"El prólogo es el inicio de una gran aventura llamada vida alterna mejorada "
Anónimo.

16 de Agosto de 2010.

Dakota Klarsson.

Algo no está bien.

Algo está muy mal.

Algo malo está pasando.

Mi mente y cuerpo gritan que corra, que me esconda pero ¿De qué? ¿De quién? ¿Por qué?

Mamá le grita que se largue y yo no sé qué hacer, estoy escondida en el armario mientras veo su discusión. Ella dijo que no me moviera, que si algo malo pasara me quedara en mi lugar sin mover ningún músculo.

Lo hago, intento con todas mis fuerzas no salir. Pero quiero ir y proteger a mamá.

Ronald tiene algo que mamá llama arma de fuego, dice que son malas., peligrosas y que nunca las use porque puedo herir a alguien sin querer, la acaba de sacar de algún sitio en su espalda. Mamá mira rápidamente hacia donde estoy y entiendo lo que quiere decir " no salgas Dak, no salgas, mantente en tu sitio''.

Al parecer Ronald no lo entiende y siento como una presión en el pecho por eso, mami deja de verme y siento miedo.

¿Cómo la entendí? ¿Por qué mamá está temblando y no deja de sudar? ¿Por qué se siente bien que él no lo notará? No lo sé, no entiendo nada. Se supone que ellos son pareja y tienen una bonita relación, siempre paseamos juntos y comemos como una familia los domingos.

Me escondo más en mi lugar intentando no hacer ruido, no me gusta hacer enojar a mamá .

—¿Dónde está?

—¿Quién?

La voz de mamá tiembla, así que deben estar hablando de mí.

—Tú sabes de quién hablo Rebecca.

Ronald habla casi en un murmullo con su voz ronca y gruesa como esos señores que trabajan en la radio, mami dijo que es por culpa de su cigarrillo.

Mami niega con su cabeza y le susurra que estoy en clases de ballet. Él no hace nada y susurra algo que no escucho, el arma se mueve en su mano de un lado a otro, mami ve hacia los lados buscando algo, Ronald levanta el arma cuando mami corre pasando por su lado, entonces empiezan a sonar unos ruidos muy fuertes, como los de la televisión pero peores.

Uno.. se agarra el brazo izquierdo con fuerza con su mano derecha.

Dos... mami cae hacia atrás con fuerza, su frente tiene una mancha roja.

Tres... no veo que mami respire.

Cuatro... ella no se mueve

Cinco... otro hueco en su pecho

Seis... ¿Qué pasa con mami?

Siete, mami está perdiendo mucha sangre.

Por más que miro no se mueve. No me mira. No parpadea. No veo el movimiento que hace su pecho al respirar. No veo vida en ella.

Llevo una mano a mi boca cuando siento que voy a sollozar.

<< Has silencio Dakota , hazlo por mamá >>

Ronald voltea hacia todos lados y después camina hacia el lavamanos de la cocina que está abierta al resto de la casa, así que veo todos sus movimientos, empieza a cantar una canción de cumpleaños feliz mientra ve hacia dónde está mamá, sus ojos no tienen ningun brillo y me preocupa que lleve tanto tiempo sin moverse.

El da un pequeño recorrido a la casa buscando algo, no mira en ningún momento hacia el armario de los zapatos, que es donde yo estoy, siempre he odiado este lugar por que es pequeño y suele tener un olor raro que no me gusta.

—¡Dak! ¡Dak cariño te traje un súper regalo de cumpleaños!

"Hoy es mi cumpleaños número siete ". Y no me gusta esta sorpresa de cumpleaños, si mamá no es feliz yo tampoco.

Él sabe que si estuviera en casa saldría corriendo a sus brazos.

Él grita muchas veces llamándome y yo no respondo. No salgo. No hago ningún ruido.

Unos minutos después él sale de la casa.

Casi una hora después llegan unos señores a la casa a recoger a mamá en una bolsa grande y me encontraron a mi.

Al principio me resisto de que me lleven por qué mamá se molesta si no le hago caso y me deja sin poder jugar con choncho el perro del señor Jhonn, nuestro vecino. Pero después de que papá llega y me dice que mamá se lo pidió antes de irse. Me dejó llevar a su casa.

23 de diciembre del 2011.

Dakota Klarsson .

<<¡Feliz navidad, mami! >> Ese fue mi primer pensamiento al levantarme, al salir de casa, al ver por la ventana mientras escuchaba su canción favorita que pasaban por la radio, al sentarme y empezar a hablar con ella.

Nadie nunca entenderá cuánto la extraño, cuánto necesito a mi mamá.

—Hoy fuimos a comprar el pavo como siempre hacíamos mamá. Papá me compró una linda muñeca — mi voz se entrecorta y siento las lágrimas formándose pero me niego a dejarlas ir otra vez— también le compramos ropa a la muñeca, ¿Sabes cual? Es la muñeca tuya. La que soñamos en ir a comprar para navidad, pero que no pudimos.

Sigo hablando con ella un rato más hasta que siento que ya le conté todo lo que debía saber, hasta que esas lágrimas que intente retener dejan de salir y hasta que veo como papá camina hacia mi.

Papá se ha comportado como un buen padre desde que mamá murió, me ha cuidado y se ha mantenido a mi lado. Pero siento que todavía no tenemos esa confianza que teníamos nosotras. La señorita Grey — mi psicóloga — me dijo que no podía comparar la confianza y el cariño que cada uno me daba o dió. Pero a veces es inevitable pensar que haría ella o que no haría en ciertas circunstancias.

Un año ya pasó desde que ella fue asesinada, el juicio pasó hace tres meses, muchas personas hablaron como testigo diciendo mentiras sobre mami asi que yo tuve que hablar varias veces contándoles cómo pasó todo para que esas mentiras no dañaran el juicio.

Me gustaría decir que me estoy recuperando poco a poco pero mentiría. Han pasado muchas cosas y sé que vendrán muchas más los próximos meses, la principal de esas cosas que pasarán será nuestra mudanza. Papá y yo decidimos que nos mudaremos definitivamente de Londres y nos iríamos al otro lado del mundo.

Por eso está visita de mamá me toma más tiempo para despedirme. Se que la visitaremos los días necesarios y que vendré para su cumpleaños, pero eso no hace todo esto más complicado al saber que la dejaré sola.

<< No la dejaremos sola, haremos lo que ella quería. Ser feliz >>

— Listo papá., Ya nos podemos ir.

Papá solo asiente y me cuenta que nos iremos para año nuevo.

El primero de enero del dos mil doce me voy y empiezo una nueva vida en un nuevo país. Me duele, pero a la vez me hace feliz saber que dejare esto atrás. Sé que un lugar no cambiará las cosas, pero si cambiará como me siento con respecto a lo que me rodea.

Papá y la abuela siempre dicen que me tengo que ir de los lugares donde no soy feliz y eso es lo que haremos, irnos de donde no somos felices, dónde a pesar de los maravillosos recuerdos los malos me hacen sentir asfixiada y con ganas de nunca salir de mi habitación.

Tengo demasiados recuerdos maravillosos acá en Londres, mamá y yo siempre visitamos sitios nuevos e intentamos descubrir hasta lo más mínimo para algún día decir "mira mundo, las señoritas Klarsson lograron lo que siempre se propusieron".

— Papá.

— Si, cariño.

— ¿Cuando estemos allá podemos visitar en nuestros tiempos libres todos los lugares que podamos?

Mi vista se mantiene siempre en el frente para no tener que ver a papá o ver el paisaje de irnos del cementerio, solo veo el asfalto negro que casi pareciera gris por el paso de los años. Pero a pesar de eso se que quitó su vista del camino para verme por una milésima de segundo.

— ¿Quieres eso?

— Si...

Mi voz sale en un pequeño murmullo y me obligó a sonar más convincente, quiero esto, pero eso no evita sentir que podría hacer sentir a mamá mal en dónde sea que esté por incluir a papá en algo que era solamente de nosotras.

<< Se que debes pensar que estoy loca, pero mamá y yo lo hacíamos, era nuestro momento especial en dónde solo éramos felices siendo nosotras sin nadie más... Y quiero compartirlo contigo.

Giro un poco mi cabeza para ver si la cara de papá demuestra que piensa y lo único que encuentro es una pequeña semi sonrisa y su labio temblando tanto que yo lo noto.

— Será un verdadero placer participar en ese momento tan especial para ti cariño.

19 de marzo del 2012.

Dakota Klarsson.

Todo a mi alrededor da vueltas y siento que en algún momento volveré a vomitar .

Papá canta mi canción favorita en voz muy baja, mientras yo solo me mantengo apoyada en su pecho esperando esperando que todo este mareo acabe.

Este malévolo monstruo que se está llevando lo mejor de mi me hace sentir mal siempre. Mi estómago no deja de doler casi en ningún momento, papá y yo venimos muy seguido al hospital por ese motivo, pasamos muchas horas en esa sala mientras me inyectan el suero, papá dice que es mi tratamiento y que hará que este monstruo se aleje de mi vida de una vez por todas.

Mi boca se ha sentido muy rara con esas pequeñas costras que empezaron a salir desde que empezamos a venir. Papá siempre dice que todo pasará y que estaré mejor pronto, pero ya han pasado dos meses y todo sigue igual.

Me alejo a él cuando siento que voy a volver a vomitar, es solo una falsa alarma pero la sensación es fuerte mientras espero que las náuseas se vayan.

Papá sigue cantando hasta que un ruido fuerte suena y me tapo los oídos con las manos esperando que conteste la llamada. Mi cabeza normalmente duele mucho y los doctores dicen que eso se mantendrá así un tiempo mientras todo esto termine.

—Cariño, es la tía Khate.

Solo levanto mi cabeza y asiento, hablar con mi tía siempre me hace sentir mejor. Es como ese pequeño momento en dónde soy feliz por qué es tener a alguien que me entiende. Ella pasó por este monstruo hace mucho tiempo.

La pantalla se ilumina mostrando a una tía Khate sonriente y empieza un pequeño momento de alivio hasta que las náuseas vuelven.