Nicholas y su compañera seguían recorriendo el pueblo buscando a David, Alan, Hanna o a alguien que los hubiera visto para poder avisarles sobre el peligro que estaba corriendo Clara.

—¡Nicholas espera! —Exclamó su compañera un par de metros atrás de él.

—¿Que pasa Cloe? ¿Ya estás cansada? —Le pregunto en forma de broma mientras sonreía.

—No —Respondió volviendo a juntarse con Nicholas—, es que eres muy rápido y casi me dejas sola.

—Bueno, entonces bajaré el ritmo —Dijo él—. Vamos entonces —Agrego a la vez que empezaba a correr.

En ese momento Cloe lo tomo rápidamente de la mano y lo detuvo.

—Bueno está bien... Si estoy cansada —Dijo un poco avergonzada, se suponía que un soldado del E.R.E debía tener una gran resistencia física pero ella no la tenía.

—¿Eh? Pero durante las pruebas hacíamos esto todo el día ¿Como es que te cansas ahora? ¿No habrás subido unos kilos demas? —Bromeo.

—¡En las pruebas no andábamos con armas ni con ropa pesada encima! —Exclamo para intentar defenderse de las palabras de su compañero.

—Bien, bien, bien, caminemos entonces.

Ambos continuaron recorriendo el pueblo en su intento por encontrar a David o alguno de los demás pero no obtuvieron resultado. Después de haber estado buscando durante un largo rato decidieron regresar al cuartel para reunirse con sus compañeros de equipo e ir a descansar pero fue entonces que encontraron a alguien que quizá podría saber el paradero de Clara.

—¿Esa no es la líder? —Pregunto Cloe señalando a una mujer que había pasado varios metros delante de ellos.

Nicholas volteó hacia donde su amiga señalaba.

—Te aseguro que ella sabe en donde esta nieves.

Nicholas no dijo nada, solo comenzó a caminar hacia Sara.

—Ey, ey, ey, espera ¿Que haces? —Cloe detuvo a su compañero, dejarlo acercarse así como así a la persona más importante del pueblo podría no ser tan bueno para él—. Ella es la líder ¿Como se te ocurre acercarte así a ella?

—Ay te preocupas mucho por nada... —Le respondió Nicholas restándole importancia y soltándose del agarre de Cloe para continuar caminando hasta llegar a donde Sara y preguntarle si sabía en donde estaba Clara y los demás.

—¿Para que quieres saber eso? —Cuestiono Sara con voz severa y cortante.

—Por que quiero ayudarlos —Respondió con mucha determinación en su mirada.

Al ver a Nicholas tan determinado por ayudar a sus compañeros Sara no pudo evitar sonreír levemente. De cierta forma verlo a él la hacía recordar cuando era joven y no pudo ayudar a sus compañeros que terminaron siendo expulsados del pueblo, no iba a dejar que Nicholas pasara por la misma impotencia de no poder hacer nada.

—Bien sígueme —Dijo la líder comenzando a caminar hacia el Bunker.

Nicholas le hizo una seña a Cloe para que se acercara y ambos comenzaron a seguir a Sara.

—Ellos seguramente ya estan buscando a Clara para matarla —Agrego Sara haciendo que Nicholas sintiera un escalofrío recorrer todo su cuerpo—, he pensando en las opciones y creo que todas terminan con Clara muerta...

Sara comenzó a explicarle a Nicholas la situación, sin importar lo que eligieran ya sea exiliar a Clara del pueblo o entregarla a los progenitores ella probablemente terminaria muriendo.

—Estoy segura que si la exilio Darreth enviara a un equipo de rastreo para que la maten —Aseguro sin detener su andar. Sara conocía bien al líder de Kaldya, era un hombre que estaba dispuesto a todo si se trataba de la seguridad de su pueblo, y según él, tener a Clara en Edén era un riesgo enorme.

—Y lo que buscan esa gente que nos atacó esta dentro de ella ¿no es así? —Pregunto Nicholas a lo que Sara asintió con un leve movimiento de cabeza—, posiblemente la maten tratando de obtener eso, sea lo que sea —Agrego a la vez que comenzaba a idear un plan en su mente con el cual pudieran salvar a Clara.

—La última opción es dejar que la maten aquí —Volvio a hablar Sara con pesadez.

En ese momento Nicholas ya tenía un pequeño plan estructurado, solo necesitaba apoyo y gracias a Sara lo tenía.

—No, espera —Hablo el joven deteniendose—. Se me ocurrió algo que podría funcionar, ven.

Sara miró a Nicholas muy confundida ya que él había cambiado su rumbo de regreso hacia el cuartel, aún así, lo siguió sin darle muchas vueltas en su mente, le bastaba con saber que Nicholas quería ayudar a Clara.

[...]

En una de las pequeñas habitaciones que habían en el búnker se encontraban David y los demás, todos preocupados por su amiga que llevaba acostada en una camilla desde hace varios días.

Clara no había reaccionado desde el día en que cayó desmayada.  No estaba muerta, eso era fácil de notar ya que aún estaba respirando. Además Abigail y Dianna la revisaron con los máquinas y no encontraron nada fuera de lo común.

–¿Creen que lo de su madre tenga algo que ver con lo que le paso? –Cuestiono Alan luego de pensar en algunas causas que pudieron causar que Clara colapsara así.

–No lo se... –Respondio David–, mamá siempre llevaba a Clara consigo mientras que yo iba a ayudar a mi abuelo a cortar leña. 

Hanna era la que más preocupada estaba después de David. Ella tenía su cabeza recostada de la orilla de la cama muy cerca del rostro de Clara, se sentía una inútil por no poder hacer nada para ayudarla. 

—Vamos Clarita... –Dijo llorosa tomándole la mano a su querida amiga–, no nos puedes dejar así.

–¿Creen que nos pueda escuchar? –Pregunto Leo. Como todos allí él estaba preocupado por Clara. Sabía que no estaba muerta pero la idea de que pronto lo estuviera no dejaba de rondar por su mente–. ¿Y si nunca despierta? –Volvio a preguntar cabizbajo, debían aceptar esa posibilidad.

–Lo hará –Intervino rápidamente Kyala–. Aunque no lo parezca las expresiones de su cara han cambiado algunas veces. La he visto –Dijo con seguridad. Esas pocas palabras revivieron la esperanza en los demás.

–Igual no podemos descartar la posibilidad de que no lo haga –Setencio Liena con voz fria.

Normalmente los chicos no estarían de acuerdo con Liena pero esta vez era diferente, todos estaban consciente del posible destino de Clara pero no todos estaban preparados para lo peor.

—Lo más probable es que su madre le haya hecho algo ¿Seguro que no recuerdas nada? —Le pregunto Alan a David.

—No, nunca había notado nada raro en nuestra madre... —Respondió sin apartar la vista de su hermana—, Ni siquiera había notado que ella sabía sobre este bunker.

—Hasta donde sé es posible —Volvio a Hablar Kyala sentándose en el suelo—. Según que la madre de Alan y la de ustedes trabajaban juntas ¿No? —Pregunto mirando a Alan.

—Si, ellas trabajaban en el área de genética, su madre se especializaba en la mezcla y separación de genes —Respondio el moreno— y la mía se encargaba de controlar las reacciones genéticas y las transmutaciones o algo así..., No recuerdo bien.

—O sea que es posible que sí le haya hecho algo —Agrego Kyala tras soltar un suspiro de pesadez—. Solo queda esperar a que despierte y preguntarle si ha recordado algo...

Los chicos continuaron esa charla por un rato más hasta que finalmente se quedaron sin nada que decir y el silencio era lo único que se escuchaba, hasta ese momento solo habían hablado de Clara, y aunque se preocupaban por ella, sabían que no podían dejar sus deberes con su pueblo.

—Ire a ver qué hace Ethan —Dijo Kyala poniéndose de pie y saliendo de la habitación donde había estado hablando con sus amigos.

Al ver salir a su compañera los demás decidieron hacer lo mismo. Uno a uno fueron tomando sus cosas y salieron de la habitación dejando a Clara descansar con la esperanza de que despertara pronto. Cuando estuvieron completamente listos salieron del búnker con dirección al pueblo, pero, al poco tiempo de haber comenzado a caminar vieron un par de vehículos en el camino que llevaba al Edén.

—¿Ese no es nuestro vehículo? —Pregunto Hanna confundida.

Todos se apresuraron a acercarse  con la esperanza de que todo estuviera bien en el pueblo y no hayan estado bajo ataque otra vez en tan poco tiempo.

—¡Al fin llegan! —Dijo una voz del interior de uno de los vehículos, el bautizado KENT.

La puerta del vehículo se abrió dejando ver a Sara acompañada de Sander, estos bajaron y al mismo tiempo del otro vehículo también bajaron varias personas, entre ellas Nicholas.

—¿Paso algo? —Pregunto David para aliviar las dudas que su grupo tenía desde que vieron los vehículos.

Sara y los otros que acababan de llegar tenían una expresión muy seria, eso solo preocupo un poco más a Kent y a los demás quienes pensaban que el pueblo estaba siendo nuevamente atacado.

—Quieren matar a Nieves —Revelo Nicholas finalmente.

Esas palabras cayeron como agua fría a los demás, especialmente a David que no podía dejar de estar preocupado por su hermana.

—¡¡¡Que!!! —Exclamo Hanna muy alterada y nerviosa. Luego se acercó rápido hacia Sara y ek teniente—. ¿Por qué? Clara no ha hecho nada... —Agrego y sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, no podía dejar morir a su amiga—. ¡¿Por qué le quieren hacer eso?! —Pregunto exaltada sacando una pistola de su cinturon y apuntándola contra Sara.

—Baja eso niña —Le dijo Sander a la rubia.

Sara permanecía tranquila en el mismo lugar solo se limitó a desplazar el arma con su dedo para que ya no estuviera apuntando a su cara.

—Como líder del Edén no puedo quedarme quieta y dejar morir a mi gente —Hablo con tranquilidad mirando a Hanna directo a los ojos—. Pero tampoco puedo dejar que una novata me amenacé —Agrego y en un movimiento rápido tomo a Hanna por la muñeca tirándola al piso con un movimiento rápido y arrebatándole el arma, ahora era Sara la que apuntaba el cañón del arma. 

Hanna estaba tirada en el suelo con el pie de Sara en su estómago y con un arma que estaba siendo apuntada a su cabeza. Estaba asustada, no había sentido ese miedo en mucho tiempo. No le daba miedo morir allí, lo que la asustaba era saber que Clara y sus amigos podrían morir en cualquier momento y ella no podía hacer nada para salvarlos. Y también se sentía enojada, enojada por qué su propia gente quería matarlos.

—¡Tranquilos! ¡Vinimos para ayudar! —Exclamó Cloe un poco alterada por ver qué Sara estaba a punto de matar a Hanna.

Al ver la reacción tan preocupada de Cloe y los demás presentes Sara solto un suspiro para luego bajo el arma y permitirle a Hanna que se levantara.

—Explicale tú —Le dijo Sara a Nicholas mientras volvía a entrar al vehículo KENT seguida de Sander. La escena que Hanna había muerto montado había logrado ponerla de mal humor.

Nicholas se acercó a David y comenzó a explicarle su plan, que a pesar de no ser una gran idea seguía siendo lo mejor que podían hacer si querían impedir que mataran a Clara.

—Debemos alejar a Nieves del pueblo..., De toda esta área —Informo mostrandoles un pequeño mapa de la región y las cercanías—. Hay personas buscándola, si se queda cerca solo facilitará que la encuentren.

»Si se van solos eso sería muy sospechoso y posiblemente envíen un equipo de rastreo a perseguirlos con órdenes de matarlos si llevan a Clara, así que para aparentar Sara y Dianna dijeron que enviarían a dos equipos a Montaña Alta para recuperar algunos objetos y materiales que no hay en Edén.

»El teniente vendrá con nosotros para mantener mejor las apariencias —Dijo Nicholas señalando a su escuadrón—, el escuadrón del teniente está  en el pueblo vigilando a los que quieren matar a Clara en caso de que intenten algo, y los altos mandos intentarán persuadirlos de esa decisión.

»Tambien logramos equipar una de las armas sonicas a su vehículo —Indico señalando la parte superior del vehículo, a la cual se le decía cabina de artillería, en la cual el arma había sido instalada—, así podrán protegerse mejor en su viaje.

—Pero... ¿A donde podemos ir? —Le pregunto David, su voz dejaba notar que estaba muy preocupado por su hermana.

—Al Noroeste podrán encontrar las ruinas de ciudades antiguas. —Hablo Sara saliendo del vehiculo junto a Sander cargando un par de contenedores—. Normalmente ir a ellas significaría una muerte casi segura pero ahora que tenemos esto debería ser más fácil moverse en ellas —Agrego entregándole el contenedor más pequeño a David, dentro habían varias botellas que contenían el líquido con el cual podrían engañar el olfato de los Híbridos—. Acérquense y traten de construir una fortaleza en la que puedan ocultarse, estoy segura que no se atreverán a buscarlos allí.

—Esta vez no puedo ir con ustedes pero creo que puedo apoyarlos un poco en su viaje —Dijo está vez Sander acercándose a David con otro de los contenedores, aunque este era más grande que el que Sara le había dado a David.

El teniente abrió contenedor y de este saco un par de objetos:

—Este es un comunicador capaz de cubrir grandes distancias si lo acoplan en su vehículo. Usenlo para mantener comunicación con Sara, Abigail o conmigo. Y este es un mapa holográfico igual que el que me vieron usar cuando rastreavamos a los Raiders —Explico de forma calmada entregándole los objetos a David y regresando junto a Sara.

—Tienen provisiones en su vehículo aunque no sé cuanto tiempo les pueda durar, así que administra la bien —Volvio a hablar comenzando a caminar con dirección al bunker—. Pongámonos en marcha entonces... Busquemos a Clara —Finalizo y los demás comenzaron a seguirla.

[...]

Luego de recoger a Clara en el búnker y llevarla a dónde estaban los vehículos ambos grupos decidieron repasar su plan.

—Es simple ustedes irán a la ruinas antiguas —Hablo Sander señalando a David y a su grupo, y después dirigió su vista al grupo de Nicholas— y ustedes los seguirán por varios kilómetros para asegurarse que nadie más los siga, luego irán a montaña alta y traerán algunas de las cosas que pidió Dianna.

David, Alan, Hanna, Leo y Liena estaban listos para irse y llevar a Clara a un lugar seguro, Kyala había decidido quedarse con el objetivo de informarles si encontraban más información en el búnker o si ya podían regresar.

—¿Segura? —Le preguntaron Leo y Liena, ambos eran sus compañeros más antiguos y sus mejores amigos.

—Si, los ayudare desde aquí —Respondio con una mirada de conviccion—. De eso pueden estar seguros —Agrego abrazando a sus amigos—. Cuídense.

—Tu igual —Le dijeron Liena y Leo despidiéndose.

Los grupos subieron a los Vehículos y comenzaron el viaje dejando atrás el valle de la esperanza.

David y los demás estaban preparados para un viaje del que quizá no podrían volver pero era mejor tomar ese riesgo si les daba la oportunidad de salvar a Clara que simplemente dejarla en Edén para que muriese.

Después de varias horas habían salido del valle de la esperanza y llegaron a un prado cubierto por hiervas altas perfecta para que un Híbrido se oculte para asechar a una presa.

—Bien hasta aquí llegamos nosotros —Le informo Nicholas a David usando el comunicador con el que contaban los vehículo.

—Gracias por todo amigo —Le respondió David desde el otro lado de la linea.

—Mantengase a salvo ya hemos perdido a mucha gente —Agrego Nicholas y luego cortó la comunicación—. Espero que les vaya bien...  —Se dijo así mismo y luego cambio su rumbo para seguir con su misión.

El sol se había ocultado dejando paso a la oscuridad de la noche, la única iluminación que había eran la de la Luna, las estrellas y las pocas luces que el Vehículo "KENT" tenía incorporada para iluminar el camino. No podían detenerse a descansar en un lugar como así, ya que serían un blanco fácil para los Híbridos y para los bandidos que posiblemente merodeén por la zona así que decidieron seguir con su viaje.

David era quien manejaba el vehículo mientras recibía instrucciones de Alan para saber hacia a donde ir. Ya estaban un poco cansados pero sabían que ese lugar era muy peligroso para descansar y que debían estar alerta a cualquier posible ataque, no solo de los Híbridos sino también de los bandidos que posiblemente merodeaban por las cercanías.

—¿De verdad creen que una ciudad sea el lugar más seguro al que podamos ir? —Pregunto Alan sosteniendo el mapa de la ciudad a la que se dirigian—, se supone que están repletas de Híbridos de nivel 4 y 5.

—Oye, oye ¿Y a donde más podemos ir? —Le pregunto Hanna desde el asiento de copiloto—, no hay lugares seguros.  Clara corre peligro en Edén y los demás poblados aliados fueron destruidos por los Híbridos. Si queda algún otro pueblo por ahí ha de tener problemas con el nuestro y nos verán como enemigos.

—¿Que tal si les decimos que no somos de Edén? —Pregunto está vez David.

—Ojala fuera tan fácil —Le respondió Liena luego de reír un poco por la pregunta de su amigo—. Estamos en una fortaleza rodante, un vehículo así no pasa desapercibido —Les dijo con obviedad— lo más seguro que cuando nos vean llegar vayan a verificar quienes somos y de dónde venimos.

—Asi es... —Agrego Alan completamente de acuerdo con Liena—. Y con las ciudades antiguas pasaría algo similar ¿No lo creen? Seguro que ni nos acercamos a la entrada de la ciudad cuando ya tenemos una manada de Híbrido tras nosotros.

Tras esas palabras todos permanecieron en silencio pensando mejor en sus opciones, no importaba que eligieran el peligro seguía siendo enorme pero la opción más viable era ir a la ciudad antigua y usar la loción que les entrego Sara para ocultar su aroma de los Híbridos.

—Tanta charla ya me dio hambre... —Susurro Hanna con aburrimiento—, iré a ver cómo está Clara.

Hanna se puso de pie y fue a ver cómo seguía su amiga, mientras tanto David y los demás seguían pensando en lo mejor que podían hacer para sobrevivir.

—Ir a la ciudad es lo más seguro —Les dijo Liena a sus compañeros—, tenemos el líquido ese que oculta nuestro aroma de los Híbridos así que solo tenemos que preocuparnos por encontrar un lugar donde escondernos rápido si es que nos ven llegar. 

—Luego podemos colocar algunas trampas alrededor para que nos ayuden a defendernos de los Híbridos —Agrego Alan pensando en las mejores cosas que podían hacer para defenderse de los Híbridos cuando llegaran a una ciudad.

—Bien, entonces ya sabemos que hacer —Hablo David sin apartar su vista del camino.

Repentinamente se escucho un grito en la parte trasera del vehículo. Liena y Alan fueron corriendo para asegurarse de que Hanna y Clara estuvieran bien al llegar se encontraron con alguien a quien no esperaban ver allí.

—¡¿Abigail?! —Exclamaron ambos al mismo tiempo.

—Hola, hola —Saludo nerviosamente con una sonrisa leve.

—¿Que haces aquí? —Le pregunto Alan.

—Estaba en la cabina de artillería —Acuso Hanna severamente. Parecía una adulta regalando a un niño, aunque Abigail era mayor que todos los demás en el vehículo.

—Soy la líder científica de Edén y acabamos de averiguar qué Clara no es una persona común, también que el diario ese que nos mostraron tiene las ubicaciones de otros búnkeres con posibles recursos... Así que pensé en que irían a esos lugares para obtener respuestas ¿Como esperan que me quede por fuera? —Pregunto con cierta gracia en su voz caminando a la cabina del piloto. 

—No iremos a ningún Búnker —Nego Liena al instante—, el diario con las coordenadas se quedó en el pueblo con Sara..., Creo.

Abigail llevó su mano a un pequeño bolso que tenía colgando al lado de su cintura y saco precisamente el libro que necesitaban.

—Toma —Dijo y se lo arrojó a Alan—, lo tomé cuando Sara y el otro chico fueron a buscar a los demás que los ayudarían.

Abigail camino hasta el asiento del conductor.

—Aun lado —Le dijo a David tomando el control del volante, aunque había parecido más una orden—. Ir a la ciudad es muy peligroso, especialmente con este vehículo.

—No, pero tenemos la loción que oculta nuestro aroma —Dijo Hanna buscando unos de los frascos para pasárselo a Abigail.

—No me refiero a los Híbridos —Nego con seriedad sin apartar su vista del camino—. Los Merodeadores no dejarán pasar la oportunidad de conseguir un vehículo como este.  

—¿Quienes? —Cuestionaron los chicos confundidos. A pesar de que habían participado en varias misiones fuera del pueblo no habían oído hablar sobre unos Medioriadores nunca, solo les habían dicho que tuvieran cuidado con ciertos grupos de enemigos de Edén y con los Raiders. 

—Son una gente rara que se la pasan recorriendo las ciudades antiguas buscando tecnología para vender o fabricar su propio equipo —Respondio desinteresada, casi como si no le hubiera importado contarle a los chicos sobre esa amenaza desconocida para ellos—. Lo más seguro es ir a uno de esos búnkeres y esperar a que alguno este en buen estado. Tardaremos un par de días en llegar y quizá no se encuentre exactamente en la misma ubicación pero bueno... —Suspiró.

—¿Y quien te puso al mando? —Le pregunto David de forma retadora—. Te recuerdo que ya no estamos en el pueblo y posiblemente ya ni seamos parte de él.

—Soy la mayor, eso me pone al mando —Respondio mirando a David con una sonrisa de superioridad—. Además tengo más experiencia que ustedes en todo y por lo visto pensaron que solo durarían unos días fuera por qué solo trajeron un poco de comida.

—No imaginábamos que fueramos a tener un polizonte —Dijo Hanna desde la parte de atrás del vehículo mientras comía un trozo de carne cerca.

Al verla haciendo eso Alan soltó un suspiro moviendo la cabeza de un lado y luego camino hasta su compañera y le quitó la comida.

—Oye, oye, ¡Dámela! —Le exigió.

—No tenemos mucha comida y ya te la estás acabando toda —La regaño con tono severo alejandola más de las provisiones.

—Bueno tengo hambre —Se excuso la rubia sabiendo que su compañero no la dejaría tomar algo para comer—, la comida es para comerla.

—Siempre tienes hambre —Agrego Leo riendo tras ver esa situacion, desde que conocía a Hanna ella siempre había sido así.

—Bueno haremos una parada lo quieran o no, es necesario hacerla para conseguir provisiones —Dijo y luego le pidió el asiento de conductor a David.

Abigail aceleró el vehículo y tomo rumbo a un lugar que los chicos aún desconocían pero en donde según ella podrían conseguir provisiones.  

====== Fin Del Capítulo ======

Con esto termina la primera parte de la historia.

Antes de iniciar con la siguiente parte me tomaré un tiempo para editar los capítulos que ya he publicado pero aún no he corregido.

Si has llegado hasta aquí me gustaría saber tu opinión sobre la historia y, si es posible, me gustaría que me dijeran en que cosas puedo mejorarla.