Nadie sabe cuando se entra a un campo de fútbol y los aficionados de los dos equipos, esperan impacientes a saber quién llenará de orgullo su equipo, y eso es a lo que nosotros nos dedicamos a llenar de orgullo equipos, somos jugadores de fútbol, somos héroes con balón y un uniforme, sómos sus ídolos y los que un día ellos lleguen a superar, son sus sueños de pequeños.

Hoy era un partido amistoso y totalmente benéfico para los niños sin hogar y que les gusta el fútbol, el Real Madrid y el Barça pactaron hacer el amistoso. Entre los aficionados que fueron espectadores, en el campo, en las primeras gradas habían niños a los que les dedicamos esos momentos. Entre todos los niños había uno que me llamó la atención era muy tímido, y algo antisocial pero miraba con admiración el campo y a sus jugadores, nos tocaba elegir a un niño para que cumpliera su gran sueño de pisar un campo oficial.

Observaba con atención a ese niño, me acerqué a él, y me puse a su altura y sonreí con timidez, no sabía qué decirle, pero recordé que era tímido y supe por dónde empezar a hablar.

-Me da miedo salir -le confesé al niño- ¿me acompañas Nik? -Vi su nombre en su tarjeta de identificación.

-¿Un jugador como tú tiene miedo? -preguntó sin vacilar ni un momento

-Si, y la verdad me da mucho miedo -le miré a los ojos- quiero que me ayudes a quitarme el miedo -le pedí, este rápidamente aceptó y cogió mi mano.

Ambos caminábamos hacia el centro de campo, él miraba con asombro todo el estadio, este sonreía con ilusión y apretaba mi mano, al llegar a nuestro sitio el se puso enfrente mía y dimos paso a la presentaciòn, y la elección del árbitro, una vez elegido empezó el partido, los niños que habían estado con nosotros se fueron a las gradas de primera fila y por primera vez tengo la necesidad de ganar el partido por alguien y ese alguien es un niño que se llama Nik, ese niño entró en mi corazón con fuerza.

El partido se volvió tenso, cada uno quería ganar por alguien, uno de los defensa del equipo contrario me hizo una falta dándome un buen golpe en la espinillera causando un dolor muy fuerte, mis compañeras corrieron a mirar si estaba bien, el jugador causante de la falta fue expulsado, con el paso de los segundos el dolor se volvió suave y ya indoloro, el partido siguió con total tranquilidad yo volví al campo, ante los aplausos de todos y al mirar por el rabillo del ojo pude ver a Nik muy nervioso por como estaba, eso por una parte me alegraba.

En el córner me encontraba mirando a la portería, recé todo lo que sabía y chuté, dando efecto al golpe marcando el primer gol del partido, y el que tal vez sería el último, ya que apenas quedaban cinco minutos para el final del partido, los últimos minutos fueron los que nos dieron la gloria, habíamos ganado 1-0 estoy emocionado, corrí a la primera fila de las gradas, salte y abracé a Nik, el cual también me abrazaba con fuerza.

-¿Ves? No hay que tener miedo -comentó abrazándome- eres el mejor -susurró.

-Tienes razón pequeñajo -sonreí ante su primer comentario- tu también eres el mejor ese gol era para ti -sonreí y le entregué mi camiseta antes de volver a celebrar con mis compañeros de equipo.

Mientras celebraba la victoria una magnífica idea pasó por mi cabeza, hace tiempo que mis grandes ganas de tener un hijo, aparecieron hace ya unos largos meses y tan solo la idea, el tener a alguien a quien cuidar y que su vida dependa de ti hasta que se vaya, es un gran placer de la vida, sonreí ampliamente hacia mi idea.

4 meses después

Llevaba un mes visitando casi todos los días a Nik, siempre hablábamos y había buena conexión, me gustaba ver que ese niño confiara tanto en mi, el último día que fui al orfanato hablé con una de las encargadas de las adopciones.

-¿A quién dices que quieres adoptar? -preguntó anotando todo.

-A Nik -sonreí orgulloso de mi elección.

-Claro los papeles van a estar en una semana -me miró con una sonrisa.

-Claro -dije pensativo- por cierto quiero que sea un secreto para Nik -avisé, esta aceptó sin hacer preguntas.

Mientras hablaba con Nik dando una vuelta por los sitios más favoritos de este, mi cabeza iba a mil, estaba pensando en cómo haría su habitación y la ropa que le compraría y mil cosas más, estaba muy emocionado, pero no quería que él supiera que estaba ocultando algo, pero la emoción no cabía en mi.

Una semana después

Llegó el día de la adopción, llegué al orfanato sobre las 10:30 de la mañana, me llevaron a la habitación de Nik, él aún no sabía nada, al entrar le encontré dormido, esta muy mono durmiendo, me senté en el borde de la cama y acaricié su pelo con cuidado de no despertarlo, era una gran emoción, este a los minutos de estar ahí empezó a despertar, al verme se sorprendió.

-Feliz cumpleaños Nik -sonreí con ternura.

-¡Oh! -exclamó sorprendido- gracias Johnatan -dijo con una sonrisa.

-Bueno Nik no -entregué los papeles de adopción, su mirada era de sorpresa- hijo mío -sus ojos se abrieron como platos, sí, él ya era mi hijo totalmente.

-¿¡hijo!? -exclamó sonriendo- ¿¡enserio que bien!? -me abrazó fuerte mientras en sus ojos caían lágrimas.

-Gracias papá -sollozó mientras agradece.

-Suena bien eso -sonreí orgulloso.

-A mí eso también me gusta -confesó con una sonrisa.

Le ayudé a hacer las maletas, miré la ropa que tenía y decidí dejar todo para otro niño, le llevé al coche, y fuimos a mi casa, al llegar bajamos y le hice un recorrido por toda la casa, hasta llegar a su habitación, era de varios colores pastel, posters de fútbol y coches, una cama a su tamaño y lista para que se ajuste a él para cuando crezca.

Este saltaba de la alegría, era emocionante verlo así de contento, me llenaba el corazón de alegría, desde ese día mi objetivo para ganar los partidos era mi hijo, él que ha hecho que esté orgulloso de haber adoptado un niño, era mi más grande emoción, el que él esté a mi lado, el que siempre habrá alguien que me quiera.

20 años después

Hoy es el cumpleaños de Nik, hoy cumple sus 30 años, y es uno de los mejores jugadores del que antes era mi club de fútbol, él Barça, él ahora se ha vuelto mi ejemplo y mi mejor elección, estoy muy orgulloso de mi hijo, él es lo mejor, hoy ha ganado junto a la selección española el mundial y lo estoy esperando en el aeropuerto, con el paso de las horas apareció la figura de mi hijo acompañado de su mujer y sus dos hijos, al verme se lanzó a abrazarme, saludé a su mujer con un abrazo también al igual que a mis nietos, ellos también son mi ojito derecho.

El paso de la cena fue tranquilo y la mejor sensación que tengo es de haber cumplido mi gran sueño, el tener una familia y tener a gente que me quiera, y ellos son mi familia y actualmente mi vida, mi corazón ahora les pertenece.

-Quiero deciros algo -anuncié- bueno sobre todo a ti Nik -anuncié.

-Dime papá -sonrió con ilusión.

-Desde él día que te adopté todo fue maravilloso, y tú te has vuelto mi más grande ilusión y mi mejor elección gracias porque desde ese día supe que todo sería dedicado a ti -agradecí con cariño e ilusión.

-No es nada papá -sonrió con lágrimas en los ojos y emoción..

La cena volvió a ser animada y con grandes risa, todo fueron risas y grandes bromas entre nosotros, todo volvió a ser divertido y recordaba buenos momentos con mi hijo y su primera cita con Rose, su mujer, él nacimiento de Katerine, su hija mayor, y Dennis su hijo pequeño, ellos son mi más grande vida y por lo que siempre lucharé.

Vida mía esto es todo lo que tengo, mi hijo, mi nuera y mis nietos, todo eso es lo que siempre soñé y siempre quise tener, lo único que me falta es tener yo una mujer, pero eso será casi imposible, mientras tanto escribo esta carta a lo que un día puede ser mi gran futuro.

En un futuro no muy lejano

Y aquí estoy, en el altar con mi mujer, tres años después, de haber tenido una relación estable con ella, sorprendentemente ella fue quien me pidió matrimonio en el partido de mi hijo cuando él ganó, ella me pidió matrimonio, y ahora aquí estoy en el altar diciendo que sí, diciendo que quiero estar junto a esa persona para siempre, todo va dedicado a ti mi niño, todo es gracias a tí, mi niño todo es gracias a tí, el se fue de viaje a Miami con su familia, ahora les toca disfrutar a ellos, y ahora disfruto yo.

Miré a los ojos a Jennifer, mi mujer mi vida actual, a la que a terminado de cumplir mi sueño.

Para el siguiente autor, las palabras que debe contener son estadio y uniforme