Todo se había quedado en completo silencio, eso no se lo esperaba nadie, ni siquiera Timoteo; él sabía del desastre que era CEDEF en ese momento por la reciente pérdida, y había dejado en claro que CEDEF sería lo último en pisar.

–Reborn ya habíamos hablado de eso..-el contrario recibió una dura mirada por parte del más anciano

–hablé con ellos y dijeron que estaba bien, además de que ellos fueron los que solicitaron que fueran..-calló, dándole indirectamente un mensaje a Timoteo

–… Reborn no hagas cambios espontáneos..-pidió soltando el aire; miró a Tsuna, éste le miraba con decisión -está bien, llévalos..-accedió

–bien, nos iremos en cuanto termine el desayuno..-exclamó

Mientras los ajenos a la mafia comían en silencio y emoción, el resto se encontraba metido en sus propios pensamientos, preguntándose qué pasaría en ese recorridos, pero para Tsuna, ese recorrido sería importante, lo sabía, su intuición se lo decía.

Algo cambiaría ahí, pero no sabía si sería un cambio bueno o malo, esperaba que bueno.

Soltó el aire cansado, con la atenta mirada de sus conocidos sobre su persona. Al notarlo sonrió ligeramente antes de continuar comiendo.

Su estómago no quería la comida, y era muy difícil pasarla por su garganta, la tensión, estrés y sus emociones descontroladas le provocaban demasiado asco, pero no podía dejar de comer así nada más, sobretodo estando en presencia de Lussuria, quien le observaba configurando que estuviese comiendo.

Con incomodidad y una sonrisa forzada acabó su plato además del postre, solo para no ser grosero con los cocineros; los guardianes notaban el asco en el rostro del más bajo, y si bien no querían obligarlo, no podían dejar de lado el hecho que no hubiese comido bien en aquellos días, así que sólo se limitaban a mirar cómo se forzaba a consumir los alimentos.

En cuanto acabó soltó el aire aliviado, ahora esperaría a que todos terminaran.

Después de haber dado por terminado el desayuno y estuviesen listos, se dirigieron a CEDEF. Si bien, Tsuna estaba decidido a ir, ya en el camino los nervios comenzaron a golpearle con fuerza.

No sabía cómo se encontraba la organización de asesores en esos momentos, conocía del aprecio que los miembros de dicha organización le tenían a Iemetsu y en cierto modo, eso le asustaba.

–“estará bien que vaya?”

Era su principal duda; miró a Reborn, se le miraba tranquilo y eso le preocupaba todavía más, él no era un experto, pero sabía, no, afirmaba que algo lo tenía pensado.

Algo lo suficientemente serio como para comenzar a preocuparse. Estuvo tentado a preguntarle, pero no lo hizo por el hecho de que a sus compañeros no les parecería, así que mantuvo sus dudas y preocupaciones en sus pensamientos.

–Sawada, estás bien?-la voz extrañamente tranquila de Ryohei llamó su atención

–Onii-san.. si, estoy bien, porque la pregunta?

–te noto preocupado..-ante su certera respuesta se quedó callado -Sawada?

–estoy un poco preocupado..-murmuró -no se cómo está CEDEF, quiero pensar que mejor que yo y tengo mucha esperanza de que lo estén..

–Sawada si ellos dijeron que estaba bien, quiere decir que pueden con ello, así como tú lo has hecho, ellos también pueden, no deberías dudar de ellos..

–Ryohei tiene razón dame..-Reborn habló a su lado -no dudes de la que pronto será tu familia..-como respuesta solo recibió un ligero asentimiento

Al llegar al edificio donde se encontraba CEDEF los ajenos a la mafia se emocionaron, pues el edifico no era precisamente pequeño y era adornado por algunos jardines con rosas blancas. Por otro lado, Reborn notó el lujubre ambiente desde afuera, él sabía que los miembros de CEDEF no se encontraban nada bien y por eso mismo se había negado a ir cuando Oregano se lo había pedido, pero su insistencia le había provocado curiosidad y ahí estaban.

–quiero que bajen en silencio y sin empujarse..-exclamó en cuanto estuvieron en la entrada

Con un rostro amable, Oregano les recibió, aunque se le notaba bastante cansada, a su lado se encontraba Basil con sus ojos algo rojos pero intentaba sonreír hacia la décima generación.

–bienvenidos sean jóvenes..-habló bajo -mi nombre es Oregano, él es Basil, nosostros les daremos el recorrido el día de hoy así que, vamos..

Con una sonrisa claramente forzada ingresó al edificio seguida de Basil y posteriormente los alumnos. La decima generación se quedó en su lugar junto a Reborn.

–Oregano me pidió que los trajera dame..-miró el preocupado rostro de su alumno -deben tener una buena razón para que haya querido que los trajera..

–sabes.. mi intuición me dice que algo importante pasará hoy, y tiene que ver con CEDEF, no estoy seguro si será bueno o malo..-soltó el aire

–hacia donde se inclina la balanza?-hubo silencio ante la pregunta, a lo que todos miraron al castaño

–no lo se..-soltó -hay algo más aparte, una persona, creo.. la balanza va hacia ambos lados..-murmuró antes de ingresar al edificio

Mientras Oregano y Basil se encargaban de mostrar y explicar distintas áreas de CEDEF, los miembros de la misma les daban la bienvenida a la décima generación y a Reborn con una inclinación de cabeza y una mirada en forma de pésame hacia el más bajo, éste sólo se limitaba a regresar el gesto antes de que su vista se perdiera en algún punto lejano, al menos, hasta que una de las tantas preguntas de sus compañeros llamó su atención.

–disculpe, Oregano-san..-llamó Mochida

–si?

–porque todos están de negro?-la pregunta detuvo a los guías y por ende a los alumnos

–perdón?

–si, es que los veo todos de negro..-mencionó

–también con Timoteo-san, pero los trabajadores tenían rosas blancas como adorno..-siguió Suzuki

Ambos se mantuvieron en silencio, mirando directamente a Tsuna, pidiendo su permiso para hablar sobre eso; al comprender el mensaje, les dió una ligera sonrisa antes de asentir.

–Vongola se encuentra de luto, jóvenes..-respondió -hace dos días, nuestro jefe y su esposa fallecieron en un accidente, pero no queremos hablar de eso..

Sin duda, la respuesta de Oregano había cohibido a más de uno, esperaban cualquier cosa, menos eso.

–continuemos..-murmuró para retomar su camino, Tsuna por su parte pensó mucho en sus palabras

–“accidente..”-esa palabra se le repetía y ello conllevó a hacerse preguntas -“que habrá sucedido? Fue rápido? Les dolió? Estuvieron juntos? Lo pude evitar?”-salió de sus pensamientos al sentir un ligero empujón

–no piense en eso décimo..-habló bajo Gokudera, justo a su lado

–que?-preguntó confundido

–décimo sé lo que está pensando..

–no se de qué hablas..-murmuró

–claro que sí..-insistió -ya pasé por eso cuando mi madre.. bueno, el punto es, que yo sé lo que se siente no saber cómo sucedieron las cosas.. también sé lo que es cuestionarse si pudo haberse evitado..-Tsuna le miró

–y como lo superaste?

–fue muy difícil, no voy a mentirle.. pero aprendí que no siempre se le gana a la vida y lo mejor es aceptarlo..

–y funcionó?

–.. con dificultad, pero sí..

–ya veo..-asintió

–aún así.. no está solo décimo, puede contar con nosotros, incluyendo a la cabeza de piña..-el apodo le hizo reír

–gracias..-asintió

El recorrido continuó con normalidad aunque el ambiente en los alumnos se había vuelto incómodo después de que Oregano les dijera la razón de la vestimenta oscura de todos. Reborn solo miraba a los estudiantes y a la décima generación en silencio, los primeros evitaban molestar o intervenir en el camino de los trabajadores y los segundos evitaban pelear entre ellos para evitar molestar a Tsunayoshi, si no fuera por la situación en la que estaban, se burlaría de la escena.

–bien jóvenes, tendremos un descanso de media hora..-habló Oregano, provocando un suspiro cansado

Ante el anuncio Reborn se acercó a ambos miembros de CEDEF.

–donde están el par de brutos? Se supone que ellos harían el recorrido..-exclamó

–ellos estaban checando unos asuntos de CEDEF, pero a partir de aquí ellos continuarán el recorrido..-explicó Basil

–……-les miró con detenimiento antes de hablar -Tsuna dice que algo importante pasará hoy, de que se trata?-preguntó serio

–pues..-intercambiaron miradas -mas adelante en el recorrido sabrá porque quisimos que vinieran..

–.. es algo malo?

–no, bueno, no creo..-respondió con simpleza

–bien..

A pesar de decirlo así, no se sentía seguro, no quería ponerle más presión a su alumno de la necesaria y en ese momento no necesitaba más problemas. Pensando en aquello regresó con la décima generación; Tsuna estaba junto a las chicas mirando a la nada, parecía pensar en lo mismo.

–en qué piensas, dame?-preguntó, notando como éste ni se había inmutado ante su repentina pregunta

–estaba pensando en lo que me dice mi intuición..-habló mirándole

–hablé con ellos.. Oregano dice que no es nada malo, al menos, eso cree ella..

–… entiendo..-asintió

Al pasar la media hora, apareció Lal y Colonello.

–bien mocosos, nosotros continuaremos con el recorrido..-exclamó la ex arcobaleno fallida -mi nombre es Lal Mirch..

–mi nombre es Colonello, kora.. la señorita Oregano y Basil tuvieron otros asuntos más importantes..

–no quiero preguntas, entendieron? Que no hago ésto por gusto si no porque alguien nos lo pidió..-masculló la fémina -muevanse..

Así siguió el recorrido dado por ambos portadores de la lluvia, quienes no dejaban que los alumnos hicieran ruido alguno. La pareja sabía del maltrato que el próximo cielo de Vongola había sufrido gracias a esa clase, y habían decidido que no tendrían derecho a hacer preguntas sin el permiso del heredero, claro, Tsuna no sabía aquello y esa era la clave para que ese grupo no hablara.

En uno de los pasillos Lal guió a los alumnos por el lado derecho, llevándolos a otro pasillo diferente mientras Colonello paraba a la décima generación.

–vayan a ese pasillo, ahí les darán la principal razón por la que están aquí..-exclamó

Sin decir nada fueron por donde el rubio les indicaba, llegando a una puerta; al abrirla solo se encontraba Oregano en la habitación. Esperaron en silencio hasta que comenzó a hablar.

–antes de que el jefe se fuera, nos dejó un último aviso y a su vez una ultima orden..-les mostró un sobre, entregándoselo a Reborn -yo..-le miraron cerrar los ojos y sonreír suave -.. eh cumplido su orden.. jefe..-las palabras llegaron como un golpe a los frágiles sentimientos de Tsuna, pero permaneció callado, mirando a Reborn

Éste abrió el sobre y leyó la muy corta carta antes de soltar el aire y leerla en voz alta.

–“como última orden, bueno, petición, hay alguien a quien quisiera dejarle CEDEF”-paró unos segundos mirando a Oregano, y así como el resto, le miraba con atención -“ésta persona, la juzgue por su capacidad para guiar, su fuerza y su, algo retorcido, sentido de la justicia, que quiera tomar CEDEF ya dependerá de él..”-hizo otra pausa antes de mirar a su alumno -“le encargo toda CEDEF, al guardián de la nube de la décima generación Vongola, Hibari Kyoya. Atentamente, Sawada Iemetsu”

Hola~~

Iba a subir el capítulo más tarde ya que me siento un poco mal, pero pues, al diablo xd

Tsuna bb ya tiene otra cosa de la qué preocuparse, de momento¯\_(ツ)_/¯

Espero que les guste el capítulo, y si ven un error ortográfico, díganme ;–;

El próximo capítulo será subido probablemente entre el martes y miércoles xd
[Algo que se me pasó y alguien me hizo notar jsjsjs, es que será de la próxima semana, ya que estaré fuera de mi estado desde el miércoles hasta el martes me parece:^]

Que tengan un lindo día ♥ nos vemos~(˘▾˘~)