CAPITULO 14

El día siguiente no tardó en llegar, _________ se preparaba para ir al instituto, pero algo la detuvo cuando escucho el sonido del timbre, alguien estaba tocando, bajo las escaleras y abrió, era Jungkook.

- Hola - levanto la mano en forma de saludo, con la linda sonrisa que lo distinguía, ella se preguntaba el porqué su cambio de humor, hace un día lo había visto como si quisiera matarla y ahora era el mismo chico que la atormentaba.

- Hola - respondió de vuelta, el día anterior decidió seguir el consejo que su ángel dijo, "disfrutar sus días en la tierra", saber aquello era como tener la fecha exacta en la que vas a morir y como cualquier persona lo haría, ella también, lo disfrutaría, disfrutaría su tiempo ahí, en la tierra, además este era el último año de instituto, pronto se graduaría

- Bonita puerta - dijo sarcástico.

- Oh lo siento, pasa - lo hizo pasar.
Cerro la puerta y volteo la mirada, él era lindo, pero irritante a la vez cuando se trataba de molestarla.

-Ya lo sé, no te puedes resistir a mis encantos - hablo en un tono burlon, lo que causo una sonrisa ladeada en ________.

- Oh si.....claro. - bromeo.

- Como me ves? - pregunto, dando una vuelta en sus talones, como si fuese un ave.

- Con mis ojos. - rio.

- Que graciosa, me veo atractivo? - volvió a preguntar.

- Claro, sin duda alguna - respondió sarcástica.

- Estas tratando de seducirme? - rieron al unísono.

- Creo que se nos hace tarde. - miró su reloj, era hora de salir hacia el instituto.

Salieron juntos de casa y caminaron a gran paso, pero casi al llegar, el tomo su mano y la llevo por otro camino, quiso resistirse pero no lo logro.

- Cambio de planes, te secuestrare. - dijo él.

- Que? - Aquello la había sorprendido - Suéltame. - exclamo

- Hey tranquila. - se detuvo - Aceptas regalarme este día? - pregunto.

- Ah?

- Lo tomare como un sí, vamos - volvió a retomar su camino.
No sin antes tomar su bolso y cargarlo por ella, llegaron a un estacionamiento y subieron al que parecer era su auto y se pusieron en marcha. ¿Desde cuándo tenia auto? Se preguntó, las pocas veces que lo había visto era sin uno, aquel chico era extraño, pero cada vez que estaba con él se sentía protegida de cierto modo.

- Es tu auto? - se atrevió a preguntar.

- Digamos que sí, es de mi hermano. - dijo simplemente.

- A dónde vamos?

- Haces muchas preguntas, hermosa ángel - respondió - es una sorpresa.

Ángel?, había escuchado bien, acaso el sabia de donde provenía, eso era imposible.

- Ángel? Claro que no - comento negándolo.

- Claro que sí. - contraataco.

- Como lo sabes? - pregunto, tenía que saber cómo la había descubierto.

- Saber qué? - la miro extrañado.

- Porque me llamas ángel?

- Porque eres uno, eras tan inocente y.... Hermosa - no se atrevía a mirarla.

Un gran alivio la invadía, por un momento se había tensado pensando en cómo la había descubierto, él era humano y se sorprendería al saber que ella no, era lo que pensaba. Se maldecía hacia a sus adentros al haberle casi gritado.

- Ah....... - logro decir.

- Bien llegamos - se estaciono cerca de un sendero, cada lado de este era cubierto de lindos arboles muy bien cuidados y de un color amarillento, sus hojas caídas, el camino se adentraba a un lindo bosque y un pequeño lago de agua muy cristalina, un lugar que sin duda serviría mucho para relajarse, un lugar, hermoso. - te gusta?

- Es... hermoso - susurro.

-Este tiempo lo prepare todo, para venir aquí contigo, vamos. - tomo su mano y se adentró al bosque.

Aquellas palabras la habían tomado de sorpresa, pero un poco de tranquilidad entre todo lo malo que acababa de suceder no estaba demás.

- Eso.... Es hermoso. - dijo refiriéndose al pequeño círculo de flores cerca del lago, en el centro una pequeña mesa y dos sillas a sus costados, al centro de esta se encontraba un arreglo con velas, una exquisita comida en cada lugar.

- Es para ti preciosa, ven vamos. - la invito a sentarse y el la imito.

- A qué se debe todo esto? - cuestiono curiosa.

- A decir verdad, no lo sé, solo quiero hacerte sentir bien. - Sonrió - comamos, me muero de hambre.

- Claro - esbozó una pequeña sonrisa.
La comida fue tranquila, el silencio no era para nada incomodo, él en ningún momento dejaba de mirarla, algo en ella era perfecto para Jungkook, pero eso no tendría que ser así.

- Gracias, estuvo muy bien. - dijo ________, al terminar con su comida.

- Sí que lo estuvo, me acompañas. - se puso de pie estirando su mano hacia ella.

- Claro. -- aceptó su mano y se puso de pie.

Se adentraron más al bosque y miro algo que le sorprendió bastante, había una especie de alas formadas con flores blancas, muy hermosas, pero a que se debía aquello.

- Y eso? - pregunto al verlo.

- Eres un ángel y esas son tuyas. - levanto su dedo índice en dirección aquellas alas. - siéntate justo allí.

Coloco sus manos en sus hombros y la encamino hacia el centro de las alas donde no estaba cubiertas de flores.

- Eres tan hermosa como ángel. - se puso de cuclillas frente a ella, mirándola a los ojos, mirando como aquellas alas le hacían ver como un ángel de verdad, pareciera que fuera uno y estaba frente a él.

- Yo.... - trato de decir, pero la interrumpió.

- Sabes, el día de ayer, odie tanto al tipo que estaba jugando contigo, por esa razón no aparecí todo el día, por favor ya no lo hagas, aunque sé que fue estúpido de mi parte, no sé por qué digo esto, pero es algo que mi mente no controla. - la miro fijamente. - lo siento. - junto sus labios con los de ella en un lento y tierno beso.

Ella no sabía cómo responder, aquello la había tomado de sorpresa, muchas sorpresas para un día. Se separó de ella con una sonrisa en su rostro, feliz por lo que acababa de hacer.

- Prometo ya no volver hacerlo. - se disculpó.

- Gracias por lo de hoy, me podrías llevar a casa por favor. - se levantó en dirección al auto.

No cruzaron palabra alguna durante el trayecto, todo era muy rápido para ella, pero tampoco debía olvidar las responsabilidades a las que se sometía por un solo beso, al ya no ser pura en un aspecto.

- Me dejarías aquí - hablo ella, esperó a que el auto se estacionar en la librería a la que iba a trabajar. - Gracias.

- Adiós, cuídate hermosa ángel. - se puso en marchas y desapareció en la esquina.

Jungkook se sentía feliz de cierta manera, pero aquella felicidad se esfumo al llegar a su departamento y encontrarse con Jimin, hace mucho no lo había visto y ahora aparecía de la nada.

- Nuestra madre. - Hablo exaltado.

- Que?

- Cayo en un sueño profundo, tomo la sangre de otro vampiro. - hablaba con tanta desesperación que lo hizo preocuparse.

- Esta bien? - pregunto.

-Claro que no. Ahora debemos ir al reino.

No dudo ni un segundo y abrieron el portal hacia la otra dimensión adentrándose en aquellas paredes de colores hasta llegar y ver a su madre recostada en un sueño profundo, mientras su padre lloraba desconsoladamente.

Por otro lado en el mundo terrenal había llegado la noche, __________ se dirigía a su casa después del trabajo, al llegar a su casa sintió un gran alivio, subió a su habitación, al entrar se dirigió al baño, pero a medio caminar la puerta se cerró de repente algo que la hizo brincar del susto, se dio vuelta para ver lo que sucedía y se encontró con quien menos se esperaba, Minhyun el chico nuevo, pero ahora su mirada era oscura y le daba terror.

- Pero miren a quien tenemos aquí. - se acercó a ella tomándola de la cintura.

- Suéltame - exclamo, se quiso alejar de él, pero no lo lograba.

- Claro que no, ángel - aquello la tomo de sorpresa ¿quién era él? - Siempre he querido saber que se siente tener sexo con un ángel - se relamió los labios.

- No, suéltame - grito, pero era en vano nadie la escucharía, él era el príncipe de las tinieblas y sabia como actuar, Baekhyun no podría descubrirlo al haber colocado un campo protector.

_______ se concentró y miro su mano mientras el besaba su cuello, una pequeña luz se desprendió de esta y la tiro sobre él, antes de eso tomo su mano y la apretó con fuerza.

- No lo harás preciosa, tus poderes no causan nada en mí si no los sabes controlar por lo menos 6 meses.

- No por favor, no...... -- suplicaba.

- Cállate - lanzo una bofetada en su rostro tirándola sobre la cama, la desnudo, observando su cuerpo como si de una escultura se tratara. -simplemente perfecta.

Y lo más temido había ocurrido, ella había dejado de ser pura totalmente, sus lágrimas caían mientras él la violaba, cada vez que suplicaba para que se detenga recibía una bofetada como respuesta, su rostro estaba marcado por varios moretones.
Había perdido todo, y su primera vez había sido una pesadilla, ¿Por qué tanto sufrimiento? Se preguntaba, ahora le daba lo mismo morir en este mismo instante, ninguna persona tenía derecho a sufrir así ni por mas celestial que fuera, al cabo de un tiempo él había terminado y salido de su interior.

- Espero hacerlo otra vez. - se atrevió a decir, ella no podía alzar la mirada, desde aquella noche no volvería a ser la misma. - Pero por ahora no olvides lo que paso, pero si olvídame, preciosa.

Levanto su mano en su dirección y un oscuro poder salió de ella, envolviéndola en una especie de nube, aquello le haría olvidar su rostro, pero no su pesadilla.

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