Decisiones
Narra Dégel.
Caminaba de un lado a otro, no podía pensar con claridad, era muy gracioso el... quién siempre se consideró así mismo una persona muy lista, ahora no sabia que hacer.
Dégel: es una completa locura - fue lo que susurró mientras fijaba su vista en el gran retrato que tenía de su esposo y él cuando recién se casaron, sonrió de forma triste por eso, a él le encantaba presumir ese cuadro. Viendo ese cuadró, recordó lo que esos muchachos le dijeron.
En el Flashback.
Alone: me enteré que... hace cinco años atrás. Usted perdió a su esposo, gracias a los pequeños con los que estaba hablando recientemente ¿no es así? - preguntó él rubio mientras acariciaba suavemente aún cachorro que llevaba en sus brazos.
Dégel: así es... veo que usted está muy bien enterado - dijo a la defensiva.
Alone: como mencionamos antes, tenemos una propuesta muy interesante para usted.
Dégel: déjese de juegos y hable de una vez que no tengo tiempo para estupideces - hablo serio.
Sasha: hemos estado investigando acerca de estas cosas de la muerte - dijo ella mientras comenzaba a rodearlo - y gracias a unos libros muy poco conocidos, hemos descubierto una forma de traer a nuestros seres queridos.
Dégel: ¿de que esta hablando señorita? - preguntó serio.
Alone: lo que mi hermana quiere decir es que... hemos descubierto una forma de resucitar a los muertos por muy loco que parezca joven Chevalier, como usted muy seguramente sabrá, que hay seres inmortales a parte de Dios, los cuales se encargan de resguardar y guiar a las almas humanas para que no se pierdan y llevarlos al lugar donde descansarán eternamente - dijo él.
Dégel: ¿esta hablando de los ángeles? - preguntó él.
Sasha: bingo - dijo ella.
Dégel: ¿Que tienen que ves los ángeles en todo esto? - preguntó.
Alone: recientemente descubrimos que hay ángeles que se encargan de custodiar las puertas del infierno. Ellos también protegen las puertas de los cielos. Por lo cual sabemos que tienen cierto poder sobre las almas que en esos lugares habitan - dijo él.
Dégel: ¿cuál es su punto? - preguntó.
Alone: hemos descubierto un hechizo con el cual lograremos traer a nuestro mundo a un ángel guardián del otro mundo, nuestro plan es traerlo aquí y obligarlo a que nos devuelva a nuestros seres queridos, ¿no le gustaría volver a tener entre sus brazos a su bello esposo?, pero para ello necesitaremos un lugar grande para mantener al ángel y evitar que nos mate o tan siquiera escape - finalizo él.
Sasha: su casa parece perfecta, nos imaginamos que tendrá un gran sótano por lo cual él ángel no tendrá muchas opciones.
Dégel: si esos ángeles guardianes del "otro mundo" existen. ¿No creen que sería peligroso molestar a uno de ellos?, de seguro son muy hostiles y además digo por algo se les habrá dado ese título por lo tanto ellos podrían ser...
Alone: claro que son peligrosos, sin embargo ellos tienen una regla, jamás tocar algo de él mundo de los humanos o tan siquiera permitir que uno de nosotros lo toque. ¿Quiere saber por que?, porque al ser criaturas divininas al servicio de Dios. Ellos no se pueden permitir ser ensuciados por nuestros pecados. Por lo cual una jaula grande y con el peligro constante de perder su derecho de regresar al cielo, no se negará ayudarnos.
Dégel: esto es una maldita locura de la cual no pienso ser participe - dijo mientras se dio la vuelta con intención de irse.
Alone: bien le daremos tiempo para pensar joven Chevalier, le dejaremos nuestro contacto en dado caso cambie de opinión - fue lo que dijo él rubio mientras la chica dejó una pequeña tarjeta de presentación en el suelo y ambos se retiraron. Dejando a Dégel pensando.
Fin del Flashback.
Dégel: es una puta locura - susurró, mientras bruscamente se sentó en el sillón detrás de su escritorio el cual le dejaba ver al frente.
Camus: ¿que es una puta locura papá? - preguntó su hijo mayor mientras ingresaba a la oficina de su padre.
Dégel: Camus ya te e dicho que siempre se debe tocar la puerta antes de entrar - regaño él - y además... ¿que clase de vocabulario es ese jovencito? - preguntó molesto.
Camus: pero si él que lo dijo primero fuiste tú - dijo rápidamente mientras Dégel lo vio molesto.
Dégel: no me contestes de esa manera jovencito - regañó él.
Camus: hm...
Dégel: ¿Que es lo que deseas? - preguntó serio.
Camus: estaba preocupado porque mis hermanos menores se encontraban preocupados porque no habías salido de aquí padre, por lo cual e venido a preguntar ¿si te sucede algo?.
Dégel: agh... tranquilos estoy bien, solo estaba pensando en algunas cosas - dijo él.
Camus: perdona mi curiosidad pero... ¿podría saber que es? - preguntó curioso.
Dégel: dime algo Camus, ¿tú desearías que tú madre regresará con nosotros? - preguntó.
Camus: ¿que clase de pregunta es esa?... claro que si, me encantaría que él regresara con nosotros - respondió seriamente.
Dégel: entiendo - susurró.
Camus: ¿eso era todo lo que tenías para decirme? - preguntó mientras su padre lo vio para después asentir - si me buscas estaré con mis hermanos - fue lo que dijo para después darse la vuelta e irse de ahí.
Dégel por su parte solo suspiro, se puso de pie y dirigió su vista al cuadro una vez más. Mordió su labio inferior con muchas dudas, sin embargó tenía la gran necesidad de negarse aunque. ¿Y si resultaba siendo verdad?. Y si podían traer a su amado Kardia en algún momento, su familia sería feliz de nuevo, estarían unidos una vez más y sus hijos estarían felices. Suspiró y más decidido que nunca tomó la pequeña tarjeta y marcó el número con el teléfono de casa.
Por otro lado.
Territorio de los ángeles.
Una joven de cabellos lilas veía con una sonrisa cuatro luces, las cuales resplandecían, cual diamante fuesen, al estar todos unidos, el recién llegado había sido aceptado exitosamente.
Xx: ¿Señorita Sendai? - preguntó llamando la atención de la ángel.
Sendai: tranquilo Écarlate, tú hijo fue aceptado exitosamente - respondió la joven.
Écarlate: Señorita Sendai, ¿aún me preguntó por qué escogió a Milo para esto? - preguntó mientras la chica lo vio - todavía es un niño.
Sendai: entiende que esa es su responsabilidad, esa era la condición que se les puso a Mystoria y a ti el día que se casaron - recordó ella, para después sonreír - no te preocupes todo estará bien ahora que te vayas - dijo ella.
Écarlate: así que te diste cuenta - dijo con pesadez.
Sendai: ¿Por qué te sorprende?. Si soy yo la encargada de enviar a las nuevas almas a la tierra - dijo sonriendo ella.
Écarlate: solo prométeme que no dejaras que nada le pase hasta que llegue su día para nacer - le pidió.
Sendai: tranquilo, le prometí a Mystoria eso y no faltare a mi promesa - dijo ella - solo tengo que esperar a que alguien este listo para tomar su lugar y después esperar a que ustedes dos se unan para enviarlo con ustedes - le dijo sonriendo.
Écarlate: bien espero que no me mientas Sendai que cuando regrese me las pagas - dijo haciendo reír a la chica que solo asintió.
Una luz brillante hizo al joven ángel desaparecer y dejando a la chica sola, que siguió revisando que todo estuviera en orden.
Continuará...
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