Capítulo 13
-¿En serio estan hablando bien de nosotros?-preguntó Lucy sin terminar de creérselo.
Natsu miró disimuladamente a Juvia. Ella le miró a él, sus miradas se encontraron pero ninguno se apartó.
-Creo que deberíamos hablar-le susurró Natsu al oído a Juvia.
-Esta noche en el puente-susurró la maga de agua.
Fairy Tail montó una gran fiesta para celebrar que ppr fin habían hablado bien de sus compañeros. Todos los miembros del gremio se emborracharon menos Juvia y Natsu que debían estar en plenas condiciones aquella noche.
Natsu y Juvia salieron del gremio cuando todo el mundo estaba tan borracho como para no darse cuenta de su ausencia. Corrieron por las calles de Magnolia en plena noche hasta que, en medio de un puente, Juvia se paró y le preguntó a Natsu:
-¿Qué es lo que siente Natsu-san por Juvia?
-Ni idea-dijo el pelirrosa con total sinceridad.
-Juvia tampoco sabe lo que siente por Natsu-san.
-Pues que bien vamos ¿no?-dijo Natsu con sarcasmo.
-¿Natsu-san cree que a Juvia le gusta esta situación?-preguntó la maga de agua algo dolida.
-No, no creo eso, a mí tampoco me gusta esto-dijo él a la defensiva-¡Joder!-exclamó perdiendo los nervios.
Natsu comenzó a llorar sin saber porqué. Se sentía débil y confundido.
-Tranquilo Natsu-san, todo saldrá bien-dijo la maga mientras abrazaba al DS de fuego.
Natsu correspondió el abrazo y lloró algo más fuerte.
-¿Ves? Por cosas como esta creo que estoy enamorado de ti.
De repente empezó a llover. Sin previo aviso.
-¡Juvia!-gritó Natsu-¿Te ocurre algo?
-Que Juvia cree que también se he enamorado de Natsu-san, pero Juvia no quiere dejar a Gray-sama. Él es el hombre de la vida de Juvia-dijo la maga llorando.
-¿Por qué?-preguntó Natsu algo triste.
-Porque gracias a él Juvia pudo ver la luz del sol-respondió la maga de agua.
Natsu sonrió-Gray te enseñó el sol, o sea a mí, porque si lo piensas bien el sol es una gran bola de fuego, al igual que yo. Y al igual que él da luz y calor y nos protege, yo seré tu luz, te daré calor y te protegeré.
Juvia se acurrucó entre los brazos del chico. No quería separarse de él.
-¿Qué van a hacer Juvia y Natsu-san?-preguntó Juvia algo desesperada.
-Averiguar si esto va a alguna parte-dijo decidido el mago.
-¿Y Lucy-san y Gray-sama?-preguntó la peliazul preocupada.
-No les diremos nada de momento-dijo Natsu.
Juvia asintió conforme.
La lluvia paró por fin y estuvieron cinco minutos abrazos.
-¿Puedo pedirte un favor Juvia?-preguntó Natsu algo nervioso.
-Sí-dijo la maga.
-Dame un beso-susurró el mago.
Juvia se sorprendió y miró a Natsu que la miraba con deseo. La maga acercó sus labios a los de él y le besó tiernamente. Otra vez esa sensación de no querer separarse nunca de él. Natsu la apretó contra su cuerpo para sentirla más. Ella emitió un gemido de sorpresa pero se dejó hacer.
Tras varios minutos la peliazul se separó. La había costado bastante pero debía hacerlo.
-Juvia piensa que Natsu-san y ella deberían ir a un sitio más íntimo para besarse.
Natsu asintió y sonrió. Cogió a Juvia como una princesa y corrió con ella hasta un callejón oscuro para continuar su sesión de besos.
En el gremio nadie echó de menos a Juvia y a Natsu, estaban tan borrachos que no se dieron cuenta de su ausencia.
-¡Ronda de chupitos!-gritó Cana agitando su vaso.
-¡Nos apuntamos!-gritó más de medio gremio.
-¿No tenéis la sensación de que falto algo o alguien?-preguntó Erza.
Todos negaron con la cabeza. Erza estaba borracha, pero su instinto le decía que algo no iba también como parecía. Como no estaba en condiciones de seguir divagando dejó de lado esos pensamientos para más tarde cuando estuviese sobria.
Natsu y Juvia se separaron tras una hora entera de innumerables caricias y besos.
-Juvia cree que Natsu-san y Juvia deberían volver ya al gremio.
-Puede ser, pero no me apetece levantarme más mínimo-dijo Natsu y mordió la oreja de Juvia haciendo que esta soltase un pequeño gemido.
-Natsu-san-susurró-es por nuestro bien.
Natsu suspiró resignado y se levantó.-que conste que lo hago por ti-dijo algo molesto.
Juvia sonrió y le dio un pequeño beso en la mejilla como recompensa.
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