Narra Rin

Fuimos corriendo hacia el patio, seguramente Yang se llevó allí a Hotaru. Cuando salimos mi compañero de equipo estaba atado al árbol.

Hotaru: ¡Pagarás por esto demonio! 

Yang: ¿Yo soy el demonio? Ustedes fueron los que hicieron las cosas mal, ahora las pagarán.

Hotaru: ¡Sal del cuerpo de la sensei! ¡Ella debe descansar!

Yang: Por desgracia no puedo hacerlo a menos que ella muera.- Rió de manera sádica.- ¿Serán capaces de matar a su sensei? No lo creo...

Miyuki: ¡Queremos a la sensei de vuelta!

Yang: Eso no será posible, ahora que su cuerpo está débil no podrá contenerme. ¡Yo tome el control del cuerpo! Si ustedes no hubieran intentado quitarle la máscara yo no estaría aquí, así que gracias.

Rin: No me importa lo que digas, salvaremos a Hotaru y traeremos a la sensei de nuevo.

Yang: ¿Y cómo planean hacerlo?

Rin: Bueno... Eh...

Yang: Eso creí.- Volvió a reír. No puedo creerme que estoy viendo a la sensei actuando de esta manera.

Kohana: Chicos, hagamos el ataque en conjunto.

Yang: ¿Creen que con eso podrán vencerme? Estuve dentro de Nozomi todo este tiempo, los conozco a todos y sus entrenamientos.

Kohana: Ignoren lo que dice, ataquemosla.

Chicos: ¡Si!

(...)

Estuvimos luchando un buen tiempo con Yang pero detenía todos nuestros ataque como si nada. Esta situación realmente me estaba asustando. ¿Qué tal si no podemos traer a la sensei? Todo esto por la torpe idea de ver su rostro. ¿Será por esto que no quiere que lo veamos? ¿Para no traer al demonio? No creo, sino ya lo hubiéramos visto antes cuando Raiga le quitó la máscara en Konoha. Pero tal vez eso no ocurrió porque estaba despierta. Cuando Hotaru intentó quitársela estaba dormida. Entonces... ¿Hay que despertarla? Pero si no lo hizo con esta batalla, ¿cómo lo haremos?

Rin: Chicos, el demonio apareció mientras la sensei estaba dormida. Tal vez para que se vaya hay que despertarla, pero no se me ocurre como...

Tora: Tengo una idea... Espérenme aquí.- Se fue en dirección a los cuartos.

Yang: No importa lo que hagan, todo será inútil.- Al poco tiempo Tora apareció con un libro a lo que Yang volvió a reír.- ¿Qué? ¿Planeas leerme un cuento? 

Tora: Este es el libro favorito de Nozomi, dijo que era importante para ella... Por su bien, será mejor que vuelva, sino su preciado libro se hará polvo.

Yang: ¿Qué parte de que yo no soy Nozomi no entienden? A mi no me importa ese libro, puedes romperlo si quieres. Pero ten en cuenta de que la culpa será tuya no mía.- Rió nuevamente.- Ella si que estaría furiosa. Intentaron quitarle la máscara, despertaron un demonio el cual poseyó su cuerpo y ahora intentan destruir su preciado libro. Si que tiene unos alumnos muy malos.

Rin: Entonces... ¿Qué tenemos que hacer para que la sensei vuelva?

Yang: Por desgracia, ustedes no pueden hacer nada.

Raiga: ¿Chicos?- Comenzó a escucharse desde las habitaciones. Todos volteamos en esa dirección y Raiga apareció por el pasillo.- ¿Qué hacen aquí? Teichi-sensei me contó lo de Nozomi. Se supone que la deberían estar cuidando y no sólo eso, ni siquiera Nozomi está en su cuarto.- Fuimos corriendo hacia Raiga.

Rin: ¡Nozomi-sensei fue poseída por un demonio y secuestró a Hotaru! ¡Ayúdanos!

Raiga: Chicos, no es momento de sus juegos. Nozomi está enferma, no tendría que estar jugando con ustedes.

Tora: ¡Pero eso es enserio! ¡Mira allí está!- Le señaló en dirección al árbol, pero cuando todos volteamos observamos que el cuerpo de Nozomi estaba tirado en el cuerpo inconsciente.

Raiga: ¡Nozomi! ¡Les dije que no debería estar jugando en estos momentos!- Fue corriendo hacia ella y la tomó en brazos.

Hotaru: Raiga, ten cuidado puede ser una trampa.

Raiga: ¡Chicos, ya basta! ¡Esto no es divertido! ¡Desaten a Hotaru y luego vayan todos a su cuarto! ¡Ella pudo haber empeorado!

Rin: Pero todo esto no es un juego, te estamos diciendo la verdad...

Raiga: Lo siento chicos, pero no puedo creerles eso. Los demonios o fantasmas no existen.- Luego se llevó a Nozomi hacia su curto.

Hotaru: Tenemos que hacer que nos crea... No podemos dejar esto así.

Miyuki: Hotaru, tu seguro viste lo que sucedió. ¿Qué paso con el demonio?

Hotaru: En el momento que Raiga apareció el cuerpo de la sensei cayó al suelo. ¿Creen que se haya ido?

Yu: No lo creo, recuerden que dijo que las tendríamos que pagar. Ya hizo que Raiga se enojara con nosotros. 

Miyuki: Tienes razón nii-san... Además no importa a que adulto se lo digamos, nadie nos creerá.

Tora: Ahora entiendo como te sentías, Rin. Lo siento... La próxima vez aunque sea una locura te creeré.

Rin: No hay problema, pero ahora no es momento de hablar de esto. Esa cosa puede volver. Tenemos que vigilarla.

Naomi: Pero, ¿cómo lo haremos?

Rin: El libro, podemos ir a devolverlo al cuarto y disculparnos con Raiga.

Hotaru: Pero nosotros no hicimos nada.

Kazuo: Todo esto fue porque quisimos ver su rostro. Así que si, algo hicimos... 

Midori: De todas maneras finjamos que lo que dijo Raiga es verdad, si nos disculpamos por eso tal vez nos dé otra oportunidad para cuidarla.

Natsuki: Tienes razón, vayamos.- Fuimos hacia el cuarto de Nozomi y tocamos la puerta.

Raiga: ¿Quién es?- Abrimos la puerta y entramos. Él le estaba poniendo paños a Nozomi.- ¿Qué hacen aquí? Les dije que se vayan a su cuarto.

Tora: Es que queríamos devolverle el libro a la sensei...

Rin: Y disculparnos...

Midori: Así es, queremos otra oportunidad para cuidarla. Ella siempre nos cuida, actuamos mal al llevarla al patio. Lo sentimos.

Chicos: ¡Si! 

Kohana: ¿Nos das otra oportunidad?- Él suspiró. 

Raiga: Está bien, pueden quedarse, pero no quiero que hagan ruido.

Chicos: De acuerdo.- Raiga le sacó el termómetro.

Raiga: ¿Por casualidad saben cuánto tenía de temperatura?

Rin: Teichi-san dijo que tenía 39°.- Le cambió el paño.

Raiga: Ahora tiene 40°, veo que ha empeorado un poco. Mientras descanse todo estará bien.- Estuvimos en silencio un buen rato hasta que Raiga se levantó de al lado de Nozomi.- Chicos, voy al baño. En lo que no estoy sigan así de calmados y nada de levantarla de la cama.

Chicos: De acuerdo.- Después de que se fue Nozomi se sentó muy lento en la cama.

Maki: Nozomi-sensei, será mejor que te recuestes.- Nozomi rió. Oh no, no de nuevo.

Yang: Ya les dije que no soy su preciada sensei.

Hotaru: ¡Por tu culpa la sensei empeoró! ¡Ni se te ocurra salir de la cama!

Yang: ¿Y tú vas a impedirlo? No me hagas reír.- Intentó levantarse, pero entre todos le sostuvimos el torso para que no lo hiciera.

Naomi: No permitiremos que le hagas esto a la sensei. Haremos que te vayas.- Estuvimos forcejeando con Yang hasta que escuchamos el sonido de la puerta. En ese momento el cuerpo de Nozomi volvió a desmayarse.

Raiga: ¡¿Qué están haciendo?!

Ren: El demonio quería salir de la cama así que lo estábamos impidiendo.- Raiga frunció el ceño.

Raiga: Me parece que son otros los que quieren sacarla de la cama. ¿Qué les dije antes?

Rin: Pero lo que dijimos no era una mentira. Ella de verdad está siendo controlada por un demonio.- Raiga se acercó a nosotros y acomodó a Nozomi en la cama.

Raiga: No sé que mosca les picó hoy, pero no pueden seguir así, vayan a sus cuartos, están castigados.

Hotaru: P-pero... Tenemos que proteger a la sensei.

Raiga: Pues, ya han hecho mucho. Les dije que se vayan a su cuarto. Y no quiero que salgan de ahí hasta la hora de cenar.- Todos agachamos la cabeza y nos dirigimos hacia nuestro cuarto.

Hotaru: No podemos dejar esto así. ¡Tenemos que ayudar a la sensei! ¡En el momento en que Raiga la descuide no sabemos lo que podría hacer ese demonio!

Takeshi: ¿No les pareció raro que desaparezca cada vez que Raiga aparece?

Maki: Teneos que planear algo para que Raiga pueda verlo y nos crea.

Narra ___

Estaba durmiendo en la cama, por alguna razón a pesar de mi siesta... me sentía más cansada, mis mal estares habían aumentado. Sobre todo el estómago, sentía como si todo estuviera revuelto. Al despertar seguí sintiendo que me estaban cambiando los paños. Seguro que es Kohana. Pero al abrir los ojos me encontré con otra persona.

___: ¿Raiga? ¿Qué haces aquí? ¿Y los chicos?

Raiga: Están castigados.

___: ¿Qué? ¿Por qué?

Raiga: Nozomi, eres muy descuidada. Si tienes fiebre no deberías salir de la cama.

___: Pero yo no salí de la cama. Desde que los chicos estuvieron cuidándome estuve durmiendo.

Raiga: Cuando te encontré estabas desmayada en el patio... ¿Eso quiere decir que los chicos te llevaron hasta allí? Vaya que tienes el sueño pesado.- ¿Yang tú sabes algo en todo esto? Puede ser que mientras estabas durmiendo intentaran verte el rostro así que les dí una pequeña lección. ¿Pequeña lección? Ahora creen que estás poseída por un demonio. ¡Yang! Antes de quejarte agradece que no permití que vieran tu rostro. Gracias por eso, pero ahora Raiga los castigó por tu culpa. Lo merecen, incluso intentaron romper el libro de Jiraiya.

___: ¡¿Qué?!

Raiga: ¿Por qué te alteras tanto?

___: Nada, nada, no es nada.- Juntó su frente con la mía haciendo que me sonrojara.

Raiga: Perece que tu fiebre bajó algo desde que comencé a cuidarte.- Luego me sonrió.- Desde aquí pueden verse un poco tu sonrojo. Con la máscara no se te nota. Muchas veces me pregunté si esas cosas te pasaban.- Sentí como mis mejillas ardían más y alejé mi frente de la de él.

___: Es muy fácil hacerme sonrojar. Desde que uso máscara es un alivio que no se me note tanto... Es muy vergonzoso.

Raiga: Vaya, no me hubiera imaginado eso... ¿Puedo verlo?

___: Tendría que quitarme la máscara para eso... No quiero...

Raiga: ¿No planeas quitarte la máscara nunca?

___: Me prometí que me sacaría la máscara cuando la hija del Hokage volviera. En ese momento verán mi rostro, pero, en el determinado caso de que eso ocurra, seguramente volveré a Konoha. No podrán verlo muy seguido... 

Raiga: Entonces por eso le diste la charla a los chicos de que no estarás siempre. ¿Con eso intentaste decir que en algún momento volverás a Konoha?

___: No es seguro que vuelva... Me prometí que no volvería... Pero te mentiría si te dijera que no quiero hacerlo.