(Somalí) El incontrolable deseo por apretar a alguien que amas

Luary chillaba y se retorcía de emoción mientras Takashi le contaba todo lo que pasó el día anterior en el festival.

–Quédate quiera mientras te hablo. –Takashi le lanzó una almohada.

–Ok. –dijo abrasándose a ella. –¿Y qué te dijo luego?

–Que podíamos ir lento si así lo quería, que no es necesario hacer un gran anuncio, sólo... caminar juntos y eso...Creo que ninguno de los dos sabe muy bien cómo tener una relación...

–¿Gay? ¿Por qué sigues pensando que una pareja gay es diferente a una heterosexual?

–¡No lo sé! Estoy confundido.

Takashi se recostó al lado de Luary, ella lo copió, apoyó su cabeza en el hombro de su amigo y suspiró.

–Me alegra que al menos uno de nosotros tenga su final feliz.

–Honestamente creí que serías tú. –comentó Takashi.

–Tuve mala suerte. –Ambos se quedaron en silencio.

–¿Fuiste al hotel de ese señor?

–Sí, es lindo. Es agradable, trabajar con Ze Lei ahí. Al menos ahí puedo tocar con libertad. Y me pagan, así que mi mamá no dice nada.

En el departamento de TJ, ambos amigos comentaban acerca de la nueva relación del pelirrojo, TJ exageró algunos detalles, que Athan no terminó de creer por completo.

–Así que, eres oficialmente el novio de Takashi. –Comentó Athan mientras lavaba los platos en su casa.

–Sí. –respondió emocionado. –Parece que todo está tomando forma. Es como si siempre hubiéramos estado juntos.

–Por Dios qué cursi eres. –Dijo mojándolo. –Por cierto, lo grabé.

–¿Qué cosa?

–Lu y Ze Lei. –Sacó su celular y le mostró el video a su amigo. –Su presentación.

–Wao. –Carraspeó. –Digo esto porque tengo novio y estoy libre de culpa. Luary se ve extraordinariamente sensual tocando esa canción.

–Sí, pensé lo mismo, se transforma por completo cuando toca.

–Oh no..

–¿Qué?

–¿La viste tocar mientras Dilara estaba contigo?

–No ¿por?

–Porque parece que te volviste a enamorar de Lu. ¿Por qué no terminas con Dilara? Lo suyo no funciona.

–No sé si realmente quiero terminar con ella.

Tuvieron que pasar días, semanas, para que Athan supiera qué era lo que realmente quería. Durante todo ese tiempo entre él y Luary apenas si había mensajes, ambos se evadían. Takashi y TJ comenzaron a pasar más tiempo juntos, salían a citas y buscaban siempre la mejor privacidad para besarse. Pero eso no les libró de situaciones un poco penosas.

Jyn y Alex vieron a TJ y a Takashi entrar al Instituto abrasados. La escena los hizo sentir insultados, su amigo terminó siendo gay.

–Vaya, vaya, TJ. –Dijo Jyn acercándose con Alex y otros de sus amigos. –No sabía que ahora te gustaban los... afeminados. ¿Takashi te volvió gay?

–¿Qué pasa Jyn? ¿Estás celoso? Creí que te gustaba Luary, ¿o te acercabas a ella porque en realidad estás enamorado de mi Take?

–¿Qué dijiste? –Respondió alterado.

–Aléjate Jyn. –Amenazó Takashi.

–Tu amiga ya no está aquí para defenderte.

–No, pero estoy yo. –dijo Athan desde el otro lado. –No creas que te he perdonado lo que le hiciste a Luary, pedazo de animal.

–Tsk, olvídalo. –miró a la pareja de pies a cabeza. –Qué desagradable.

El grupo se fue en medio de susurros de desaprobación y mirando a todas partes para asegurarse de que ningún maestro los viera.

–¿Estás bien? No les hagas caso. –Dijo Takashi abrasando a su novio.

–Estoy bien. ¿Quieres... faltar a clases hoy? No quiero volverle a ver. Además... extraño besarte.

–Me besaste esta mañana.

–Chicos, sigo aquí. –Señaló Athan. Los tres rieron.

Al finalizar los ensayos, así como Athan y Dilara salían a pasear, TJ y Takashi hicieron lo mismo. Dio la casualidad de que Dilara le montó una escena de celos a Athan a media cuadra del Instituto y Takashi lo vio y se lo señaló a TJ. Athan, como siempre, sólo guardaba silencio y se disculpaba con Dilara hasta que ella comenzaba a tranquilizarse.

–No se lo ve muy feliz. –comentó Takashi.

–Para nada. ¿Deberíamos hacer algo para que se encuentre con Lu?

–¿Algo como qué? –Takashi se encogió de hombros, pero de pronto, una sonrisa de victoria visitó el rostro de TJ.

Athan salía de la ducha cuando escuchó el timbre, se apresuró a colocarse un pantalón y abrió. Era Lu con unas cuantas bolsas de compras, ambos se sorprendieron de verse. Él no la esperaba y ella no esperaba verlo mojado y desarreglado.

–Hola. –Dijo él.

–Hola... lo siento. –Dijo volteando para no verle. – TJ me pidió que le trajera algunas cosas de la tienda. ¿Puedo pasar?

–Sí, claro. Adelante.

–Gracias....

Pero no entró, Athan se dio cuenta de la situación y corrió a su habitación a ponerse algo más, mientras no dejaba de disculparse. Lu colocó las cosas en el sofá y buscó con la mirada a TJ, al tiempo que Athan se arreglaba lo poco que podía.

–TJ no está en casa... –Lu lo miró confundida. –Dijo que hoy se quedaría con Takashi.

–Ah... –Sonrió con perversión. –entiendo. Debería irme, entonces.

–¿No quieres... tomar algo antes? –Lu negó con la cabeza.

–Mejor llevo esto a casa y se lo entrego por la mañana.

Athan se aproximó a ayudarla, gesto que ella agradeció con una sonrisa. Por culpa de los nervios ella apresuró el trabajo, la base de una de las bolsas de enganchó con la manta sobre la que descansaba. Entre irse rápido, no chocar con Athan y jalar la caja, ambos terminaron perdiendo el equilibrio y terminaron cayendo sobre el sofá. Rieron hasta que se percataron de la cercanía de sus rostros.

Athan tenía a Lu recostada por completo frente a él, y desde la perspectiva de Luary, era una situación muy comprometedora.

Luary bajó la cabeza, evitando cualquier desastre del cual podría arrepentirse. Athan comprendió, estaba mal. Se levantó y ayudó a Luary.

–Lo siento. –dijo ella. –Mejor lo dejo todo.

–Sí, mejor...

Lu caminó sola a la puerta mientras él todavía intentaba serenarse.

–Luary –Ella volteó a verlo. –Será mejor que nos alejemos un tiempo.

–¿Qué?

–Alejémonos, yo... creo que estoy confundiendo algunas cosas. Es mejor evitar problemas.

Luary bajó la mirada, como si eso pudiera ayudar a su corazón roto. ¿Era por Dilara? Claro que era por ella.

–Tienes razón. –Dijo fingiendo una sonrisa. –Eres un gran amigo y no quisiera perderte por una estupidez. Cuídate. –Salió del lugar.

Athan se enfureció consigo mismo, pateó las bolsas que se cayeron y se sentó en el otro sillón, se cubrió el rostro molesto por la impotencia. Quería pasar tiempo con Lu, la necesitaba, pero ahora se sentía inseguro de todo y a lo único que podía aferrarse era a Dilara, a que quería algo que funcione con Dilara.

Al otro lado de la puerta Luary se llevó la mano al pecho, su roto corazón latía con mucha fuerza. Quiso llorar, pero su orgullo no lo permitió.

«Sí, es lo mejor...» Pensó «Sé feliz, Athan. Si él es feliz entonces ¿Por qué debería desear algo diferente?»

–Sí, no seas egoísta.

Y con ese pensamiento regresó a casa.

Athan le contó todo a TJ después, su amigo lo reprochó haber hecho sentir mal a Lu por no haber terminado con Dilara.

Pero mientras más le insistía TJ, más se negaba a terminar con Dilara, tenía que hacer que esa relación funcione, había escogido a Dilara, la chica que dijo que lo amaba desde que lo vio.

Ambos, Luary y Athan, se preguntaban a diario cuando pensaban el uno en el otro, ¿Es realmente esto lo mejor?