerpo bien, se puso de pie.

-Veo que eres del tipo que se levanta hasta que muere. Muy bien, te acabaré con mi siguiente ataque- declaro Sylpheed. Su Cosmos se eleva a su punto más alto. -¡Aletazo de Aniquilación!-.

Shoko sintió una fuerte ráfaga de viento acercarse. Sabe que si ese ataque le da y con su cuerpo no pudiendo moverse bien por el veneno de Basilisco, podría morir. Tiene solo una oportunidad para ganar.

-¡Arde, mi Cosmos!- Shoko se lanzo hacía el ataque de Sylpheed.

-¿Que pretende hacer esta mujer?- Se pregunto el Espectro, sorprendido de ver a su oponente arrojarse hacía su poderoso viento.

-¡Caza fugaz de Águila!- Elevando lo más alto posible su Cosmos, cubriendo todo su cuerpo con una capa de cosmos, la Saintia de Águila choco con el ataque de Basilisco.

Sylpheed vio sorprendido como esa mujer lo esta haciendo retroceder. -¡Esa maldita...! ¡Cubre todo su cuerpo de Cosmos y avanza adelante, incluso empujándome mientras lanzo mi ataque! ¡Esta atacando y defendiendo casi al mismo tiempo!-.

Con un grito de batalla, el Cosmos de Shoko supera al de Sylpheed, atravesando su técnica y estrellando su puño en el corazón de Sylpheed. El golpe atraviesa su pecho y por la onde de choque de Cosmos, manda a volar su cuerpo.

Shoko suspira y ve a su enemigo derrotado. La Caza Fugaz de Águila es una técnica propia que desarrollo cuando Marín ascendió a Caballero Dorado y ella heredo su armadura de Plata. Entreno mucho con Mayura para crear y perfeccionar esta técnica, que efectiva, es agotadora.

Azazel vio las victorias de las dos Saintias desde el cielo. Solo quedaba un Espectro y estaba seguro que Penemue lo derrotaría.

Fijo su atención en Katerea, que tenía un semblante molesto. Probablemente porque se estaba dando cuenta que su ataque estaba condenado al fracaso. Miro la mano derecha de Katerea. Como descendiente del verdadero Leviathan, ella era fuerte, pero ese poder extra que tiene la hace aun más, haciendo que ambos estén en el mismo nivel, cuando en el pasado, él era muy superior a ella.

Pero también, eso confirma las sospechas que tenía y lo que descubrió Shemhaza recientemente.

-Ahora entonces, creo que es hora de terminar este juego- saco de su ropa una daga dorada con la punta con forma de cilindro y en la parte inferior de la daga había una gema morada.

-¿Qué es eso?- Pregunto Katerea. Lo que sea que sea esa daga, si lo tiene Azazel, es peligroso.

-Mi hobby, es mucho más interesante que la guerra- levanto la daga y la gema empezó a emanar un brillo. -Esta es la Lanza del Dragón Caído. Una Sacred Gear creada artificialmente por mi-.

Penemue bloqueo un ataque de las ramas de Queen con su espada, aunque el impacto la hizo retroceder. El brillo de la gema de la daga de Azazel atrajo su atención y miro hacía arriba.

-Así que finalmente vas a usar eso-.

-¡Balance Breaker!- Dijo Azazel, y la daga desapareció en destellos dorados, envolviéndolo a él en una capa de los mismos destello.

La gema del guantelete de Issei brillo y miro hacía el cielo. No fue el único: Sirzechs, Miguel, Athena y los Santos Dorados también vieron al cielo, todos intrigados de lo que estaba haciendo Azazel.

El rugido de un dragón se hizo escuchar cuando los destellos dorados se fueron, mostrando a un Azazel envuelto completamente por una armadura de dragón de un oro opaco con gemas moradas en el torso, codos y rodillas. Sus alas de Ángel Caído se extendían detrás de su espalda. En su mano derecha sostenía un tridente hecha de luz sagrada.

-La Armadura del Dragón Caído: Down Fall Armor Dragon- presento Azazel.

-¿Una armadura de dragón? ¿Eso es un Balance Breaker?- Pregunto Issei.

-¿Qué clase de armadura es esa?- Pregunto Queen al ver la armadura de Azazel.

-Ese tipo... si que tenías muchas ganas de usarla- suspiro Penemue. Azazel nunca cambiaría. Al menos se tomaba la pelea en serio. -Creo que es hora de terminar contigo-.

Queen la miro jactancioso. La técnica de espada de esa mujer, aunque consiguió golpearlo, no lo hirió letalmente gracias a su Sapuris, pero si lo golpeo al punto de derramar sangre. Hora de la retribución.

Queen ataco con las ramas de su Sapuris que Penemue esquiva de un salto, ataco de nuevo, esta vez apuntando a la mano que sostenía la espada. Penemue, notando eso, creo lanzas de luz arriba suyo que repelieron las ramas y fueron hacía Queen, quien las repelió con sus manos fácilmente y tomo un par en cada mano que lanzo devuelta, pero Penemue las bloqueo con un círculo mágico defensivo.

El Espectro de Mandrágora sonrió, era la oportunidad que esperaba.

Penemue sintió como una de las ramas de la armadura envolvió su pierna derecha. -¡Maldición!-.

-¡Ahora recibe el castigo por haberme humillado, sucia Caída! ¡Guillotina de Flores Sangrientas!-.

Queen alza los brazos y detrás de él apareció por su cosmos una guillotina que dejo caer su hoja rápidamente. Su técnica produce un profundo corte en el pecho de Penemue. El corte va desde cerca de su hombro izquierdo hasta su costado inferior derecho, pasando entre medio de sus senos. La sangre de la Caída empezó a caer por la herida.

-Te felicito por mover tu cuerpo lo suficiente como para que mi técnica no cortara tu cabeza, pero arreglare eso ahora mismo- Queen se acerco confiado hacía Penemue, creyendo que ya tenía la victoria asegurada.

Pero se detuvo cuando la escucho reír.

-¿Qué es tan gracioso?-.

-Tu ataque fue poderoso, incluso me dejaste este tipo de herida. Algo así de fuerte hubiera bastado para matar a tipos como Kokabiel, pero en mi caso... me divierte que hayas podido golpearme, te lo reconozco- Penemue miro a los ojos a Queen. -Es una lastima que eso es todo lo que podrás hacer-.

-Qué estas...- Queen no termino de hablar, ya que Penemue libero una energía gigantesca de su cuerpo, haciéndolo rebotar, incluso le saco el casco por el rebote. -¡¿Cómo pudo hacerlo?! ¡Estaba moribunda!- Mira a la Caída desconcertado.

-¿Moribunda, yo? No te creas mucho. Tu ataque me lastimo, pero se necesita mucho más que eso para matarme-.

Penemue se puso de pie y posiciono su espada al lado derecho de su cintura en una posición de desenvainar.

-¡Destello del Pecado Celestial!-.

Penemue dio un paso adelante, levantando la espada como si la estuviera desenvainando de una funda con una habilidad y velocidad de una katana. La hoja de la espada estaba imbuida de magia para amplificar su fuerza, haciendo que tuviera un aura morada.

La espada corto a Queen en un corte ascendente. Queen fue lanzando al aire por el impacto, su cuerpo no fue cortado debido a su Sapuris, pero la fuerza y el filo de la espada le hizo sacar una cantidad absurda de sangre que voló por el aire antes de que su cuerpo cayera al suelo.

Penemue bajo su espada y con su mano libre, creo un círculo mágico para cerrar la herida. Vio al cielo para ver el combate de Azazel y Katerea.

La descendiente del Leviathan original estaba con un gran corte en su pecho debido al ataque de Azazel. Ella se dio cuenta que con esa armadura, el líder de los Ángeles Caídos aumento mucho su poder, ella no tiene oportunidad de ganar.

Pero al menos...

Se dio la vuelta y estiro sus brazos, y desde las puntas de sus dedos, crecieron brazos más pequeños. Todos envolvieron el brazo izquierdo del gobernante de Grigory.

-Si puedo tomar la vida de uno de los líderes de las Tres Facciones... ¡entonces con mucho gusto me sacrificare!- Grito Katerea.

-¿Un atentado suicida? Lo siento, pero eso no es suficiente. ¡Este acuerdo esta lejos de ser justo!- Azazel se clavo el tridente de luz en donde comenzaba su brazo y terminaba su hombro, arrancándoselo.

Katerea se sorprendió y retrocedió al ver que Azazel se quito su propia extremidad sin dudar.

-No eres nada- lanzo el tridente hacía la cabeza de la mujer, dando en el blanco.

Katerea dio un grito desgarrados antes de desvanecerse, siendo lo último sobre ella.

-Un brazo es todo lo que tienes de intercambio por tu vida- la armadura de dragón se fue, y un circulo mágico apareció en la zona cortada de su extremidad para cortar el desangrado. La gema morada de su daga floto hasta que la atrapo. -Parece que todavía hay espacio para mejorar- beso la gema. -Tendrás que jugar conmigo por un tiempo más, Rey Dragón Fafnir-.

En el suelo, todos vieron como Azazel gano, y la forma en que lo hizo.

-Realmente se arranco el brazo, sorprendente- admitió Seiya.

-Era eso o explotar con esa loca- agrego Mei.

-Solo falta derrotar a las fuerzas que quedan- dijo Kiki, observando como todos los jóvenes Demonios peleaban contra los Magos que quedaban.

-Yo me encargo- Mei dio un paso adelante, pidiéndole a Kiki que haga un agujero para que pueda salir. Levanto el brazo izquierdo, levantando su dedo índice. -Hora de terminar la función, damas y caballeros. ¡Ondas Infernales!-.

Con su poder, Mei atrajo todas las almas de los Magos en el campo de batalla, teniendo cuidado de no traer las almas de los Demonios entre ellas. Como las almas estaban siendo atraídas hacía Mei, sus cuerpos caían inertes al suelo.

-Ese poder... ¿ese es el Caballero Dorado de Cáncer?- Pregunto Michael, viendo como Mei enviaba todas las almas de los Magos al Yomotsu.

-Oh, así que esas son las Ondas Infernales, que pueden separar el alma de un cuerpo y enviarlas al camino del Inframundo, ¿eh?- Observo interesando Azazel.

Estaba tan distraído, que no noto el ataque mágico que lo golpeo por atrás, estrellándolo contra el suelo cerca de Issei, haciendo un pequeño agujero.

-¡Saori-san!- Grito Mii, corriendo hasta donde estaban todos.

-¡Lamento el retraso!- Dijo Shoko, llegando también con Athena y los demás.

-No, creo que llegas a tiempo- Kiki alzo la mirada para ver que...

-Parece que me diste un buen golpe, ¿eh, Vali?- Comento Azazel, saliendo del agujero.

En el cielo, el Dragón Emperador Blanco fue quien ataco al líder de los Ángeles Caídos. -Lo siento, Azazel. Este lado parece ser más divertido-.

-¡Vali! ¡¿Tu eras el traidor?!- Pregunto furioso Issei.

Penemue voló con sus alas de Ángel Caído desde donde estaba hasta estar frente a Vali. -El hecho de que estés haciendo esto, significa que las sospechas de Shemhaza eran correctas-.

-¿Sospechas?- Pregunto Saori.

-Sobre la existencia de una organización que esta reuniendo a personas peligrosas que podrían ser una amenaza para las Tres Facciones. Creo que se llaman la Brigada del Khaos- explico Azazel.

-Brigada del Khaos...- repitió con cierta preocupación Sirzechs.

-¿Reuniendo gente peligrosa? No cualquier ser puede hacer eso, debe ser alguien poderoso si recluta y controla a gente así- dijo Saori con perspicacia.

-Así es. El líder de todo esto no es otro que el Dragón del Ouroboros, Ophis-.

La revelación de ese nombre sorprendió a todos los presentes, excepto a Issei y los Santos Dorados, así como a las Saintias, que no conocían ese nombre.

-¿Ophis? ¡No puede ser...!- Rias sudo frío por el temor.

-¿Quién es Ophis?- Pregunto Seiya confundido.

-¿Un dragón, dijo?- Pregunto Issei.

-Ophis es el Dragón del Infinito e inmortal. Es el dragón que representa ese concepto, así como una de las dos existencias más fuertes del mundo que incluso los Dioses temen- explico Athena.

-Se dice que incluso Dios le temía- agrego Rias.

-Ouroboros...- Kiki repitió ese nombre. -¿Tiene alguna relación con el signo de Ofiuco?-.

Ese comentario tomo por sorpresa a Saori. -Eso... no lo se-.

¿Puede que en el pasado, ella haya interactuado con Ophis?

-Es cierto que uní fuerzas con Ophis, pero a diferencia de ella, yo no tengo interés en este mundo, o sus planes de dominación. Las personas simplemente se unieron a nosotros porque querían hacer uso de nuestra fuerza- afirmo y explico Vali.

-Ya veo. Entonces tu y Katerea no colaboraron juntos por ser ambos descendientes de Reyes Demonio, sino para usarse. Suena un poco a algo que tu harías- dijo Penemue.

-¿Descendiente del Rey Demonio?- Rias no se le dejo escapar lo que dijo Penemue, y a Sirzechs tampoco. -¿Qué significa eso?-.

Llegados a este punto, Vali no encontraba sentido ocultarlo más. -¡Mi nombre es Vali Lucifer!-.

-¡¿Qué?!-.

-¿Lucifer?-.

-¡No puede ser!-.

Sirzechs, Issei y Rias fueron lo que exclamaron los pensamiento de todos los Demonios en este momento.

-La sangre del fallecido Rey Demonio Lucifer fluye por mis venas. Soy su descendiente directo, la descendencia mixta de un Demonio puro y una mujer humana- para hacer verídicas sus palabras, Vali saco sus alas de Demonio. Eran 8 en total.

-Imposible...- murmuro impactada Rias, pero no podía negar lo que sus ojos veían.

-Ya veo, con una humana... eso explica como se ha mantenido en las sombras todo este tiempo- Sirzechs sabía que de haber todavía un descendiente directo del Lucifer original, seria una noticia que todo el Inframundo sabría, pero si estaba en el mundo humano podía pasar desapercibido.

-Aunque es descendiente de sangre del Lucifer original, sigue siendo mitad humano, por eso fue capaz de ser el anfitrión del Vanishing Dragón por pura coincidencia- dijo Azazel.

-La existencia de Vali se podría considerar un milagro, o el capricho del destino- agrego Penemue.

-Eso explica la otra energía que sentí en él cuando lo vi con Issei y Xenovia: era la de un Demonio que convivía con su parte humana- pensó Kiki para si mismo.

-Creo que la palabra milagro fue creada para definirme- dijo Vali.

-Pasado, presente y futuro. Él tal vez sea el Dragón Emperador Blanco más fuerte que jamás haya existido-.

-Él más fuerte...- Issei sudo por la declaración de Azazel. ¿Su rival a quien tendría que derrotar era alguien tan importante y poderoso?

-Hyodou Issei- Vali llamo al castaño. -¿Piensas que tu destino es cruel?-.

-¿Qué dices?-.

-La sangre del Antiguo Rey Demonio corre fluye en mi, y sin embargo, también tengo el poder de un dragón, de uno de los más poderosos del mundo. Por otro lado, tu eres un simple humano. Aunque hayas reencarnado en Demonio, solo eres un estudiante de secundaria más. En otras palabras, no eres nada sin tu Boosted Gear-.

Issei apretó los dientes de rabia al no poder contradecir las palabras de Vali.

-Que aburrido. Tan aburrido que me hace reír. Se supone que nuestras Sacred Gear son rivales del mismo nivel, pero la diferencia entre nosotros es incluso más amplia que la de el cielo y la tierra. No, tal vez incluso mayor-.

-¿Y que con eso?-.

-Oh, ¿que tal esto?- A Vali se le ocurrió una idea interesante. -Te convertirás en un vengador. Para eso matare a tus padres-.

Issei abrió ampliamente sus ojos al escuchar esa horrible idea. A su mente vino la imagen de sus padres muriendo de un tajo.

-Si tus padres son asesinados por alguien tan importante como yo, entonces, ¿no sería un giro del destino adecuado para que te vengaras de mi? Eso también hará que la vida de tus padres más dramática que esperar a envejecer y tener una muerte aburrida-.

-¡Vali!- Le llamo la atención Penemue. Ella había notado que Vali decía esas cosas para provocar a Issei a pelear, pero se estaba pasando.

-Si, haré...- no termino de hablar, ya que hizo a un lado su cabeza, esquivando lo que parecía ser un meteorito de energía.

-¡Seiya!- Saori y todos voltearon a ver al Santo de Sagitario, quien tenía el puño extendido hacía Vali.

-Lo lamento, pero si quisiera escuchar tonterías, me iría a pelear contra algún Dios, a ellos les encanta el sonido de su propia voz- Seiya camino un poco hasta adelante, colocando una mano en el hombro de Issei. -Emperador Blanco, haces menos a Issei solo por haber nacido humano. Como otro simple humano, no te lo recomiendo-.

-¿Simple humano? Si que eres humilde, Santo de Sagitario- respondió Vali. -Después de nuestro encuentro de la situación de Kokabiel, investigue un poco de ti. Eres conocido como el "Asesino de Dioses", el único humano que el Olimpo teme y odia. Tu participación ha cambiado el rumbo de las batallas de Athena, y en diferentes Panteones eres temido y respetado... sin embargo, aun con ese poder, te conformas con ser un perro faldero de tu Diosa-.

-Me sobreestimas. Yo no hubiera logrado nada de eso sin el apoyo de mis amigos y de Athena. Y a diferencia de ti, a pesar de que eres mitad humano, yo creo en el potencial de la humanidad, así como en el valor de las personas. Se que tu e Issei tienen una batalla predestinada por el destino y que nadie puede meterse en eso... pero no me quedare sentado cuando amenazas a personas inocentes por tus tonterías de querer pelear-.

Seiya tomo vuelo, quedando frente a frente con Vali, y teniendo a Penemue atrás suyo.

-Si tanta es tu ansia de una pelea, yo con gusto te complaceré, Vali Lucifer-.

-Espera...-.

Penemue trato de entrometerse. Seiya la miro, y Penemue quedo congelada al ver su mirada... no era una mirada amenazante ni peligrosa... sino una mirada llena de firmeza y valor. Pudo ser su imaginación, pero la Caído creyó ver todo un Universo en los ojos del castaño.

-Se que no nos conocemos, pero te pido que me dejes esto a mi. No puedo hacer como que no escuche nada después de lo que él dijo- pidió Seiya suavemente.

Penemue, no sabiendo bien porque, asintió con la cabeza y empezó a descender... era extraño, pero con solo la presencia de ese humano, la hizo sentir como que todo iría bien.

-¿Esta segura de permitir eso, señorita Athena?- Pregunto Mii.

-Seiya no va a retroceder en este instante, aunque se lo pidiera. Ese tipo de persona es. Solo queda confiar en él- fue la respuesta de Athena.

Todos los presentes ahora mirarían con sumo cuidado la batalla que iba a comenzar, entre la existencia que podría considerarse un milagro, y la persona que con su fuerza de voluntad, es capaz de crear los milagros.
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N/A: Hasta aquí el capitulo, uno de acción.

Las chicas con algo de esfuerzo consiguieron vencer. La técnica que usa Shoko fue una que yo cree, y que personalmente, creo que le queda.

Y sabiendo que algunos se quejaran sobre que Penemue derroto a un Espectro, quiero que tengan en cuenta que Penemue, así como los líderes de las Facciones y sus segundos al mando (o en el caso de los Maou, los 4) son capaces de pelear contra un Santo Dorado. No digo que ganarle, pero si darles batalla.

Uno de los problemas de los fics de DxD, es que a veces nerfean o exageran niveles de poder. En un universo como el suyo se pueden dar esas exageraciones, pero a veces se pasan un poco. Por ejemplo, he visto fics en que Issei derrota a Sirzechs. No digo que no pueda o no tenga el potencial para derrotarlo, pero el Issei del canon por ejemplo, aun no podría derrotar a Sirzechs, ya que este, además de ser un Super Demonio, también tiene la experiencia que lo respalda.

Aquí trataré de respetar lo que más pueda los niveles de poder de los personajes al enfrentarse. Kokabiel, por ejemplo, podía ser vencido por un Santo de Plata, por eso fue derrotado con tanta facilidad por Kiki, un Santo Dorado.

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.