Aaron, Alex y Teo entraron en la cafetería notando el silencio y las miradas furtivas a la mesa donde estaban las chicas.

- Se puede saber que pasa? - dijo Aaron a los chicos.

- Ni idea pero no paran de mirar a las chicas - dijo Teo.

- Dí mejor que no paran de mirar a una; a Emma para ser más exactos. - dijo Alex.

Aaron gruñó, los chicos de su manada lo oyeron y apartaron la mirada enseguida. Fue hacia la mesa sentándose al lado de Emma mientras que Alex y Teo se sentaron enfrente de las chicas. Aaron vio que Damian no dejaba de observar a Emma, así que cogió su barbilla y la dio un beso.

-Que estás haciendo Aaron?

- Besar a mi chica.

- No estábamos enfadados tú y yo? -dijo Emma alzando una ceja.

- Enfadados? Cuándo? a mí me parece que no.- dijo sonriendo.

- Lo que tu digas - dijo volteando los ojos.

- Emma escucha, lo siento e sido un idiota, ya tienes demasiadas cosas en las que pensar...

- Y sí te vienes a mi habitación y vemos alguna película?- dijo cambiando de tema.

- Claro, me gusta la idea - le pasó el brazo por el hombro.

Emma sabía lo que Aaron estaba haciendo, se había fijado que cada vez que Damian miraba hacia ella, Aaron se acercaba; un poco más y terminaba sentándose en las piernas de Emma, aunque la verdad no la molestaría que acabara así ( no pienses en eso, malditas hormonas ). Le daba la sensación que estaba intentando marcar territorio con ella para que Damian dejara de mirarla. Así que decidió hacer lo mismo, giró la cabeza hacia Aaron y se acercó tanto a él que sus labios casi se tocaban y le dijo:

- Que peli te apetece ver?

- No lo sé - dijo susurrando mirando sus labios - y tú cuál quieres ver?

Emma se mordió el labio inferior fingiendo pensar que película ver, estaba aguantándose la risa al ver la cara de circunstancia de Aaron, así que le dio un pico súper rápido y se giró hacia los chic@s diciendo:

- Y a vosotros que película os apetece ver? Porque os apuntais, verdad? - dijo alzando una ceja.

- Claro, nos apuntamos - dijo Alana hablando por los demás.

Todos se extrañaron al ver la cara de póquer que tenía Aaron, Emma se levantó antes de que se le escapara la risa y dijo:

- Ya e terminado.

Se fue a dejar la bandeja y Damian la interceptó.

- Hola preciosa.

- Creía haberte dicho que te comprases un bosque y te perdieras! - dijo Emma, no le daba buena espina ese chico.

- Alejate de ella, Damian - dijo Aaron levantándose como un resorte yendo hacia ellos furioso.

- Porque debería hacerlo? - dijo burlándose.

- Porque es mi alma gemela - dijo Aaron entredientes.

- Eso es verdad? - dijo Damian mirando a Emma.

- Sí - dijo ella.

- En serio estás con este chucho? Porque sabes que es uno, verdad? - dijo Damian

- No es un chucho, demonio; es un lobo y vale mil veces más que tú - y mirando a Aaron dijo: nos vamos ya? Tenemos mejores cosas que hacer que estar aquí aguantandole.

- Aaron asintió, veía a Emma muy cansada y una sesión de película y palomitas con ellos la sentaría bien, pero como ese maldito demonio hablara una sola vez más....

- Cuando te canses del perro buscame, estaré encantado de complacerte.

Y todo se fue al carajo.

Aaron le dio un puñetazo en la nariz haciéndole caer al suelo, Damian rápidamente le barrió con la pierna y fue el turno de Aaron caer. Se liaron a puñetazos, patadas, no podían transformarse por los humanos que había. Al rato cuando Alex, Teo y algunos demonios pudieron separarlos vieron que ni Emma, Alana y Sofi estaban allí. Damian se soltó de los que le sujetaban y fue hacia Aaron susurrando para que los humanos no pudieran oírle.

- Esto no quedará así.

- Cuando quieras y donde quieras hijo de puta - Aaron estaba furioso.

- Esta noche quiero ver a tu chucho, te voy hacer pedazos!

- Antes te mando al infierno, ya es hora de que alguien te dé una lección - dijo Aaron entredientes.

- Crees que vas a poder? - dijo Damian burlón.

- No lo dudes gilipollas!

- Esta noche en el bosque y veremos quién le da la lección a quién.

Aaron asintió, nunca le cayó bien Damian, era un imbécil sobre todo con las chicas; se fijaba en una, conseguía que se acostara con él prometiendolas el mundo y luego si te e visto no me acuerdo. Ahora le había echado el ojo a Emma y eso no lo iba a permitir. Aaron, Teo y Alex se fueron a la habitación de las chicas, llegaron y vieron a Alana y Sofi en el suelo comiendo palomitas y a Emma tumbada en la cama boca abajo con las manos en las mejillas viendo la película Percy Jackson y el mar de los monstruos. Emma miró hacia su dirección y dio unos golpecitos a la cama para que Aaron se pusiera a su lado. Le dejó sitio y Aaron se tumbó en la misma posición que ella.

- Todo bien? - le dijo Emma tocándole la barbilla, tenía un moretón - te duele? Puedo ponerte una crema para ese moretón.

- Tranquila mi amor, no es nada - dijo Aaron, le gustaba mucho que quisiera curarle, y por nada del mundo le diría lo que pasaría esta noche, demasiadas preocupaciones tenía ya. - Te gusta la película?

- Sí, fíjate que los protas son mestizos: mitad dioses, mitad humanos - dijo Emma moviendo las cejas de arriba abajo.

Aaron sonrió y dijo:

- Con todo lo que te has enterado hoy, ves esta película?

- Si quieres podemos hacer otra cosa! - y le guiñó el ojo.

- Que has dicho? - dijo él sorprendido.

- Nada - emma se puso roja, giró la cabeza a la película y pensó que no podía creer lo que había insinuado; pero que la pasaba? tener a Aaron tan cerca le estaba afectando, su mirada sensual y esos labios tan... tan comestibles.... Por dios Emma controlate y concentrate en la película.

- Sabes que puedo leer tus pensamientos? -dijo Aaron sonriendola.

Emma lo miró con los ojos como platos - no puedes hacer eso, es una invasión de la intimidad!

- Tranquila Emma solo lo e hecho ahora, me moría de ganas de saber porque estabas como un tomate.

- Pues no lo hagas nunca más y deja de mirarme, me desconcentras y quiero seguir viendo la película.

- Te desconcentro? En serio? - Aaron sonrió con una sonrisa seductora.

- Callate - dijo Emma

Aaron sonrió, la iba a desconcentrar más a menudo, pero por ahora y solo por ahora miraría la película, mientras comía palomitas pensaba en la noche, iba hacer entender a ese demonio de mierda que nadie estaría con Emma excepto él.