(Coreano) Te amo.

Athan Zeev se fue de la Isla Fel el 28 de Diciembre de ese año. Esta vez no estaba solo. Esta vez tenía el corazón roto.

Luary se negó a pasar la noche anterior con ellos, así que durmió en casa de Takashi. Eso no hacía sentir mejor a Athan, pero ella no podía... simplemente no soportaba pensar que esa era su última noche juntos.

Aún faltaba una hora. Sus padres estaban en la cafetería con el director Evander y la maestra Senesh. Athan y TJ miraban videos en sus teléfonos, ajenos a lo que pasaba, hasta que ellos llegaron. TJ corrió a abrazar a Takashi en cuanto lo vio. Athan, en cambio, se acercó temeroso a la que pronto dejaría de ser su novia.

–Hola. –Dijo ella. –Te ves bien.

Mintió, ambos traían unas ojeras enormes.

–El productor aún no llega. –Dijo él. –¿Te importa si hablamos en otro lado?

Caminaron en silencio hasta alejarse a un lugar más solitario.

–Lamento lo de ayer –Dijo él. –Fui un idiota.

–Sí, lo fuiste. –Luary lo tomó de ambas manos. –No te preocupes por mí. Estaré bien, en las videollamadas te darás cuenta. –Le acarició el rostro, se sintió culpable de que él no haya dormido nada. –Lamento no haber regresado a casa anoche.

–Está bien.

–Come bien, duerme al menos 8 horas. No te excedas con las dietas, ni con el ejercicio, ni con las prácticas. No creas a nadie que te diga que no eres lo suficientemente bueno. Y, si mi recuerdo te pesa... Olvídame y ama a alguien más.

–¿De qué hablas? No podría.

–Si pasa, no te sientas culpable. Eres tan genial que cualquier chica puede quererte, déjate querer.

Luary sintió que una estaca se le clavaba en el corazón, estaba terminando con él.

–Lo siento. –Dijo ella cuando las lágrimas caían en contra de su voluntad.

Athan la abrasó, y ella no pudo contenerlo más.

–Sé honesta, dime la verdad. Dime que no quieres que me vaya, que me amas y que no quieres que te olvide. –Luary intentó decir algo, pero no pudo. –Yo no quiero que me olvides. –Athan dejó de abrasarla. –Tú, eres la chica más jodidamente perseverante que he conocido en la vida. Consigues todo lo que quieres, y conseguirás todo lo que sueñas, así que, por favor... –Athan tomó las manos de Lu entre las suyas–Por favor sueña conmigo. Sueña que estamos juntos, hasta viejitos.

Luary intentó decirle algo, pero TJ la interrumpió.

–¿Athan? El productor llegó. Es hora.

Retornaron al punto de encuentro tomados de la mano. Los padres de Athan se despidieron de todos, la madre de Athan abrasó a Luary y volvió a agradecerle. Fueron los primeros en subir al avión, dándoles tiempo para despedirse.

–Bueno, Take. –Le dijo TJ. –Es hora...

–Sí.

–Me voy...

–Sí. –TJ lo abrasó, Take no fue dictador con sus sentimientos, sólo dejó que fluyera. –Te amo.

–Yo igual. –Se separaron. –Nos veremos pronto. –Giró a ver a su amiga. –Luary. –Le dijo sorbiéndose los mocos. –Mantendré a Athan a raya por ti.

Luary se acercó y lo abrasó.

–Cuídate TJ, te vamos a extrañar. Gracias por todo.

TJ estaba a punto de irse, pero volteó rápidamente y corrió a besar a Takashi.

–Sólo son dos años.

TJ se adelantó, a la puerta, dejó a Athan para que se sintiera más tranquilo.

–Creo que... esto es todo. –Dijo Lu. –Que te vaya bien.

–Nunca lo dirás, ¿verdad? –Lu negó con la cabeza. –Tengo algo para ti.

Athan sacó una cadena de su bolsillo.

–No soy tan tonto como para proponerte matrimonio, sabiendo que odias la idea, pero... Me niego a que me olvides. –Le colocó el collar, Luary miró el dije con ternura. –Es un puerco unicornio, lo mandé a hacer hace unos días, era para navidad, pero aún no estaba listo.

–Ath...

–Este es el mío. –Athan sacó el dije de la cadena que traía colgada. –Dijiste que tu nombre significaba "aquella iluminada por la luz de la luna". –El dije del collar era una luna llena con un violín grabado.

–Estás loco.

–Probablemente...

Luary lo tomó del cuello y lo besó.

–Te amo. No respondas sólo... vete.

Athan asintió y se fue, al llegar al pasillo volteó.

–¡사랑해요 Luary Tametz!

El idioma no impidió que ella entendiera y se sonrojara.

Seis meses más tarde, Takashi viajó a Italia junto con el maestro Yuan, Ahmya y otros tres estudiantes. Pasó los siguientes ocho meses estudiando allá. Su madre vendió su casa y se mudó a Corea, estaba claro que su hijo pronto comenzaría una vida allá y no quería perdérsela.

Takashi y TJ nunca perdieron el contacto, aunque la coordinación de horarios se hacía cada vez más difícil, ambos se esforzaron por entender y mantener la relación. A los que no les fue tan bien fue a Athan y a Luary...

El director Evander convenció a Ze Lei y a Luary para que fueran a una escuela en Nueva Zelanda. Luary no pasó las audiciones la primera vez, al contrario de Ze Lei. Sin embargo, lo volvió a intentar un año más tarde, consiguiendo una plaza. Algunos meses después ambos estarían involucrados en la producción de una serie que se grabaría en ese país.

Athan hizo hasta lo imposible para seguir en contacto con ella, y por un tiempo parecía que nunca habían terminado. Pero la realidad es fría, y pronto los horarios se hicieron imposibles de coordinar, y poco a poco dejaron de hablarse con tanta frecuencia.

Nadie, además de Takashi, sabe dónde está Luary ahora, qué hace o dónde vive. Nunca volvió a la Isla. Su familia se enteró por terceros, los proyectos en los que participaba. Su madre nunca aceptó haberse equivocado, pero alguna vez sí se lo cuestionó.

¿Y Athan? Él y TJ debutaron como actores en un drama que hizo furor. Tan grande fue el éxito que la compañía se apresuró por anunciar el debut de los muchachos, el destino sólo les sonreía. Athan no volvió a dejar la terapia, con el tiempo sobrellevaba cada vez mejor la ansiedad.

Aunque Luary y Athan tuvieron otras relaciones, nunca como aquella que vivieron en la Isla. Se arruinaron la vida de la manera más hermosa, se enamoraron de una persona que se convirtió en su más bello recuerdo.

Ellos dos, aún no se han vuelto a encontrar. Por ahora están destinados a conocerse y volver a separarse cada vez que tú, querido hipotético lector, abras este libro y leas su historia.