Capitulo 27; No estuviste
-¿Estas segura? –Dilan insistía de nuevo –Puedo estar allí hoy mismo
-Ya te he dicho que no –Elena suspiro acomodándose en la cama –Ya tengo demasiada gente a mi alrededor controlándome Tu sigue con la campaña, estoy segura de que ahora mi imagen valdrá mas
-La prensa esta revolucionada –Dilan parecía eufórico –Cuando tu avises daremos una exclusiva y después rueda de prensa
-Para eso habrá que esperar a que me pueda levantar de esta maldita cama –Ella miro a la puerta y vio a Roberto entrar con un gran ramo de rosas rojas –Tengo que dejarte
-Esta bien, adiós –Dilan suspiro –Cuídate
-¿Y eso? –Elena miro el ramo
-Son de tu policía –Roberto sonrió -¿Dónde pongo este ramo?
-En el salón –Ella se encogió de hombros
-El salón ya parece una floristería –Richard entro a la habitación mirándola divertido
-Pues en la terraza –Elena miro a Roberto –Solo sácalas de aquí, me agobia tanto arreglo floral
-Como quieras –Roberto volvió a salir con el ramo
-Esas no te molestan –Richard señalo el ramo de rosas blanca
-Son distintas –No sabia bien porque, pero lo eran –Son tan, naturales
-¿Cómo estas nena? –Jou entro a la habitación y se acerco a darle un beso en la frente, después la miro fijamente -¿Desayunaste bien?
-Si –Elena negó con la cabeza
-En ese caso ¿Estas lista para recibir tu primera visita? –Jou la miro divertido
-¿Ya llego Luís? –Ella frunció el ceño
-Con un ramo de flores –Richard rió a mirándola –Le dije que mejor lo dejara en la entrada
-Te lo agradezco –Elena trato de sonreírle pero solo pudo hacer una mueca –Hacedle pasar y dejadnos solos, por favor
-Ya nos echa –Richard camino hacia la puerta sonriente –Si no estuvieras en cama te daría una buena
Elena se acomodo mejor en la cama y se cubrió bien con la sabana, con la mano trato de arreglarse un poco el cabello, aunque era consciente de que su aspecto seria horrible.
Escucho la puerta abrirse y miro hacia allí rápidamente para ver como Luís entraba y la miraba preocupado
-Gracias a Dios –El suspiro y camino hacia ella –Esperaba encontrarte peor
-Aunque no lo creas dudo que pudiera estar peor –Ella trato de sonreír
-Podrías estar muerta –Luís la miro con una mezcla de temor en sus ojos
-Pero no lo estoy –Elena le miro a los ojos
-Por suerte –Luís se sentó en el filo de la cama junto a ella y le tomo la mano -¿Cómo te encuentras?
-Dolorida –Elena le sonrió levemente
-Aun no saben quien fue –El hablaba sumergido en sus propios pensamientos –Y mientras no lo averigüen estas en peligro
-Tengo mucha protección a mi alrededor –Elena retiro su mano –Te lo aseguro
-Me asuste mucho –frunció el ceño –No podía imaginar nada peor
-Ya ves que no fue para tanto –Elena se removió incomoda, llevo la mano a su vientre e hizo una mueca de dolor
-Creo que es mejor que me marche y te deje descansar –El se levanto de la cama rápidamente –Volveré mañana
-Gracias –Ella asintió y observo como el se iba de la habitación
Pronto Roberto estuvo de vuelta en la habitación con una bandeja de comida y por supuesto la obligo a tomar unos calmantes . Le aseguro que Tom no vendría hasta pasadas las cinco de la tarde para que ella pudiera descansar y finalmente cayó rendida ante el cansancio. Cuando desperto quedaba poco para las seis y Richard le aviso que su invitado llevaba veinte minutos esperando en la sala mientras conversaba con Jou y con Roberto
-Hola –Tom se paro ante ella después de cerrar la puerta, la analizo en silencio y camino hasta su lado -¿Cansada de estar en la cama?
-Se nota que tu has recibido balas –Ella sonrió mirándole divertida
-Mas de las que quisiera –Suspirando se agacho para estar a su altura –Tengo que hacerte algunas preguntas
-Por supuesto –Elena asintió y el saco una pequeña libreta de su bolsillo y un bolígrafo
-Por supuesto no viste al que disparo –El la miro con el ceño fruncido –Pero ¿viste algo extraño ese día?
-No, nada fuera de lo normal –Elena se concentro en recordar –Estaba allí, montando a Diablo y de repente escuche aquel ruido y sentí el dolor en mi estomago . Después todo se volvió negro
-De acuerdo –suspirando el anoto en su libreta
-¿Crees que fue el mismo del coche? –Ella lo miro preocupada
-Si –asintió, después guardo la libreta en su bolsillo –Podríamos ponerte bajo vigilancia
-No pienso tener a un policía pegada a mi las 24 horas –Elena negó con la cabeza
-Como quieras –El sonrió ante la idea de estar 24 horas PEGADO a ella –Ahora acabo la visita policial y empieza la mía
-¿La tuya? –le sonrió -¿Qué tipo de visita es?
-La de un amigo –El levanto una ceja –Un amigo muy insistente
-Desde luego lo eres –Elena se quedo pensativa –Bonito el ramo por cierto
-Supongo que hablas del primero –El sonrió –Mande dos mas después de tu incidente y ahora creo que fue un error . Tienes un invernadero
-Será que no se les ocurre nada mas que mandarme –Elena se encogió de hombros
-A mi si –El le guiño un ojo, después metió la mano tras su chaqueta y saco una pequeña caja de bombones –Pero no se si una modelo se aventurara a perder su silueta
-¿Piensas que este cuerpo lo perderé por un poco de chocolate? –Elena le miro con una ceja levantada mientras tomaba la caja –Adoro el chocolate
-Entonces acerté –Sonriente la observo abrir la caja y llevar un bombón a sus labios, levanto la mano y delicadamente limpio su labio inferior mirándola a los ojos, después llevo el dedo a su boca y probo el chocolate –Sabe mejor de tus labios
-¿Estas coqueteando con una mujer convaleciente? –Elena lo miro divertida
-Estoy siendo insistente –El rió –Como prometí
-Y no te quito meritos –Ella miro la caja de bombones –Deliciosos
-Procurare traerte otra mañana –El le guiño un ojo
-¿Mañana? –Ella frunció el ceño
-Por supuesto –Tom se levanto de la cama –Soy muy insistente, ya te lo dije –y tras guiñarle un ojo salio de la habitación
A los pies de la escalera Jou, Roberto y Richard esperaban al nuevo invitado, nada mas poner un pie abajo le abordaron a preguntas
-Teníais razón –Tom les miro divertido –No me ha dicho nada que pueda servir para la investigación
-Se lo dije –Jou suspiro –Aun así le agradezco su ayuda
-Subiré ha hacerle compañita –Richard subió las escaleras a toda velocidad
-Hola –Lucas entro por la puerta y se paro ante ellos -¿Cómo se encuentra Elena?
-Bien –Roberto asintió –Por cierto, te agradece que pasaras a verla anoche, aunque estuviera dormida
-¿Se recuperara pronto? –Gonzalo se paro junto a su hijo y miro al policía fijamente
-Eso esperamos –Jou frunció el ceño
-Yo me marcho, mañana regresare –Tom camino hacia la puerta
-Le acompañamos –Roberto le siguió y Jou tras el
Al salir Tom camino hacia su coche hablando con ambos hombres, mientras Bernardo y Oscar permanecían parados junto al pozo mirándoles . Oscar no podía evitar estar molesto al ver a ese hombre visitándola y por si fuera poco Luís estuvo con ella esta misma mañana . Sin embargo el no había podido verla despierta, las veces que había pasado por la habitación estaba profundamente dormida
Observaron como el auto del agente se alejaba y Oscar abandono sus pensamientos al ver como Bernardo caminaba rápidamente hacia Roberto y Jou, le siguió
-Me gustaría ver a Elena –Bernardo se paro ante ellos –Quiero ver a mi hija
-Tiene que descansar –Roberto miro la ventana de ella
-Claro –Jou puso una mano en el hombro de Roberto y asintió –Venga, le acompañare
-Gracias –Bernardo suspiro aliviado y siguió al hombre hasta la puerta de la habitación
-Le dejaremos a solas -Jou extendió el brazo para abrir la puerta pero Bernardo se lo impidió
-La quiere mucho ¿Verdad? –Bernardo lo miraba a la cara
-Si, como una hija –Jou asintió –Es mi pequeña, yo la vi convertirse en quien es
-Y estuvo a su lado –Bernardo suspiro –Y nunca podré agradecérselo
-No necesito que lo haga –Jou sonrió –Con saber que ella tambien me quiere tengo mas que suficiente
-Y le quiere –Bernardo miro la puerta
-Lo se –Jou asintió, giro al pomo y abrió sonrió al ver la imagen que tenia frente a el
-Quieres estarte quieto –Elena miraba molesta a Richard que estaba sentado frente a ella comiéndose los bombones –Me los han traído a mi
-Tu estas malita –El sonrió –Además no deberías comerlos, perderás la figura
-Ya quisieras tu tener la figura que yo tengo –Elena siseo con los ojos entrecerrados
-Por supuesto –El asintió –Quisiera tener una mujer con esa figura
-¡Richard! –Jou sonrió al ver como su hijo se sobresaltaba y los bombones caían por la cama –Ven conmigo
-¿No iras a regañarme verdad? –El salto de la cama y camino hacia la puerta –Sabes que solo trato de distraerla
-¡No te lleves la caja! –Elena miraba como el desaparecía por la puerta con la caja y el resto de bombones en su mano . Suspiro y frunció el ceño al ver que Jou no cerraba la puerta, la miraba con cariño y después se marchaba Entonces vio a Bernardo que entro despacio mirándola con precaución -¿Ocurrió algo en la Hacienda?
-No –el trago saliva y se paro en mitad de la habitación –Quería ver como estabas
-Me han dado un tiro, ¿Cómo voy a estar? –Sonó mar ruda de lo que esperaba
-Ya –Bernardo paso la mano por su pelo –Me asuste
-¿A si? –Elena lo miro escéptica -¿Tambien te has asustado durante estos años sin saber que estaba haciendo?
-Se que me merezco eso –Los ojos de el se humedecieron –Me perdí muchas cosas
-Pues si –se quedo pensativa –Me operaron de apendicitis –lo miro fijamente –Nada mas llegar a Miami –frunció el ceño –Tuve un accidente de coche, al año de estar allí, por culpa de Richard –negó con la cabeza –Me apuñalaron
-Y yo no estuve –El la miro comprendiendo lo que quería decirle en verdad
-No, no estuviste –Ella se encogió de hombros –Tampoco estuviste cuando tuve mi primer pase de modelos, mi primera entrevista, mi primer premio –sonrió –Cuando compre mi primer auto, mi primera casa, cuando aprendí a montar a caballo –Elena lo miro fijamente –Ahora necesito a mi padre a mi lado, a Jou –llevo una mano a su vientre –Y necesito descansar
-Ya me marcho –Bernardo se giro y se quedo parado en el umbral de la puerta antes de salir –Nunca deje de quererte, eres mi hija
ELENA SE RECUPERA RODEADA DE AQUELLOS QUE LA QUIEREN, PERO NO dEBE OLVIDAR QUE TAMBIEN HAY ALGUIEN QUE LA ODIA; ALQUIEN QUE ESTA DISPUESTO A TODO POR ACABAR CON ELLA, Y QUIZAS ESE ALGUIEN ESTE DEMASIADO CERCA PRONTO SE DESCUBRIRA LA VERDAD O AL MENOS LA QUE TODOS PIENSAN QUE ES
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