Más tarde ese día Hizumi había regresado a casa y le hablaba con Nami acerca de todo el papeleo que tuvieron que hacer para su inscripción, en eso suena el timbre y la castaña se levanta a abrir.

- ¿Shinobu?- decir que estaba sorprendida era poco, al verlo correr en la mañana se imaginó que no quería pasarse por aquí y hablar con ella.

- ¿Puedo pasar?- se le notaba un poco incómodo.

- Si, claro, pasa- la ojigris dio un paso al costado para que el joven pueda pasar al recibidor.

- ¿Quién es Hizumi?- el grito de Nami podría haberse escuchado por toda la casa. 

- ¿Esa es Nami?- Shinobu pensaba hablar a solas con su mejor amiga, no lo malinterpreten, Nami también es una muy buena amiga, pero es algo "explosiva" y no cree que lo perdone tan fácilmente por no ponerse en contacto con ellas los meses que ha estado en Japón desde que regresó.

- Sí, sus padres están de viaje y ella se va a quedar unos meses en mi casa- le dijo ajena a la expresión incómoda de su amigo- ¡Es Shinobu-kun!

- ¿Shino-kun?- se escuchó un golpe y pasos apresurados hacia la recepción- ¿Eres tú, cuando has llegado, que tal Australia?

El joven se olvidó momentáneamente de sus preocupaciones y soltó una pequeña carcajada.

- Tranquila Nami-chan, entremos y les contaré lo que quieran saber.

Pasaron a la sala de estar donde el programa de televisión pasó a un segundo plano. Ritsu había llamado para avisar que iba a llegar tarde porque estaban atrasados con las fechas para la publicación del manga.

Hizumi pidió algunos bentos porque ni ella ni Nami querían cocinar y sabían que Shinobu no era muy bueno cocinando. Ya con los almuerzos, se sentaron y las chicas esperaron a que el castaño comenzara a hablar.

- Muy bien, primero que nada no quiero que me interrumpan, al final aclararé todas sus dudas, ¿de acuerdo?- ambas chicas asintieron y el chico les dedicó una sonrisa suave, reservada solo para sus mejores amigas.- Esta bien, lo segundo que quería decirles es que regresé de Australia hace unos meses... no pudo seguir hablando por el grito incrédulo de las chicas.

- ¿Qué, como que hace meses, por qué no nos avisaste?- preguntó Hizumi con un pequeño deje de dolor en su voz, pensó que él no quería verla.

- Hizumi, todo tiene una razón, si me dejaras seguir y no interrumpirme como les pedí antes lo sabrán- las miró con reproche y ambas, avergonzadas, asintieron nuevamente.

- Creo que debo de comenzar con lo que sucedió hace tres años, hubo un hombre que me ayudó con unos matones, era el mismo hombre que había visto hace varios días atrás en la biblioteca, después de ayudarme me preguntó por el hotel Teito, justo a donde me dirigía. En ese momento pensé que era el destino que nos encontráramos, pero todo se derrumbó cuando me di cuenta que íbamos al mismo sitio porque se iba a casar con Risako-neechan.

Ahí decidí ir a estudiar a Australia, pero, hace unos meses me enteré que mi hermana se divorció y volví a sentir que el destino juega a mi favor así que lo busqué y le confesé mis sentimientos- el joven Takatsuki dijo todo eso casi sin respirar y sin mirar a los ojos a sus dos mejores amigas, sin embargo al no escuchar ni una sola palabra de ellas las observó y ellas le mostraron una sonrisa de oreja a oreja y de la nada dieron un chillido de alegría y lo comenzaron a abrazar.

- Estoy tan feliz por ti, Shino-kun- dijo Nami.

- ¿Quién es?- preguntó Hizumi.

- Queremos saber más- dijeron ambas.

Shinobu comenzó a ponerse rojo de vergüenza mientras escucha las preguntas de sus amigas, una más vergonzosa que otras que lo hacían ver como un lindo tomatito.

- Silencio chicas, les responderé lo que quieran, pero primero- miró a su prometida- ¿Estamos bien?

- ¿Te refieres al compromiso?- él asintió- no te preocupes por eso, sabes que es más importante nuestra amistad- le dirigió una de sus sonrisas características que siempre lo calman.- Pero si quieres no lo rompamos aún, hasta que estés preparado para decírselo  a los demás.- Shinobu no aguantó más y la abrazó, ella le devolvió el abrazo gustosa.

Luego de ese emotivo momento en donde se les unió Nami, volvieron a bombardearle con preguntas que el joven Takatsuki, aunque avergonzado, iba respondiendo una a una.

- ¿Entonces estas saliendo con mi nuevo profesor?- el estudiante de leyes asintió- ¿y estás viviendo a su lado, como vecinos?- volvió a asentir- ¿cuándo te puedo ir a visitar?- el ojiverde comenzó a negar con la cabeza.

-¡No!- su grito sobresaltó a las chicas, al parecer se aprovecharon mucho de la amabilidad del joven e incitaron a que aparezca su lado irritable.

- Esta bien, tranquilo Shino-kun, te iremos a visitar cuando nos des permiso, ahora cambiando de tema, ¿qué estas estudiando?

- Leyes en la Universidad de Tokio- respondió más tranquilo aunque seguía irritado.

- Sabía que nuestro Shino-kun es muy inteligente, felicidades, ya sabes que yo estudio literatura en la universidad M y bueno, Nami estudia diseño gráfico en la universidad de Bellas Artes.

- Ah si, felicidades a ustedes también.

- Hay que celebrar chicos- dijo de repente la joven Tachibana- tenemos que celebrar el ingreso a nuestras universidades y Shino-kun todavía le debe un regalo a Hizumi por su cumpleaños.

- Si- gritó la ojigris- me lo debes Shino-kun.

El único hombre del pequeño grupo suspiró, le era imposible enojarse mucho con sus amigas.

Siguieron conversando hasta bien entrada la noche , el joven se despidió de sus amigas y se dirigió a su hogar esperando que Miyagi estuviese aún despierto para poder contarle lo sucedido el día de hoy.

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Ahí esta el nuevo capítulo, espero que les guste, voten y comenten para hacer a esta escritora feliz.

Les deseo un buen día :)

JMP