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A veces dañamos a quien amamos

Empezaron a jugar un juego de retos, Hoseok lo propuso con la secreta intención de quizá lograr besar esos labios carnosos de Jimin, y quien sabe, tal vez convencerlo de seguirle, por lo menos unos besos más o tal vez un rato en el infame armario.

Para sorpresa de Hoseok el que perdió y recibiría el reto está vez es el niño de la mirada intensa, Tae miró con pánico alrededor, Jimin tapó su boca con ambas manos tratando de callar su sorpresa, y sintió algo de culpa, trato de detener a Tae pero los demás adolescentes ya lo habían colocado frente a Hoseok, uno de ellos incluso pinto los labios del mayor.

Tae sentía muchos nervios quería salir corriendo pero no había como hacerlo, los chicos los rodeaban y cantaban cánticos burlones incitando el beso, Jimin apretó la manita de Cookie quien no podía dejar de mirar con cierto morbo inocente lo que estaba pasando.

Hoseok pensó: - que más da, si primero tengo que besar a este chiquillo para luego besar al otro lo haré, igual también es bonito.

Después de un par de minutos de dudas acercaron lentamente sus bocas y sucedió el contacto de sus labios, uno de los amigos de Hoseok los tomó del cuello impidiendo que pudieran separarse tan pronto y prolongó el beso, Tae se sintió raro, los labios de Hoseok eran suaves, y sin pensarlo su lengua empezó a hacerse camino, ya antes había besado a Jimin en los labios pero siempre había sido sólo un toque tímido, un roce de sus labios, Jimin no permitía más que eso y dejarle tomar su mano, hacia más de un año que no le permitía visitarlo en sus celos ni abrazarlo por más de un segundo o muy apretado, esto era más que un toque, los labios de Hoseok se apretaban a los suyos y permitió la entrada fugaz de la lengua de Tae, al separarse ambos actuaron como si fuera un castigo que les quemaba las entrañas.

En Tae había sido un fuerte huracán que movió todos sus sentimientos, en Hoseok había sido un beso más, le había sorprendido un poco sentir la lengua del chico pero supuso que siendo un Omega sólo estaba reaccionando a su presencia de alpha, después de todo era obvio que ese niño estaba enamorado del otro y que aún no aceptaba que siendo dos Omegas no podrían estar juntos o al menos les traería muchos problemas, como el no poder protegerse de los alphas oportunistas, no poder vincularse por medio de la marca y por ende reclamar al otro como suyo exponiéndose a que cualquier Alpha que captará el celo de alguno de ellos y lo arrancará de los brazos de su amante y lo hiciera suyo a la fuerza quizá hasta marcandolo y llevarselo lejos, todo ese tipo de situaciones que se propiciarían por no poder atenuar por medio del vínculo las feromonas de un Omega sin mencionar que procrear estaría totalmente descartado.

Al incorporarse Tae aún con la boca y su alrededor cubierto de labial rojo, Jimin lo jaló de la mano y salieron de ahí, caminaron los tres en silencio un par de calles y Jimin se detuvo abruptamente - perdóname Tae, es mi culpa, por favor, no te enojes conmigo- dijo Jimin mientras cubría con sus manos su cara y sollozaba.

Tae lo abrazo enternecido y le dijo - haría cualquier cosa para evitar tu sufrimiento Jiminie - y comenzaron a llorar, Jimin se sentía culpable por qué de nuevo había arrastrado a Tae a una situación donde saliera lastimado por su necedad y lo peor es que seguiría así y seguiría lastimandolo si Tae seguía a su lado protegiéndolo, no podía ser tan egoísta, amaba a Tae como su hermano y no quería volverlo a dañar, ¿qué clase de persona arrastra a quien ama a ser lastimado por su culpa?

Tenía que alejarse de Tae un tiempo aunque le doliera, Cookie tomó de la mano a Tae  y a Jimin y siguieron caminando en silencio.

Esa noche Tae no se quedó con Jimin, pidió permiso en casa de Cookie para pasar la noche, jugaron hasta tarde y durmieron en la misma cama.

Jimin no fue a la escuela por unos días, tenía que poner espacio entre Tae y él para resolver lo que sentía y como ponerle un alto a este comportamiento antes de que sea tarde, Tae no insistió pensando que seguramente era otro celo, en su mente no dejaba de recrear lo sucedido y no dejaba de pensar en Hoseok, tal vez en verdad estaba confundido, o su amor por Jimin no era tan fuerte como el creía - eso no puede ser... - está seguro de lo que siente por Jimin pero también está conciente que no es del todo correspondido y que de quedarse a su lado siempre estará compitiendo con el fantasma perfecto de ese abusivo alpha que lo marcó y lo abandonó, han pasado años desde entonces en que ni siquiera le ha llamado, pero Jimin es tan necio que no quiere aceptarlo y sigue repitiendo como perico esa tontería del destino - ¿por qué siento esto? ¿por qué no puedo dejar de pensar en Hoseok? fue sólo un reto tonto y claro que su intención era besar a mi Jimin, entonces ¿por qué no puedo estar enojado con él? ¿Acaso me gusta? ¿O en verdad soy un Omega y estoy reaccionando así por qué el es un Alpha?- se preguntaba Tae tratando de desenredar sus sentimientos.

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