Aclaración:
Con el ascenso de Dégel, el título de Capitán es reemplazado por el de General, el de Capitán es otorgado al jefe de la Marina.
Denebola ahora es un Archiducado.
Ahora si primer capítulo n.n

1.- Golpe de estado.

" El rey Hades fue ejecutado..."

Voces de comerciantes que huían de Giudecca proclamaban la terrible noticia que en un santiamén llegó a oídos de la nobleza de Indrapaths que atribulada ya pensaba en abandonar el reino junto a sus riquezas, sirvientes y familias. Eso era lo que se sabía, la gente prefería no entrar en detalles sobre la ejecución del Rey.
Popea maldecía a Radamanthys cuya orden fue exiliarla y despojarla de todas sus propiedades. En Giudecca desde esos momentos regía un estado de excepción para los civiles mientras que la nobleza aliada al depuesto Hades era vejada, empobrecida y expulsada del reino.

La demencia de Wyert obligó a que los estados vecinos prepararan a sus ejércitos, Dégel en vista de que el General del ejército Kanon Geminae no se hallaba presente, tuvo que ascender a Julián Solo al grado de General.

Palacio Real
.
La nueva familia real se había mudado a sus dependencias después de la coronación la cual fue austera. Asmita quién después de su abdicación se retiró a vivir a un palacete cercano al monasterio. A excepción de Camus el cual abandonó la corte al saber que Thera sería la sucesora de todos los títulos de su padre y propiedades, todos los Acuario vivían en Rajish Palace, ahora llamado Saldamelik.

En esos momentos la nueva Princesa heredera y sus damas se dirigían a la oficina del rey, Saga que conservaba su puesto recibió a la joven y le indicó donde la esperaba  Dégel.

—me llamó Mi Señor—dijo a modo de saludo apenas entró.

Dégel alzó la vista de unos papeles que analizaba antes de firmar para sonreír brevemente a su hija y le indicó sentarse en una silla cerca de él.

—¿ viniste sola?

A ella se le hizo rara la pregunta.

—no, con mis damas ¿ por qué?

—no por nada, es que la Condesa de Bernadette preguntaba por ti.

—ah, Alissa quiere que salga con ella a comprar sombreros—dijo Thera .

—creo que esa actividad no será posible con una amenaza de guerra, hija mía—aconcejó el Rey.

Desde su proclamación, el nuevo Rey de Indrapaths no había hablado con su primogénita puesto que el desaire de Camus quién se negó a acudir a la ceremonia de coronación lo había decepcionado a tal punto de odiar su nuevo puesto.

Más ese dolor volvería cuando la heredera al trono mencionaría a su hermano.

—¿ no sabes nada de mi hermano?

Los nudillos de su mano palidecieron al oír la mención de este, Thera se arrepintió de haberlo hecho.

—perdón padre, no quería entristecerte.

—déjalo así.... está molesto consigo mismo.

—bien, ¿ me llamaste para algo? ¿ qué es padre?

La actitud de una futura reina, ese era lo que él deseaba ver en ella y estaba seguro que sería una gran reina.

—hay una gran probabilidad de que Giudecca declare una guerra a todos los reinos y territorios, si eso sucede debo estar al frente del ejército—hizo una pausa para ver si su hija estaba entendiendo lo que iba a decir—aún no estoy casado con Kardia....

Thera entendió lo que su padre quería decirle..... alguien debía quedar como regente del reino y como no había un consorte puesto que Kardia aún no era el esposo de su padre, ella como la heredera del trono probablemente sería la regente de Indrapaths.

—entiendo.

El soberano tomó entre sus manos las de su hija que sintió por vez primera el cariño de un padre, sabía que él necesitaba que asumiera su rol de hija.

—no te dejaré solo padre—sonrió—si es posible.... haré que Camus regrese....
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Giudecca.
Palacio Real, habitaciones de los reyes.

—saquen todo esto de aquí—Radamanthys ordenaba a los temerosos sirvientes—Hades malgastó todo el tesoro real en estas porquerías.

Pandora a su lado observaba el ir y venir de la servidumbre. Con su nueva posición de Esposa del Dictador tuvo a su cargo la responsabilidad de apresar a aquellos que apoyaban al depuesto rey y en lo posible ejecutarlos.

Ella había actuado como informante de Wyert quién antes de la caída de Hades era uno de los nobles más poderosos de Giudecca a tal punto de influir en ciertas decisiones del rey y tener roces con la entonces Canciller, Popea a la que expulsó de Giudecca. En conclusión todo había sido fraguado con sumo cuidado sin que ni en Indrapaths se dieran cuenta.

—¿te gusta querida?

Asintió satisfecha mientras rozaba con sus uñas el brazo descubierto de Radamanthys.

Sólo quedó un tapiz antiguo, un candelabro y un mobiliario austero. Con un despectivo gesto despidió a la servidumbre para quedarse solo con Pandora; el tener poder lo acercaba a nivel de un emperador romano.

—la infeliz de Popea huyó hacia un Aqrchiducado regido por un Leons—comentó Pandora.

—ese territorio será nuestro pronto—la besó sin premura—al igual que Antares, Alhena y el insípido reino de Indrapaths.

Pandora se desternilló de risa avalando esas demenciales palabras, una sirviente se persignó observándolos tras la puerta, se venían tiempos difícíles, los arrestos y expropiaciones sucedían cada segundo sin que nadie pudiese hacer nada puesto que el ejército iba a ser purgado para evitar sublevaciones en contra del nuevo gobernante.

—querido mío, sabes que para capturar Denébola debes sacar del juego al General Geminae y luego asesinar a Aioria Leons.

Radamanthys sabía cúan despiadada podía ser Pandora, es por eso que contó con ella cuando le dio las coordenadas del cuartel general de Indrapahts y así envió aquel ataque que por poco cuesta la vida de Kanon. Los comentarios de que el hermano del Canciller era un prodigio en las tácticas militares traspasaron fronteras a pesar de que tenía poco tiempo en la jefatura del ejército, sin embargo su talento lo demostró cuando aún era un soldado.

—el muy infeliz se salvó de la muerte, pero ahora ya sé cómo atacarlo—posó sus dedos sobre el escote de Pandora—gracias a tu información ya sé qué hacer.

Antes de que Pandora agregara algo más, la acostó sobre la cama que perteneció a los reyes y procedió a arrancarle las prendas, eran tal para cual. Los gemidos de la mujer asustaron a los atemorizados sirvientes que veían el infierno desatarse.
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Antares.

Milo al tanto de la situación firmaba un decreto real en el que autorizaba la entrada de los ciudadanos tanto nobles como plebeyos al principado, pero había un punto....

—espera—Calvera leía desconcertada el documento—los nobles que tenemos más de dos propiedades debemos acoger a los expatriados de Giudecca.

—así es—contestó el joven acompañado de Camus quién como su esposo y consejero confirmó esas palabras—quedan exonerados de este decreto Ileana Acuario y Moses.

A su criterio, Camus últimamente ejercía una poderosa influencia sobre Milo, algo sin precedentes puesto que el Principe Soberano ni de su madre se dejó influenciar. Hasta llegó a pensar mientras digería la noticia del decreto que los problemas familiares de Camus estaban interfiriendo en la política de Antares.

Para colmo Seraphina revoloteaba en el palacio real como ama y señora por el simple echo de ser nombrada " Madre del Principe Consorte", Selene había encontrado una buena amiga para sus intrigas y chismes de palacio.
—¿sucede algo Calvera?—la voz de Camus la sacó de su ensimismamiento.

Avergonzada de que su pensamiento haya sido " leído", ella farfulló una disculpa a los soberanos.

—pero Ileana Acuario tiene muchos años viviendo aquí y....

—por lo mismo—interrumpió Camus antes de que Milo replicara, se apartó de su lado agitando su capa azul—ella y sus hijos son nobles honorarios de Antares, tú como Canciller deberías tener conocimiento de aquello. Y otra cosa—alzó la barbilla entrecerrando los ojos—no tutees a tu Soberano.

Cuando Milo estuviera solo, hablaría con él. Camus era distinto al joven que llegó a adquirir lotes de tierra, tímido, humilde y respetuoso. Ahora.... actuaba soberbio, severo e intransigente tanto que hacía varios días tuvo roces por causa de Seraphina con uno de los nobles.

—lo siento, Su Alteza—bajó la mirada—haré que el decreto se haga efectivo desde este momento.¡Con permiso!—abandonó la oficina de Milo dejando un rastro de inconformidad.

—no le gustó como le hablaste—comentó Milo con seriedad.

Camus alzó los hombros restando importancia mientras depositaba un beso en el lóbulo de la oreja derecha de Milo quién se estremeció.

—tú eres el señor de estas tierras y ella es tu representante y no debe cuestionar tus decisiones ni siquiera las mías porque soy tu igual—recorrió con sus besos hasta las mejillas de Milo quién estiró la mano y lo atrajo para darle un beso apasionado que encendió la estancia y los deseos del consorte—además que te amo mucho.... ¿ lo sabes? ¿ verdad?—murmuró pegado a su boca.

Bien Milo podía ahí mismo hacerlo suyo, pero, pero el estado de emergencia que se instaló en todas las tierras desde Alhena hasta Denébola impedía que sus gobernantes tuvieran tiempo para compartir momentos íntimos.

—nadie nos ve—dijo Camus adivinando su pensamiento en tanto metia sus manos debajo de las finas ropas de Milo—Selene y mi madre se encuentran compartiendo una comida con varias damas, sólo estamos tú y yo—sonrió pícaro—¿ qué decís mi señor?

Primero debía aleccionar a los centinelas que se apostaban vigilando la entrada para que nadie si Selene los interrumpiera y dos oigan lo que oigan debía fingir sordera y demencia. Dadas estas sencillas instrucciones los Soberanos procedieron a a amarse como se debía.

Ya después verían que medidas tomarían para enfrentar la amenaza de Giudecca.

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Primer capítulo después de un milenio ausente ¿ creo yo xD?
Bueno siempre uso esa palabra, mi última materia resultó ser una lata, me faltaron cuatro puntos para llegar a la nota que debía y para mantener mi beca debo dar un nuevo examen de recuperación. Y aunque no es excusa, he enfrentado una severa sequía de ideas en varias de mis historias, me encantaría que Calíope y el resto de las musas me iluminaran. Últimamente lo que escribo no me satisface para nada.
Ya no me quejo, de igual forma muchas gracias a quienes leen y comentan.
Los amo, aprecio y adoro n.n