Trunks y Giin se la pasaron todo el día en la cama, únicamente hablaban de cualquier tema que se les cruzara por la cabeza: el clima, sus familias, anécdotas divertidas, el refugio, hasta que el tema del viaje salió a la luz.

—Trunks, ¿Que pasará cuando vayamos al pasado? —preguntó Giin mientras jugaba con el cabello de Trunks.

—No lo sé —respondió acomodándose sobre el pecho de la muchacha— se supone que llegaremos a la época dónde el señor Goku volvió a la tierra luego de la batalla en el planeta Namek.

—¿Cuándo Freezer y su padre vinieron a la tierra?

—Exactamente

Los dos comenzaron a planear todo lo que harían una vez que vayan al pasado: Llegarían y se esconderían, verían a Goku derrotar a Freezer, su padre y sus hombres, hablarían con él, le advertitían del futuro catastrófico y le entregarían la medicina.

Entonces una nueva preocupación se apoderó de ambos, ¿Que pasaría si los demás se enteraran de Giin también era un androide? Trunks le preguntó si tenía pensado decirles, pero ella aún no se había decidido.

Por un lado, si no les decía, correría el riesgo de levantar sospechas, ¿Cómo es que ella podía convertirse en super saiyajin si ni Goku ni Vegeta eran sus padres?, Además de que existiría la duda de cómo fue que conoció a Gohan.

Pero, por el otro lado, si les decía que ella también era un androide, la hermana de los dos enemigos que aparecerían tres años en el futuro específicamente, se arriesgaba a qué los demás desconfiaran de ella y, en el peor de los casos, trataran de destruirla.

Sea como sea, ella terminaría en medio de un mar de dudas entre todos los guerreros del pasado, aquello la inquietaba demasiado.

—Descuida —Trunks al ver el nerviosismo en su pareja, la abrazó y le dió un rápido beso— ya veremos qué hacer.

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Terminada la mañana, ambos decidieron levantarse de la cama, partirían al medio día, así que se vistieron, comieron y fueron a preparar lo que necesitarían para el viaje.

En un momento, Giin salió al patio donde se encontraba la máquina del tiempo, la miró por unos instantes mientras recordaba todo el infierno por el que habían pasado: Las vidas inocentes perdidas, las ciudades destruidas, la muerte de Gohan, su ojo y su oído.

Todo eso los había conducido hasta este momento, ella suspiró por un momento y una vez que su mente estuvo tranquila, escribió en un costado de la máquina la palabra HOPE!!

—¿Esperanza? —preguntó Trunks sorprendiéndola y abrazándola por la cintura. Ella sonrió.

—Así es, esa es la palabra que resume nuestra misión —tomó sus manos— este viaje es nuestra ultima esperanza para salvar a la tierra, esperanza es lo que Gohan nos dejó antes de morir, esperanza es lo que no debemos perder mientras estemos vivos...

—Y esperanza es lo que le traeremos a la tierra —concluyó él— lo lograremos.

—Trunks, cuando todo esto acabe... me casaré contigo —le dijo con una sonrisa.

Y el pelivioleta no pudo ser más feliz con esas palabras.

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Todo estaba listo, la máquina se había cargado en su totalidad, las capsulas estaban en orden y los muchachos ya se encontraban listos para irse.

Era hora

—Giin, este es un regalo para tu viaje —Bulma le extendió la pañoleta roja que Gohan le había entregado años atrás— esta perteneció al padre de Goku y tu hermano quería que tú la usaras.

Giin se sorprendió al ver aquella prenda, con sus manos temblorosas tomó la pañoleta y se la colocó en su frente, tal y como lo hizo Bardock.

—Chicos cuidense mucho.

—Lo haremos Bulma y gracias —le dijo Giin abrazándola.

Bulma sacó algo de su bolsillo y se dirigió a Trunks.

—Esta es la medicina para curar el corazón, dásela a Goku y no te vayas a equivocar —se dirigió a ambos— no se esfuercen demasiado.

—Si —Trunks tomó la medicina y la guardó en uno de sus bolsillos
— mamá cuídate mucho por favor.

—Bulma por favor ten cuidado y cuida a mi madre por favor —ella le pidió tomando sus manos.

—Lo haré Giin, descuida —ambas se dieron un fuerte abrazo.

Trunks y Giin subieron a la máquina del tiempo, cerraron la compuerta y esta comenzó a elevarse.

—Ya nos vamos —él levantó una de sus manos despidiéndose por ultima vez de su madre.

Y, en ese momento, la máquina desapareció en el cielo, Bulma únicamente miró la pequeña nube de humo que dejó y suspiró.

—Lo lograrán —dijo finalmente.

Y así fue como Trunks y Giin viajaron en la máquina del tiempo y llegarán al pasado, en ese lugar les esperarán nuevas batallas.

Y nuevos desafíos que no se imaginarían.