Jean

— ¡Te estoy preguntan...!

—¡Jolietta!— Interrumpo a Jolie que da un respingo sorprendida—. ¡El no tiene ni idea de lo que sucede!

— Pero... fué lo que escuché, Amanda y Martin son hermanos, lo dijo—. Bas sigue con la misma expresión de terror que antes.

Resulta que Jolie ah despertado justo en el momento en que Bas soltó la bomba, y sí ha cambiado de nuevo su personalidad, estoy empezando a acostumbrarme a esos cambios repentinos de humor. Bastian por su parte  no ah podido explicar absolutamente nada, Jolie se ah alterado y el es incapaz de decir una sola palabra, tal parece que tiene los pensamientos congelados.

— Jolie escucha, estamos tan asombrados como tú, pero debemos oír a Bastian antes—. Alessia se sienta a su lado y toma sus manos para calmarla.

—Bastian, se que es algo muy fuerte, pero necesito que nos digas exactamente qué hay entre Amanda y Martin, aún no entiendo tu reacción.— El parece escucharme por fin, su respiración vuelve a ser estable, cierra sus ojos a modo de concentración y me observa.

— Sucedió hace muchos años, yo era un crío y mamá te llevaba en la tripa, visitamos a la abuela Stella en Mallorca, pero antes de salir de la ciudad, una mujer joven y bonita de cabello castaño oscuro, subió al coche y nos acompañó, su nombre era Marina, entendí que era amiga de mamá, hasta el momento en que ella comenzó a gritarle y la amenazó con contarle algo a papá.

<< Después de ese día no la ví más, hasta después de 3 años, seguía teniendo el pelo de su color natural, solo estaba más rellenita, con ojeras un poco débiles, tenía un aire despreocupado, algo desaliñado y el mal olor a alcohol se apoderaba de todo su cuerpo. Mamá, salía de casa en las noches, luego de asegurarse de que tú ya estabas dormido claro, pero como papá trabajaba mucho, ella se veía súper agotada. En una de esas noches Amanda llegó a casa y comenzó a discutir con mamá y fué esa noche, que ví por última vez el rostro de mi madre, luego de que ella saliera esa noche, solo pude llorar al pie de su tumba.

La habitación que hasta un momento ardía de la tensión, ahora es un lugar vacío , de completo silencio. 

Jolie y Ale no conocieron a mi madre, incluso Bastian no sabe la otra parte de la historia. Solo de pensar que el malnacido de Martin fue capaz de asesinarla, siento una impotencia enorme ¿Porqué no murió cuando le dí ese disparo? ¿ Porqué nos persigue aún?

— Chicos, esto es verdaderamente triste, pero creo que ah llegado el momento de terminar con Martin de una vez—. Ale rompe el silencio al fin, no se me ocurre nada mejor que estar de acuerdo. Definitivamente, esto tiene que acabar.

_________________________

Por fin llegamos a casa. Jolietta está impasible, como si nada. El traslado fue el  más silencioso y largo de toda mi vida, Bas se mantenía con la mirada perdida;  pensando sabrá Dios en qué, Alessia sin nada que opinar solo miraba por la ventana, Jolietta durmió durante un momento en el coche, pero al despertar volvió a ser la misma de hace unos minutos.

— ¿Me vas a ayudar ? o te quedarás ahí parado mirando mi intento de lavarme la cara—. Me dice Jolie toda insoportable en el lavabo de mi cuarto de baño, ahora no estoy seguro si es la misma de hace un rato, ya ni sé que creer, o sí, me estoy volviendo totalmente loco.

— Vale, ya te ayudo...

— Me quiero ir a España.

Me quedo un poco confundido al escuchar esa frase, sobretodo porque nunca pensé que las diría Jolie.

— ¿ De qué hablas Jolietta?

— Quiero visitar a mis abuelos, después de todo ellos son la única familia de verdad que me queda.

— Tienes razón, pero ellos no siquiera saben que estás viva. ¿ Cómo crees que van a reaccionar cuando te vean?

— No lo sé Jean, solo quiero irme lejos de aquí. Si quiero darme una oportunidad contigo, este no es el mejor lugar. Quiero sentirme segura, olvidarme de todo lo que ha sucedido y empezar de cero, lejos de Martin y Amanda o cómo sea que se llame.

Le seco suavemente, coloco la toalla a un lado y le observo a esos preciosos ojos café.

— Jolie, no tienes que irte a ningún lado, yo estaré aquí para tí, igual que Bas y Alessia, no estás sola, vale. Pero si quieres volver a España para ver a tus abuelos, no me opongo, al contrario iré contigo.

— Gracias principito.

El sonido de la puerta de mi habitación, interrumpe nuestra conversación. Al abrir es Alessia, entra a toda prisa con el teléfono en la mano y totalmente aterrada.

— Jean hay alguien al teléfono, creo que debes hablar tú.

Se me hace muy extraño ver la reacción de Alessia ante esa llamada así que solo contesto y todo mi cuerpo se tensa al escuchar la voz al otro lado de la línea.

— Hola mi querido hijo. Espero que a tu protegida le haya quedado claro que no debe meterse en asuntos de familia.

—¿ Qué quieres Martin?

— Oh, claro. Solo quería recordarte que una anciana traidora pagará por haberse hecho pasar por medium y ayudarlos a ambos a llegar hasta mi.

— No sé de qué me hablas.

— Oh querido mío, claro que sí lo sabes. Tal vez si te digo que es la abuela de tu pequeña cachorrita asustada, puedes recordarla.

Justo en ese momento escucho débiles balbuceos a una distancia no muy corta. Por Dios ese malnacido le hará daño a la señora Monique.

— Escucha bien lo que te voy a decir cabronazo, si le haces algo te juro que ya no vivirás para contar tu trágica historia de una vida de mierda.

— Pues entronces te aconsejo que vallas planeando como matarme. Dile adiós a esta vieja traidora...

Un disparo. Eso acabo de escuchar, un disparo que resuena en mi tímpano como la última gota que faltaba para colmar mi paciencia. Los balbuceos que antes escuché, ahora no son más que el último recuerdo que tendré de la señora Monique.

— Jean, Jean. Ey Jean ¿ Qué sucede? Estás pálido.

Sigo totalmente helado. Y mi voz resulta temblorosa al responder a Alessia.

— Monique está muerta.

Es lo único que puedo decir. Alessia se coloca una mano en la boca sin creer lo que le acabo de decir.

— ¿ Qué les sucede?

Jolie acaba de salir del cuarto de baño. Nos sorprende a ambos y para ser sinceros, no estoy seguro de si puedo contarle toda la verdad.

— Jolie, debemos ir a Lyon.— Es todo lo que puedo decirle.

— ¿ Justo ahora? Estoy muy cansada Jean, creo que mejor visitamos a Flex otro d...

— ¡Joder, Monique está muerta!