Cap. 17 La oscuridad predomina
Narra Calia.
Era una escena horrible, nuestros guardias no serían suficientes para vencerlos, si o si debíamos tener la flor.
Darcio: ¡Calia escóndete en tu cuarto! ¡rápido!
Calia: ¡¿y ustedes?!
Darcio: ¡estaremos bien! ¡solo vete!
No tuve otra más que obedecerlo, quería que Marc estuviera aquí, me sentiría más protegida con él, mientras corría hacia mi cuarto lagrimas caían de mis ojos.
Narra Marc.
Llegamos, lo logramos, pero a lo que llegamos era a un matadero, los poseídos estaban quemando las casas, mataban a cualquiera que se les cruzaba, cadáveres cortados en el piso, todo era un caos.
Marc: ¡tenemos que pelear!
Lucian: tengo que ir por mi hermana y mis padres.
Marc: yo iré, tu defiende a la gente con los demás guardias.
Lucian: ah ok.
Saqué mis dos espadas y me fui corriendo hacia el castillo, aproveché de matar a varios de los guerreros poseídos.
Entonces escuche un ruido, voltee y vi a un niño tigre que estaba contra una pared y a uno de esos monstruos frente a él.
Tigre niño: no (llorando) por favor, no. Piedad.
Guerrero poseído: jejejeje, jajajajaja, no hay piedad... ¡Muere! (levanta su espada)
Tigre niño: ¡nooo!
El poseído no le hizo nada porque yo lo decapite primero y su cadáver cayó justo frente al niño.
Marc: no lo toques.
Tigre niño: eres el humano.
Marc: ven aquí niño.
Lo cargue en brazos para llevarlo a un lugar seguro, le cubrí los ojos para que no vea la masacre, incluso los malakits estaban poseídos, estábamos muy en desventaja.
Lucian: ¡Marc! ¡¿y ese niño?!
Marc: ponlo a salvo (le doy al niño) yo asegurare la flor y luego iré al castillo.
Lucian: ok.
Vi como Lucian se llevó al niño y lo dejo con otra pareja de antropomorfos que estaban poniéndose a salvo en una gran casa. Pero...
Marc: bien hecho- ¿oh? ¡Lucian detrás de ti!
Lucian: ¿eh?
No volteo a tiempo.
Guerrero poseído: Jajajajaja.
El poseído con su espada le corta la cabeza completa justo frente a mis ojos, su cuerpo ahora sin cabeza cae al piso.
Marc: ¡nooooooo!
Guerrero poseído: jajajajaja ¿oh?
Marc: ¡aahhh! (le corta la cabeza también)
Vi su cuerpo ahí, decapitado como si fuera cualquier cosa, pero no debíaperder tiempo así que fui directo hacia donde estaba mi malakit y vi que aúntenía la flor de cenizas así que la tome con todo y saco en el que estaba, me fui corriendo, vi a mis amigos, pero no tuve ni tiempo de saludarlos porque estaba ocupado en mis cosas, llegue al castillo, entre derribando la puerta muy, apresurado para encontrar a los reyes.
Al fin los encontré justo donde crei, en la sala principal se les veía muy preocupados.
Marc: ¡¡majestades!!
Ellos me vieron sorprendidos por mi aparición repentina.
Darcio: ¡Marc! ¡si llegaron! ¿Qué tienes ahí?
Marc: la solución. (le muestro la flor)
Darcio: (impactado) es real. Bien hecho ahora con esto podremos ganar.
Eira: que venga Lucian, no hay nadie más digno que él.
Yo baje la mirada.
Darcio: ¿Qué sucede?
Marc: majestades, debo decirles que... Lucian... murió.
Los dos: ¡¿QUEEEEEEE?!
Eira: ¡¿Qué hiciste maldito?!
Marc: ¿Qué?
Eira: seguro lo mataste para quedarte con el poder tu solo.
Darcio: ¡cálmate! ¡deja que se explique! Dinos ¿Qué paso?
Marc: él estaba ayudando a un niño a ponerse a salvo y una de esas cosas le apareció por detrás y... le corto la cabeza.
Eira: ¡él no es tan despistado! ¡seguro tú lo mataste!
Entonces Darcio sujeta a su esposa y la empuja haciéndola caer al piso.
Eira: ¿Qué acabas de hacer?
Darcio: ya me harté de tus regaños, no tenemos tiempo para esto, nuestra gente muere y tú lo estas culpando de algo que no hizo.
Ella lo mira sin decir nada muy molesta.
Darcio: ya deja de molestarnos y ayuda en algo.
Ahora el me mira a mí.
Darcio: gracias a ti tenemos la solución.
Marc: ¿y Calia?
Darcio: está en su cuarto.
Marc: iré a verla, debo saber que está a salvo.
Darcio: pero la flor.
Marc: yo la amo majestad, tengo que ver si está bien.
Estaba por irme cuando la reina me detuvo hablando mientras se levantaba del piso.
Eira: ¿Cómo que... la amas?
Marc: oh.
Eira: engatusaste a mi hija, es por eso que es más torpe que antes.
Marc: ¡¡y a usted que le importa!!
Ella se calla.
Marc: solo se la pasa menospreciándola, no la anima a ser mejor, la deprime, la hace sentir que es la peor del mundo cuando en realidad es la persona más maravillosa que he conocido, no pude evitar enamorarme de ella, usted no es más que una vieja amargada que se cree mejor que los demás, incluso más que su propia familia, usted no merece ser llamada reina, ella me ama como yo a ella y si a usted no le gusta ¡¡váyase al demonio!! (Se va)
Eira: ¿tu, sabias de esto?
Darcio: si ¿y qué?
Eira: estúpido ¿Cómo vas a aceptar una relación así? Es abominable.
Darcio: ¡tu cállate! ¡y vete de aquí! Tengo que pensar en que hacer.
Eira: ok (se aleja) piensa en que otras formas nos destruirás.
Corrí buscando el cuarto de Calia, el suelo tembló con más ataques de los malos, al fin llegué al cuarto de ella, no tenía tiempo para tocar así que entre pateando la puerta.
Marc: ¡Calia!
Ella me ve sorprendida por mi aparición.
Calia: ¡Marc!
En cuanto me ve corre hacia a mí, salta encima mío abrazándome con todas sus fuerzas, yo hago lo mismo.
Calia: ¡Marc, te extrañe mucho!
Marc: yo también ¿estas bien?
Calia: si, no te preocupes. ¿y mi hermano?
Marc: (triste) lo siento mucho Calia, pero... murió, no logre salvarlo.
Calia: (lagrimeando) no... no... ¡NOOO! ¡¿Por qué?! ¡¿Qué paso?!
Marc: paso muy rápido, no pude ni reaccionar, le cortaron la cabeza, no logre evitarlo.
Ella seguía llorando, pero la tome de la cara para mirar su cara llena de lágrimas y decirle.
Marc: Calia, mírame (la toma de las mejillas y hace que lo mire directo a los ojos) tienes que ser fuerte, si no ganamos, Lucian y todos los demás habrán muerto por nada. Derrotemos a Lorcan por ellos.
Calia: -snif- (se limpia las lágrimas) .... ok..... ok....
La ayudo a levantarse, empezamos a correr por los pasillos hasta que un temblor nos detuvo, mire por una ventana y vi uno de esos arpones de antes, lo habían disparado a una de las torres del castillo y con eso derribaron la torre entera, me quede impactado por eso.
Calia: ¡vámonos!
Marc: (reacciona) ¡sí!
Seguimos corriendo hasta llegar a la sala de antes pero antes de entrar pudimos ver a varios de esos guerreros poseídos que tenían sujeto al rey Darcio con una espada apuntándole al cuello mientras el mismo Lorcan tenía a la reina Eira.
Calia: ¿Qué hacemos? (susurrando)
Marc: déjame pensar.
En la habitación vimos como Lorcan empezó a hablar.
Lorcan: ¿Dónde está la flor, majestad? (le pregunta a Darcio)
Darcio: como si fuera decírtelo.
Lorcan: agotas mi paciencia alteza, dime donde está la flor o mato a tu reina. (le apunta al cuello con una cuchilla verde)
Eira: Rrrrr....
Lorcan: es simple, dime donde escondiste la flor, dímelo o seguiré masacrando a tu reino.
Eira: díselo, después de todo ya estamos condenados.
Darcio: ¡deja de decir eso! No te lo diré, así que si quieres mátame.
Lorcan: a míno me puedes engañar, alteza.
Lorcan: dímelo ahora y te dejare vivir como uno de mis guerreros.
Darcio: antes muerto que vivir como uno de tus descerebrados esclavos.
El sujeto entonces voltea a ver a la reina y dice.
Lorcan: usted dígame donde está la flor, si fuera tan amable. (se le acerca)
Eira: no lo sé, este inútil la escondió cuando yo me fui.
Lorcan: usted tiene mucho odio ¿no es cierto?
Eira: ¿y como no? Estos días han roto las reglas, subestimado mis decisiones ¡¿Cómo esperas que no esté enojada?!
Lorcan: no, lo que tiene usted es odio hacia cualquiera que no la obedezca, lo contrario a mis guerreros me obedecen a mí, usted odia a cualquiera que no sea de su (pone un dedo en la barbilla de ella) estatus social.
Eira: Rrrrr....
Lorcan: conozco a los de tu tipo querida, camine atreves de las eras, he visto a muchos como tú y nunca terminaron bien, de hecho, acabaron muy mal.
Eira: yo no soy así, quiero lo mejor para el reino y estos no me hacen caso.
Lorcan: (se aleja un poco) ¿y dicen que yo soy el villano? Cuando personas como tu son los verdaderos enemigos. Cuando destruya la flor de cenizas nada me impedirá gobernar este mundo y hacer que todos sean como yo, todos seremos iguales y no habrá desigualdad nunca más.
Darcio: haces que tu plan malévolo suene heroico.
Lorcan: (lo mira) no soy un héroe, ni un villano, majestad. Solo soy alguien que quiere que todos sean como él.
Vuelve a ver a Eira y pone su mano en la cara de ella.
Darcio: ¡no la toques!
Lorcan: aun después de todo lo que te hizo ¿aun la defiendes?
Vuelve a ver a la reina.
Lorcan: tienes un gran esposo y no sabes apreciarlo (aun con la mano en su cara) pero ahora apreciaras algo más.
Con su mano empieza a quemar la cara de Eira.
Eira: ¡AAAAHHHH! (grita de dolor)
Darcio: ¡nooooooo! (trata de soltarse)
Calia que estaba a mi lado no quiso mirar así que volteo a otro lado, cuando termino el cuerpo de la reina cayo a piso con el cráneo ennegrecido como carbón.
Lorcan: (chasquea los dedos) suéltenlo.
Sus poseídos sueltan a Darcio.
Darcio: ¡maldito!
Agarra una espada de los poseídos y ataca a Lorcan, pero este evita que los suyos ataquen.
Darcio: ¡voy a matarte...! (escupe sangre) Agh...
Le habían atravesado el pecho, el que lo hizo fue su esposa que ahora se había levantado como otro de sus poseídos, con el cráneo negro envuelto en fuego verde.
Eira poseída: jejejeje.... Yo te maldigo.
Le atravesó dos veces más su espada en su corazón.
Darcio: n-no... (cae al piso)
Calia: ¡nooooooo!
Todos la ven, yo también salgo de mi escondite y saco mis espadas.
Marc: acabemos con esto. ¡toma! (le doy una de mis espadas a Calia)
Calia: gracias. (se pone en guardia)
Ella había visto a su hermano entrenar así que sabia más o menos lo que había que hacer.
Lorcan: el humano, ¡acaben con el! Eira tu ve por tu hija, Yo buscare la flor. (Se va)
Guerreros poseídos: ¡RRRAaaaaaa...! (van hacia ellos)
Nuestra pelea comenzó, yo me encargue de los poseídos mientras que ella de su madre, fue un poco más difícil con solo una espada, pero me las arregle.
Calia: (apuntando con su espada a la que era su madre) así que enserio haremos esto.
Eira poseída: ¡voy a matarte mocosa! (va hacia ella)
Ella bloquea los ataques de su madre, está a como dé lugar quería matarla, pero Calia se defendía con fuerza, algo de pelea después la Eira poseída de un rápido movimiento le dio una patada Calia haciendo que cayera al piso.
Marc: ¡Calia!
Le grite, después de terminar con los que estaba peleando.
Calia: estoy bien, ve por Lorcan.
Marc: pero...
Calia: ¡ve!
No tuve otra más que hacerle caso, toma una de las espadas que los malos muertos habían tirados así completando mis dos espadas y fui tras él.
........
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