Sentidos

JongIn

Salí del Shock.

Su sangre me estaba volviendo loco, me ponía ansioso. No sé cómo es que no me pude controlar con KyungSoo.

Primero, cuando estaba lavando, viene tan... no sé, deseable. 

Tal vez el del problema era yo, hace mucho que no me acuesto con alguien y ya se siente la desesperación.

Me le quedé viendo un buen de tiempo hasta que me doy cuenta que dejé de hacer los deberes y observo su mirada.

- ¿Pasa algo? – Me pregunta.

- No nada – Le respondo volteándome tratando de reprimir los pensamientos que llegan a mí después de lo ocurrido, sinceramente estos instintos no me dejan en paz.

Maldita seas Krystal.

Algo que si se ha vuelto un hábito para mí es salir por las noches cuando JongDae sale a hacer guardia con KyungSoo, ya que me deja esos ratos libres.

¿Qué es lo que hago?

Cazo.

Todo este tiempo como vampiro me ha hecho identificar ciertas necesidades, cómo la necesidad de sangre (No como la que me da JongDae, sino salida directamente de un individuo) y a su vez, la necesidad sexual.

Ohhh, vaya que los vampiros necesitan muy seguido acostarse con alguien, es desesperante porque la Sangre da un subidón de adrenalina casi como si te estuvieras drogando.

Así que cuando salgo, me pongo mis mejores atuendos - Claro, siempre llevo mi arma- y busco a algún chico o chica que quiera bailar conmigo en algún bar, y los convenzo de llevarlos a la cama.

También me di cuenta cuando dejar a la víctima viva, y cuando no.

Con esto último me di cuenta que Krystal realmente planeó hacerme unos de los suyos.

Una de esas asquerosas criaturas.

Me doy asco, cada que necesito sangre... Cada que mato a alguien para poder alimentarme. Pero me alegra que sean personas de mala muerte, no podría matar a un inocente, JAMÁS.

Por eso es que estoy tan sorprendido de que KyungSoo me haya llevado a mi límite.

Cuando se cortó, fue la gota que derramó el vaso... No lo pensé.

Mi vampiro actuó dejando a mi razón de lado, lo primero que hice fue tomar su mano y probar la sangre que brotaba de ella.

Deliciosa.

Sabía tan dulce, era casi exigente la necesidad de obtener una probada más.

Mis pupilas debieron cambiar de color y dilatarse, porque con sola esa probada me dio un subidón de adrenalina que me hizo tambalearme.

Sentí como KyungSoo se tensaba en sí mismo.

Me acerqué a su cuello porque mi vampiro estaba deseando mucho más que esa cortada.

- Jong... JongIn. ¿Qué estás haciendo? – Me dijo.

- Shhh... - Le dije con lo único que se me quedaba de voz, pues la garganta se estaba cerrando... supongo por la ansiedad. – No hagas ruido.

Y se puso muy tembloroso sobre todo cuando empecé a pasar mi lengua por su blanquecino cuello y a sujetarlo más fuerte de la cintura; ya no estaba razonando, sólo había una voz en mi cabeza que decía: "Bebe, Sáciate, Ya está aquí". Así que continué con lo que estaba haciendo, deseando cada vez más y pasé mi lengua por su clavícula que sabía condenadamente deliciosa.

Escuché que gemía y ese sonido sólo me puso más hambriento; lo definiría como el sonido de la inocencia corrompida... él... tan inocente y a la vez tan exigente... me volvía loco, y por mi cabeza rondaba sólo llevármelo a la cama y beber de él.

Después de estar un buen tiempo sobre su cuello, clavículas y hombros, lo besé.

No me llevaba el ritmo, así que marqué el propio. Mordí y lamí hasta quedar satisfecho, pero mi razón se negaba a cometer una estupidez.

Lo deseaba, lo deseaba intensamente pero no podía... no me lo perdonaría nunca el corromperlo así que con la última fuerza de voluntad que me quedaba lo solté y me dirigí a mi habitación ignorando que lo dejé en la cocina.

El muchacho tendría muchas preguntas.

No soy quién para respondérselas. 

>>También te contaré un dulce sueño, la próxima noche...  

OIGAAAAAAAAN

¡SUS PATRONES VUELVEN!

Disfruten mucho de la Actu y de los teasers porque las teorías me están volviendo locaaaaaaaa. <3 

Hasta la próxima semana. :D