23 - Bronce vs Plata
Kagome sin dudarlo se puso su armadura, debía darse prisa o Seiya parecería frente al nuevo enemigo. No podía permitir que algo malo le ocurriese a su mejor amigo.
Corria por la carretera, saltando los autos que se trasladaban por ella. Iba a la playa, pues esa fue la dirección que le había dado Miho.
—¿Qué es esto?—dijo en su mente—Es un cosmos abrumador. También logró percibir el cosmos de Seiya, está luchando, pero hay algo que me inquieta...
Llegó a la playa, jadeo un poco, estaba tratando de recuperar el aliento. Tenía que apresurarse.
Nuevamente volvió a correr, el cosmos que percibió desapareció.
Pero cuando llegó al campo de batalla, logró ver a su amigo a salvó pero también había el cuerpo de un caballero muerto.
—¡Seiya!—corrio hasta el—¿Te encuentras bien?—pregunto con preocupación.
—Si, no tienes porque preocuparte—le dedicó una sonrisa tranquila.
—Que alivió...—dejo salir un suspiro. Dirigió su mirada al hombre que yacía en el suelo— Ese hombre...
—Es un caballero de plata—respondio con seriedad.
—¿Qué?—lo miro impactada—¿Un caballero de plata?
—Si, tendremos que estar alertas...estos sujetos, no se comparan con nuestros anteriores enemigos...
( . . . )
Seiya había convencido a la Amazona de quedarse en su apartamento, pues con lo ocurrido en la mansión no tendría dónde pasar la noche.
—Espero que no le haya pasado nada malo a Marín...—dijo el castaño.
—No te preocupes por ella, Marín es una mujer muy fuerte, seguro se encuentra bien—poso su mano en su hombro, tratando de animarlo.
El chico la miro de reojo, le dedicó una pequeña sonrisa y puso delicadamente su mano sobre la de la chica.
—Tienes razón...—murmuro con calma.
Ambos se miraron a los ojos por unos momentos, desde que tenía memoria, Seiya solo había visto el rostro de su amiga cubierto por una máscara, pero ahora podía contemplarlo libremente.
Un pequeño rayo de luz ingreso por la ventana, en las mejillas del chico se formó un pequeño sonrojo.
Kagome lo miro, y bajo levemente su mirada apenada, nunca había estado en este tipo de ambiente con el.
Su cuerpo empezó a actuar solo, inclino su cuerpo hacia el de ella, acercándose a su rostro. La chica se puso nerviosa, se sentía paralizada, no sabía que hacer. Tragó saliva nerviosa y un sonrojo adornaba sus mejillas, cerro sus ojos con fuerza para intentar recuperar la compostura.
De repente, ambos sintieron un extraño presentimiento.
—Marín está pidiendo ayuda...—dijo Seiya alejándose de la chica.
—Algo malo debe estar pasando...—murmuro la chica.
No se podía creer que algo malo le pasará a Marín. Ambos salieron del apartamento, dónde justamente estaba un muy preocupado Kiki.
—¡Seiya!—exclamo al verlo—Marin está en peligro.
( . . . )
Ambos adolecentes corrieron a la playa, dónde se encontrarían con dos extraños caballeros que nunca habían visto. No solo eso, si no que la amazona de águila estába atada cabeza abajo, a un poste en medio del agua.
—¡Marín! ¡Ya voy!—exclamo Seiya corriendo hasta ella.
—Hey, no tan de prisa, primero tendrás que librarte de mi y no te será tan fácil—dijo uno de los hombres, impidiéndole el pasó—. Mientras combatimos verás como ella se ahoga poco a poco...
—¡Eres un mounstro!—lo atacó golpeándolo en su abdomen.
El Caballero fue derribado y calló al suelo, Seiya iba a ir a salvar a Marín pero el Caballero se puso de pie, nuevamente impidiéndole el paso.
—Seiya, no te preocupes yo iré a salvar a Marín, tu encárgate de el—le pidió Kagome.
A Seiya no le quedó otra opción, eso era mejor a qué su maestra muriera por culpa de su tardía. Kagome corrió hasta Marín, sin embargó fue detenido por el otro caballero.
—Ni lo pienses Amazona, recuerda que somos dos Caballeros de Plata—dijo el hombre.
—Tsk—chasqueo su lengua con molestia—. Bien, entoces te derrotare y salvaré a Marín.
—No te adelantes tanto, pequeña—dijo con burla el extraño—. Puedo leer tu mente y prevenir cada uno de tus ataques, estás demente si piensas que lograrás vencerme.
Kagome se sorprendío, sin embargó trato de no hacerle caso y lanzarse a pelear al caballero de Plata.
—¡Las garras de lobo!—su cosmos se moldeo en grandes garras y comenzó a atacar.
Comenzó a hacer cortes en el cuerpo de su enemigo, pero cuando pestaño el ya no estaba frente a ella, en su lugar solo había una simple roca.
—¿¡Pero qué...!?—murmuro sorprendída.
—Ya te lo dije, no podrás sorprenderme—se escuchó la voz del hombre. El estaba parado sobre una roca, sin ningún rasguño—Leo en tu mente el ataque que realizarás, jamás conseguirás tocarme Amazona. Moses se encargará de Pegaso y Marín morirá.
—¡Seiya...!—dijo en su mente, mirando de reojo a su compañero, quien recibió un fuerte golpe del tal Moses.
—¡No te desconcentres!—exclamo el hombre, quien la atacó dándole un fuerte golpe en el abdomen, provocando que ella escupiera sangre.
La chica retrocedió unos pasos y jadeo, trato de darle un puñetazo en la cara, sin embargó el Caballero lo esquivó con facilidad. Kagome frunció el ceño molesta, continuó tratando de darle aunque sea un golpe, pero el continuaba esquivando.
—Vas a tener el honor de ser la primera de ustedes dos, en conocer mi arma más terrible—dio un potente saltó, elevando su cosmos—¡Prepárate!
Su cosmos brilló con fuerza, y cuando la chica pestaño vio como el Caballero se multiplicaba. No sabía cuál era el verdadero, pero si que la manera más rápida de averiguarlo era atacando a distancia.
No lo dudo y atacó con una Ráfaga de Garras, sin embargo no parecía hacerle daño a ninguno de los clones.
—Predecible—dijo el hombre con una sonrisa burlona—¡Legión de Fantasmas, destruyanla!
De repente todos los clones lanzaron un potente ataque a la vez. La chica soltó un grito de dolor, todo su cuerpo recibía el impacto de su técnica y era una sensación horrible.
Su cuerpo calló con fuerza en el suelo, el caballero de plata puso sus pies en el piso y camino hasta la amazona. Piso su cabeza con fuerza.
—Tus golpes son fuertes, pero te diré algo...—comenzo a patearla— los golpes de un caballero de plata, son el doble de potentes que los de un caballero de bronce como tú y ese niñato.
Antes de que pudiera hacer algo, fue empujado por alguien. Seiya había acabado con el Moses.
La Amazona de lobo blanco apoyo sus manos en la arena, para comenzar a levantarse de a poco. Tosió un poco de sangre y se puso de pie completamente.
Cuando se dió cuenta, el caballero de Pegaso fue atacado con la misma técnica que uso en ella.
Apretó sus dientes con fuerza y no dudo en volver a atacarlo, pero como era de esperarse el esquivo con rapidez.
—Te has puesto de pie...—murmuro el hombre con una sonrisa burlona—no será por mucho, ¡Hasta nunca!
Sin embargo Kagome bloqueó su golpe, y le dió un puntapié en su mentón. El Caballero de plata retrocedió unos pasos, había sido descuidado.
—Has tenido suerte, pero no cuentes que la tendrás siempre—dijo con irá.
—Mientras me mantenga de pie, no serás el vencedor—dijo la chica con seriedad.
Se lanzó a atacarlo, nuevamente con su técnica de "Las garras de lobo" pero el esquivaba fácilmente. Sin embargo, fue atacado por atrás por el caballero de Pegaso. Se sorprendio un poco, pero se movió a una gran velocidad esquivando sus meteoros.
Para mala suerte de los caballeros de bronce, Kagome termino recibiendo el impacto de los meteoros callendo al suelo.
—¡Kagome!—exclamo el castaño preocupado.
Por un descuido, fue atacado por el caballero de Plata, nuevamente con aquella técnica "Legión de fantasmas". Ambos se encontraban derrotados en el suelo.
—Jmph...—solto una risa—Estupidos Caballeros de bronce, no podrán detenerme, y tampoco detendrán su muerte.
Iba a atacar a Seiya, sin embargo sintió como algo lo sostenía del pie. La amazona de Lobo Albino, lo retenía.
—Creo que te he detenido...—aunque estaba adolorida sonrió con burla.
—Maldita mocosa...—fruncio el entrecejo con cólera—Por andar de graciosa, serás la primera en morir
Iba a atacarla pero de repente...
🌸🌸🌸
Suspenso XD
En fin, dejen su F, al pobre de Seiya siempre le interrumpen los besos.
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