10
Irina Pov
Él tenía razón. Mi feminidad se sentía estirada y deliciosamente invadida. Josef gimió detrás de mí cuando de manera gentil me empujó hacia adelante.
-Va a ponerse bastante más estrecha. Creo que Ivan necesita también un poco de atención, amor- indicó Josef mientras besaba todo el camino hacia mi cuello.
Ivan estaba en la cabecera de la cama de rodillas con su erección en la mano, esperando por mí atención. Una cremosa gota de pre-semen asomaba de la punta redondeada. Suspire mientras la lamía para luego meter el glande en mi boca. Su sabor masculino y salado llenaba mis papilas gustativas y me deleite con eso mientras Isaac se empujaba hacia arriba y me empalaba aún más en su polla.
- Voy a sacar el plug ahora, Irina La voz de Josef fue más profunda de lo normalNo sueltes a Ivan o te hare arrepentirte.
Gimotee en torno a la polla de Ivan mientras ésta me llenaba la boca, al mismo tiempo que Josef quitaba poco a poco el plug de mi ano. Sentí su pérdida pero no tuve tiempo para lamentarlo. Ivan me alimentaba con su pene centímetro a centímetro. Isaac bombeaba con suavidad dentro de mí, encontrando un lugar profundo en mi interior que hizo aumentar mi placer con cada embestida. Más lubricante recubrió mi ano. Los dedos masajeaban aquí y allá. Nunca había imaginado que podía sentirse tan bueno tenerlos a todos en mi interior al mismo tiempo. Josef metió dos dedos llenos de lubricante en mi ano, preparándome para tomar algo, que, yo sabía era mucho más grande que los plugs que habían utilizado en nuestros últimos encuentros. Me tense cuando sentí el pene de Josef en mi estrecha entrada pero sus manos recorriendo mi espalda me hicieron relajarme ante el contacto. Ardió cuando él presionó contra mis músculos tensos e inexpertos, pero no estoy dispuesta a dar marcha atrás, los necesito en mi interior.
- Sostente, cariño. Eres muy, muy estrechaLas manos de Josef se sentían como hierros calientes en mis caderas. Me sujetaba con fuerza, atrayéndome hacia él, como si temiera que fuera a escapar, sus dientes mordían suavemente mi cuello que se encontraba muy cerca de su boca haciendo que los gemidos se me escaparan sin poder evitarlo.
- Dios, esto se siente bien. La respiración de Isaac llegaba en profundos jadeos hasta mis oídos, su control resbalando de manera obvia- Arquéate un poco, nena. Deja que Josef se deslice más profundo dentro de ti.
- Joder. Su boca me está matando Ivan se abrió paso de nuevo, llenándome la boca con su pene.
Me sentí como si pudiera fracturarme en mil pedazos mientras seguía la orden de Isaac. Cuando me arquee para poner mi culo en pompa, la polla de Josef se abrió paso más profundamente dentro de mí. Más ardor y estiramiento. No estaba segura de cuanto más podría tomar, pero el delicioso mordisco de dolor que me propino Jos en el hombro desgarró mi compostura. Yo gimoteaba y arañaba el pecho de Isaac, el cual gemía más fuerte cada vez que mis uñas se clavaban en su pecho.
-Relájate, cariño pidió Ivan. Su voz en mi oído me serenó. Sus manos me acariciaron el cabello y cambio las estocadas que daba en mi boca por otras lentas y profundas
-Eres bellísima. Eres de sobra mujer para nosotros, puedes aguantarnos a todos dentro de ti, mi reina- alago Josef proporcionándome confianza como solo él podía hacerlo.
- Eres nuestro todo, Irinaagregó Isaac tras las palabras de Josef Relájate y deja que nos ocupemos de ti cariño. Respira profundo y empuja hacia afuera. Deja que Josef se hunda en ti, así todos podemos darte placer.
- Sí. Dios, déjame entrar, Irina. Me muero por estar muy dentro de ti. Nunca he deseado algo tanto como deseo este dulce agujero tuyo- admitió Josef mientras presionaba delicadamente contra mí, de manera constante, obligándome a tomar poco a poco cada centímetro de su ancho miembro con cada pequeña estocada y solo por él estaba dispuesta a hacerlo.
Isaac tomó la cadena que unía las abrazaderas y tiro de ella, retorciendo mis pezones. Cuando gemí ante eso, me rodeó con las manos y separó bien mis nalgas para Josef.
- Vamos. Amor. No te resistas. Tómalo todo- me insto Jos antes de abofetear mi glúteo derecho con una fuerza increíble.
Un grito ahogado afloro desde el fondo de mi garganta haciendo que el miembro de Ivan saliera de mi boca y justo en ese momento de distracción Josef se deslizó por completo en el apretado anillo de músculos que le oponía resistencia. El ardor estaba allí, pero también estaba un loco repique de sensación, una plenitud que estimulaba terminaciones nerviosas que no sabía que existían. Los minutos pasaron con cortas embestidas en espera de que me adaptara a la nueva sensación que no lograba terminar de procesar. Cuando él se retiró lentamente, Isaac me penetró profundo y en el momento que abrí mi boca para chillar por el placer que me causaba la invasión, mi boca también fue llenada por el miembro de Ivan.
-Dios, esto está más apretado de lo que imaginaba- gimió Isaac al borde del éxtasis.
-Sí siseó Josef Está tomando cada centímetro de mi polla y estoy tan complacido por eso- la aprobación es su voz causando que mi placer se multiplicara- No creo saciarme nunca de ti cariño. Siempre querré disfrutar de ti de esta forma y de cualquier otra que me permitas- admite acariciando mi espalda antes de agarrar mis caderas con fuerza y atraerlas hacia el para penetrarme de una sola estocada que me hace chillar.
Sus palabras y brusquedad hicieron que el placer dentro de mí se encendiera al rojo vivo. Cuando volvió a penetrarme y a alabarme por el placer que les daba o lo mucho que me estaba dejando complacer, Josef me llevó más cerca del orgasmo. Mientras retrocedía, Isaac se empujaba hacia arriba, acercándose a mi matriz y lancé otro grito placer. Inflamada, excitada, abatida por la inminencia de mi orgasmo, tire del miembro de Ivan, atrayéndolo casi a la parte posterior de mi garganta.
-Joder, hermanos, voy a morir aquí, lo está haciendo mejor que nuncala voz de Ivan sonaba ahogada por la fuerza de la succión que llevaba sobre su miembro.
Isaac volvió a empujar su erección hacia arriba.
- Mierda, ella es como un tornillo sobre mi polla. Esto es demasiado bueno. No aguanto más. Irina, amor mío, córrete para nosotros
Me pidió Josef mientras me follaba con estocadas largas y lujuriosas.Los otros se unieron. Eran como una máquina bien engrasada y correctamente programada. Cuando Josef se metía profundo en mi ano, Isaac se retiraba.
Cuando Isaac me follaba el coño, Josef sacaba su miembro, casi por completo de mí. Cada sensor de placer en mi cuerpo se activó. Ellos me colmaban de sus alientos jadeantes y devoción. Ivan acariciaba mi cabello y lo tomaba con fuerza para controlar su placer. Isaac empleaba su lengua en torno a mis pezones sensibles y sujetos por las abrazaderas. Josef me mordisqueaba el cuello, su aliento caliente haciéndome temblar todo el cuerpo mientras me susurraba al oído lo mucho que le gustaba mi entrega.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro