Anécdota de @Asteropell

Mi sobrina y yo tenemos casi la misma edad (soy mayor por tres meses) y afortunadamente a ninguna le había llegado La Doncella de Rojo. Ella decidió hacer una apuesta: a quien le bajara primero, perdería y tendría que darle dinero a la otra.

En un principio se me hizo algo estúpido porque nosotras no elegimos cuándo y no podemos impedir el ataque de Andrés de ninguna manera. Acepté; solo me quedaba esperar.

Yo estaba confiada en que ella menstruaría primero ya que se estaba desarrollando más rápido que yo. Pasaron algunos meses y ella aún no perdía, incluso llegué a pensar que yo perdería. Hasta que hace un mes, mi sobrina me llamó para contarme un secreto: el periodo por fin le había llegado, por lo que debía pagarme.

¿Adivinen quién tiene dinero? Pues yo no, porque la maldita no me ha dado lo que me debe.