" No solo se ve al mounstro, también se siente"
Alisson, libro pecado ( futuramente en mi perfil )

Dakota Klarsson
28 de Marzo del 2022

"𝙸𝚗𝚜𝚝𝚒𝚝𝚞𝚝𝚘 𝙼𝚎𝚗𝚝𝚊𝚕 𝙵𝚘𝚛𝚋𝚎𝚜 "
"𝙸𝚗𝚏𝚘𝚛𝚖𝚎 𝚍𝚎 𝚕𝚊 𝚙𝚊𝚌𝚒𝚎𝚗𝚝𝚎 𝙽𝚞𝚖𝚎𝚛𝚘 01626"

Releo lo que aparece en la cubierta del sobre y pienso si seguir leyendo, tan solo el nombre del paciente me dejó con el cuerpo temblando y siento que no soy capas de poder continuar.

Uno de los hombres de blanco me mira con lo que creo es una sonrisa por debajo del pasamontañas. Tomo aire varias veces aún cuando mis pulmones parecen no tener la fuerza-ni las ganas- de soportar el aire que entra por mucho tiempo, mis manos no dejan de temblar por más que obligo a mi cuerpo que deje de hacerlo y mi respiración errática no quiere volver a la normalidad.

<< Vamos Dakota nosotras podemos. >>

"La valentia no es algo que se hereda si no que se aprende" Farfullo en busca de un poco de autocontrol. El cual no llega.

Son varias hojas, con un simple vistazo lo sé, el sobre cerrado color amarillo está abultado por la cantidad de páginas que en su interior se alojan. Lo abro lentamente no sé si por masoquismo o esperando que desaparezca mágicamente.

Cosa que no sucede por qué sigue existiendo.

Empiezo a leer con el corazón en un vilo a la espera de lo peor en estas páginas. Y no me equivoco, lo que encuentro en las primeras líneas me hace correr hacia el baño para vomitar, pero no llego hasta el baño por qué las cadenas que están en mis pies son demaciado cortas y termino expulsando todo a mitad de camino, el hombre de blanco que hasta hace poco sonreía se aleja y gime de asco, le doy asco y soy un asco.

Mis ojos se llenan de lágrimas y el olor nauseabundo empieza a llenar la habitación de a poco. Uno de los hombres en grandes zancadas se acerca sin que lo noté y me empuja por la espalda con algún objeto duro haciendo que caiga en cima del vómito.

Ya no las reprimo y empiezo a llorar, lloro por esto, por lo que deje fuera de esta habitación, por aquella taza que deje sin lavar aquella mañana, por mi tía khea, por mi novio, por mi padre que yo no siento que lo sea y por sobre todas las cosas... Por mi libertad, aquella libertad que se me fue arrebatada sin ningún motivo que yo terminé de entender.

-!¿Que mierda?¡ - Ese grito, ese grito es lo último que escucho antes de que todo se vuelva negro.

[...]

Me pesa la vista mientras intento ver con claridad mi alrededor, todo tiene un olor a cloro que me parece molesto y la luz de la habitación es más intensa que el acostumbrado casi penumbras que ya se me hacía tan familiar.

Intento levantarme pero se queda en eso, en intento.

A mi mente empieza a llegar imágenes de lo que pasó antes de que quedará inconsciente haciendo que me levanté de un salto de la cama ocasionando que el mundo empieze a darme vueltas  y casi quedé en el suelo nuevamente, pero unas manos evitan mi inminente caída.

-El señor ordenó que no la dejáramos levantarse de la cama hasta que lea todos los documentos.

Miro a la persona que me acaba de hablar y lo único que encuentro es una máscara blanca evitando que sepa quién es. Me ayuda de manera delicada a que me siente en la cama nuevamente y me entrega el sobre.

Mis ojos se ponen llorosos pero las arcadas no vuelven, agradezco mucho que no vuelvan por qué no quiero repetir la escena de hace unos minutos -o de hace unas horas, no lo sé- ya que se que está ves me harían comer el vómito, por que  una ves me la pasarán ¿Pero dos?, Dos veces en un día la misma situación significaría que me harían daño de una manera u otra.

Estoy segura, que si volviera a vomitar en uno o dos días después de hoy, me harían comérmelo.

Abro el sobre de manera lenta nuevamente y empiezo a leer.

Paciente que llegó al instituto por una revisión sobre su problema y termino recluida después de notar su nivel de peligrosidad para su persona y los demás.

<<Ella... ella era solo una bebé cuando la obligaron a alejarse de su familia>>

La luz de la habitación empieza a titilar, así que alejo las lágrimas, se qué eso fue una advertencia para que siguiera leyendo.

La paciente como le gustaba que se refirieran a ella llego por un cuadro de comportamientos extraños que alertaron a su familia sobre que algo grave estaba pasando, después de algunos días de exámenes se descubrió el por qué.

Paso un año en ese lugar en España hasta que fue retirada y llevada a Londres para pasar otra temporada de dos años en un mejor psiquiátrico. Tres años de su vida en esos lugares y ocho meses en casa aislada de las demás personas personas, para una niña, casi una bebé eso tuvo que haber sido terrible.

La retiraron de los dos centros por el mismo motivo.

El resto de las hojas solo son anotaciones sin sentido de su nana y fotos de la paciente en diferentes lugares , estaciones y momentos de su vida que no comprendo ¿Por qué eso estaría allí?

Tomo grandes bocanadas de aire por mi boca esperando que de esta forma llenar mis pulmones de aire rápidamente, después de varios intentos lo logro y sostengo las hojas en forma de un gran abrazo a mi pecho, es extraño, pero quisiera retroceder el tiempo y abrazar a esa niña y consolarla esperando que entienda que todo estará bien, que ya nadie le hará más daño.

[...]

Algo golpea mi pierna haciendo que me despierte, no sé en qué momento me quedé dormida, pero tuvo que haber sido hace mucho por qué recuerdo claramente que soñé con una niña con grandes trenzas jugando en un jardín inmenso mientras cantaba una canción infantil.

Abro mis ojos lentamente esperando que está ves, igual a la anterior, la luz me deje ciega por unos instantes, pero no sucede.

En cambio a mi vista llega un hombre con barba y mirada de lujuria que me ve como si yo fuera el mejor trozo de carne que queda en el mercado.

Me alejo de manera instintiva pegando mi espalda a la pared, entonces notó que una de sus manos estaba en mi pecho y que los papeles que sostenía cuando me quedé dormida ya no están conmigo, en cambio los tiene él en su regazo. La mano que hasta hace unos segundos estaba en mi pecho izquierdo la lleva a su boca y se toca los labios de forma vulgar con ella. Siento repulsión por su gesto, pero en ves de demostrarlo de alguna manera más valiente lo único que hago es empezar a llorar.

Otra ves lloro de miedo y asco.

Ronald sentado en su silla negra que tanto le gusta para observar mejor mientras duermo, con ese asqueroso olor a cigarro y alcohol de mala calidad empieza a mover los labios susurrando cosas que no tiene sentido a mis oídos hasta las empieza a decir en vos alta.

-¿Sabes dak? Tu cuerpo me recuerda mucho al de tu madre, claro, te falta no tener esa mirada de asco hacia mi -su mano empieza a moverse de manera "provocativa" por su barbilla mientras cada sílaba sale de su boca-... Creo que sí la cambiamos por una mirada de lujuria y enojo serías la copia exacta de ella. Tu madre era una perfecta puta cuando quería, una dama según ella pero en el fondo todos, hasta tú sabía que era una verdadera puta. - se detiene un segundo y suspira con pesar, pero ¿Pesar de que? No entiendo, y ya el terror se está apoderando de mi.

<< Recuerdo cómo conocí a tu madre como si fuera ayer... Ella llego a la clínica donde yo trabajaba por un intento de aborto fallido en casa, por qué si pequeña, ella quería deshacerte de ti desde un inicio, la ayudamos a que ninguna de las dos murieran en ninguno de los días que se encontró el la clínica. En ese entonces yo trabajaba como psiquiatra así que la ayude para que superará su miedo a ser madre. En ese entonces mientras estaba hospitalizada creamos algo así como un vinculo y me acosté con ella varias veces, cuando le dieron el alta seguimos en contacto y a pesar de estar embarazada de una asquerosidad como tú le sacamos provecho la libido que le causaban las hormonas y nos acostamos muchas veces, mejor dicho miles en esos siete meses que duraste dentro de ella.

No, no, no, no, ¡¡Noo!! ¡Mi ma-dre! ¡¡Mi madre no era de esa forma!! .

Me tapo con las manos las orejas y niego repetitivamente lo que está diciendo. Quiero negar en vos alta lo que dice pero solo me salen palabras incomprensibles hasta para mí.

Ronald se me acerca de forma pausada y hasta un tanto descordinada para quitarme las manos de las orejas y empezar a besarme el cuello, lucho contra él para que me suelte, pero teniendo las manos y los pies inmovilizados poco es lo que puedo hacer contra él.

Cuando siento que su mano que no me sostiene las mias empieza a bajar a mi zona íntima me congelo. No encuentro la fuerza para moverme y mis ojos que ya estaban soltando lágrimas lo hacen de manera más fuerte, pero ningún sonido sale de mi. Nada.

Es como si mi mente hubiera entrado en un estado de shock total cuando esa mano empezó a bajar por mi cuello y tocar todo aquello que es mío y que solo yo tengo derecho a decidir quien toca.

Mi vista nublada no enfoca nada, pero eso no evita que mi cerebro tenga el resto de mis sentidos alertas, incluyendo la sensación que cada ves más baja por mi torso.

De forma repentina la sensación de la mano áspera de Ronald deja de estar en mi cuerpo y rápidamente recobro el poder de mi cuerpo haciendo que me vuelva un ovillo lleno que temblores y llanto que no deja de balbucear que la suelten.

No sé cuento tiempo pasa, pero me quedo en esa posición un rato, un rato muy largo.

Un rato tan largo que cuendo vuelvo a ser yo misma encuentro un dedo en la silla donde estaba Ronald la última vez que tuve control de mi persona...

Y una mancha enorme de sangre en los papeles que están en el piso.