-¡¿Puedes hablar?!- preguntó Lucas sorprendido

-Claro, por eso destaco más que las otras, porque puedo hablar- contestó Flowey

-Pues yo pensé que era porque tenías cara- dijo Lucas

-Pues no, no es por eso- dijo Flowey

-Bueno, da igual. A partir de ahora seremos grandes amigos, Flowey- dijo Lucas con una sonrisa

-¡Sí, papá!- dijo Flowey contento

Pasaron días y meses. Lucas siempre regaba, regaba y regaba a Flowey. Pero no solo eso, también hacían picnics juntos, hablaban, reían.

Pero un día...

Unos ladrones se metieron en el jardín para robar flores.

-¡Mira tío, yo me voy a llevar esta flor rosa!- dijo el ladrón B cortando esa flor

-Eh, tú. Mira esta, tiene cara- dijo el ladrón A viendo a Flowey

El ladrón A estaba a punto de cortar a Flowey para llevársela pero justo en ese momento aparecería Lucas.

-¡Apártate de Flowey!- gritó Lucas impidiendo que el ladrón A cortase a Flowey

-¿Tú quién eres, viejo?- preguntó el ladrón A

-Yo soy Lucas, el dueño de este jardín. Y no pienso permitir que cortes a mi querida flor Flowey- contestó Lucas

-Mira viejo, ya me has hartado- dijo el ladrón A sacando un cuchillo -Tío, saca tú también un cuchillo-

-De acuerdo, tío- dijo el ladrón B

Entonces, el ladrón A y el ladrón B empezaron a apuñalar a Lucas, tanto que este último cayó al suelo.

-¿Sabes qué? Ya se me han quitado las ganas de cortar esa flor, nos vamos- dijo el ladrón A

Entonces, el ladrón A y el ladrón B se fueron.

-Papá... ¿estás bien?- preguntó Flowey

-No..., Flowey. No estoy... bien. Quiero que hagas... una cosa- dijo Lucas

-¿El qué?- preguntó Flowey llorando

-Protege... el... jardín- dijo Lucas cerrando los ojos

Así, Lucas fallecería.

-¡No! ¡PAPÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁ!- gritó Flowey llorando

Pero de pronto, aparecería el Diablo.

-Quieres vengarte de esos ladrones, ¿verdad?- preguntó el Diablo

-Sí... ¡Los quiero MATAR!- gritó Flowey furioso

-¿Sabes? Yo puedo darte el poder suficiente para que los mates- dijo el Diablo -¿Lo quieres? ¿Quieres ese poder?-

-Claro... ¡¡POR SUPUESTO!!- gritó Flowey

-Vale, pero me darás algo a cambio... ¡¡TU ALMA!!- dijo el Diablo con una cara de loco

-Tú me das el poder, y yo te doy mi alma en 1 año- dijo Flowey

-De acueeeerdo, pero en 1 año- dijo el Diablo

Entonces, el Diablo le dio mucha fuerza a Flowey, y a esta, le aparecerían brazos y una sonrisa muy malvada.

-¿Y ahora me puedo mover?- preguntó Flowey

-Por supuesto, y puedes viajar bajo tierra- dijo el Diablo

Entonces, el Diablo desaparecería.

Un rato después.

El ladrón A y el ladrón B estarían paseando por la calle. Pero se encontrarían con Flowey.

-¡Coño! ¡La flor de antes! Aunque pareces distinta- dijo el ladrón B

-Me las vais a pagar, ¡¡MATASTÉIS A MI PADREEEEE!!- gritó Flowey metiendo las manos en el suelo

-¿Qué estás haciendo?- preguntó el ladrón A

Entonces, Flowey se transformaría en un auténtico monstruo.

-Eeeeh, ¿cómo te llamabas? Flowey, ¿no? Flowey, lo sentimos mucho. Nosotros no querí...- dijo el ladrón A sin terminar de hablar

-¡¡No me llames Flowey!! Llámame... ¡¡¡CAGNEY CARNATION!!!- gritó este

Así, Cagney mataría al ladrón A y al ladrón B. Pero por culpa de esto, Cagney le cogería el gusto a matar, haciendo que se convirtiese en un asesino en serie.

Días después.

Por isla Tintero habrían muchos carteles de "Se busca" de Cagney, dando una recompensa de 5.000$ por su cabeza.

A todo esto, vámonos a un mundo más lejano que las islas Tintero.

El mundo de los dulces.

Ahí habría un castillo.

-¡Von Bombón!- gritó el Rey de los Dulces

-¿Qué pasa ahora, padre?- preguntó la Baronesa Von Bombón

CONTINUARÁ...