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Todos empezaron a recoger para salir del aula.
- Aroa, Marcos - los llamó Héctor - venid un momento.
Marcos se acercó y Aroa se aproximó a Carol.
- Córtate un poquito, ¿no ves como te mira Iván? - le susurró haciendo que su amiga apartara la mirada de Marcos.
- Ni se corta la niña - dijo Rebekah - atrevida - sonrió de lado.
Luego se acercó a Héctor.
- Marcos te presento a mi hija Aroa
Todos lo miraron fijamente.
- Así que él la crió - dijo Freya.
- Puede que lo haya hecho pero es mía - dijo Finn molesto - si hubiera sabido...
- Lo sabemos Finn, nunca la hubieras dejado - dijo Freya poniendo la mano en su hombro en forma de apoyo.
y Aroa, a partir de hoy soy tutor de Marcos y su hermana.
- De acuerdo - se encogió de hombros - bueno me voy.
- No le importa mucho - sonrió Kol divertido.
- Eso parece - dijo Klaus igual que Kol.
- Está en plan... si, si, si, lo que digas, me largo - rió Hope.
Aroa comenzó a caminar pero Marcos la detuvo.
- ¡Espera!
- ¿Sí?
- ¿Te puedo hacer una pregunta?
- Poder puedes, el caso es que te la responda.
Rieron.
- ¿De verdad que Héctor es tu papá?
- Adoptivo - asintió - pero sí, lo es.
Finn bajó la mirada.
- ¿Y tus papás?
- Ni idea, me abandonaron cuando era un bebé.
- No es verdad - murmuró Finn entredientes - maldita Esther. ¡MALDITA SEAS!
- Lo siento.
- Yo no - se encogió de hombros - que se pudran.
- Miren, ella sigue la tradición de odiar a los padres - dijo Kol.
Todos lo miraron mal.
- Ay, nadie entiende mi humor - se quejó Kol.
Las chicas estaban sentadas leyendo sus libros cuando aparece Iván asustandolas.
- ¡Iván/Lucifer! - lo golpearon molestas.
Iván levantó a Carol y mientras hablaban, las chicas ayudaban al profesor Alfonso ya que un alumno chocó con él y se le cayeron unos papeles.
- Ese niño es el que debería ayudar a ese profesor, ni siquiera se disculpó - dijo Elijah frunciendo el ceño.
Aroa vio un anillo en el suelo y lo cogió.
- Profesor, se le a caído este anillo - dijo dándoselo.
- Ah, gracias - lo cogió - es que cuando refresca se me cae.
- Tome - dijo Vicky entregándole los papeles.
- Gracias.
- No, gracias a usted por aprobarme - dijo Vicky - le prometo que este curso me voy a esforzar muchísimo más, se lo prometo.
- Más te vale, que eres muy lista pero muy vaga. Y tienes que conservar la beca - dijo haciendo asentir a Carol y Aroa - bastante hace tu madre para tenerte aquí - Alfonso al ver a Camilo se acercó a él dejando a las chicas.
- Que majo el profesor - dijo Freya.
Las chicas estaban dormidas cuando despertaron por la voz de Alfonso.
- ¿Se puede saber que hace un profesor en el dormitorio de sus alumnas? - dijo Finn molesto.
- Es como si Alaric se metiera en mi dormitorio por la noche - frunció el ceño Hope.
Se oyó un gruñido y ahí es cuando se dieron cuenta que era Klaus.
- Pero no lo ha hecho papá tranquilízate.
- Carolina, Victoria, Aroa - susurró Alfonso asustandolas - shhh.
- ¿Que hace usted aquí? - se alteró Carol mientras las dos lo miraban confusas.
- ¡Tenéis que iros de este colegio, es peligroso! - dijo el profesor.
- ¿Peligroso? - se miraron los hermanos alerta.
- ¿Mi prima está en peligro? - dijo preocupada.
- ¿Peligroso? - preguntó Aroa.
- Ahora no puedo explicaroslo - negó Alfonso - id mañana a las diez al cementerio y os lo podré contar todo - fue hacia la puerta y se marchó dejando a las chicas desconcertadas.
- ¿Peligroso? Pero si este colegio es lo más aburrido que hay - rodo los ojos Aroa.
- Vamos con los chicos - dijo Carol saliendo de la habitación.
- ¿No vienes? - dijo Vicky viendo a Aroa cerrar los ojos.
- No, quiero dormir.
- Prioridades - rió Hope haciendo sonreír a los demás.
- Vamos - Vicky la agarró la mano y se la llevó mientras Aroa se quejaba.
- ¿Es que no hay vigilantes? - preguntó Elijah.
- Es un colegio no la cárcel - dijo Rebekah.
Cuando llegaron, los chicos las dejaron pasar y ellas contaron lo sucedido con Alfonso.
- ¿Que el colegio es peligroso? - preguntó Iván incrédulo.
- Lo único peligroso es que los profesores se tomen la libertad de entrar a las habitaciones de sus alumnas - dijo adormilada Aroa tumbada en la cama de Iván - somos menores.
- Ella tiene razón - dijo Finn - se lo podia haber dicho al día siguiente.
- Demasiadas libertades - asintió Klaus frunciendo el ceño.
- ¡Aroa! - la regañó Carol.
- ¿Porqué la regaña si ha dicho la verdad? - Hope frunció el ceño molesta.
- Bueno, ella tiene razón - dijo Iván y miró a las otras dos - y a las diez en el cementerio, ¿no?
- Sí - asintió Vicky.
Los tres amigos se echaron a reír.
- ¿De qué se ríen? - preguntó Freya confusa.
Rebekah se encogió de hombros.
- ¿Qué? ¿Qué os hace tanta gracia? - dijo Vicky molesta.
- Y que vayáis ligeritas de ropa, ¿No? Para ganar tiempo - se burló Cayetano.
- ¿Que? - los miró Carol.
- Venga hombre que eso no se lo cree ni mi prima de tres años - dijo Iván - lo que pasa es que Alfonso es un listo. Además que sabe que dormís medio en pelotas.
- Os acojona para que os tiréis a su cuello - dijo Cayetano - ¿ Y encima os cita para mañana? Joder tío, porqué no se nos a ocurrido a nosotros. Miralas, a punto de caramelo las tiene.
- Malditos niños hormonales - siseó Finn muy molesto por como hablaban de las chicas.
- Ya no hay respeto - dijo Rebekah igual que Finn.
- Deberíamos enseñarles a como se tratan a las mujeres - dijo Elijah.
Los demás asintieron.
- ¿¡Sois imbeciles o que les pasa!? - se molestó Carol.
- Llegáis a nacer antes y a retrasados no os gana nadie - dijo Aroa alzando el dedo de enmedio.
Hope rió.
Marcos sonrió al escucharla.
- ¡Eh! - se quejaron los tres haciendo que Aroa rodara los ojos.
- Alfonso no es ningún mirón ni un salido como vosotros - siguió Carol.
Se abrió la puerta alertando a todos, pero se relajaron al ver a Paula.
- Mocosa, vete para tu cuarto que aquí no puedes estar - se acercó Iván.
- Paula, ¿que haces aquí? - Marcos se sentó en la cama mirándola.
- Es que quiero dormir contigo - dijo Paula - ¿Puedo quedarme?
- Awwww que linda - dijeron las chicas.
- No, no puedes quedarte enana, venga vete para tu cuarto - dijo Iván agarrándola.
Marcos agarró el brazo de Iván bruscamente.
- Como vuelvas a ponerle la mano encima a mi hermana, te la arranco gilipollas - le amenazó.
- Eso defiende a tu hermana - asintió Klaus - me cae bien.
A todos les gustó cómo defendió a la niña.
Los demás se miraron tensos. Marcos volvió a tumbarse en su cama y ayudó a Paula arropandola después.
Cayetano se asomó viendo a Jacinta.
- ¡Agua! ¡Agua!
Vicky y Aroa se escondieron debajo de la cama, Carol en el armario y Cayetano apagó la luz haciéndose los dormidos. Jacinta abrió la puerta y encendió la luz.
- Carolina, Victoria y Aroa a vuestras habitaciones. ¡Ahora!
- Buff, Jacinta que susto, que estábamos durmiendo - dijo Iván "adormilado".
- ¿Sabías que si a un adolescente le rompes el sueño le puedes desencadenar un trastorno psicológico grave a su edad adulta? - dijo Cayetano.
- A ustedes los despertaron muy a menudo, ¿no? - rió divertida Hope al ver las caras de su familia - era una broma.
- Cierra el pico o no vas a llegar a la edad adulta - advirtió Jacinta - Vosotras, o salís a la voz de ya o mañana os pongo a las tres hacerme la pedicura.
Las tres salieron rápidamente de sus escondites y se acercaron.
- Bien, ya nos vamos entendiendo.
- Sí, claro Jacinta, si tienes unos callos como champiñones - dijo Carol saliendo la última.
Todos pusieron mala cara.
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