En la religión yorubís, Jemanjah, la olorhun del mar y madre de todos los olorhun, tiene "7 caminos principales". Cada uno de los pobladores de esta región posee un camino que se le otorga en el momento de su nacimiento; una partera revela en medio de una ceremonia cual será el camino que le ha otorgado Jemanjah y de este modo sus padres sabrán que tipo de persona será y a qué se dedicará.

    Existe un octavo camino, pero es uno que solo ocurre cada cien años en una noche de eclipse y oleaje fuerte; muy pocos habitantes de Santhos han podido controlar este don y terminan volviéndose locos.

    Aun así y con todas estas advertencias, algunos inconformes con su don otorgado al nacer codiciaban el octavo camino.

    La avaricia humana no tiene límites, muchos creyeron que sacrificando vidas inocentes y actuando de mala voluntad lograrían obtener el máximo poder. Pero lograban todo lo contrario. Cada uno de estos caminos representa diferentes aspectos de su personalidad y energía, y pueden variar ligeramente dependiendo de la tradición e incluso de la región Norte y Sur del territorio.

    1. "Jemanjah Asess": Representa las aguas turbulentas y es asociada con la justicia.

    2. "Jemanjah Okitt": Está relacionada con la oscuridad y la introspección, reina en las profundidades del mar.

    3. "Jemanjah Mayey": Protectora de los pescadores y comerciante astuta.

    4. "Jemanjah Olok": Asociada a las grandes profundidades del océano y los secretos del mar.

    5. "Jemanjah Okut": Una versión guerrera de Jemanjah, más temperamental y activa en la protección de sus hijos.

    6. "Jemanjah Kon": Representa la sabiduría y el conocimiento, está ligada a las aguas serenas.

    7. "Jemanjah Ib Agan" : Asociada con el movimiento y las corrientes marinas, protectora y gran luchadora.

    Estos caminos reflejan la complejidad y la diversidad de su energía y la manera en que interactúa con sus devotos.

    Jemanjah, una de las olorhun más poderosas y veneradas en la religión yorubís, tiene diferentes caminos, o "avatares", que representan varios aspectos de su naturaleza y personalidad.

    Estos caminos reflejan sus distintos roles en la vida, el mar, la maternidad, la guerra y la sabiduría.

     1. Jemanjah Asess

    Es conocida como la  Jemanjah de las aguas turbulentas y fangosas.

    Está asociada con los ríos oscuros y las aguas que han sido alteradas por las tormentas. Es una figura fuerte que equilibra las fuerzas de la naturaleza y la justicia. Es severa y rápida en castigar a quienes violan las leyes del respeto y el equilibrio.

    Se le relaciona con la fertilidad y la abundancia, pero también con la purificación y la limpieza de las negatividades.

    Sus colores son azul oscuro, blanco y negro.

    Se le asocian los manantiales y los pantanos, y su receptáculo es una tinaja o una vasija llena de agua turbia y barro.

    2. Jemanjah Okitt

    Representa a Jemanjah en su aspecto más introspectivo y profundo. Reina en las profundidades del océano, donde habitan secretos y misterios. Es considerada la dueña de las aguas oscuras, representando el misterio y lo oculto.

    Es una figura que inspira respeto y temor, asociada con la introspección, los secretos y la protección. También es considerada protectora de las almas perdidas y los muertos en el mar.

    Sus colores son el azul oscuro, negro y plateado.

    Sus símbolos son las profundidades del océano, los tesoros ocultos en las profundidades marinas y la sabiduría ancestral.

    3. Jemanjah Mayey

    Este camino la representa como una comerciante astuta y la protectora de los pescadores y navegantes. Es la Jemanjah relacionada con el comercio, el intercambio y la riqueza que se extrae del mar.

     Astuta y hábil en los negocios, se asocia con la buena fortuna y el éxito en los emprendimientos. También representa la supervivencia en condiciones difíciles, protegiendo a aquellos que dependen del mar para ganarse la vida.

    Sus colores son el azul y dorado.

    Sus símbolos con el pescado, las redes de pesca y las monedas.

    4. Jemanjah Olok

    Es la diosa de las profundidades más abismales del océano, compartiendo espacio con el olorhun Olok, quien también es un poderoso ser marino. Este camino está asociado con los misterios insondables del mar y la sabiduría oculta.

    Se le considera guardiana de los secretos ancestrales y es temida y respetada por su capacidad para controlar los grandes cataclismos marinos. Está asociada también con la riqueza, la salud y la longevidad.

    Sus colores son el azul oscuro y blanco, a veces con tonos de verde.

    Sus símbolos son el océano profundo, las perlas y los corales.

    5. Jemanjah Okut

    Es la representación más guerrera de Jemanjah. Este camino la presenta como una diosa fuerte y decidida que lucha por sus hijos y es feroz en la batalla. También se le relaciona con la violencia de las tormentas marinas.

    Es protectora y combativa, interviniendo activamente para defender a los suyos. Este aspecto de Jemanjah es más temperamental y firme en su accionar.

    Sus colores son el azul oscuro y rojo.

    Sus símbolos son las armas, los escudos y el trueno.

    6. Jemanjah Kon

    Este camino es la encarnación de Jemanjah en su forma más sabia y maternal. Representa la sabiduría y el conocimiento que fluye del océano, y es venerada por aquellos que buscan consejo y guía en momentos difíciles.

    Sus características son la serenidad, paciencia y claridad. Es una madre protectora y sabia, que guía a sus hijos con firmeza pero con gran amor. También se la asocia con las aguas tranquilas, donde todo es claridad y paz.

    Sus colores son el azul claro, blanco y plata.

    Sus símbolos son las caracolas marinas, los remolinos y las aguas calmadas.

    7. Jemanjah Ib Agan

    Este es el camino más dinámico y activo de Jemanjah. Está relacionada con el movimiento y las corrientes marinas, y simboliza la energía en constante cambio. Es una figura que lucha por el orden, pero también promueve el crecimiento y el cambio.

    Representa la fuerza del movimiento, el flujo de la vida y el empuje para avanzar. Es una luchadora incansable que, aunque a veces severa, ayuda a sus hijos a superar los obstáculos.

    Sus colores son el azul turquesa y blanco.

    Sus símbolos son las corrientes marinas, los remolinos y las olas en movimiento.

    Cada uno de los caminos de Jemanjah representa una faceta de esta poderosa olorhun, mostrando tanto su aspecto maternal y protector como su carácter guerrero y severo. Sus caminos son venerados y respetados en diferentes regiones, y su influencia es profundamente significativa para sus devotos en la religión yorubís.

    Jemanjah es representada como una mujer maternal, amorosa y protectora, pero también puede ser feroz y destructiva como el mar en tempestad. Es una diosa con muchas facetas y puede tanto ofrecer seguridad y nutrición como castigar a quienes la ofenden.

    Sus colores tradicionales son el azul y el blanco, simbolizando las olas del océano y la espuma del mar.

    El número 7 está asociado a Jemanjah, representando los siete mares y las fases de la luna, que también están bajo su influencia.

    Sus símbolos incluyen los peces, las conchas, los barcos y todo lo relacionado con el mar. También suele estar vinculada con la luna y las mareas.

    Jemanjah es la madre de varios olorhun importantes, como Og (dios del hierro y la guerra), Shanhó (dios del trueno y el fuego), y Otya (diosa de los vientos y las tempestades). También tiene una estrecha relación con Oshün, la olorhun de los ríos y las aguas dulces, lo que a menudo las coloca en un vínculo complementario: Jemanjah en el mar y Oshün en los ríos.

    En el culto a Jemanjah, los devotos realizan ofrendas en la orilla del mar, donde suelen dejar frutas como melones, flores y conchas marinas. También le ofrecen animales como patos o gallinas en los rituales. Las ceremonias en su honor incluyen cantos y danzas tradicionales, que imitan el movimiento de las olas.

    Jemanjah es invocada para protección, fertilidad, maternidad, y para la protección de los navegantes. Como madre protectora, se le pide su ayuda para mantener la paz en el hogar, la salud de los hijos y la abundancia en las relaciones familiares.

    Uno de los momentos más importantes de su culto es el 2 de febrero, cuando miles de devotos se congregan en las playas de Santhos, para realizar ofrendas y pedir bendiciones. En esta celebración, las personas visten de blanco y azul, lanzan flores al mar y, en algunos casos, pequeñas embarcaciones con ofrendas.

    El lamento de Jemanjah Okut es una historia que surge dentro de la mitología yorubís y se relaciona con una de las manifestaciones de Jemanjah, la poderosa olorhun del mar. Jemanjah es conocida por ser la madre de todas las cosas vivas, la diosa de los océanos y las aguas, y su figura abarca diferentes caminos o avatares.

    Uno de estos caminos es Jemanjah Okut, una versión más guerrera y feroz de esta deidad.

    Jemanjah Okut es una guerrera formidable, asociada con las armas de hierro y las batallas, y muchas veces se la vincula con la forja y los metales.

    A diferencia de otras facetas de Jemanjah, que se relacionan con la maternidad y la protección, Okut representa la fuerza, la lucha y el carácter indomable del océano en su estado más salvaje y peligroso. También es conocida por tener un vínculo especial con Og, el olorhun de los metales y la guerra, lo que refuerza su aspecto bélico.

    El mito del lamento de Jemanjah Okut cuenta que, a pesar de su fuerza y su actitud aguerrida, Jemanjah también es una deidad que siente profundo dolor y tristeza. La leyenda relata que en un momento de gran aflicción, Jemanjah Okut sufrió una gran traición, que varía dependiendo de las versiones del mito.

    En algunas versiones, fue traicionada por uno de sus hijos o seguidores, mientras que en otras, se habla de una traición amorosa.

    Esta traición, sea cual sea la versión, sumió a Jemanjah Okut en un dolor tan profundo que se retiró al océano para lamentarse. Su llanto no fue un simple sollozo, sino un lamento desgarrador que resonó en las profundidades del mar y los cielos.

    Los yorubís creen que este lamento es una advertencia, un símbolo de que incluso la deidad más fuerte puede ser vulnerable al sufrimiento. Sin embargo, Jemanjah Okut, siendo una guerrera, no sucumbió completamente a su dolor; en lugar de ello, su llanto se convirtió en una fuerza destructora, como las tormentas que nacen de los mares embravecidos.

    Se dice que cuando Jemanjah Okut lamenta, el mar se agita, las olas se levantan como montañas, y las tormentas rugen sobre la tierra, mostrando el poder devastador de su pena. Su llanto no es solo una expresión de tristeza, sino un recordatorio de su capacidad para destruir todo a su paso cuando su corazón ha sido herido.

    Este lamento se considera un fenómeno peligroso, temido por quienes viven cerca del mar, ya que simboliza la ira incontenible de una madre traicionada.

    El lamento de Jemanjah Okut enseña que incluso las figuras más poderosas y temibles tienen su lado vulnerable. El mito también refleja la dualidad de Jemanjah: por un lado, es la dadora de vida, protectora y madre; por otro, es una fuerza destructiva cuando se le provoca o se le traiciona.

    Su lamento es una advertencia sobre las consecuencias de traicionar la confianza y el amor de alguien poderoso, ya que el dolor puede convertirse en ira incontenible.

    Este mito también está relacionado con la idea de que las deidades yorubís no son solo seres inmortales y divinos, sino que también poseen emociones humanas, como el amor, la tristeza, y el rencor, lo que las hace más cercanas a los mortales que las veneran.

Glosario:

7 caminos principales: Cada habitante de Santhos al nacer se le otorga un camino y un don que le guiará por el resto de su vida.

octavo camino: No es muy común, y los habitantes lo ven como una maldición hacia la familia más que como una bendición debido a que no se conoce de alguien que haya heredado este don y que su vida sea abundante o próspera. Generalmente son personas infelices.

olorhun Olok: Son los habitantes de Santhos, generalmente del Sur, del género masculino que al nacer reciben este camino y pueden cambiar sus piernas por una cola para nadar al fondo del mar y cuidar de las profundidades del océano.

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Proyecto "Dulce Afrodisíaco"

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