Capitulo 9. Lo que se tiene o no...
Hola! Si, no me he olvidado de este fanfic, pero me ha dado flojera el ponerme al corriente, enserio lo siento, ademas que no me dado el tiempo de seguirle, pero por fin despues de largo tiempo, termine este capitulo que me ha costado horrores, como parece que ya todos... hehehe bueno, no les quito el tiempo, pasen a leer.
Las canciones usadas no son de mi pertenecia, credito a sus respectivos autores.
Advertencia, escena Yaoi al inicio, si deseas saltarla, baja hasta toparte con los puntos que van de 3, 2 y 1.
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Aclaraciones:
<Pensamientos>
— Diálogos —
(Interrupciones de la autora o aclaraciones)
(Complementos... algo corto como palabras, objetos, fechas, nombres etc.)
Capítulo 9. Lo que se tiene o no, que saber... Parte 1
–Pero ¿que...? – cuestionó sorprendido mientras observaba al joven detective de Osaka parado en la puerta, este le miraba ligeramente serio.
– ¿Quién... eres? –murmuro con dificultad, no fue una proeza notar que estaba ebrio.
–Shinichi me llamo hace rato, pidiéndome que viniera –respondió ligeramente serio, no tenía tiempo de darle cuestiones a ese detective, después de todo, Shinichi le amenazo por teléfono que si no iba, bebería hasta que le diera un coma etílico y por las fotos de cerveza y botellas que le mando, temía que en verdad se fuera a pasar con la bebida, y si, él se esperaba encontrarse a Hattori, ya que Shinichi durante el rato que se mensajearon le dijo que estaban en su departamento bebiendo solo ellos dos, sintió un poco de celos.
–No lo sé, si té soy sincero, no me das confianza – murmuro mientras lo seguía viendo, Kuroba rodo los ojos ligeramente, pensando que como evadirlo sin hacerle nada, aunque no fue necesario ya que segundos después, un castaño de ojos azules se asomó.
– ¡Kaito! –exclamo con felicidad, quitando a Hattori de un empujo y abrazando al de ojos índigos con una gran alegría, cosa que puso alerta al mago, pero fue tal la sorpresa y la fuerza debido al impulso que tomo Shinichi que los mando al suelo a los dos, Kaito termino sentado en el suelo con el oji azul encima, mientras le pasaba los brazos por el cuello a este.
<Bien... esto es grave> pensó el de ojos índigo, mientras sentía el fuerte aroma a licor.
–Shin-chan... ¿Qué te ocurrió? – cuestionó preocupado, llevando una de sus manos a los cabellos castaños.
–Pues... bebi –respondió de forma infantil, acomodando su rostro en el cuello ajeno –Mmm...Que bien... hueles... –murmuro rosando su nariz contra el cuello de Kaito, este se estremeció, su amigo estaba grave, jamás le había tocado ver al ex detective borracho y no tenía idea de cómo podía comportarse.
Hattori después de recuperarse, ya que por el empujón se cayó de igual forma, se les quedó mirando, Kudo estaba muy cómodamente sentado en el regazo del otro castaño, se sentía muy celoso debido a que Shinichi no había aceptado su consuelo, pero nada más había aparecido este tipo y le salto a los brazos, también, aunque estaba bajo los efectos del alcohol, noto como el otro chico paso saliva.
–Si, ya me di cuenta –murmuro Kaito antes de suspirar, alzo la vista para ver al detective de piel morena – ¿Qué paso?
–Kudo quiso ser feliz y olvidar –respondió indiferente, Kaito alzo una ceja no satisfecho –Kazuha y la rica Suzuki le dijeron cosas... –agrego quitándole importancia, balbuceo otras cosas, pero el castaño dejo de darle importancia cuando sintió al oji azul moverse contra él.
– ¿Entonces? –cuestionó Kaito nuevamente cuando vio que el ex detective solo se acomodó en su pecho, buscando que este lo abrazara y parecía que se había dormido.
–La verdad no se si contarte, no sé quién eres y no me importa... además él me lo contó en confianza...
–Hmm... bueno. Supongo que el mismo me lo contará... –dijo Kaito mientras regresaba su mirada a Shinichi –Después de todo él me cuenta todo, siempre – agrego con confianza, notando como Hattori gruño molesto.
El de Osaka se tomó un momento para pensar y unir cabos, más de lo normal debido al alcohol que rondaba en su sistema, ese tipo debía ser el tal Kuroba Kaito, un chico del que Shinichi no paraba de hablar desde temprano ¿Qué tenia de especial?
–Deja te ayudo a levantarlo –comenzó a decir el antes de acercarse y separar a Kudo de Kuroba.
–Gracias... –agradeció Kaito sin emoción cuando el detective le separo a Shinichi, se levantó con prisa.
–De nada – respondió el de la misma forma, ninguno de los dos se sentía cómodo con el otro cerca.
–Mmm... – murmuró el joven entre "sueños", mientras se removía entre los brazos de Hattori – Hattori... Déjame... – empezó a decir y de un momento a otro se lanzó a los brazos de Kaito que ya estaba en pie – ¡Yo quiero estar con Ran! – reclamo.
< Con que Mouri... Eh > pensó Kaito con tristeza, mientras lo sostenía contra sí, pero antes de poder decir algo sintió una presión contra él, bajo la mirada notando que Shinichi le miraba fijamente.
– ¿Shin -chan?
– ¿Ran...? – murmuró Shinichi con voz temblorosa ladeando la cabeza, miró a su compañero a los ojos unos momentos y negó –Kaito –susurro antes de pasarle los brazos al cuello, cuando el de ojos índigo capto la acción fue demasiado tarde, de un momento a otro tenía la boca de Shinichi unida con suya, y los brazos del mismo fuertemente enredados detrás de su cuello, jalándolo más hacia él.
El contacto era torpe, ya que sólo tenía sus labios pegados con los ajenos, pero cuando quiso alejarlo de si, Shinichi movió su boca suavemente contra la suya, se quedó helado cuando sintió como los labios del oji azul se movían contra los suyos y se abrían levemente, invitando a corresponderle, pero a pesar de querer hacerlo, no lo hizo, solo se quedó estático mientras sentía al más bajo besarlo.
Hattori se quedó mudo al verlos, la verdad no esperaba eso y Kaito estaba igual o peor. Al final el de cabellos alborotados pudo conseguir el separarse con suavidad, sentía el sabor del alcohol en sus labios y un ligero rubor se pintó en su rostro cuando vio a Shinichi relamerse los labios, el más alto paso saliva, ese gesto se había visto tan tentador, con lo ebrio que parecía estar el de ojos azules, bien podía robarle dos o tres besos y quizás ni siquiera lo recordaría, rápido desecho la idea, no, no debía aprovecharse de su Shin-chan en ese estado, por más que lo deseaba. Justo cuando el ex detective iba a repetir la acción les interrumpieron.
– ¡Oye, Shinichi! –hablo por fin el de piel oscura, después de que puso su cerebro a medio funcionar, llamando la atención de los dos, Shinichi hizo un puchero cuando vio que los ojos color índigo de su compañero dejaron de mirarlo, dirigió su mirada al otro, sin despegarse ni un poco de Kaito.
– ¿Qué? –cuestiono frustrado por haber sido interrumpido, se apegó más al cuerpo del más alto.
–Me gustaría saber quién el – dijo el pelinegro – Y por qué lo llamaste, si la noche era solo de nosotros.
Kaito apreso posesivamente al más bajo entre sus brazos, Shinichi no se quejó, aun así, tuvo cuidado de no bajar sus brazos hacia su cintura o cadera, como sus bajos instintos le dictaban, se limitó a dejar sus manos quietas en su espalda, solo miro como su compañero hacia un puchero tierno mirando al detective de Osaka, alzo la mirada nuevamente. Tanto Hattori como Kuroba se retaron con la mirada, al castaño no le había hecho nada de gracia la última oración dicha por el moreno, es más, desde que le escucho decir 'Shinichi' en lugar de 'Kudo' empezó la extrañes y porque no, molestia, hasta donde tenía entendido, ellos se trataban por Hattori y Kudo, el oji azul lo confirmo hace unos momentos a referirse a él por 'Hattori' entonces ¿Por qué ese se tomaba esa confianza?
–Pero si... te dije que... Kaito vendría –hablo por fin Shinichi, miro ahora al chico que abrazaba –Ven conmigo... no podemos seguir... aquí afuera –agrego señalando con la cabeza hacia dentro de su apartamento, Kaito suspiro alejando sus manos de la espalda ajena, clara fue su sorpresa cuando Shinichi no se alejó, sino que lo jalo del cuello hacia dentro mientras que una risita traviesa bailaba por sus labios.
¿Acaso eso era una invitación? Diferente... No sabía si emocionarse o preocuparse.
<Calma Kaito... Shin-chan esta, borracho, se prudente, se prudente >se dijo mentalmente. Todo apuntaba a que era una invitación algo diferente cuando de un jalón, termino con Shinichi pegado a la pared más cercana, y así mismo apresándolo entre su cuerpo y la pared, se le corto el aliento cuando Shinichi simplemente busco el que se acercaran aún más.
–Shin-chan –murmuro con voz ligeramente ronca –Estas jugando con fuego mi pyriel –agrego apoyando sus manos contra la pared, el mencionado rio suavemente.
–Lo sé –murmuro entrecerrando los ojos –No te preocupes... no tengo miedo... a quemarme –susurro antes de volver a unir sus labios, se permitió tomarse unos segundos para sentir como el de ojos azules lo abraza más por el cuello, Kaito no soportando más la tentación presiono sus labios suavemente contra la boca ajena, correspondiendo el beso, mientras que presionaba al más bajo contra la pared, Shinichi suspiro suavemente contra sus labios, dándole la oportunidad a Kaito de deslizar su lengua contra los suaves labios del ex detective que para su deleite los entreabrió, profundizando el beso.
La parte más cuerda de la mente de Kaito, aún estaba intentando recordarle que no tenía, ni debía dejarse llevar por la situación, su subconsciente le repetía que NO debía aprovecharse de la ebriedad de Shinichi, pero no encontraba la fuerza de voluntad para alejarse de los labios del castaño oscuro y menos cuando este le regresaba el beso, el oji azul jadeo contra sus labios, después de morder su labio inferior.
– ¡Ya aléjate de él! –grito el detective de Osaka interrumpiendo a ambos, Kaito consiguió la cordura y el sentido para usar su fuerza de voluntad y separarse de los labios de Shinichi, claro que se dio el gusto de darles otra mordida juguetona, ganando un dulce sonido de parte del oji azul.
– ¡Hattori! –reclamo el de ojos azules molesto – ¡¿Por qué interrumpes?! Vete a dormir –agrego, el de piel morena le miro molesto.
– ¡Dijiste que dormirías conmigo! –reclamo, Kaito apretó los dientes.
< ¿Dormir con él? ¡Ni loco!> gruño internamente <No mientras yo pueda impedirlo>
–Obvio... en el departamento... dormimos juntos... en el mismo... lugar –contesto como sin fuera de lo más obvio, ahora Kaito quiso soltarse a reír, su ex detective era un denso y despistado incluso estando borracho, en ese momento se alegraba por ello.
–Ya hice mucho para venir hasta acá – dijo el castaño de ojos índigo amablemente – Yo me hare cargo de Shinichi ahora – aseguró, mirando con desafío al moreno, este apretó los dientes antes de perderse detrás de una puerta, rio divertido cuando escucho el portazo.
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– ¿Que haré contigo? –murmuró Kaito mientras sentía como era apresado aún más por Shinichi, había conseguido subir las escaleras con el pegado a si, escuchaba de fondo una regadera, imaginando que era el de Osaka, miro la puerta que recordaba era la habitación del oji azul.
–Todo – le murmuró suavemente, Kaito lo miró sorprendido, el oji azul lo miraba con una suave sonrisa, tenía toda su cara roja, además de que desprendía un aroma a licor demasiado fuerte.
– ¿Qué quieres? ¿irte a dormir o te llevo al baño a que te bañes? – preguntó Kaito mientras intentaba apartarse un poco del más bajo y abría la puerta de la habitación que pertenecía a su amigo.
–A ti – susurro y sin más volvió a buscar los labios de Kaito, pero el más alto alejo su rostro, no podía volver a perder el control, con el beso anterior que interrumpió el de Osaka, supo que era débil ante Shinichi y si este le volvía a besar y se ponía tan dócil y tentador, terminaría cediendo a sus deseos y eso sería malo, porque se estaría aprovechando de él.
Además, que escuchar el nombre de Ran cuando llego, aun le dejaba un mal sabor de boca, suspiro.
–Shin-chan... Yo no soy Mouri – empezó a decir mentiras suspira – Soy Kaito... Tu compañero de habitación en la escuela, tu mejor amigo... Kaito –a pesar de que la palabra 'mejor amigo' le peso como siempre, si no es que más, no tuvo nada mejor que decir, después de todo, esa era la triste realidad.
–Mn – murmuró antes de quedarse en silencio un rato – Baño... – hablo por fin.
Kaito asintió mientras se inclinaba un poco para poder levantarlo en brazos, debido a que cuando lo soltó y quiso caminar solo se fue de bruces al suelo, gracias a los reflejos de Kaito, fue que no se golpeó ni nada, Shinichi se aferró a Kaito debido al movimiento, todo le daba vueltas y sentía ascos, pero estaba seguro de que no tenía nada que desechar, no recordaba el haber comido o bebido aparte de licor. El oji azul se quedó mirando finamente al mayor.
–Kaito... – murmuró tembloroso, el mencionado bajo la mirada, gran error.
Ya que cuando sus miradas de encontraron Shinichi alzó su rostro y unió sus labios nuevamente, Kaito jadeo por la sorpresa, ahora había bajado la guardia, intentó separarse de su amigo pero este lo jalo más hacia él, Kaito se estremeció cuando sintió como Shinichi le abría los labios nuevamente en una invitación a corresponder su beso, Kuroba lucho con las ganas de corresponder el beso y enseñarle a su oji azul a como besar, y por qué le causaba ligera gracia lo torpe del beso... ¡Pero no era momento para pensar en ellos! Como pudo se separó de Shinichi.
–Bájame – murmuró el castaño más bajo mientras desviaba la mirada con tristeza. Kaito tomó aire, Shinichi de por sí ya era mucha tentación para él, pero ahora era dos o tres veces más difícil resistirse a él, en su mente seguía repitiéndose el que no debía aprovecharse del estado de su Shin-chan. Aunque se muriera por comérselo a besos.
<Calma Kaito, puedes con eso> se animaba antes de bajar con cuidado a Shinichi.
Kudo cuando tocó el suelo, se alejó del más alto y se apoyó en un mueble, Kaito se le quedó viendo, pero se arrepintió al instante, Shinichi se había comenzado a intentar cambiarse de ropa frente a sus ojos. Un sonrojo se pintó en sus mejillas y sin más se intentó voltear, pero...
–Kaito... – murmuró.
– ¿S-sí?
– ¿Me ayudas...? –pidió mientras lo miraba con los ojos brillantes, Kuroba pasó salió antes de acercarse y ayudarlo a desabrochar el saco y quitárselo con cuidado, volvió a pasar saliva cuando Shinichi le extendió las manos para que también desabrochara los botones de las mangas de su camisa blanca y ahora más, se quedó sin aliento al desabrocharle el cinturón negro.
–Demonios Shinichi... – maldijo en voz baja, vaya que su compañero se lo estaba poniendo demasiado difícil. Iba a necesitar una ducha bien fría para poder despejarse, pero ¡¡Shinichi tenía toda la culpa!! ¡¿Como se le ocurrió desvestirse frente a él?!
–Entiendo –murmuro en voz baja alejándose de Kaito y bajando la mirada. El de cabellos alborotados le miro extrañado al ver el repentino cambio en su voz.
– ¿Shinichi? –dijo algo confundido al ver el cambio de semblante.
–No soy alguien deseable –respondió mientras caminaba tembloroso hacia su cama.
¿Qué no era deseable? Si todo el cuerpo de Kaito temblaba por acorralarlo contra una pared o la cama y besarlo hasta que no quedara ningún lugar del cuerpo del ex detective que no conociera o no hubiera saboreado. Miro con el de ojos azules solo se sentaba en su cama y se dejaba caer hacia un lado con la mirada perdida, paso saliva antes de acercarse a él y sentarse a su lado.
–Oye... ¿Qué fue lo que te paso? –preguntó en voz baja, el otro no le contesto y solo cerro los ojos.
–Lárgate. –dijo con voz seria y dura.
–Pero Shin -chan yo... –dijo Kaito buscando su mirada, pero Shinichi la aparto rápidamente.
– ¡Te dije que te vayas! –exclamo sentándose de golpe – ¡No quiero verte! ¡No te quiero cerca de mí! ¡No quiero a nadie, no necesito a nadie! –le grito antes de jalar las almohadas que estaban en la cama – ¡¿Por qué me hacen esto a mí?! ¡¡Estaba mejor solo!! –grito lanzándole algunas almohadas. – ¡Siempre ha sido mejor!
–Oye ¡espera! –pidió cubriéndose de las almohadas.
– ¡¡No quiero a nadie, no quiero necesitar a nadie, no quiero depender de nadie!!
–Cálmate un poco. –dijo en tono suave, quitándole las almohadas, lanzándolas al suelo de la habitación.
– ¡NO! ¡No quiero! ¡Vete! ¡Vete! –gritaba mientras su voz comenzaba a quebrarse y su cuerpo a temblar – ¡¡Váyanse todos al demonio!! Ran, Hattori, Kazuha, Sonoko, tu... todos, ¡Todos! ¡TODOS VAYANSE A LA MIERDA!
–Shinichi por favor –pidió tomándolo de los hombros tratando de detenerlo. –Tranquilízate y hablemos.
– ¡NO! ¡Déjame! ¡¿Qué no lo ves?! ¡Solo mírame maldita sea! ¡Solo mira el asco en me he convertido! Mira lo débil que soy... mira lo que quedo... de Shinichi Kudo... –cada vez su voz iba disminuyendo hasta volverse en su sollozo reprimido.
–Shin-chan...
–No quiero que duela... Ya no quiero... ya no... No es justo... no es justo Kai... no lo es –murmuro con voz temblorosa mientras apoyaba su rostro contra el hombro ajeno, el de ojos índigo suspiro antes de rodearlo con sus brazos y besar su cabello, lo apoyo contra su pecho.
–Está bien, la vida no es justa en muchas ocasiones –murmuro suavemente, a pesar de que Shinichi hizo un sonido de afirmación, no dijo más.
Kaito sentía como su corazón dolía mientras que abrazaba con fuerza al castaño, sintiendo como su bello ángel de la justicia hacia todo lo posible por no sollozar, por callar todos los sonidos que amenazaban con salir de su boca, sabia que Shinichi era muy propenso a guardarse todo para si mismo, todos los sentimientos, todas las culpas, el cargaba con todo incluso si el peso era mas de lo que él podía soportar, pero el así era y así le amaba, se quedó en silencio y dejo que su pyriel se desahogara, después de todo, él se prometió que siempre estaría para su Shin -chan, siempre.
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—Crees que es tuyo solamente, pero es una farsa, Y te convences que esto acabará...—canto con ánimo mientras se subía a una de las camas de la habitación para hacer su pequeña actuación, las demás chicas a su alrededor le dieron el espacio, unas se levantaron para bailar con la canción—te equivocas...
—Tu papel es el de ser esa mujer que él se cansó de ver... Que ya no toca más...—siguió la de ojos amarillos haciendo gesto conforme cantaba, imitando sus acciones de la vez anterior, la demás rieron apareciendo fotos de sus respectivos "chicos" — que ya no quiere más...
—En cambio, yo... quiero sus noches y su pasión... Sus fantasías y su obsesión, aunque te duela, Soy... —corearon todas las chicas, las que bailaban y las que se habían quedado sentadas en la otra cama solo moviendo los brazos —La que en tu cama quiere su amor, tú eres rutina, Por eso yo... prefiero ser su amante, su amante...
–Debemos admitir que Shadow y Akako tuvieron mucha seguridad al cantar eso frente a todos –comento una joven de cabellos negros, la rubia a su lado solo rio un poco.
–Bueno, algo tenían que hacer para defender a sus hombres ¿no lo crees? –pregunto volteando a verla –Después de todo, ellas no tienen seguros a sus chicos como tu Vivian.
–Supongo que tienes razón Mai –comento.
–Claro que la tengo cariño –dijo con seguridad, ambas rieron un poco antes de regresar su atención a sus amigas. –Además, Shadow debía ponerle una advertencia a la nueva.
–Por lo que vi estos días, ella come con Akefia y eso sí que es extraño –opino en un tono de duda, la rubia le miro de nueva cuenta.
–Vaya que sí, aún no sabemos a qué se debe, pero también, no solo comen juntos, se sientan juntos en las clases que comparten –conto Mai.
– ¿En serio? A Shadow eso no debió hacerle nada de gracia
–Vaya que no.
La castaña de ojos azules bailaba junto con su amiga albina y la pelinegra de ojos marrones, mientras que la de ojos amarillos bailaba sobre su cama. También una peli rosada y otra rubia se unieron.
—La que en tu cama quiere su amor, tú eres rutina... Por eso yo, prefiero ser su amante, su amante... Yo quiero sus noches y su pasión... Sus fantasías y su obsesión, aunque te duela... Su amante, su amante, seré yo. —cantaron las 4 a todo pulmón.
–Bravo, bravo –dijo Mai mientras les aplaudía junto con Vivian.
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–Y dinos Shadow ¿Qué piensas hacer al respecto? –cuestiono Vivian mientras cepillaba el cabello de la mencionada.
–Si, Miho quiere saber –dijo la de cabellos blancos.
–Primero necesito averiguar qué tanto es la relación de mi Akefia con la nueva, siento que hay algo que no estoy viendo –dijo antes de resoplar –Lo que si estoy segura es que esa no me la va a dejar fácil, ese día con la mirada que me dirigió lo supe.
–Bueno, puede que no sean pareja, pero tal vez si estén interesado uno con el otro –opino una peli rosa que salía del baño recién aseada, Shadow rodo los ojos.
–Ni de broma lo digas Momoko, Akefia no se fijaría en alguien tan engreída.
–Pues a Miho le parece bonita, como una muñequita de mostrador, que solo vez y no tocas –dijo la de ojos claros mientras tomaba otro cepillo.
–Y así es como se debe quedar –murmuro la de ojos amarillos –Como una linda muñeca en un mostrador, que solo pasas y vez, que todos ven y admiran, pero nadie compra.
–Supongo que es una buena definición para esa chica.
–Y ¿Qué hay de esa bicolor –comento rubio con desinterés –Después de todo sabemos que ella y el sí tiene algo entre ellos ¿no?
–Miho sabe que ellos no han confirmado ser novios.
–Eso lo sabemos Miho, pero creo que simplemente para evitar habladurías es que no dicen que son novios –comento Shadow. –Pero tiene buen punto de que Moto ha molestado a nuestra Akako.
–Creo que la tal Hikari Moto les ha dado problemas a dos de ustedes ¿no? –comenta Mai como no queriendo, las demás le miraron –Después de todo, se sospecha que ella tenía una gran amistad con el chico de Tea, pero ahora se arruino y que parece ser que sale con Kuroba.
–No digas tonterías Mai –dijo Akako ligeramente ofendida.
–Si, si pudimos alejarla de su propio hermano ¿no crees que será sencillo con los demás? –cuestiono Tea con una sonrisa, las demás rieron suavemente.
–Supongo que tienes razón.
–Solo hace falta encontrar la excusa perfecta.
–Podemos hacer algo en la exhibición de clubs –dijo la rubia de ojos aceituna de repente mientras de pintaba las uñas, las demás la voltearon a ver.
– ¿De qué hablas Yukiji? –cuestiono Akako que estaba a su lado mirando una revista.
–No le digan a nadie, apenas el lunes se dará el aviso –empezó a decir llamando la atención de las demás chicas –Al club de entretenimiento se nos informó desde el viernes que se adelantaran las fechas para las presentaciones de los clubs. No sé si las pedirían para la otra semana o ya de plano esta que viene, no nos dieron fechas, por eso no hemos avisado.
– ¡¿Qué?!
–Se supone que son como en dos meses o más, nadie debe tener nada preparado para el evento. –se quejó Tea recordando las fechas que habían dado en el calendario del nuevo ciclo. –Se supone que en dos o tres semanas iba a ser la reunión para ver lo del festival ¿ahora nos salen con esto?
–Eso lo sé, no sabemos porque lo sacaron de la nada –dijo la joven mientras tomaba su celular para rebuscar los mensajes –El tonto de mi profesor no dio la suficiente información sobre ello, solo dijo que era mejor no decir nada durante el fin de semana porque no tenemos fechas, así que no servía de nada estresar a todo mundo –comento mientras seguía atenta a su teléfono.
–Que considerado –dijo la castaña de cabellos cortos con sarcasmo mientras rodaba los ojos.
–Bueno ya escucharon, tenemos algo que hacer para dejar nuestros respectivos clubs en lo alto –dijo Vivian con emoción –También, podríamos sabotear un poco las presentaciones de esas chicas.
–Miho quiere opinar, que no sabemos en qué club esta la nueva –comento la única albina de la reunión.
–Lo sabemos Miho, pero eso no será problema, lo podemos averiguar –dijo Shadow con una sonrisa.
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–Gracias por invitarme Malik, –comento con timidez el albino de ojos cafés –espero no ser una molestia –agrego mientras el moreno de cabellos color rubio cenizo solo negó con una sonrisa.
–No es ninguna molestia Ryou –dijo mientras abría la puerta de su casa –Ya llegamos hermana –informo en voz alta.
–Bienvenidos –comento la mayor asomándose desde la cocina.
– ¿Y nuestro padre? Pensé que ya estaba aquí –comento Malik, Ryou noto como el ambiente se tensó unos segundos.
–Fue a la tienda a comprar unos cigarros, ya sabes –dijo la joven pelinegra, Malik asintió con pesar.
–Vamos Ryou te enseñare mi habitación –dijo Malik antes de caminar por la casa con su maleta.
–Gracias por recibirme, lamento las molestias –dijo al albino antes de seguir a su amigo, la joven le miro irse detrás de su hermano con una sonrisa.
–Espero y trates bien al chico padre –murmura al aire antes de regresar a la cocina. –Es de las pocas veces que Marik trae a un amigo.
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–Es un lindo cuarto, me gusta la decoración y se nota mucho tu afición por las motos –comendo con una risita, el otro también rio.
– ¿Se nota mucho?
–No, solo digo que por los posters, catálogos, imágenes y figuritas en miniatura coleccionables... Se ve que te gustan un poco las motocicletas –dijo Ryou con ligero sarcasmo y ambos soltaron a reír.
–Ya vez ¿Tu que tienes en tu cuarto? –pregunto con curiosidad mientras se sentaba en su silla para el escritorio, apoyo los brazos en el respaldo, su amigo se sentó en la cama frente a él.
–Pues el mío es aburrido y simple, mi padre no me deja tener nada en sí, casi todo lo tengo escondido –conto mientras jugaba con un cojín en forma pelota que estaba en la cama. –Pero tengo peluches de varias cosas y figuritas de arcillas y otros materiales, a Rose y a mí nos gustan mucho las manualidades.
–Un padre difícil ¿he?
–No te imaginas cuanto –resoplo recordando a su progenitor –A veces lo prefiero ebrio, al menos borracho es más fácil evadirlo y darle por su lado.
–Creo que tenemos eso en común también –Ryou le miro algo confundido, Malik se aclaró agregando –problemas paternales.
–Supongo que si... ¿Qué hay de tu madre? No recuerdo que la menciones ni nada... –el moreno solo pensó un momento –Perdona si soy indiscreto.
–No te preocupes, no eres indiscreto –dijo antes de moverse en la silla de su escritorio, tomo una foto para deslizarse hacia Ryou nuevamente –Se supone que ella es o fue mi madre, ni siquiera sé si está viva, se fue de nuestro lado cuando yo tenía 5 años, la verdad la recuerdo poco –comenzó a contar con una sonrisa triste, Ryou tomo la foto para verla.
–Ya veo, lo siento.
–No, no, descuida conejito.
– ¡¡Malik!!
–Ja ja ja ja... Ya, ya... sinceramente no es algo que me afecte en realidad, a mi hermana Ishizu creo que sí, pues ella estaba más consciente, ella tenía 8 años creo cuando mama nos dejó, aunque en lo personal la entendemos, mi padre es suficiente motivo para irse de esta casa –alzo los hombros suavemente –Creo que Ishizu la odia un poco por dejarnos a nosotros con él o al menos a mí, creo que ella piensa que no le costaba nada llevarnos, o solo a uno de nosotros, la verdad yo estoy bien, no dejaría a mi hermana por nada del mundo.
–Se que es ese sentimiento –murmuro suavemente mirando la fotografía –Lamento si te incomoda el contarme esto Malik.
–Para nada, no es algo que me quité el sueño, pero no lo mencionemos frente a mi hermana, como dije antes a ella parece que si le molesta. –tomo la fotografía que el albino le regreso, se movió para regresarla a su lugar.
–No diré nada descuida.
–Bien, ahora dime ¿qué hay de ti?, sé que solo tienes a tu padre y a Rose –comento Malik, Ryou le miro de regreso y alzo los hombros.
–Bueno... mi padre no es el mejor la verdad, Rose le odia en lo personal, de hecho, ella casi odia a todo mundo. –suspiro al recordar a su prima, Malik rio nuevamente.
–Ella se ve temible la mayor parte del tiempo –Ryou le miro con una sonrisa.
–Lo sé, pero cuando vez detrás de esa mascara llena de frialdad que se carga, vez que es una persona preciosa... Nuestra abuela siempre decía que ella era una rosa con espinas.
–Demasiadas espinas si me permites opinar–los dos rieron un poco.
–Supongo que en eso te doy toda la razón, pero dejando eso de lado un poco, mi madre murió cuando yo tenía 8 años aproximadamente, mi madre y mi hermana.
– ¿Tenias una hermana?
–Si, una hermana menor, se llamaba Amane –una sonrisa llena de tristeza apareció en su rostro por unos instantes –ella tenía como 5 años cuando falleció, desde entonces mi padre no volvió a ser el mismo.
–Lo siento, ahora yo me siento indiscreto.
–No te preocupes, la verdad no recuerdo mucho sobre eso y en mi familia no se habla de ello, mi padre prohibió el tema completamente, más a mí y a Rose, preguntar por eso siempre ha sido como una especie de tabú para él, a veces creo que ya no tolera del todo a mi prima debido a que le recuerda esas épocas, después de todo Rose llego con nosotros un año antes de que mi madre se embarazara de Amane.
– ¿Y sus padres?
–No sabemos sobre ellos, su padre no se supo quién es, solo dijeron que era 'un viajero' o 'un hombre de paso' y la madre de Rose murió después del parto, al menos eso nos han dicho, ella no pregunto jamás al respecto –se quedó en silencio unos momentos –Solo sé que al nacer y durante unos años se la paso de parientes en parientes hasta que termino con nosotros, la verdad mi abuela no podía hacerse cargo de ella a pesar de que quiso, ya era una señora mayor... Al final se quedó con nosotros un tiempo, pero cuando nació Amane ella se fue.
– ¿Por qué?
–Mi madre quedo muy débil por el parto y apenas podía con mi hermana, así que mi padre me dejo con mi abuela en lo que mama se recuperaba y a ella la mando con sus padrinos, pero a pesar de que yo regrese a la casa tiempo poco después, ella volvió hasta que mi hermana cumplido 3 años, pero cuando regreso ya era así como es ahora, fría y distante, todos dicen que siempre fue así pero mi abuela y yo sabemos que de niña ella era dulce y tierna, jamás habla de que le paso para que sea así, cuando mi madre y Amane fallecieron ella se volvió a ir y ahora si jamás regreso, por ello creo que mi padre no la tolera del todo –dejo escapar un suspiro recordando esas épocas.
–Eso debió ser difícil para ti ¿no?
–Si, pase el trago más duro ya que me quede solo, recuerdo que me iba a su cama y dormía con ella días después del accidente, ella me recibía y me cantaba o contaba cuentos hasta bien entrada la noche que por fin me dormía, cuando mi padre le mando de regreso con sus padrinos me quede completamente solo así que me mude con mi abuela un tiempo.
–Entiendo.
–Nos encontramos en la escuela anterior a esta y cuando quise cambiarme de escuela ella me apoyo y se vino conmigo, desde que nos encontramos en esa escuela de nuevo no me ha dejado solo otra vez... A veces me siento mal porque siento que solo la arrastro a mis problemas.
–Ryou –el albino negó ligeramente, haciendo una seña para que lo dejara continuar.
–Pero ella solo me regaña diciendo que alguien debe de cuidarme –rio nuevamente recordando el sentido sobreprotector de su prima, el cenizo se rio con él. –Una vez la escuche prometer al aire que siempre estaría conmigo... Imagino que se lo decía a mi hermana o a mi madre.
–Otra vez lamento si mi curiosidad te hizo recordar malos tiempos –se disculpó nuevamente.
–No te preocupes, después de todo fui yo quien empezó con las preguntas incomodas –aseguro antes de lanzarle el cojín, Malik le golpeo por impulso regresándoselo.
–Cambiando de tema ¿a qué club te uniste?
–Al de canto, la verdad que Dany –san es tan talentosa, además de que Rose me apoyo –respondió con una sonrisa mientras atrapaba el cojín nuevamente –Siempre me ha gustado cantar y siempre me han dicho que tengo una bonita voz.
–A ver.
– ¿Qué? ¿ahora?
–Claro, ¿hay algún problema?
–Eh, no... déjame pensar un poco –murmuro apenado.
–No hay prisa –dijo divertido.
– Siempre al soñar, puedo sentir... Un mundo que espera por mí, ya quiero llegar... –comenzó a cantar suavemente, Malik se acomodó en su lugar –Entre la oscuridad, donde nadie fue jamás, lo haré mi hogar...Todos pueden decir que suena loco... Todos pueden decir que no podré... No me importa que digan que estoy loco... Un mundo para ti diseñaré...–sonrió cuando vio a su amigo ladear la cabeza. –Siempre que me voy a acostar, colores me hacen pensar... En un millón de sueños que alcanzar. –el albino sonrió mientras cerraba los ojos –El mundo anhelo convertir, en algo hermoso para ti, y un millón de sueños construirán... Ese mundo que yo te quiero regalar.
Malik le miro intrigado, no recordaba a ver escuchado esa canción alguna vez, pero a su vez estaba maravillado, la voz de Ryou era muy bonita, era suave y armoniosa, le miro atento disfrutando de la voz de su amigo.
–Un hogar te daré, cada espacio llenaré, para hacerte feliz... Algo especial te haré sentir para verte sonreír, en un día gris... –Ryou movió sus dedos sobre su boca dibujando una sonrisa, Malik sonrió sin poder evitarlo –Todos pueden decir que suena loco... Dicen que nunca vamos a llegar... No me importa que digan que estamos locos... Juntos vamos un mundo a diseñar. –se dejó caer en la cama llevando su mirada el cielo, perdiéndose en un recuerdo. –Siempre que me voy a acostar, colores me hacen pensar... En un millón de sueños que alcanzar... El mundo anhelo convertir, en algo hermoso para ti, Y un millón de sueños construirán, ese mundo que yo te quiero regalar...
Malik rio suavemente al ver a su amigo perdido en su canción, se puso en pie para sentarse en la cama aun lado del albino llamando su atención, la verdad es que no sabía de donde era la canción, jamás la había escuchado, pero el sentimiento cálido se instaló en su pecho mientras el albino seguía cantando, podía sentir el sentimiento de su amigo a través de esa canción y el también no podía evitar perderse en un bonito recuerdo.
–No importa si pequeño es, déjame ser parte de... los sueños que hay en ti... Puedes fallar o acertar, pero di que me llevarás al mundo que ves... Ese mundo que queremos ver. –se sorprendió cuando Ryou dejo de lado el cojín y se levantó de su lugar para seguir con la canción, mientras lo jalaba con el –Que queremos ver... –tomo sus manos con una sonrisa –Siempre que me voy a acostar, colores me hacen pensar, en un millón de sueños que alcanzar... De sueños que hay que alcanzar. –Malik sonrió apretando sus manos –El mundo anhelo convertir, En algo hermoso para ti, y un millón de sueños construirán... Un mundo que yo te quiero regalar... Que te quiero regalar.
–Que hermosa canción –dijo el moreno, Ryou asintió suavemente.
–Fue la primera canción que me aprendí completa, mi madre me la enseño –dijo con melancolía –Es de lo poco que tengo de ella y es lo único de ella con lo que mi padre no se pone como loco, de hecho, siempre le pedía a Rose que se la tocara en el piano –conto antes de regresar a sentarse en la cama.
–Entonces ¿Un millón de sueños? –pregunto en broma tratando de aligerar el ambiente, el de ojos color chocolate sonrió divertido.
–Si.
– ¿Alguno para compartir?
–Pues... me gustaría un ingreso de helado de vainilla gratis por todo lo que me queda de la vida y poder comerlo siempre, sin que sufra dolor de estómago –respondió divertido, Malik se soltó a reír. –También de dulces.
–Eres todo un glotón.
–Entonces, dígame señor sano ¿Algún sueño para compartir?
–Quisiera...
–Por favor no pidas una motocicleta. –le interrumpió fingiendo resignación.
– ¡Oye! Es mi sueño, puedo desear lo que sea. –Ryou rio divertido.
–Está bien, perdón, adelante.
–Pues sí, me gustaría una motocicleta, que mi padre me dejara tener una, no sabes cómo Marik me ha querido regalar una, ya tenía una y compro otra solo para que podamos pasear tranquilamente.
– ¿Enserio?
–Si, su familia no es de un estándar alto, son personas normales, pero Odion, su hermano mayor me dijo que trabajo todas las vacaciones para poder comprar la segunda, solo para darme el gusto a mi –conto mientras sentí sus mejillas calentarse, Ryou hizo una expresión de ternura.
–Eso es muy lindo Malik.
–Lo sé, aunque el parezca el típico chico malo y cruel, créeme que es tan dulce cuando quiere.
–Quien diría que Marik "el Demonio" Miyamoto se muere de amor por "su ángel"
– ¡Ryou!
–Chicos bajen, la comida esta lista.
...
–Tu padre es... extraño –murmuro el albino mientras regresaban a la habitación –Jamás imagine que conociera a mi padre.
–Créeme que yo tampoco, pero al menos le agradaste, así que no creo que te toque ver algún... percance con el –dijo Malik ligeramente aliviado.
–Supongo que debo dar gracias a mi apellido.
–Supongo que sí, espero yo agradarle a tu padre como tu al mío –comento el moreno con una risita nerviosa, el oji café solo negó divertido.
–Si son tan amigos como tu padre dice, entonces sí, descuida –aseguro con tranquilidad antes de acercarse a su maleta.
–Por cierto, gracias por no mencionar a Marik en ningún momento –dijo antes de sentarse en su cama, el albino le miro unos momentos.
–Bueno, me pareció extraño que no tuvieras ni una fotografía del aquí en tu habitación, bueno en la de la escuela tampoco tienes una a la vista, la única es la que está detrás de la tuya y la de tu hermana, que por accidente vi una vez que buscaba algo –dijo Ryou ligeramente apenado, pero se rio cuando vio a su amigo enrojecer.
–Nadie sabe de esa foto, ni siquiera Yugi –dijo sonrojado.
–Lo siento, mis ojos no son como los normales, veo a través de los objetos en algunas ocasiones, no es algo intencional –explico jugando con sus dedos, incomodo.
– ¿Vez a través de los objetos?
–Veo la esencia de las personas y los objetos, así que mientras buscaba algo, vi el portarretrato y vi la esencia de dos fotos, las fotografías dependen del cariño que las conservas o las veces que la "usas" y como esta tiene la esencia del amor, pensé que era de tu novio –dijo el albino haciendo sonrojar más al moreno.
–Bueno... si... es la única que tengo...
– ¿Por qué?
–Mi padre no debe saberlo, quien sabe que haría al respecto –comenzó a decir preocupado –Por eso lo mantenemos en secreto, quiero esperar a ser mayor para decirle abiertamente, estoy casi seguro que me corre de la casa si se entera.
–Lo siento mucho por eso, debe ser duro no poder tener fotos con tu pareja –Malik alzo los hombros con pesar antes de suspirar.
–Si, un poco... pero ya me acostumbré, todas las fotos las tiene Marik, me gusta ver un álbum que Odion nos hizo donde ponemos nuestras fotos, también tenemos muchas en su celular –comento con una sonrisa tímida.
– ¿Si sabes que puedes poner candado en algunas carpetas? –cuestiono mientras sacaba algunas cosas de su maleta, el moreno resoplo suavemente.
–Si, pero no quiero que, si mi padre toma mi teléfono y ve eso, me cuestione por qué tengo carpetas con candados –respondió dejándose caer en la cama cansado –En el dormitorio tampoco tengo por no incomodar a Yugi, él sabe que Marik me llama la atención, pero no sabe que somos novios o bueno, no está del todo de acuerdo con ello, piensa que Marik va a lastimarme.
– ¿No es porque es un chico?
–No, por suerte Yugi es más flexible, pero para evitar problemas con Joey y Atem se pone en ese plan como ellos, el cree que uno puede enamorarse de quien quiera –Ryou asintió en respuesta, Malik continuo –Pero se deja llevar mucho por lo que dice Joey, Atem y ni se diga de Tea.
–Ya veo... Bueno, dejando temas incomodos de lado –comenzó a decir el albino cerrando su maleta –Me daré un baño si no te importa.
–No, adelante, el baño esta al final del pasillo.
...
..
.
– ¿No ibas a salir con Dany hoy? –pregunto mientras miraba a su hermano abrir el refrigerador con una toalla alrededor del cuello, el mayor saco una lata de refresco antes de mirar a su hermano.
–Si, pero hubo un cambio de planes, al aparecer su padre tiene la noche libre y quiere que vaya a cenar a su casa –respondió cerrando la puerta de la nevera antes de abrir su refresco.
–Tu sí que eres suertudo, le agradas a tu suegro –comento con diversión mientras regresaba su atención a la película de ciencia ficción que estaba mirando –No todos tienen esa suerte Aniki.
–Lo sé, la verdad agradezco que el padre de Dany solo tenga la apariencia de amargado y estricto –dijo con ligero alivio mientras saltaba el respaldo del sillón para sentarse. –Ahora debo ver que puedo llevarle a mi princesa, tengo que dejar a mi cuñado calladito –agrego mientras chasqueaba los dedos haciendo aparecer su celular –Que bueno que la altecita me paso su contacto.
– ¿Qué planeas con la albina? –cuestiono el de piel clara volteando a ver a su hermano mayor, el otro le regreso la mirada.
– ¿De qué hablas? –cuestiono confundido antes de mandar un mensaje a la albina de ojos rojos.
–No es normal que tengas una amistad de... –Bakura dudo un poco, buscando una palabra adecuada –ese tipo.
–Explícate. –Akefia alzo una ceja ante la respuesta de su hermano menor.
–Es demasiado alto el estándar de ella para ti zopenco. –comento con ligera burla en lo último, el mayor sufrió un ligero tic en el ojo al captar eso.
–A diferencia de ti hermanito, yo si tengo amistades de la alta alcurnia. –le regreso burlón mientras cruzaba los brazos detrás de la cabeza.
–Aja.
–En realidad somos compañeros en varias clases –comenzó a relatar –cuando se presentó en clase no le di importancia, pero me encontré con ella después, ella y el dragoncete no se llevan nada bien, –agrego con una sonrisa maliciosa –escuché una pelea infantil de ellos y después por... una indiscreción se enteró de lo mío con Dany.
–Oh –Bakura sospechaba que esa chica sabia más de lo que dejaba saber, ya que bueno, él había notada que a pesar de que parecía desinteresarle el mundo en general, era observadora y no había nada que se le pasara por alto, eso era temible a su parecer.
–En términos simples busque ser su amigo para asegurarme que no iba a abrir la boca –la voz de su hermano lo saco de sus pensamientos –pero después de una conversación entre los dos, si nadie más de por medio cambie de parecer, ella me agrada y quisiera que seamos amigos solo porque si, además sé que no dirá nada al respecto.
–Te agradan personas extrañas. –comento ligeramente desinteresado tomando su vaso de jugo de la mesa frente a ellos para darle un trago –Muy extrañas.
–Deberías tratarla, tiene un gran sentido del humor y se apunta indirectamente a las bromas, además de una forma muy curiosa de nombrar a las personas, solo tiene la cara de amargada. –aseguro Akefia antes de volver su atención a su teléfono para ver la respuesta de la albina, limitándose a responderle con una imagen que ella respondió con emoticones.
–No lo sé, se ve demasiado para todo el mundo por así decirlo, pienso que no es una mujer muy agradable. –dijo Bakura que había regresado su atención a la película.
–No seas gallina y trátala, después de todo... si te quieres ligar a su primo –empezó a decir, se rio un poco al verlo tensarse –Por sentido común debes mínimo tratarla.
– ¿Cómo? ¿Qué?
– ¿Qué? ¿Enserio crees que voy a pasar por algo tu cara de bobo?
– ¡¿De qué mierdas estás hablando?! –pregunto irritado el de ojos lila, Akefia le miro antes de soltarse a reír cuando vio como su hermano se ruborizo muy sutilmente. ¿Bakura sonrojado? Iba a nevar esa noche.
–Vamos hermanito, confiésalo todo –dijo una vez dejo de reírse, tomo aire con fuerza –Eres libre de contarme, tu querido hermano mayor te escuchara.
–Púdrete.
–No seas aguafiestas, no tengo problema en que sea un chico, después de todo eres libre de elegir –dijo el moreno antes de tomar su refresco para darle otro trago, Bakura rodo los ojos.
–La verdad me vale un carajo si te importa o no, son mis gustos no los tuyos. –se levantó para ir a dejar el vaso en el fregadero de la cocina.
–Entonces si te gusta.
– ¿Qué? ¡No! Claro que no.
...
..
.
–Esplendido. –dijo en tono cantarín al verlo entrar por la puerta de su oficina, el recién llegado solo le miro sin expresión antes de cerrar la puerta, entrelazo sus dedos y coloco su barbilla sobre estos mientras apoyaba los codos en su escritorio de madera de sauce. –En verdad pensé que rechazarías mi invitación.
–No tenía nada mejor que hacer, así que mejor terminare con esto de una buena vez ¿no cree? –cuestiono con una expresión de seriedad acercándose al escritorio. – ¿Qué es lo que quiere?
– ¿Esa es la forma de dirigirte a tu superior? –cuestiono con una sonrisa falsamente dulce, el recién llegado se cruzó de brazos –Toma asiento, esto puede... tomarnos un tiempo.
–Debe ser algo importante.
–Tal vez.
– ¿Lo suficiente como para que ponga una barrera dentro a la habitación? –cuestiono alzando una ceja, había detectado la magia desde antes de entrar a esa oficina, miro alrededor de ellos.
–Sabes que nuestras conversiones... son solo de nosotros pequeño –dijo en tono adulador, el otro le miro, en sus ojos morados se reflejaba el fastidio, pero por dentro estaba alerta para cualquier cosa y más al ver la mirada divertida del peli–plateado –Recuerda que hablamos de muchas cosas que no deben salir de aquí. Por seguridad de los entrometidos.
– ¿Qué tiene en mente ahora? –pregunto en seco –Oh más bien ¿Qué necesita que haga? –cuestiono de nueva cuenta mientras tomaba asiento frente al escritorio, el otro rio complacido.
–Por esto es que eres mi peón preferido pequeño y dulce Heba, siempre sabes cómo llegar al tema sin dar tantas vueltas al asunto, no solo eres preciso sino también inteligente –adulo en tono animado, un destello de maldad de reflejo en los ojos heterocromáticos. Heba se estremeció ligeramente.
–Adularme de esa manera tan falsa no le ayudara, solo hará que me vaya –dijo en tono serio antes de ponerse en pie.
–Adelantare el festival –dijo antes de que Heba terminara de ponerse de pie, este le miro sorprendido.
– ¿Qué?
–Adelantare el festival –repitió con una sonrisa complacida, Heba le miro con desconfianza. –Hace poco que lo he decidido.
–No puede hacer eso... –empezó a objetar.
–Puedo y quiero hacerlo –le corto rápidamente –Tengo todo el poder sobre esta escuela y puedo hacer lo que me plazca con ella y con los que trabajan y asisten –agrego en un tono serio pero malicioso.
– ¿Cuánto tiempo va a darnos?
–Un mes.
– ¿Un mes?
–Así es y el tiempo comenzó a contar desde el vienes –respondió, deleitándose con la expresión que hizo el tricolor, como le encantaba poner en aprietos a ese niño que se creía más que el solo por ser mayor, solo por ser más poderoso y sabio, oh, pero él tenía en sus manos el corazón de Heba, así que no importaba que ese tricolor fuera más poderoso, él tenía su debilidad y con eso era superior.
–Eso es muy poco tiempo, tengo que organizar al club de entretenimiento, hacer reuniones con los profesores y líderes de club para organizarnos y ver que es lo que van a querer hacer... Si quiero darles el tiempo máximo toda la organización debe estar lista para el viernes a más tardar –se quejó el de ojos morados, el otro se rio complacido.
–La reunión con los profesores se programará para el día que tu decidas, a ellos ya se les aviso durante el almuerzo que se tuvo el viernes, solo están esperan indicaciones o las peticiones de los alumnos para ver que salones se van a prestar y conque piensan colaborar –comento con una sonrisa llena de confianza antes de aparecer frente a Heba una hoja. –El comunicado que se mandó a los maestros –Heba lo tomo para leerlo. –Así que mi precioso peón, tienes una semana para organizar y entregar el cronograma, claro... Solo si quieres darles el mayor tiempo posible a todos tus compañeros.
– ¿Sera abierto? ¿enserio? –cuestiono aún más preocupado después de leer la hoja.
–Ya sabes que siempre se recibe a todo el público interesado y conocedor, todo ser mágico o gente normal que tenga conocimiento de la existencia de la magia –explico sacando unos documentos y entregándoselos al de piel morena –Toda la papelería a realizar.
–Enserio que no se para que lo adelanta tanto –se quejó tomando todos los documentos, comenzando a revisarlos, verificando que no faltaran hojas o algún papel.
–Oh... eso es muy simple, necesito más algodón de azúcar –comento en tono seductor, Heba abrió los ojos en una expresión de completa sorpresa, alzo a mirada para encontrarse con la heterocromática, el ojo dorado y el otro color avellano rojizo brillaron con perversión antes de seguir hablando –Tú sabes a lo que me refiero, Heba...
– ...
–Que mejor oportunidad para reunir esencia mágica que un festival, no solo de mis deliciosos y talentosos alumnos sino también de personas en el exterior...
Heba se estremeció cuando lo vio relamerse los labios, esa era de las peores cosas que odiaba de ese sujeto de cabellos plateados, no solo la forma de chantajearlo, sino el hecho de que siempre buscaba la forma de absorber la esencia mágica de los demás, usando las formas más sutiles a simple vista.
–Pensé que, con los viernes sociales y las clases normales, tenía más que suficiente –dijo mirándolo alerta, el otro solo se rio.
–Si, admito que es una gran fuente, pero como todo ser, siempre queremos más y más, en esta ocasión he decidido consentirme a mí mismo, dándome el gusto de recolectar mucho más de lo normal –explico con una sonrisa antes de aparecer una esfera de todos los colores posibles, Heba la miro con rabia.
–Lo que pasa es que usted no tiene un límite, lleva años recolectando la esencia de sus alumnos sin que casi nadie lo sepa y jamás hace nada con ella, más que darse un poco de poder y hacer pociones de energía vital y curación –comento Heba antes de desviar la mirada, esa esfera siempre le daba asco, asco y rabia contra sí mismo.
–Yo sé para qué usare toda esta esencia magia que he recolectado con los años –desapareció la esfera con un movimiento de manos –Son de las pocas cosas que no pienso a compartir contigo.
–No necesita hacerlo, no soy estúpido ¿sabe? –murmuro molesto –Usted solo quiere conseguir su objetivo, y necesita toda esa energía como sacrificio... Incluso más.
–Si ya lo sabes ¿Por qué no intentas detenerme? –pregunto divertido –después de todo, no estás de acuerdo con mi propósito.
– ... –ni siquiera abrió la boca para intentar decir algo, no había nada que decir.
–Si no hay más que objetar, retírate, tengo cosas que hacer y tú tienes mucho trabajo, es beneficioso que dormir no sea una necesidad para ti, tienes más tiempo que la mayoría –agrego con una risita, Heba le miro con seriedad antes de levantarse con los documentos.
–Usted está completamente enfermo –le acuso con frialdad, el de cabellos plateados le sonrió.
– ¿Y quién eres tú para decirme eso? –cuestiono con diversión antes de levantarse de su escritorio con suma elegancia –Deberías cuidar tus palabras Heba, no eres quien para juzgar los anhelos de los demás.
– ¿Anhelo? Yo lo llamaría capricho.
–Uh... Una interesante palabra 'capricho' –murmuro mientras daba unos pasos para rodear el escritorio. Heba retrocedió ligeramente, no era común que el se levantara de su cómoda silla. –Deberías cuidar tus palabras pequeño y dulce Heba, que tu eres la prueba de lo que personas podemos llegar a hacer por un "capricho" como le llamas tu.
–No es lo mismo.
–Lo es, las personas siempre queremos algo Heba, ya sea poder, amor o cualquier otra cosa, la avaricia y las ambiciones son parte de los seres pensantes como nosotros –comento en tono serio –El ser seres pensantes y comprensibles solo hace que nuestra necesidad de tener o desear algo sea diferente y mucho más fuerte que la de los animales y existimos personas como tu y como yo que hacemos cualquier cosa por conseguir "ese capricho" sin importar que tan absurdo sea –sonrió cuando le vio retroceder aún más –Tu deberías saberlo y entenderme mejor que nadie.
–Y lo hago –dijo mientras le daba la espalda. –Pero no significa que este de acuerdo con sus métodos, lo que yo hice fue por amor.
–Solo te mientes a ti mismo, una y otra vez, pero es noble tu filosofía, después de todo el único que salió perdiendo aquí, eres tú –se burló, Heba bajo en rostro apretando los papeles contra su pecho con fuerza.
–Lo se...
–Seria tonto que lo olvidara, después de todo lo vives una y otro y otra vez –señalo con confianza, sonriendo con arrogancia al ver al tricolor encogerse aun mas en su lugar –Hiciste lo que se le conoce como 'vender tu alma al diablo' o debo decir ¿a la muerte? Y todo por un propósito, que al final no sirvió de nada, si tal vez yo este enfermo de poder o tenga un capricho, pero tu ternurita estas enfermo de amor, tu amor fue tal que no dudaste en vender todo de ti por salvarlo, cambiar su vida por la tuya, ir en contra de las leyes de la vida y la muerte... Solo para que tu amado siguiera respirando, pero lo mas divertido es ¿Y a ti en que te favoreció?
–Cállate...
–La elección fue tuya, como tú lo has dicho, fue algo que tu querías, que tu deseabas con todas tus fuerzas, tu capricho –llevo sus manos a los hombros del más bajo –todos deseamos algo, todos queremos algo... Algo por lo cual estamos dispuesto a todo, hasta vender nuestra alma al diablo con tal de conseguirlo, ni deberías de atreverte juzgarme si tú eres el resultado de que, si se consiguen las cosas, incluso burlar a la muerte
–Se lo advierto, porque yo sé que es cargar con las consecuencias –Heba se abrazó a la capa que descansaba en sus hombros –Estoy consciente de lo que hice...
–Se que si... Y yo también.
...
Una vez Heba salió de la habitación, el hombre de ojos heterocromáticos sonrió antes volver a aparecer su esfera multi color. La contemplo fijamente.
–Si pudiera obtener todo de ti, Heba... me ahorrarías tantas complicaciones –dijo al aire, miro hacia su derecha donde un espejo le mostraba al tricolor de piel morena –Un alma tan vieja como la tuya sería un gran sacrificio y seria lo suficientemente fuerte para obtener lo que deseo... lástima que eres ajeno y tu propietario no perderá a su mejor pieza, así que solo me queda usar el método tardado, aunque, debo decir que la vida me está poniendo todo en bandeja de plata –agrego con diversión mientras seguía contemplando al tricolor –Solo un poco más... solo un poco más...
...
Heba suspiro con pesar mientras caminaba de regreso a su habitación, tenía muchas cosas que organizar para el lunes mismo dar el aviso y hacer junta con todos los representantes de club, evadió lo más posible el ser visto por los alumnos que se habían quedado en la escuela ese fin de semana, aun así no evito detenerse cuando en su campo de visión apareció un tricolor de piel blanca, este se encontraba en una de las áreas verdes, practicando con su espada, se limitó a quedarse detrás de un árbol cercano para mirarlo unos segundos.
Hasta ahora, jamás había entendido el motivo por el cual le gustaba observarlo desde lejos, desde que lo había conocido hace un año atrás, desde antes de que siquiera intercambiaran palabras, si, en este momento no eran amigos ni nada cercano a ello, pero Timaeus se mostraba siempre amable y atento con él, muy dispuesto a conocerlo, pero Heba siempre le alejo de alguna forma, siempre mantuvo una convivencia educada pero distante, había algo en ese chico que le atraía como un imán, pero también algo que lo alejaba drásticamente.
Le gustaba considerar a ambos como dos imanes, de un lado se atraen con fuerza y del otro se alejan y jamás llegan a unirse, el problema es que él sabía que el lado donde podían unirse, no era el suyo, así que por más posibilidades de ser amigos, siempre habría algo que lo obligaría a alejarse y ahora más que nunca, se aferró a su capa inconscientemente pero aun así no despego su mirada de los certeros y firmes movimientos que realizaba el mayor, soltó un largo suspiro antes de alejarse, tenía muchas cosas que hacer como para perder el tiempo. Mientras Heba se alejaba, Timaeus volteo, pero solo alcanzo a verlo alejarse, resoplo con pesar.
–Por más que me acerco... Mas te empeñas en alejarme –murmuro con tristeza –Y, aun así, no quiero dejar de intentarlo...
...
..
.
–Y ahora? –pregunto con ligera curiosidad al ver a su amigo de cabellos negros suspirar pesadamente, este volteo a verlo.
–Oh, no es nada, solo que...
–No tienes idea de cómo hacer tu tarea ¿verdad? –pregunto con una sonrisa, el moreno se sonrojo antes de negar con fuerza.
–No, claro que se cómo, Rose me explico muy bien –comento con una sonrisa mientras mostraba su cuaderno con unas notas y señalamientos hechos con una elegante y fina letra, que sabía que no era de su amigo.
– ¿Rose? –cuestiono Kenta haciendo un poco de memoria Luis asintió.
–Rose Shirogan, tenemos unas clases juntos y se tomo la molestia de ayudarme, después de todo nos toco hacer una actividad juntos, es una chica muy inteligente, aunque muy callada y seria... pero es mucho mas tratable que Seto –comento Luis, Kenta trato de ignorar la sonrisa que tenia el moreno en el rostro.
– ¿de verdad? –pregunto interesado, Luis asintió.
–Ella no te mira como "poca cosa" o "insecto" –bromeo el moreno, ambos soltaron a reír.
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Gracias por leer, tambien por la espera.
Solo quiero agregar que las canciones usadas son:
-Prefiero ser su amante - Maria Jose.
-A millon dreams (desconozco su autor, solo se que sale en la pelicula The greatest Showman), su traduccion es "Un millon de sueños" la letra es saca de un conver de la misma que me encanto, como no puedo poner el Link, les ponde el nombre completo del video 'A Millon Dreams - The Greatest Showman - Cover en Español - Pipe, Na Na, Kura & Enma'
Sin mas que decirles, mas que agradecer nuevamente por ser pacientes, si gustan comentar alguna cancion que les gustaria que se mencionara con usara pueden comentarlo, despues de todo el siguiente capitulo se tratara el tema del festival cultural que se hara en la escuela.
Rose Shirogan
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