— Uh... —Shōto reparte besos en la mejilla de Katsuki al mismo tiempo que acaricia su miembro con rapidez haciendo suspirar y jadear al rubio. Ambos están encerrados en el cubículo del baño de hombres con la excitación al tope. Saber que en cualquier momento alguien puede llegar a verlos los pone más calientes.— Vamos, no te detengas... —pone las manos contra la pared y alza el culo, dándole una excelente vista a su novio.— Vamos... Ya llevamos más de medio año sin hacerlo.

— Kat, ¿Estás seguro? —reparte besos en su nuca posando su derecha justo en donde las nalgas del rubio se juntan, sobando el agujero que tanto le enloquece. Katsuki asiente con la cabeza exhalando bastante, voltea a verle y le enciende más. Adentra el dedo de en medio, deleitándose por lo estrecho que es. Aún después de tanto tiempo, sigue estando bastante apretado.— Kat, relajate... —se agacha quedando justo delante de sus posaderas para después empezar a lamer aquel hoyo, rodeandola con su lengua y después ingresándola.

Katsuki siente su cuerpo vibrar de mero placer, siente que se sacude por dentro, que su pene vibra de profundo placer, suda sin poder evitarlo. Vuelve a gemir al sentir la ávida lengua de Shōto ingresar en su trasero y sus manos apretujar sus glúteos sin descaro alguno. Echa la cabeza hacia atrás y abre un poco más las piernas sintiendo un poco difícil hacerlo debido a que no se ha quitado el pantalón de la escuela. Su pene chorrea de su propia semilla aquel preseminal que indica que pronto llegará al orgasmo. Necesita que su novio se apresure. Lo necesita.

— Shōto... —jadea su nombre volteándolo a ver. El nombrado alza la mirada dejando de lado su labor.— Fóllame... Por favor. —vuelve a dejar caer la cabeza cuando el de ojos hetero le da una última lamida a su orificio. Vuelve a voltear a verlo.

— No tengo condones, Kat, no podemos... —Shōto se la sacude ante la atenta mirada del rubio. Katsuki pasa saliva sin dejar de ver la masculinidad de su novio, aquel pedazo de carne que amaba tanto sentir en su boca, en sus manos y en su trasero.

— Pu-puedo tomar la pastilla. —desvía la mirada bastante ruborizado. Deja de apoyarse contra la pared y da media vuelta para luego abrazar el cuello de su novio bastante acalorado.— Fóllame, por favor.

— Puede que no funcione y tengamos... —se ve interrumpido cuando la diestra de Katsuki baja y acaricia su pene, sobando la punta con el pulgar. Cierra los ojos dejándose llevar.— Ni siquiera deberíamos estar aquí haciendo esto...

— Antes lo hacíamos, ¿Recuerdas? —murmura Katsuki para después agacharse lentamente ante la atenta mirada del de ojos hetero. Pasa saliva. Sabe qué hará su querido novio una vez hincado delante de él.

— Lo recuerdo... —susurra. Katsuki hace circulos con su izquierda detrás de sus testículos haciéndolo jadear. Le ve besar la glande de su pene bastante sonriente.

— ¿Te acuerdas cuando lo hicimos detrás de las gradas...? —esboza una sonrisa compartiendo la misma que la de su novio. Cómo olvidar aquella vez donde casi se meten en problemas. Aún no entendía como nadie los había atrapado, como nadie había visto a Katsuki hincado chupandole el pene y Shōto impulsando sus caderas contra su rostro.

— Lo recuerdo bastante bien. —ve como le resplandecen los ojos. Le da una larga lamida desde los testículos hasta la glande haciéndolo jadear. Se ha pasado por ella bastante lento y suda por la excitación.

— ¿Y cuando lo hicimos en la sala de profesores cuando querían regañarnos por una dizque pelea que teníamos? —Shōto vuelve a asentir. Aizawa, quien los había llevado allá a hablar sobre sus conductas, tuvo que salir porque Toshinori, All Might, lo había llamado para tratar algo urgente. En esos diez minutos aprovecharon para poner a Katsuki contra el escritorio abierto de piernas y a Shōto hundiéndose en él con rapidez.

— Kat, deja de calentarme o te follo a cuatro patas. —Katsuki sonríe más. Atrapa la glande con sus labios y da una delicada chupada, tragando el preseminal que sale. Uh... Tan delicado.

— ¿Y la vez cuando me la chupaste en el cuarto del pelos de mierda? —Katsuki se acomoda el cabello detrás de la oreja para proceder a meterse el pene en su boca sin darle con los dientes, rozando su nariz contra la pelvis del de ojos hetero. Shōto suspira.

— Sí, lo recuerdo... Habíamos perdido la mascota de Kōda y nos mandó a buscarla, Kirishima no estaba y dijiste que mejor jugaramos a los conejos, decidí hacerlo debido a que tú siempre lo haces. —Katsuki hace para atrás y para adelante su cabeza viendo bastante atento a Shōto. El de cabellos bicolor cierra los ojos sintiendo el orgasmo cerca.— Después bajamos a decirle a Kōda que no lo habíamos encontrado y él ya tenía a su conejo. —Katsuki se la saca de la boca.

— ¿Y esa otra vez en el campo de prácticas? —le masturba con determinación mirándole con una sonrisa ladina. Shōto asiente con la cabeza sintiendo que la otra en cualquier momento liberaría su esencia.

— Habíamos peleado porque el idiota de Kirishima se te había acercado bastante. —su voz suena más grave. Está a punto. Katsuki vuelve a metersela a la boca chupando más rápido.— Esperé hasta que todos se fueran a dormir y te llevé ahí para aclarar las cosas. Discutimos. Te lo hice con fuerza, fuiste bastante ruidoso, lo disfruté al límite. Fue hace un año y tres meses.

— ¡Mnf! —aprieta los ojos y se la saca de la boca. Se ha venido dentro y traga sus fluidos. Lame lo sobrante volviendo a erectar el pene de Shōto.— Eres un idiota, debes de avisar.

— Lo siento. —declara apenado Shōto.— Debemos de irnos, se nos hará tarde.

— No podemos ir con un empalme de caballo. —Katsuki besa sus labios, callandolo. Da medio giro, apoya de nuevo sus manos contra la pared alzando el culo, voltea a verle.— Por favor, fóllame. —su diestra se dirige a su trasero dejándole ver su agujero.

— Kat... Te haré mío otra vez. —Katsuki sonríe por ello. Las manos de Shōto toman posesión de su trasero, estrujándolo. El rubio jadea por ello. Siente el pene del de ojos heteros restregarse contra él haciéndolo suspirar para luego ingresar en su interior con bestialidad haciéndolo morderse el labio para evitar gritar por ello.

Se lo hace con fuerza y rapidez que le nubla la vista. Ama cuando su novio pierde el control y le folla como un animal, hundiendose en su interior como un completo loco. Su cuerpo se sacude de la excitación y su pene chorrea su esencia. La cabeza le da vueltas. Shōto muerde su hombro haciéndolo gemir más. Incluso siente como sus testículos chocan contra él haciendo un delicioso sonido que le motiva a seguir abriéndose para él.

Shōto toma la pierna derecha de Katsuki y la eleva, sosteniendola con su antebrazo, apoyándola para poder hundirse mejor en el interior de su rubio haciéndolo llegar a las estrellas y a las demás galaxias. Su cuerpo arde y vuelve a girar el rostro encontrando los labios de su novio que se restriegan contra los suyos con bestialidad. Ingresa su lengua a su cavidad bucal, rodeando la propia robándole varios jadeos y gemidos. Reza en el interior que nadie los atrape porque justamente está siendo bastante ruidoso.

— No puedo más... —Katsuki rompe el beso y deja caer su cabeza para adelante bastante abochornado. Shōto deja la pierna derecha del rubio oara poder tomar mejor el culo de su novio atrayendolo a su cuerpo cada que él impulsa sus caderad hacia adelante haciéndolo más profundo, jodiéndole el interior. Katsuki lagrimea y no puede evitar babear por ello, su cuerpo perlado por el sudor delata la excitación que recibe.— Shōto... Adentro, córrete adentro... —el de ojos hetero niega con la cabeza. No quería arriesgarse. Se sale de una haciendo jadear al rubio y se restriega contra su cuerpo. Katsuki gira el rostro para verle haciendo un chistoso puchero.— Por favor... Hazlo adentro. —sus mejillas sonrojadas y aquel brillo intenso en sus ojos lo incita a volver a hundirse en él haciéndolo gritar. Esta vez no ha podido evitarlo. La gloria la encuentra cada que Shōto pasea su pene contra su punto dulce, restregándolo con insistencia. Adora aquel sentimiento tan único, tan excitante, tan perfecto.

Las manos de Shōto aprietan con mayor fuerza, no puede evitar hundir sus uñas en el trasero del rubio, lastimándolo. Pero le gusta. Vuelve impulsarse, pegando su pecho contra la espalda del rubio. Muerde su hombro, nuca y espalda repetidas veces marcando la piel ajena. Todo aquello era suyo. Enteramente suyo. En ninguna otra realidad podría ser de alguien más. Y se impulsa con más bestialidad, dejando liberar su esencia hasta lo más profundo robándole el aire a Katsuki quien ha gemido bastante alto. Él lo logra un poco después contrayendo sus paredes anales apretando deliciosamente el pene de Shōto.

— Ummm... —Katsuki gira el rostro bastante satisfecho. Le sonríe a su novio.— Buen chico, buen chico. —Shōto no puede evitar reír. Sale de su interior con lentitud, ve su semen escurrirse por las firmes nalgas de su novio descender y perderse entre sus piernas.

— Lo siento, me pasé. —se disculpa de nuevo. Katsuki da media vuelta y le abraza del cuello. Reparte besos en su mejilla y labios bastante cariñoso.

— Te amo, Todoidiota. —ronronea contra su pecho bastante sonriente.— Um... Tal parece que necesitamos hacerlo más a menudo. Shōto-kun estaba bastante entusiasmado cuando me vió. —las mejillas del de ojos hetero se colorean de un intenso rojo.

— Es que... Bueno... —Katsuki le interrumpe con otro beso.— También te amo.

***
Capítulo medio largo con porno barato :^

Lo siento, ando muy sentimental y los recuerdos me invaden. ¡Espero que les haya gustado! XD

Por cierto, cada capítulo es un mes para cada bebé:^ así que sí, llevaban medio año sin hacerlo.