"Las deidades han renacido"

Todo el pueblo se reunió en las afueras del majestuoso palacio topkapi, todos pedían justicia por sus muertos, justicia por las niñas y mujeres que habían sido abusada por los jenizaros rebeldes bajo la orden del sultán Aslan, todos querían ver arder a los tiranos.

—¡Atención, su majestad el sultán Aslan II! -ante la mención de un nuevo sultán todos se incaron en respeto, la sorpresa fue mucha pero al escuchar el nombre, pero volver a escuchar el nombre del sultán más noble que habían tenido les traía recuerdos.

—Mi querido pueblo. - Minho se coloco en la enorme tarima de madera, ahí yacía una cuerda de oro —Se que han sufrido, todos lo hicimos y hoy estamos aquí para condenar a los asesinos del sultán Aslan I, mi padre -tomó aire al ver el rostro de sorpresa de todos —Aasiyah sultan, la valide y regente, madre de mi amado padre, organizo toda una trama para matarlo, mi padre fue envenenado por su propia madre, así mismo, mis hermanos nonatos, hermanas y concubinas de mi padre, también fueron asesinados por tal vil mujer.

Poco a poco todo se iba destapando, gracias a evidencia dada por visires, sirvientes e incluso favoritas de su padre, había logrado descubrir la sucia verdad de Aasiyah sultan, una mujer vil que poco le importo matar a su propio hijo.

—Mi madre que en paz descanse, Kabuto kadin, fue enviada como ofrenda de paz a Han, aún sabiendo que la familia de ella había sido asesinada por los han, mi hermana Hülya y yo sufrimos ante esto, yo no había nacido pero ellos quisieron deshacerse de mi, el único heredero legítimo de mi padre.

Los pobladores se enardecieron al escuchar tal acto vil y cruel, no podían creer que la propia madre asesinara a su hijo y a su descendencia.

—Özlem sultan, también fue participe de este acto -todos guardaron silencio nuevamente —Ayudo a Aasiyah a deshacerse de mi madre, exilio a varias concubinas y sobre todo -tomó aire, debía hacerlo, no quería, pero tenía —Coloco a una mujer en el trono.

El silencio sepulcral invadió el lugar, solo se podían escuchar jadeos de sorpresa y a las urracas cantar.

—El sultán que tanto daño les hizo es en realidad una mujer, una mujer que permitió que esclavas fueran abusadas y les colocaran hijos falsos con sangre de osman, este pecado es penado con la muerte.

—¡Matenlas! ¡Maten a todos! - Minho suspiro, no quería ser un matasangre pero debía.

—Declaró culpable a Aasiyah sultan que es degradada a esclava, su nombre y títulos serán borrados de la familia, la declaró con el encierro absoluto en la torre de la doncella, hasta el día de su muerte, Ashina, fue manipulada desde niña, pero nada justifica sus delitos, la declaró a pena de muerte, será ahorcada en una hora, su nombre también será borrado, nunca existió para la dinastía  -suspiro, se repetía que era lo correcto —Havva hatun sabiendo la verdad sobre Ashina, participó y acepto casarse con Ashina, un pecado ante todos, será encerrada en el antiguo palacio, sus hijos serán alejados de ella y recibirá ahí hasta su muerte, sus restos serán arrojados a un barranco, no quedará en la historia, y para hacer justicia por las niñas y mujeres abusadas, declaró una ejecución masiva ahora.

Todo el pueblo llamó a su nombre cientos de veces, Aslan II había llegado para hacer justicia.

Los cuencos con sangre iban y venían de los aposentos, las doncellas llegaban por montones y las parteras y médicos se habían encerrado para trabajar sin problemas.

Yangyang daba vueltas por todo el patio, estaba nervioso y se notaba, la asistente de primera clase Yue estaba ahí apoyando, ella y Hülya se habían echo muy amigas y se deseaban el bien mutuo.

—¡Su majestad! -el eunuco de la emperatriz salió.

—¿Cómo está ella? ¿Qué fue el bebé? ¿Esta sano?

—Calma majestad, fue una niña - Yangyang salto de alegría, no le importaba si era un varón o una mujer, el tenía una hija con la mujer que amaba.

—¡Majestad! -la doncella de la emperatriz salio, Suoxin se acercó a él agitada pero feliz —Noticias.

—¿Qué sucedió? ¿Hülya está bien?

—Lo esta, pero viene en camino otro bebé- Yangyang soltó un grito de alegría.

—Tendre a mi León y a mi dragón, mis niños - soltó feliz, si era niña también, la amaría por igual.

Suoxin y Sambao regresaron a los aposentos de Hülya, los quejidos y las criadas yendo y viniendo aumentaron, Suoxin salió con la bebé y se la entrego Yue, esta la arrullo y le enseño a Yangyang como cargarla.

—Mi niña, eres igual a mamá, definitivamente serás la niña más hermosa, la niña de papá.

—Felicidades majestad, tiene una hija hermosa - Yue elogio a la pequeña niña.

La hora paso, la pequeña había sido llevada por las nodrizas para revisarla y dormir la, Yangyang se había negado a comer, estaba nervioso y angustiado.

—Todo estará bien, su majestad es fuerte -Yue le animo, aquella joven dama era una dulzura, no deseaba a Yangyang y no deseaba hijos o amor, solo quería ser feliz al lado de su amiga y criar a aquella niña o niños.

—¡Su majestad! ¡Su majestad! -Suoxin y Sambao salieron gritando con alegría.

—¿¡Qué sucede!? - este brincó de su lugar. —¿Estan bien? ¡Hablen!

—Felicidades su majestad. -ambos se reverenciaron —Ha nacido una niña y un niño.

—¿Dos más? - ambos asintieron al unísono.

Ahora Yangyang y Hülya tenían a su dragón y a su león, pero aquel tecer niño será el que revolucionaria a la dinastía qing, un Fénix lleno de sorpresas y victorias.

Ashina fue llevada hasta la tarima, todos le gritaban obscenidades y le deseaban la muerte, ella sabía que estaba mal, cometió errores y realizo cosas malas, moriría por sus pecados.
¿Pero por que ella y su madre no?

Su madre debía de morir también, morir de la peor forma.

—No te asustes, se que piensas que tu muerte es injusta, pero Özlem vivirá día a día recordando los actos crueles, deseará haber muerto, su mente será su castigo.

—Ella también...

—Te estoy librando del dolor eterno, a ella no, sufrirá en vida lo que provoco en vida, tu tendrás paz... no la mereces, pero al final, fuiste una víctima también.

—Minho...

—Mañana me coronare Sultán, llevare el nombre de mi padre, espero que en otra vida cambie tu destino y seas una sultana libre, o simplemente una persona común y libre.

Los verdugos le colocaron la cuerda en el cuello y se alejaron, Ashina miro por última vez a todos y en especial a su madre quién estaba en primera fila para ver a su hija morir.

—Allah es mi testigo, allah es mi testigo de que ame sinceramente, perdóname Havva - la pelirroja también estaba ahí, ella lloraba a mares pidiendo por sus hijos, pero Repentinamente una sonrisa surco su rostro.

—Yo nunca te ame, solo quería el poder del trono, me dabas asco Ashina, solo asco y vergüenza.

Escuchando esas palabras el verdugo quito el banco y Ashina perdió la vida.

El dolor reflejado en su rostro es algo que Özlem y Havva verían en sus sueños durante toda la vida.

El Yangyang cuando supo que eran tres:

Finalmente se fue ashina, justo o no, para ella era mejor morir, vivir solo la hubiera acabado más.

Nombren a las bendiciones de Hülya.

La historia ya está llegando a su fin, aún no se con cuántos capítulos, pero ya estamos cerca.

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