05: Juntos
Manchester, UK 10: 42 pm
Si estas aquí a mi lado, prometo que siempre velare por un futuro juntos.
—No puede ser cierto... todo este tiempo yo pensé que mis padres no me querían y por eso me abandonaron.
—No hubo un solo día en el que dejáramos de buscarte, siempre estabas presente en nuestras mentes con la incertidumbre de no saber si estabas pasando frío o hambre, si estabas enferma o si algo te dolía. —con la voz cortada Eleanor sacó toda la angustia que siempre traía consigo desde el momento en que Louis le había informado que su bebé había desaparecido del hospital.
—Tú verdadero nombre es Elena Tomlinson Calder y eres nuestra hija. —sentenció Louis, abriéndole los ojos a Lucy de su realidad.
Ahora entendía tantas cosas, el porqué no tenía papeles de identidad la razón por la cuál no podía salir de Manchester, estaba encerrada en una mentira, ¡su vida era una mentira! ¿Cómo alguien podría ser tan desgraciado para arrebatarle un bebé a su madre?
—Mis... padres, ustedes son... mi familia. —habló con voz entrecortada. —Tengo una familia.
Elena se abalanzó a los brazos de Eleanor, su madre, hecha un mar de lágrimas. Ambas se dieron un fuerte abrazo, el abrazo que anhelaba Eleanor día y noche, día tras día, mes por mes y durante diecisiete años. Elena levantó la mirada y observó al hombre que tenía al lado y las miraba con sus ojos azules brillosos por las lágrimas silenciosa qie dejaba escapar, toda la escena era sumamente conmovedora, todavía no podía creer que estaba en el departamento de su ex mujer viendo como madre e hija se abrazaban en un hermoso reencuentro.
Elena se separó de Eleanor quien la besóen la frente, se secó un poco su rostro con las manos y fue abrazar a su padre quién ya la esperaba con los brazos abiertos.
—Mi pequeña princesa. —murmuró con voz ronca y se largó a llorar junto con ella. Louis extendió su mano para que Eleanor la tomara, le dio un apretón, quizás lo hizo para saber que no era un sueño, que todo lo que estaban viviendo era real, que su hija estaba devuelta en sus vidas, sana y salva.
Louis atrajo a Eleanor hacia él y Elena que seguía llorando en su pecho, un abrazo familiar, un abrazo de reencuentro, un abrazo que decía todo el amor que sentían.
No sabían si habían pasado minutos o quizás horas pero si estaban seguros que estaban abrazados durante un largo tiempo, Elena había dejado de llorar y se había quedado dormida en el pecho de su padre mientras su madre le acariciaba su cabello castaño.
—Creo que se durmió. —Louis le susurró a Eleanor para no despertarla.
Eleanor asintió con la cabeza al ver a su hija con los parpados cerrados. —Llevemosla a mi recámara para que pueda descansar. —Eleanor se puso de pie y Louis la imitó con Elena siendo cargada por el. —Por aquí. —le indicó terminado de subir al segundo piso de su departamento.
—Aún recuerdo dónde queda tu habitación Ele. —comentó con una pequeña sonrisa al imaginarse la cara que había puesto su ex mujer al escucharlo.
Eleanor le abrió la puerta de su habitación y este se adentró al dormitorio dejando reposar en la cama a su hija, entre ambos le habían quitado las zapatillas de los pies, el reloj que llevaba en la muñeca colocándolo en la mesita de noche que estaba al lado de la cama.
—Listo, —Louis respiró hondo y sintió como su cuerpo experimentaba un momento de paz. —Que mal, el café se enfrió. —comentó al ver las tazas en la mesa, Eleanor se acercó para recogerlas y llevarlas a la cocina. —Será mejor que me vaya a un hotel, mañana temprano estaré aquí debemos hacer muchos transmite.
Eleanor miró el reloj que tenía colgado en la pared de su sala, marcaba las 12:37 am.
—Puedes quedarte si quieres. —tampoco iba hacer desconsiderada era más de media noche como para dejarlo manejar solo hasta un hotel, él debía sentirse agotado tanto como ella, además de que estaba lastimado, ya se le empezaba a notar un moretón en su mejilla.
—No quisiera molestarte.
—Hay espacio para todos. —le respondió dándose la vuelta y empezó a caminar hasta la cocina seguida por él.
—¿Hasta en tu cama? —no podía tentar a su suerte pero hace mucho tiempo que no dormía en la misma cama que Eleanor, extrañaba su calor todos los días.
—Tengo un cómodo Sofá. —lo miró con cara "se lo que intentas hacer, no lo lograrás"
¿Me estas retando?. Pensó Louis.
—Necesito fumar un rato para liberar tensiones.
—Yo también, ha sido un largo día. —abrió una gaveta y sacó una caja de cigarrillos y una encendedora.
Ambos volvieron a entrar en la habitación de Eleanor y dónde su hija dormía como una bebé, salieron al balcón y encendieron unos cigarros, quedaron en silencio, un silencio cómodo cada uno liberando sus tensiones en cada calada que llegaba a sus pulmones y era liberada en el aire.
—Mañana iré al notario para sacar los papeles legales de Elena, luego te llamaré y nos encontraremos para que saque su pasaporte, quiero estar el menos tiempo posible en esta cuidad.
—Elena vivirá conmigo. —sentenció Eleanor, Louis puso una mala cara. —No estarás pensando que viva contigo, tu esposa y tu hijo. Por favor, claro que no, es mi hija.
—También es mi hija y no quiero que viva contigo ni con el idiota de tu novio ex maricon. —Eleanor lo miro ofendida, Louis sentía la sangre hervir, no quería pelear legalmente con Eleanor por la custodia de su hija, eso nunca pero no iba a permitir que su hija viviera junto al ex amigo maricon de su ex mujer que ahora es su novio.
—No he ofendido a la mujercita que tienes como esposa, así que respeta a Dan y no esta a discusión. —Eleanor suspiró hondo e intento comprender la situación de Louis. —Viviremos en Londres, compraré un departamento para ambas.
—Sabes que no es necesario, puedes utilizar nuestra casa la he mantenido todos estos años en buen estado, todo esta como la ultima vez que la dejamos.
Eleanor lo miró sorprendida por la nueva información, Louis seguía al pendiente de su casa eso le daba gusto pero de todas formas, la casa era muy grande para dos mujeres que vivirían solas...
No le dio tiempo de alegar otra opción, una soñolienta Elena salió al balcón.
—He tenido una pesadilla, ¿podrían dormir conmigo? —preguntó tímidamente a sus padres. Louis le revolvió los cabellos y Eleanor le contestó un "claro que si, mi amor" y una sonrisa maternal que hizo que ambos Tomlinson les subiera un calor hasta las mejillas dándole un color rosa pálido.
Al final, Louis ganó y compartirían la misma cama.
Juntos los tres, por primera vez.
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ESPERO, que les haya gustado.
VOTEN para que suba rápido.
Perdonen las faltas ortográficas.
¿Qué les parece hasta ahora la historia?
Jaz
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