Capítulo 47
La tan esperada noche de bodas llegó, Misuk regresó a su habitación para cambiarse por algo más cómodo e ir de incógnita a los aposentos de Sovieshu, aquel momento era otro que estuvo esperando.
Sovieshu regresó a donde se hospedaba tan pronto como Navier dejó el salón de fiestas. Misuk se transformó y se escondió en un rincón en donde nadie la vería.
Después de pasar un tiempo sentado en la cama, aturdido, se dirigió a la ventana y reclinó su cabeza contra el marco de la misma.
Misuk encontró que se veía lamentable pero era algo que el solo se había buscado.
Sovieshu estaba palaido se sentía mareado y desgarrado. Incluso ahora mismo sentía náuseas, y como si su corazón estuviera a punto de romperse en pedazos.
La imagen de Navier sonriendo, mientras sostenía la mano del 'maldito' rey, apareció ante sus ojos.
—¿Estará ahora en la habitación donde pasará la noche de bodas? -Cuando ese pensamiento le vino a la mente, se volvió blanco como un papel.
Misuk soltó una risa para sus adentros y lo miro.
En vez de odiar que el Reino Occidental se hubiera convertido en un imperio, odiaba ver a Navier sonriendo al lado de Heinley.
Odiaba verlos bailar juntos, y odiaba el hecho de que ese maldito crío se mantuviera pegado a Navier como si realmente estuvieran unidos.
—Huh. - Sovieshu finalmente se agarró el pecho y se inclinó por el dolor en su corazón. Su corazón realmente le dolía mucho.
Estaba enojado, pero el dolor era lo suficientemente fuerte como para suprimir su enojo.
Su esposa, que había sonreído a su lado, estaba al lado de otro hombre.
Este hecho por sí solo hizo que la sangre en su cabeza hirviera. Sentía como si la sangre fuera a filtrarse a través de sus ojos.
Aunque no salió sangre de sus ojos, sí de su nariz.
Sovieshu sacó un pañuelo y se limpió la nariz mientras la sangre goteaba.
—Navier... ...Navier, Navier...
—Estas realmente loco - pensó Misuk.
De repente, se preguntó si ella también se había sentido de la misma manera cuando trajo a Rashta.
—¿Navier se sentía de esta manera? -Si estaba enojada porque no mostró ninguna emoción. —¿Reprimió sus sentimientos?
—... De ninguna manera. - Sovieshu murmuró enseguida, rechinando los dientes. —Si así fuera, lo habría notado tarde o temprano, pero a Navier no parecía afectarle. No tenía ningún interés en mí. Por eso actuaba tan indiferentemente.
Sin embargo, pensó que era mejor así. Porque si Navier hubiera experimentado estos mismos sentimientos, habría sido terrible.
—Se lo que piensas desgraciado, se sintió mal pero justo ahora es feliz y tu eres miserable. -susurro Misuk.
Sus piernas se debilitaron.
Sovieshu se sentó en el suelo de espaldas a la ventana. Apoyó su cabeza contra la pared y bajó el pañuelo.
—¿Estoy borracho?
—Borracho y pendejo.
Podía ver a la Navier del día de la coronación delante de sus ojos.
La Navier de ese día le extendió la mano a Sovieshu.
—Debemos ir rápido, Su Majestad.
Continuó en tono de reproche, con el ceño fruncido.
—Todos están aquí.
—Navier...
Sovieshu respondió inconscientemente, completamente borracho.
—No puedo levantarme, Navier.
—¿Qué estás diciendo? Te vez patético, te mereces eso y más -susurro Misuk —Ahora vendrá el otro espectáculo.
Rashta, que vino a buscar a Sovieshu para que le cantara una canción de cuna antes de dormir, se quedó de pie en el pasillo, atónita, antes de darse la vuelta apresuradamente y salir corriendo.
Rashta regresó apresuradamente a su habitación.
Su corazón latía descontroladamente.
—¿Qué significaba esto? ¿Qué acabo de ver? -Su mente estaba caótica.
Por qué Sovieshu… ¿Por qué Sovieshu estaba así? ¿Cómo si extrañara a su ex-esposa?
—No, eso no puede ser.
—Si lo es querida Rashta -dijo una voz en la puerta, la nueva emperatriz alzó la cabeza y la vio, su nueva pesadilla estaba enfrente de ella. —Su Majestad ama con todo su corazón a la emperatriz Navier y no solo eso... también ama a la princesa Misuk, tu solo eres la que porta a ese bebé, de ahí no eres nada especial. -Rashta sacudió la cabeza, su corazón comenzó a latir con fuerza.
—¿¡Quién te crees que eres!?
—Soy Evely, llevo en mi vientre al hijo de su majestad, hermana - Rashta palidecio al escucharla y trato de soltar le una bofetada.
—¿Sabía que podría perder el bebé por esto? -la persona soltó su mano con asco —Y la pena por agredir la, sería la muerta ¿lo sabía?
—Usted no se meta, Rashta esta disciplinando a esa mujer.
—No creo que a Sovieshu le guste saber esto... y más si yo se lo digo - Misuk le brindo una corta sonrisa a Evely — regresa a tus aposentos Evely, dejemos sola a la emperatriz temporal - Rashta abrió sus ojos más y las vio salir.
Sin meditarlo tanto comenzó a morde sus dedos con enfado.
Sovieshu había sido su benefactor y salvador, quien la levantó del fondo, pero también era la persona conocía sus debilidades.
Si soltaba su mano, no podría hacer nada y volvería en picada de dónde había salido.
Tampoco existía ninguna línea de sangre a la que aferrarse dado que el bebé aún no había nacido.
—Tranquilízate Rashta. La emperatriz depuesta ya se volvió a casar. Es inútil que se arrepienta ahora. Y la princesa se casará...
Rashta se estaba rascando la piel mientras se mordía una uña.
Su vientre comenzó a dolerle de nuevo, probablemente debido al estrés.
—Pero incluso si no traía de vuelta a la emperatriz depuesta, ¿qué pasa si esto causa que se vuelva frío con Rashta? ¿Qué pasa si le atribuye a Rashta la causa de su divorcio y se aleja? ¿Y si la princesa decide aceptarlo? O Evely, esa tonta concubina podía quitarme mi puesto de Emperatriz.
Si el se alejaba posiblemente Evely tomara su puesto, no podía permitirlo.
—De ninguna manera, absolutamente no.
Elgy. Necesito al Duque Elgy y a Ga-eun, quería que el Duque Elgy le dijera que todo estaría bien. Quería que Ga-eun la consolara con su excepcional mente.
Sin embargo, no había forma de que el Duque Elgy o Ga-eun, quienes ni siquiera habían venido al Imperio Occidental, aparecieran de la nada.
¿Cuánto tiempo llevo así?
Rashta abrió sus ojos fuertemente cerrados y sacó de su boca el dedo que se estaba mordiendo.
Una firme determinación surgió en sus ojos llenos de inquietud.
Así es. No es momento de actuar así.
Si se hubiera quedado llorando desconsolada y caído en la desesperación el día que perdió a su primer bebé, jamás habría conseguido una vida como esta.
Rashta había salido corriendo de ese lugar por su propia voluntad para aferrarse a una nueva vida.
Lo mismo era cierto ahora.
Si seguía temblando por la inquietud, el final era obvio.
—Debo proteger lo que es mío.
Cuando era una concubina, el amor del emperador lo era todo. Todo su poder venía del emperador. Sin embargo, ahora al menos tenía su propio poder.
Aunque sea el emperador, no podría divorciarse de nuevo en unos días debido a la opinión pública. Debía aguantar como mínimo unos meses.
Para entonces, el bebé ya habrá nacido y será el primogénito del Emperador, sin importar lo que dijeran los demás.
—En el futuro, el bebé protegerá a Rashta. Pero hasta entonces, Rashta tiene que proteger al bebé.
Rashta se levantó de la cama y caminó por la habitación.
—¿Qué debo hacer? ¿Qué debo hacer? Enfrentarme directamente a la emperatriz depuesta ¿Matar a la princesa? ¿Debo matarla?
No había razón para evitar a la emperatriz depuesta, no había razón para evitar al Vizconde Langdel, ni tampoco había razón para evitar a la Duquesa Tuania y menos era posible matar a la princesa.
La emperatriz depuesta traicionó al emperador, y aunque actualmente tenía la posición de emperatriz, era la emperatriz de un país que acababa de autoproclamarse como imperio ayer.
El Vizconde Langdel era un malvado rufián que intentó apuñalar a una mujer débil y desarmada con un cuchillo. ¿No es la Duquesa Tuania también una mujer frívola que agita su cola para arrastrar a los hombres detrás de ella?
Y la princesa estaba comprometida con otro, se iría a su imperio en unos días y finalmente ella estaría a solas con Sovieshu... pero Evely seguía ahí, tal vez debía de deshacerse de ella.
—No hay necesidad de dejarse presionar por tales personas. ¿Por qué Rashta debe desanimarse cuando los perpetradores tienen la cabeza en alto?
¿El Vizconde Langdel no es líder de una orden de caballeros? Si ese es el caso, es genial. Expondré lo repugnante que es delante de todos.
O sobre ciertos temas que pocos querían tocar.
Rashta estaba firmemente decidida.
¿Qué creen que hara Rashta?
¿Creen que Evely llegue a ser algo más que una concubina?
¿Dos bebés el mismo padre? ¿O de otros?
Se viene lo bueno, cada vez más cerca del final.
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