CAPITULO 1

—Señor, sabemos que cometimos un pecado atroz — dijeron Siwon y Taeyeon de rodillas frente a su Dios.

—Ustedes son conscientes de sus acciones tan burdas — dijo el Señor.

—Señor, lo sabemos. Pero...— habló Siwon, su ángel.

— ¡SILENCIO! — exclamó el señor — El amor fue creado para que los humanos puedan convivir, pero ustedes han sobrepasado eso, el amor no fue creado para ninguno de mis ángeles o al menos ese tipo de amor que dicen sentir el uno al otro, fue un error de mi parte haberlos dejado un año en el mundo de los humanos, sino no hubieran creado al ser que llevas dentro — miro a Taeyeon — No los puedo perdonar, serán condenados.

— Sabemos eso, ¿pero qué sucederá? —preguntó Taeyeon.

— Su hija crecerá con humana y vivirá junto con el sufrimiento de los humanos igual que ustedes, mas no será esa su condena aun, a su edad de 22 años la llamare y ella misma decidirá cómo quiere vivir.

— Disculpe mi Señor, ¿hija? ¿Cómo humanos? — Preguntaron sus ángeles al unísono.

—Lo vi, y tendrán una niña. Y si vivirá como humana, pero a su mayoría de edad como todo ángel sus poderes se harán presentes, más no sus alas, a menos que yo la llame. —Dijo el Señor — Mientras ustedes serán completamente humanos para siempre, serán desterrados del cielo a la tierra, los perdono y no los enviare al infierno.

En aquel momento el Señor elevo sus manos y en una abrir y cerrar de ojos las alas de sus ángeles fueron arrebatadas, ellos gritaron de dolor , pero sin embargo una luz blanca cegadora los envolvió y desaparecieron del cielo volviendo aparecer en una casa totalmente desconocida para ellos.

Supusieron que ya se encontraban en el mundo terrenal, no se equivocaron, al poco tiempo subieron escaleras arriba y posaron su vista en el parque que se encontraba frente a esta, mirando como personas "humanas "pasaban por ahí.

Taeyeon y Siwon intercambiaron miradas y no pudieron controlar el salir de las lágrimas, se encontraban bien en el cielo donde no existía el dolor, pero ahora su interés se tendría que centrar en la niña que iba a nacer y era fruto de su "amor".

Hace un año el Señor envió a dos de sus ángeles al mundo terrenal, debían ayudar a una alma a encontrar su cuerpo el cual estaba en coma, terminaron al tiempo de un mes, pero sin embargo poco a poco su atracción se hizo más fuerte convirtiéndose en amor verdadero y cometieron el peor pecado, segados por el deseo pasaron aquella noche juntos, mientras su Señor lo veía todo, una niña fue fruto de eso.

Ahora ya no debían pensar en eso, su vida había cambiado radicalmente, ahora eran completamente humanos, pero la niña no.

La cuenta regresiva comenzaba, pasaban los días, las semanas, incluso los meses, el embarazo de Taeyeon se notaba cada día más. Siwon tomo el rol de jefe de familia y salió a trabajar, su vida era feliz, agradecían a su Señor el no sufrir como la mayoría de personas o parejas que siempre peleaban.

Los nueve meses ya se habían cumplido, se encontraban en el hospital ya que las contracciones de Taeyeon cada vez eran más fuertes, Siwon no había ido a trabajar por estar presente en el parto.

—Tienes que ser fuerte mi amor —Tomó la mano de Taeyeon.

—Puje —habló la doctora.

—Ahhh.... — Pujaba Taeyeon.

—Bien, una vez más —dijo la doctora.

Taeyeon lo volvió hacer, sentía como su cuerpo se desgarraba, pero escucho un llanto y una inmensa felicidad la invadió, era su bebe, por fin la tendría entre sus brazos.

La doctora regreso con su hija en brazos Siwon y Taeyeon se sentían inmensamente felices, su familia ahora estaba completa. Al cabo de unos días regresaron a su casa ahora con la nueva integrante de la familia.

— ¿Como la llamaremos? —Dijo Siwon ayudando a Taeyeon a sentarse en el sofá que adornaba la sala.

—Melie que se llame Melie si te parece por supuesto — Sugirió Taeyeon.

—Claro, por mi está bien — miro a su hija — Te llamaras Melie mi pequeña.

Desde aquel día, Melie creció rodeada de mucho amor y cariño, sus padres la querían como su vida, claro estaba que en ningún momento ellos mencionarían algo de su vida pasada, pues querían que su hija viviera una vida normal como cualquier persona en el mundo.

El tiempo transcurría rápidamente y sin pensarlo habían pasado 13 años.

— ¿Mamá que harás de cenar? - preguntó Melie entrando a la cocina.

—Es una sorpresa mi amor

— ¿Te ayudo?

—No hija, ve a descansar — dijo su madre.

—Bajare en un momento entonces — Añadió por ultimo para subir a su habitación.

Aquel día se cumplían 13 años desde que vivían en la tierra, a Taeyeon le gustaba celebrar aquello como si de una boda se tratara. Al paso de tres horas todo estaba listo, tocaron la puerta y no dudo de que fuera su esposo, Siwon. Felizmente se dirigió a ella para abrirla y para su sorpresa era un desconocido.

—Buenas tardes, usted es la Señora Kim —ella asintió — Lamento mucho ser el portador de esta trágica noticia, pero el Señor Siwon tuvo un accidente y no pudimos hacer nada para salvarlo, el auto que lo atropello fue detenido y su conductor pronto será llamado a juicio, por supuesto usted tendrá que levantar cargos.

Su mente no podía asimilar lo que estaba escuchando ¿su esposo estaba muerto? Eso era lo que escucho, que haría ahora, como viviría sin saber cómo dirigirse en el mundo.

—No, no levantare cargos y no se preocupe dígame en que hospital se encuentra ahora.

—Bueno es su decisión, ahora está en el hospital central

—Muchas gracias —cerro la puerta.

El día que muera será porque nuestro Señor nos quiera de vuelta, no llores ni culpes a las personas, si la familia de cada humano que muere por otro humano quisiera algún tipo de venganza o algo en específico para anestesiar su dolor eso está mal, entonces recuerda, nosotros no somos humanos

Al instante subió hacia su habitación y se colocó un abrigo para luego salir, al pasar por la habitación de su hija se encontró con ella en la puerta.

— ¿Madre ya puedo bajar? — preguntó.

—Melie — la abrazó — hija tu padre...tu padre... Sufrió un grave accidente — los ojos de Melie se cristalizaron al instante y poco a poco sus lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas. — Tienes que ser fuerte, vamos al hospital — salieron de su hogar hacia el hospital.

Tomaron un taxi con dirección al hospital central al llegar una enfermera las llevo hacia una camilla, y una sabana cubriéndolo.

Taeyeon levanto la sabana para verificar el cuerpo, era cierto ahora su esposo ya no estaba más, sus lágrimas no tardaron en salir desatándose en una fuerte llanto.

Desde aquel día Taeyeon sintió como un pedazo de su felicidad fue arrebatada, en ningún momento culpo a su Señor por lo sucedido, sabía perfectamente que él no habría hecho algo así ya que les había permitido vivir juntos así no haya sido en el cielo. Se propuso criar a Melie con el máximo cariño que ella podría darle, ahora no tenía a un padre, pero si a una madre quien la amaba infinitamente.

Un mes había transcurrido desde aquel suceso que marco sus vidas; madre e hija se encontraban en la sala mirando una película. Melie, fue hasta la cocina a preparar algo de comer para la película, al regresar, sus piernas se desvanecieron y cayó al suelo perdiendo la conciencia. La última escena que vio fue a su madre quien fue envuelta en un rayo de luz y luego desapareció.

A los minutos despertó y se encontraba completamente sola en su casa, ahora su madre había desaparecido por una causa totalmente extraña para ella. Quiso buscar explicaciones para eso, por varios días que su madre aun no aparecía; al pasar de 2 meses se dio por vencida y ahora estaba completamente sola. De ese modo incluso pasaron años.

El mundo donde Melie vivió fue tranquilo, las personas eran comunes nada fuera de lo normal, todo siempre se repetía en su misma rutina diaria, comer, trabajar, y estudiar.

Melie se dirigía a su casa después de la fiesta que había preparado su amiga Rose por su cumpleaños número 20, al llegar a su casa preparo algo de cenar para ella y fue hasta el comedor a disfrutar lo que preparo. Siempre pensaba en sus padres ¿Qué sería de ella si sus padres aun siguieran ahí?, pero ahora tenía a su amiga Rose quien poco a poco se convirtió en una aparte de su familia, por ella disminuyeron las noches de llantos y aumentaron las sonrisas.

Sus lágrimas no tardaron en salir, siempre que pensaba en ellos sus sollozos se hacían más fuertes. Subió a su habitación, al entrar dejo caer su frágil cuerpo sobre la cama y poco a poco fue quedándose dormida.

~~~~~~~~~~~~●●●●
😇