Capítulo 2
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Al pasar de unas horas y aunque estaba algo ajetreado, Dopinder podía decir que tenía todo bajo control en la guardería.
La mayoría de los niños solo jugaban o se entretenia con cualquier cosa mientras que el taxista trataba de convencer a Laura de que estar en la guardería no era algo malo como pensaba.
Cerca de ellos, el mayor había puesto a Morgan a colorear unos dibujos aunque a esta no le emocionaba, hizo esto porque la hija del matrimonio Stark-Rogers no dejaba que uno de los ayudantes robots atendiera a Kira, ya que quería seguir jugando con él.
Martha y Robin se encontraban al otro extremo del lugar jugando con Legos; a la primera se le habían acabado los bloques negros para armar su replica de la Baticueva, entonces el contrario le quito a su construcción unas cuántas para dárselas a su hermana.
Por otro lado, Nora molestaba a Ashur moviendo su sonaja en su cara, el afectado sólo ponía su manito para impedir que le diera en la cara; pero el insistente sonido hizo que otro bebé comenzará a despertar.
Miles abrió los ojos lentamente acostumbrandose a la luz del lugar, lo primero que sus ojitos vieron fue a dos bebés peleando por el objeto que lo había despertado, acto seguido busco con la mirada a su hermana, cuando la vió trepo por el borde de la cuna y saltó, por suerte y gracias a sus poderes, no se lastimó; empezó a gatear hacia ella pero se distrajo con un cuadro que estaba en una de las paredes, en este se mostraba a sus padres, así que el pequeño se fue muy feliz hacia el y comenzo a gatear en la pared para alcanzarlo. Ellie había terminado el libro que le estaba leyendo a Ales así que se levanto para buscar otro pero sus ojos se toparon con su hermano escalando la pared, gritó y corrió hacia donde estaba, asustada de que le pasara algo.
Dopinder se percató de lo que pasaba y fue rápido hacia donde estaba el bebé, gateando en el techo sin preocupaciones como si no estuviera en peligro. El mayor sabía que cabía la posibilidad de que a Miles no le pasara nada por sus poderes regenerativos, pero no iba a quedarse quieto para averiguarlo. Ambos trataron de llamar su atención pero este hacia caso omiso. El taxista preparó rápidamente unas almohadas debajo de donde estaba por si caía, sin darse cuenta por su preocupación de que podía usar a los robots o pedir la ayuda de uno de los niños con poderes; intento saltar para ver si lo podía agarrar, pero para su mala suerte, el control que controlaba a los robots se calló de su bolsillo, cosa que vió Morgan, quien camino hacia ahí y comenzó a jugar con el hasta llegar a desarmarlo. Los robots empezaron a descontrolarse, y para cuando Dopinder se dió cuenta fue demasiado tarde.
Deborahbot sacaba chispas y empezó a correr por todo el lugar, Eric soltó a Kira de sus brazos e hizo lo mismo; la pequeña comenzó a llorar provocando una tormenta dentro de la guardería, Dopinder tuvo que dejar el rescate de Miles en manos de Ellie y así tratar de calmar a la heredera de Wakanda, pero sus intentos fracasaron y toda la guardería se seguía empapando por la lluvia.
Nora y Ashur lloraban dentro de la cuna donde estaban gracias al caos, el bebé con nombre de estornudo se asustó tanto que sus poderes se descontrolaron y empezó a teletransportarse, en los sillones, sobre las repisas, en el suelo, en la pecera, dentro de la caja de juguetes y encima de algunos de los niños que también estaban asustados por la tormenta.
Laura no pudo con la presión de la situación y por más que lo intentó, no pudo evitar tener un ataque de ira; tomo los peluches que estaban cerca y comenzó a destrozarlos, incluso al señor Migins, el peluche que la dulce Keila había tenido abrazado desde que llego y que la había mantenido tranquila apesar de lo que estaba pasando, la alienígena también empezó a llorar y sin querer activo un nuevo poder, la manipulación emocional sin tacto, lo que hizo que niños como Meredith o Alec que aún se conservaban la calma empezaran a alterarse también.
Billy fue el que se vió más afectado por los poderes de Keila, haciendo que no pudiera controlar su magia, lo que hizo que varios objetos del lugar empezaran a levitar sin control, además de crear una barrera a su alrededor que le impidió a su hermano acercarse para ayudarlo.
Los super hermanos, habían estado ligeramente calmados aún bajo la lluvia, pero Martha había comenzado a elevarse; al parecer sus poderes habían despertado ya que no flotaba de la misma manera que los objetos que se vieron afectados por los poderes de Billy, Robin agarró su pie para tratar de que no siguiera volando pero no pudo hacer nada, así que ahora los dos estaban volando por todo el lugar sin ningún tipo de control.
Frigga y Tommy eran los únicos que quedaban en calma dentro de todo el caos, estaban refugiados bajo una manta que había en el sillón, pero el velocista jalo un poco de esta por su vanidad, dejando a la princesa Asgardina expuesta a la lluvia, esto la molestó mucho, por lo que con un hechizo hizo que el cabello blanco del contrario se transformara en serpientes, Tommy se dió cuenta y empezó a correr desesperado.
Todo era caos, Dopinder no sabía que hacer, tenía que resolver pronto el gran desastre que se habia formado, pero no sabía si quiera por donde empezar, temía que alguno de los niños se hiciera daño por su culpa, temía decepcionar a sus amigos que le habían confiado lo más importante de sus vidas. Abrumado por todo solo pudo sentarse en el centro del lugar y abrazar sus piernas en busca de un poco de consuelo y claridad; puso su cabeza sobre sus rodillas mirando hacia un lado y vió a Keila, la primera niña que había recibido, la vio llorar desconsoladamente, eso hizo que sintiera como si le apretaran el corazón, no podía dejarla así, no podía dejar a ninguno de los niños así, tenía que ser fuerte por ellos. Fue hacia la alienígena y la cargó en sus brazos.
—Tranquila, todo va a estar bien, yo mismo me encargaré de arreglar al señor Migins cuando esto termine —la niña empezaba a calmarse, entonces el mayor tomó una de sus manos, ya que se le ocurrió que con esto podría transmitirle sus propias emociones—, yo me haré cargo de ustedes y les prometo que nunca más les pasará nada malo mientras estén conmigo, ¿Qué dices pequeña, me ayudas? —preguntó con una sonrisa.
—Shi —dijo moviendo su cabecita.
Dopinder se acerco a Keila hacia Kira, quien seguia llorando en el suelo, la mayor la toco con sus manitos, la lluvia había disminuido, pero aún seguian cayendo algunas gotas, el taxista dejo a Keila en el suelo y se puso de cuclillas, sacó una curita de colores para colocarla en el pequeño raspón que Kira se había hecho, la princesa wakandiana la miró y sonrió, haciendo que la lluvia cesara por completo.
—Ahora vengo por ustedes.
El mayor se paró rápido y fue hacia donde Martha estaba volando con Robin colgando de su pie, los tomó a ambos de los brazos y los regreso a tierra, pero la infante volvia a volar, Dopinder no sabía como controlarla hasta que vió un andador, si bien Martha ya era muy grande para eso, serviría de manera temporal hasta que resuelva todo el desastre, para asegurarse puso un par de juguetes encima del andador para agregarles peso.
Ahora fue con Ashur, quien había dejado de teletransportarse pero había quedado encima de un mueble muy alto para él, cuando lo bajo pudo notar que aún se veía intranquilo, así que lo llevo donde estaban Keila y Kira para que jugaran con él.
Dopinder vió que Nora, Meredith y Laura habían logrado calmarse por su parte cuando la lluvia paro, la última fue hacia donde estaba su primo Alec para ver si estaba bien, así que podía estar tranquilo por ellos por el momento.
Su siguiente parada fue Frigga, él había visto como la niña de tan solo tres años había lanzado el hechizo a uno de los mellizos Maximoff para que su cabello se volviera un nido de serpientes.
—Frigga, ¿Puedes deshacer el hechizo?
—No —contestó tajante.
—Por favor, miralo, esta sufriendo —señaló al niño corriendo por todo el lugar.
—No.
—Si lo haces te daré más helado como postre.
La niña pareció pensarlo y después de unos segundos movió su mano para volver el cabello de Tommy a la normalidad; Dopinder solo podía pensar que Frigga tenía un nivel de maldad exagerado para alguien de su tamaño. Cuando el velocista se dio cuenta que su cabello volvió a la normalidad paro en seco y miró en dirección hacia donde estaba el mayor.
—¿Todavía soy hermoso? —preguntó con lágrimas en sus ojos, el más alto tuvo que evitar reír ante eso.
—Después hablaremos de tus prioridades.
Ambos voltearon a ver Billy, ya no tenía la barrera alrededor suyo pero el niño se veía realmente afectado, estaba arrodillado sobre el suelo mientras se abrazaba así mismo; el mayor estaba apunto de acercarse pero Tommy lo detuvo y le dijo que él se encargaría, que ya sabía que hacer; al parecer estas situaciones no eran nuevas para ellos. Dopinder decidió confiar e ir por otro niño, lo único que logró escuchar es como Billy decía "La escuché, escuché a mamá", definitivamente es algo que le diría a Wanda y Visión cuando vinieran por sus hijos.
Cuando se acercó a Morgan, se veía asustada, escondiendo el control que controlaba a los robots detrás de su espalda.
—Lo siento —dijo bajando su cabecita—, no quelia . . .—comenzó a sollozar.
—Tranquila, no estás en problemas —acarició su cabeza para reconfortarla—dame el control, por favor.
La niña le entregó el control, este estaba en pedazos, como pudo trató de volver a armarlo pero no quedaba igual a como estaba en el inicio, miró a los robots y estos parecían tranquilos así que intentó solo llamarlos.
—Deborahbot, Eric, vengan —pidió en voz alta para llamar su atención.
Sorprendentemente estos le hicieron caso y caminaron hasta él, ambos tenían su visor pintado con una cara feliz, decidió no prestarle atención a eso.
—Deborahbot, trae al bebé —pidió refiriéndose a Miles.
—Okay —respondió y sin moverse de su sitio extendió sus brazos agarrando a un niño para luego extenderselo a Dopinder quien no sabía si reír o llorar.
—Me refería al que esta colgado en el techo en peligro de caerse, no al que se teletransporta y tiene nombre de estornudo.
—Usted no especificó —dijo y dejó a Ashur en la cuna donde estaba Nora, quien volvía a molestarlo con su sonaja y esta vez agarró a Miles.
Si bien tenía razón, creía que por tener tecnología avanzada sabría diferenciar ese tipo de cosas, supuso que ahora estaban defectuosos, pensó en que si al final hacían bien su trabajo no sería necesario pedir su reparación. Ellie se había acercado cuando el robot tomó a su hermano, el taxista le indicó que se lo diera a su hermana y luego les dijo que empezaran a limpiar todo el lugar. Ya todo estaba controlado.
Dopinder se acercó a Keila, y como había prometido, comenzó a arreglar su peluche, cuando terminó cargó a la niña y se lo entregó, esto la puso muy feliz, abrazó al taxista haciendo que su corazón se sintiera calido y lleno de cariño como nunca antes lo había sentido.
—Te dije que arreglaria al señor Migins y que nunca permitiría que les volviera a pasar nada malo —sonrió aún con la niña en brazos.
—Glacias.
—Tal vez no soy tan malo en esto como pensaba —se dijo a si mismo—, hasta creo que soy muy bueno —hizo una pose heroica.
—Señor Dopinder, mi hermano se hizo popo —comunicó Ellie, quien cargaba a su hermano un poco lejos de ella.
Su talento para cuidar a estos niños aún estaba por verse.
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Dos años para escribir este capítulo . . .
Espero que les haya gustado 🤗
A partir de aquí ya serán capitulos cortos, como los de "IntesaDeadpool", que por cierto, también la estaré actualizando estos días
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Bueno, eso es todo por ahora, nos leemos en la próxima 😉
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