《Extraños sucesos》.

*referencia a otro manhwa.

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La pequeña peli marrón miro fijamente el lazo celeste que su madre el regalo cuando era más pequeña.

Habían pasado horas desde que charlo con su tío y se entero que el emperador era su padre y que...tenía una hermana.

Pero..ella no podía decirle nada de eso a su madre. Ya que tal como le había dicho Roger, hablar de ese tema provocaba tristeza en su madre.

El duque había inventado una gran historia: la hermosa Santa era muy cercana al emperador desde que era niña, cuando crecieron tuvieron que ocultar su amor ya que claude estaba comprometido. Cuando Ariana quedo embarazada huyo de obelia ya que el padre de claude se entero de todo y no le quedo otra que huir. En el templo la refugiaron hasta su nacimiento pero solo ella, que era un bebé, pudo volver y quedar al cuidado de sus tíos. Ya que el padre de claude aún vivía y estaba el peligro de que le hiciera daño a Ariana pero jamás le haría daño a su primer nieta.

En ese tiempo claude tomo el poder y se convirtió en emperador. Pero había caído en los encantos de otra mujer y por eso jamás pidio ver a Ariana o a su "primer hija". Del resultado de eso nacio Athanasia. Su madre murió y ella quedó como princesa del palacio.

Claude y Ariana jamás dejaron salir a la luz su relación ni que zenit era de la relaeza. Todo era por su seguridad. Solo los más cercanos sabían de esa historia, el antiguo emperador y el príncipe Athanasio, que ya estan muertos, junto a Roger y zenim.

-...Mamá sufrió mucho -sus ojos destellaron de tristeza y abrazo su conejo con fuerza.

Luego sonrió alegré y miro al cielo nocturno.

Tenía una hermana y un padre, solo debía de ser paciente y cuando menos lo esperara serían una familia feliz.

Pobre ángel que fue engañado.

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-ahhh que agotador.

Ariana suspiro cansada al estar en una de las habitaciones del palacio. El emperador había negado que se vaya a esas horas de la noche.

-"espero que los niños estén bien".

Miro al techo preocupada mientras se sentaba en la gran cama. La habitación era hermosa, era color blanca con detalles rosa con dorado*, había un gran ventanal hacia el balcón que daba una hermosa vista al cielo nocturno.

Se sentía extraña por estar recibiendo tal atención. Si bien era una santa no era de la realeza o estaba casada con alguien importante. Pero todo era gracias al interés que tenia el emperador y la princesa por ella.

-alguien quiere hablar contigo.

Se exalto cuando un brillo rojo apareció en su hombro transformandose en un pequeño dragón*.

Era uno de los espíritus que la protegían.

Ella al ser tener la bendición de dios tenía conexión infinita con los espíritus.

La santa no solo era importante por ser el humano más cercano a dios sino porque también es el canal entre el mundo de los vivos, el mundo de los muertos y de los espíritus.

Por eso su divinidad era inalcanzable y muy pocas personas sabían sobre ese segundo motivo que la convertía en alguien tan importante. Solo el consejo del templo y algunos integrantes de dicho lugar lo sabían.

-cesar, de quién hablas? -susurro curiosa.

Una suave risa la exalto y cuando miro hacia adelante quedo sorprendida allí estaba la hermosa bailarina. Tenía un vestido rosa y su largo cabello era decorado con flores. La sonreía con amabilidad.

-lady.

Se paro de golpe mirando con asombro a la mujer.

-no te asustes, solo quería conocer a la amable mujer que cuidará de mis seres amados desde ahora.

Ariana parpadeo curiosa ante lo dicho pero se sorprendió cuando recibió un abrazo de la oji rosa.

-por favor cuida de mi hija y de claude, pueden ser tercos y a veces bipolares pero en el fondo son personas tiernas y amables...sé libre lady Ariana -acaricio su mejilla con suavidad tal cual una madre lo haría.

Los ojos de la santa se cristalizaron al recordar a su madre y Diana solo le sonrió con suavidad.

-cuando menos te des cuenta serás nuevamente bendecida por todos esos años de soledad y tristeza que sufriste.

Su cuerpo comenzó a desaparecer en petalos rosa.

-...con gusto cuidare de tus amados lady -le sonrio amable a la bailarina que le devolvió la sonrisa y cerro sus ojos desapareciendo.

El lugar quedo en silencio y Ariana miro el pétalo rosa en su mano.

-su espíritu no se irá hasta que cumpla su cometido, ella es como...

-el ángel guardián del emperador y la princesa.

Ariana cerro su mano con suavidad y sonrio com tristeza.

Ella no pudo hacer nada para evitar la muerte de Diana pero por lo menos cumpliría con lo que le pidió. Cuidaría de sus amados con todas sus fierzas.

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-princesa no corra!.

Fue inútil para Felix evitar que Atthy corriera por los pasillos.

-Ariana! -abrió la puerta del living con alegría viendo a la bella santa saludarla con una sonrisa.

-buenos días princesa.

La rubia sonrio alegré y se acerco a ella.

-te quedarás hasta que tomemos el té con Papá? -sus ojo ilusionados hicieron que una gotita rodará por la mejilla de Ariana.

-b-bueno sería un gusto pero...

-sí! -sin dejar que responda empezó a saltar alegré haciendo reír a su escolta y que lily mire en forma de disculpa a la santa.

-mucho gusto soy lillium york, cuido de la princesa desde su nacimiento -hizo una reverencia ante la santa igual que la ojo esmeralda.

-el gusto es mío, soy Ariana Yedith -las dos mujeres sonrieron brillantemente cegando a Felix y Atthy.

-"no me había dado cuenta pero se parecen" -la oji celeste miro con una gotita a las dos mujeres.

No sabía el motivo de su gran interés por la santa. Pero desde que noto que ella es diferente a las demás mujeres quiso tenerla solo para ella. Como una joya y como una de las personas en quien pudiera confiar. Aunque eso sería difícil ya que ella es madre y no podría estar siempre en el palacio.

Además de que debía de pensar todo muy bien para que zenit no se aparezca en el palacio y le robe la atención de claude.

-su majestad aún está durmiendo, pero qué tal si lady Ariana lo va a despertar y la princesa va a cambiarse?.

El comentario de Felix dejo de piedra a las tres mujeres.

-"Felix estás loco?!, no puedo perder a la santa, si tengo a está hermosa joya de mi lado puedo asegurar mi vida en el futuro ya que tendré su protección y claude jamás me hará nada pero...claude tambien quiere esta hermosa joya, tch".

Hizo un puchero al recordar los ojos del rubio cuando miro a la santa.

-l-lord Loebein eso no es posible! -chillo Ariana sonrojada.

Lily al verla en ese estado sonrió divertida y alzo a Atthy.

-yo llevaré a la princesa a cambiarse -en segundos salio de allí sin escuchar las protestas de la rubia.

Felix le sonrio alegré a la santa y ella solo trago saliva con miedo.

Desde que piso ese palacio toda su tranquilidad se esfumo.

Al estar frente a la habitación del emperador trago saliva nerviosa y golpeo la puerta, al no recibir respuesta abrió levemente la puerta y asomo su cabeza.

-s-su majestad?.

Nadie contesto y se exalto cuando Felix la empujo "inocentemente" dentro del cuarto y cerro la puerta. Ella quedo en shock para luego un aura negra rodearla.

Juraba lanzarle millones de maldiciones a Felix Loebein y toda su descendencia.

Miro curiosa la habitación hasta que al ver el retrato de su hermana fruncio el ceño. Aunque por el vidrio roto en el retrato noto que claude en verdad odiaba a Penélope.

Camino por el lugar hasta que se acerco a la cama y se sonrojo a tope.

-rubio atrevido -susurro frunciendo el ceño con las mejillas sonrojadas.

Con nerviosismo se acerco a claude y se apoyo con cuidado en la cama.

-su majestad...despierte -susurro sin obtener respuesta, acerco su mano al hombro del rubio -su majestad....!!!

Su cuerpo se estrello contra el colchón y sus manos quedaron encima de su cabeza.

-quién...-esas gemas celeste la miraron con frialdad exaltandola, cuando noto la ropa corrida del rubio miro para otro lado.

-s-soy Ariana, su majestad.

El rubio reaccionó y miro sereno la situación. Tenía acorralada a la santa, había capturado sus manos encima de su cabeza y una de sus piernas estaba entre las de la ella.

-hn...Ariana -parecía degustar su nombre al decirlo.

Ella contuvo su respiración al tenerlo tan cerca y oler su aroma. Esquivo su mirada y él soltó una risa por lo bajo.

-tu olor....es exquisito -jadeo cuando sintio la nariz del emperador en su cuello, la olfateaba como si fuera un perro marcando territorio.

-e-e-emperador claude qué hace?! -chillo hecha tomate siendo ignorada por el rubio que con su mano libre acaricio su mejilla delineando con su pulgar su labio inferior.

-me gusta cuando sale mi nombre de tus labios...vuelve a decirlo -ordeno sonriendo con sensualidad.

-qué...-se asusto cuando claude se puso por completo entre sus piernas y acerco su rostro a su cuello -c-claude.

El rubio sonrio con gusto y sus ojos brillaron al ver la delicada piel de ariana. Sin una sola marca.

Perfecta para dejar sus propias marcas en ella.

-he cambiado de opinión -volvió a tomar su mejilla haciendo que lo mire -quiero que solo tú vengas a vivir a mi palacio, es una orden Ariana.

Abrió sus ojos en shok ante tal orden.

-p-pero!, tengo a mi hija no puedo...

-no puedes negarte a las ordenes de un emperador...además -decidio quedarse callado y luego sonrio ante sus pensamientos.

-claude?..!?!?

Nuevamente quedo en shock al sentir unos labios contra los suyos.

El gran emperador Claude de Alger obelia la estaba besando!.

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