CAPITULO VEINTE
Abri los ojos lentamente todo lo que veía eran luces levemente borrosas, intente levantarme pero no pude, al parecer estaba en el hospital. Porque habían muchas personas a mi al rededor y trataban de decirme algo...
Intente moverme de nuevo, fallo, lo siguiente que escucho (la cual parece ser una doctora) es «No te muevas por favor»
Mi vista sigue siendo borrosa y todo se escucha como si estuviera debajo del agua
No respires...
Escucho dentro de mi, lo único que sentí ese momento fue como mi cuerpo entraba en tensión y me faltaba la respiración
«Esthela» «Esthela, respira»
Mis ojos se cerraron con fuerza y cuando los abrí estaba en un lugar completamente oscuro, este también tenía liquido por todo el suelo. Pero era... Extraño si, estaba sentada allí sin moverme, levanté lentamente mi mano
Ese líquido de deslizaba lentamente por mi brazo hasta volver a caer
Sangre.
Efectivamente eso era, el color carmesí de esta ya se me hacía sospechoso, hice una mueca de asco y me levanté con cuidado. Mis piernas me temblaban un poco y aquí tampoco podia sostenerme de algo. Algo empieza a llamar mi atención, había un eco, parecía que caían gotas. Por instinto me quedé empecé a caminar normal
Mis pantalones estaban de color carmesí, seguía dándome asco pero aun así no pare de caminar, no se a donde iba pero no quería quedarme aquí para averiguarlo.
Seguí con mi camino ,el eco de gotas callendo se hacía más acelerado, sin detener el paso levemente voltee mi cabeza hacia un lado para ver qué era. Nada, no había nada pero seguía sonando mire a varios lugares distintos y no aparecía nada, no podía preocuparme pero...¿Porque los malditos latidos de mi corazón se hacían más rápidos y fuertes?
Lo siguiente que escuché fue exactamente eso, las gotas dejaron de sonar ahora solo de escuchaba mis latidos en literal, me detuve en seco cuando noté que había una figura observando me desde lejos con la cabeza inclinada dejando que su pelo largo estuviera de lado
No me moví en ningún instante, solo observaba aquella figura que se mantenía igual. Quieta, por un momento me atrevi a dar otro paso hacia adelante. No me dió tiempo de reaccionar en cuanto sentí unas garras filosas jalando hasta abajo, grite lo más fuerte que pude hasta que me di cuenta de que ahora estaba en agua.... Estaba en un océano
Mi grito fue reemplazado por burbujas, apenas sabía nada y aunque esto no fuera real, podía sentir el agua en cada extremidad de mi ropa y mi cuerpo, empeze a moverme con desesperación cerrando lo ojos y manteniendo la respiración, sentía mi pelo corto moverse por en pequeñas partes, mi cuerpo empezó a sentirse pesado y raptado. Abri los ojos y estaba amarrada en una silla, con una camisa de fuerza y con la boca cubierta por un pedazo de tela.
¿Sigues respirando?
Escuché esa risa de nuevo, la tela fue alejándose de mi cabeza, ya todo empezaba a ser borroso, no solo por el agua, me estaba desmayando y perdiendo la conciencia, estaba cerrando mis ojos lentamentes sintiendo el frío y mortificante recibimiento del agua, lo último que ví antes de cerrar los ojos por completo fue una mano, que me tomo de la camisa y me jalo con una fuerza bruta.
Choque de electricidad, fue lo que sentí antes de volver a abrir los ojos y cerrarlos de nuevo
«...¡¡Esthela!!...»
Fue lo último que escuché antes volver a cerrar los ojos.
[###]
Abrí los ojos lentamente contemplando una luz cegante y atrayente, trate de enfocar mi vista, lo único que escuchaba a mi al rededor eran «Pips, Pips, Pips» me acomode sobre la camilla y pude ver mejor la habitación en la que estaba, cortinas al rededor de mi Camilla
Aquí no...
Ignore la voz que sonaba en mi cabeza mire a los lados buscado alguna señal
–Hasta que porfin despiertas –La cortina que estaba a un costado de mi fue recogida para dar una vista de mi mejor amiga
No sé porque pero el impulso me llevo a abrazarla con todo y el dolor que llevaba encima, ella no dijo nada solo lo correspondió deslizando su brazo por mi cintura y otro de ellos tomando mi pelo
–Que te paso estaba preocupada Esthela... –Susurra, su voz... Sonaba tan frágil tan delicada
–Como termine aquí? –Fue lo único que respondí mientras me alejaba –Y como es que tú estás aquí...
–¿Enserio no lo recuerdas?
Niego
–Me llamaste para que te buscará en el departamento de tu abuela, dijiste que no querías recordar lo que pasó, tus palabras fueron: «Quiero recordarla pero no asi», dijiste que solo abriste la puerta no terminaste de entrar. En ese momento la llamada se cortó y fui a buscarte, no te encontré y empecé a tener pánico por suerte una de las señoras de enfrente dijo que estabas en su departamento
»Cuando entre estabas inconsciente, ella dice que te desmayaste, fue un bajón de presión. Los médicos llegaron unos minutos después de eso
No supe que decir, era imposible recuerdo aver entrado, estuve ordenando las cosas y derrepente no se que paso...
Abrí la boca para decir algo y entro uno de los doctores diciendo mi nombre
–Esthela Victoria Bock –dijo revisando su lista y sacando una linterna de su bolsillo –Mira hacia abajo –Como no obedecí me tomo de la barbilla y lo hizo el – Pareces estar en perfectas condiciones –Me suelta de forma brusca
Parpadee varias veces hasta dejar de ver color a mi alrededor
–¿Acaso intenta dejarme ciega? –me quejo
–Veo que tú humor no cambio –Dijo Lilith conteniendo una pequeña risa
Decidí ignorarla y prestar atención al hombre que tenía al frente
–¿Cuando podré irme? –Le pregunté, no quería estar más tiempo en esta pocilga
–Haremos unos cuantos estudios más y luego podrás irte ¿Estás de acuerdo?
–Esos cables hacen que me mantenga convida no es cierto? –Sonrei un poco
–Correcto ¿Porque lo preguntas?
–Especificamente cuando tiempo puedo tardar en morir si llego a desconectarlos? Un minuto? Dos? ¿Segundos?
Lilith carraspeo al notar la incómodidad que tenía aquel hombre y sonrio con esa seguridad de si misma que me encanta
–Bueno doc ¿En dónde puedo llenar los papeles para que mi amiga se pueda ir en cuento terminen?
–Por supuesto –Dijo quitando su mirada de mi y fijandola en Lilith – sigame
Y con eso se fueron dejándome con unas enfermeras
–Tienes mucha suerte –Dijo una de ellas – Cuando llegaste estabas en serías condiciones, pocas personas sobreviven a ataques como los tuyos
–En realidad es una desgracia –Dije volviendo a sentir ese peso encima –Hubiera preferido morir que seguir aquí –Esas palabras fueron casi un susurro
–Niña tienes la suerte de poder vivir un día más, dale gracias al señor de arriba –Dijo una mujer de piel arrugada que estaba arreglando algunas herramientas que supongo eran para alguna operación
–De verdad que es una lastima que todos piensen igual –Eso si fue un susurro para mí misma
Unos minutos después las mujeres se fueron, rápidamente tome dos de las herramientas de operación que la señora arreglo
En qué estás pensando
En qué acabaré con esto de una vez. Crees que me extrañarás
Eres el ser más horrible que e visto
En realidad eres una parte de mi conciencia la cual toma una parte del 96% de mi sistema mental, un 78% de mi cuerpo y un 100% de racionalidad haciendo que está conversación que estamos teniendo sea solo un transtorno mental. Por lo tanto estás diciendo que tú también eres ese ser horrible.
Me gusta que solo creas que soy una parte de tu mente o que soy un «Transtorno mental» pero no... Esthela... Soy más que eso
Mi cuerpo empezó a sentirse más pesado en cuanto las luces empezaron a palpitar, mis latidos empiezaban a ir más y más rápidos al punto que aquella máquina de latidos no parara de sonar. Sentí unas manos posarse sobre mis hombros y, algo acercarse a mi oído, haciendo que haya una gran tensión en toda la habitación
No lo olvides, gracias a mi estás viva, pero en cualquier momento eso puede terminar
Te dices a ti misma que quieres morir, pero las dos sabemos que no es cierto, no... Tu no quieres morir.... Tu solo quieres escapar de mi... Pero tranquila, el día que mueras ya no estarás conmigo, serás alguien más
No aguante más y me levanté, salí de esa habitación y empece a caminar, choque con varias personas, algunos enfermeros me observaban con curiosidad pero decidí ignorarlos, como todo aquel ser que se fijara en mi
–Si, ella está aquí –Escuche la voz del doctor que me atendió, preferí no ser una metida y seguir con mi camino pero no pude evitar pensar que hablaba de mi en cuanto sigui hablando.
–Sigue viva, por sorpresa, llegó con muchas lesiones, tiene marcas que ni siquiera son normales en un humano –Hubo silencio por un momento –Nos encargaremos de ella, eso es una promesa.... En menos de 24 horas ya no estará aquí. Espero que tenga la paga lista
¿Con quién estaba hablando? Me incline un poco para poder verlo, y ví un documento con mi foto
El se dió la vuelta y yo me recosté de la pared lo más rápido que pude, me dirigi de nuevo a mi habitación y me quedé en la camilla
Quieren matarnos
Si lo piensas no es algo tan malo
Reacciona, quieren algo, no podemos dárselo así de fácil
Estaba pensativa, alguien quería matarme ¿Porque? Quería pensar que sería el fin de todo esto, peo ahí estaba la tensión, la presión en mi pecho que no podía evitar, y el escándalo en mi mente
Derrepente todo se volvió oscuro a mi alrededor, y alguien se acercó, alguien a quien llevaba 19 años sin ver de frente y aunque no pude ver su rostro sabía quien era
–Vas a permitir que sea tan sencillo?
–No. –dije con firmeza
–Iremos al Lord's Jeferson, encontraremos a esa chica que viste y pediremos explicaciones, pero primero tienes que averiguar qué quieren contigo en este lugar, y escaparemos
–Y Lilith?...
–Ella no es una prioridad justo ahora –sin más su mano hizo presencia – Tenemos un trato?
Sin pensar en las consecuencias y todo lo pueda pasar asenti y tome su mano
Y allí fue donde escuché la frase la cual me hizo dar un viaje a cuando solo tenía ocho años
–Solo yo puedo salvarte o destruirte.
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