En el momento en que vi a Meg cerrar los ojos y perder el equilibrio, me apresure a afirmarla antes de que cayera al suelo, la tome en brazos y al pensar en su habitación, aparecimos en ella, fui hasta la cama de Meg y la deje sobre ésta con mucho cuidado.

-¿Lo hiciste?- aquella repentina voz casi hace que pegue un brinco, me incorpore y mire de soslayo a la pequeña chica dentro de la habitación.

-Lo hice- respondí, Adara se acercó a la cama y miro a la chica que yacía sobre ésta.

-Creó que esta vez sera diferente, creo que ella no volverá a pasar por ello otra vez- dijo acariciando la mano de Meg con la yema de sus dedos.

-¿Viste algo?- pregunte volteandome a verla, ella respondió sin dejar de acariciar la mano de Meg, mirándome de reojo.

-No mucho... Desde aquel día mis poderes no han estado muy bien- con su mano libre retiro un mechón de cabello de la cara de la durmiente- Pero he visto algo, es pequeño, pero...

-¿Lo encontraste?- la interrumpí, Adara suspiro cerrando los ojos, asintiendo a la vez.

-Algo así, no lo he logrado ver a él, pero pude ver donde puede estar.

-¿Y donde esta?- me apresure a preguntar.

-El mar de los muertos- murmuro ella.

-El... ¿ahí no es donde están..?

-Si, es donde se escuchan aquellas Melodías siniestras- dijo mirándome a los ojos, tense la mandíbula y se me erizo la piel de solo pensar en ese lugar.

-Ese lugar es peligroso- dije en un murmullo, suspire, tenia que pensar, era por lejos el peor lugar donde podía estar, un murmullo capto mi atención, era Megara la que hablaba mientras dormía.

*Ignis vero umbrae fines metu illuminet somniat aperit possum videre audireque quae mihi visa ventum orientalem profundum labitur somniorum.
Ignis vero umbrae fines metu illuminet somniat aperit possum videre audireque quae mihi visa ventum orientalem profundum labitur somniorum.

-Ella...- dijo Adara algo asustada.

-¡Maldición!- acorte la poca distancia que me separaba de Meg y puse mi mano derecha sobre su frente- Altmar akbar zansibar calendula.

-¿Crees que ella..?

-No lo se- me separe de Meg al ver que su semblante se relajaba- Debemos hablar con el resto.

-¿Con el consejo también?- pregunto preocupada.

-No creo que debamos - me pase la mano por el cabello pensativo.

-Graham, ¿Que harás?- Adara esperaba una respuesta que no tenia.

-Yo... Aún no lo se- mire a Meg por ultima vez- Por ahora, solo hablare con los demás, mientras tanto- hice una pequeña pausa para mirar a Adara- Cuidala, no la dejes sola.

-Si, esta bien... Sabes que nunca lo haría, es... Es mi amiga- respondió con ojos tristes.

-Lo se- toque su hombro- Te recordara- no espere a que respondiera, solo me fui.

*"*

-¿Entonces le devolviste la memoria?- todos los presentes esperaban mi respuesta.

-Si Myles, junto a sus poderes- respondí.

-¿Y esta vez cuanto tiempo estará inconsciente?- Zora se veía preocupada.

-Una semana, tal vez- respondí encogiéndome de hombros.

-Ahora solo debemos esperar a que despierte- comento Nicodemus.

-Adara... Ella vio algo- todos se veían realmente asombrados.

-¿Que? Pero ella... Ella no había visto casi nada desde aquel día- Ares que se había mantenido en silencio junto a su hermana, se había puesto de pie llamando la atención del resto.

-Si, lo se, ahora por primera vez sabemos en donde puede estar- me pase la mano por el cabello nervioso- Él esta en... en el mar de los muertos.

Todos los que estaban en la sala se quedaron en silencio, ellos al igual que yo, sabían que tan peligroso era ese lugar.

-Es por eso que en todos estos años no lo pudimos hallar- Litsa rompió el silencio.

-Eso es... ¿les dirás al consejo?- pregunto Ariadna, negué con la cabeza- ¿Entonces, que harás?

-Por ahora, debemos proteger a Megara, ella esta vulnerable.

-Graham tiene razón- Myles se veía pensativo- Ahora que Meg esta inconsciente, los que están en contra de ella, intentaran matarla.

-Ariadna y Ares, necesito que ustedes la protejan- ambos hermanos asintieron afirmativamente- Litsa, Zora, investigen todo, todo sobre el mar de los muertos, tal vez haya algo que pasamos por alto, Myles, Nicodemus, ustedes eviten a toda costa que el consejo se mueva, no podemos dejar que ellos se enteren de lo que sucede, si lo hacen, estarán en desacuerdo con nosotros...

-¿Y yo que haré?- nos volteamos a ver al dueño de aquella voz.

-Colín, ¿que haces..?

-Quiero ayudar- me interrumpió, esta era la primera vez que lo veía tan serio, suspire.

-Tal vez podrías evitar que tu hermano se acerque a Megara- el asintió sin decir nada- Bien, junto a Adara nos encargaremos de los preparativos, en cuanto Megara despierte, nos iremos.

-¿Quienes irán?- pregunto Zora.

-Aún no lo he decidido, ahora en marcha.

Por mucho, esta era la misión más peligrosa de todas, si queríamos regresar con vida del mar de los muertos, tenia que elegir a los mejores, por eso tenia que pensar bien antes de tomar una decisión, esta seria una larga semana.

*"*

Había venido a ver a Megara, después de cuatro días sin verla, Ariadna dormía en un sillón que estaba en la habitación, mientras Ares caminaba de un lado a otro por la estancia.

-¿A habido algún cambio?- pregunte acercándome a Meg.

-No mucho- respondió Ares yendo a mi lado- Aunque...

-¿Que?- dije volteando a verlo, Ares estaba algo nervioso- ¿Que pasa?

-Ella hablo dormida- dijo por fin.

-¿Que dijo?.

-Un encantamiento...

-¿Cual?- dije frunciendo las cejas.

-Para ver visiones- apreté la mandíbula, esta chica era realmente algo.

Mire a Meg, se veía tan tranquila durmiendo, aún me preguntaba, ¿que era lo que ya había recordado como para pedir ver visiones?, la vi mover su mano, mientras su respiración se agitaba un poco.

-Falta poco- muermure.

-¿Despertara?

-Tal vez en uno o dos días.

-Ya... La vez pasada duro más de un mes inconsciente, esta vez solo han sigo algunos días.

-Lo se- tome la mano de Meg y mire su marca, ésta estaba verde, deje su mano en donde estaba antes y me voltee a ver a Ares- Deben estar alerta, no sabemos que tanto recuerde al despertar.

-Si.

El tiempo era oro, solo faltaban pequeños detalles para poder estar listos, por mi parte ya había elegido quienes irían al viaje.

**♪**

Me incorpore al despertar, estaba algo mareada, por la poca luz que entraba desde la ventana pude notar que estaba en mi habitación, me levante con cuidado, fui hasta el armario y saque uno de los tantos vestidos que ahí habían, me puse uno azul y unos tacones negros, era bastante temprano por lo que supuse que todos estarían en el comedor, pensé en éste y aparecí cerca de la puerta, no había nadie ¿donde estaban todos? abrí la puerta y salí, los pasillos estaban vacíos, pero vamos, eso casi siempre era así, fui abriendo puerta tras puerta, pero no había ni un alma en ninguna parte, ¿que estaba pasando? sentí unos pequeños pasos que se acercaban a gran velocidad en el pasillos contrario, me detuve a ver quien era, en pocos segundos una pequeña niña apareció, tenia los ojos inundados en lágrimas, las cuales se limpiaba con la manga de su vestido, al verme abrió los ojos sorprendida, corrió hasta donde yo estaba y me abrazo, me agache y acaricie su cabello, cuando la niña estaba más calmada limpie sus lágrimas con mis pulgares.

-Princesa- dijo con voz temblorosa.

-¿Que pasa linda? ¿alguien te asusto?- la niña nego efusivamente con la cabeza- ¿Entonces?

-Salvalos por favor- dijo volviendo a llorar.

-¿Que? ¿de que hablas? ¿salvar a quienes?- pregunte confundida.

-A todos- respondió, con sus manitas retiro las lágrimas de sus mejillas- Están afuera luchando contra los brujos, mi madre estaba herida, dijo que corriera y me escondiera- mi corazón comenzó a latir a gran velocidad, ¿que diablos estaba pasando? Mis ojos se dirigieron a mi brazo izquierdo, la marca estaba cambiando de color, de verde a rojo, lentamente comenzó a quemarme.

-Ven- tome la mano de la niña y me acerque a una de las puertas, al abrir la puerta estábamos en mi habitación- Quedate aquí, si estas en peligro grita mi nombre, vendré enseguida ¿de acuerdo?- ella asintió, le sonrei- No te preocupes, iré a ayudar a los demás.

En un segundo ya estaba en la puerta principal, la abrí sin dificultades, al salir afuera era todo un caos, habían muchas personas en el suelo, algunos sangraban, otros solo estaban inconscientes, la marca en mi brazo cada vez quemaba más, uno de los brujos al verme corrió a atacarme, traía un cuchillo ensangrentado, lo eche a volar con un movimiento de muñeca, ¿donde estaba Graham? Camine por entremedio de las personas, lanzando lejos a cualquier brujo que me topara, pude divisar a lo lejos a Myles, se veía bastante cansado, ya estando en medio de todo, me detuve.

-¡Alto!- grite, esto solo me tomaría unos segundos, todos los presentes se detuvieron, los brujos al verme se abalanzaron sobre mi, que estúpidos, levante mis manos con las palmas hacia arriba haciendo que todos aquellos que tuviesen los ojos dorados levitaran en el aire, comencé a cerrar mis manos y en menos de un suspiro los gritos de los brujos se oyeron por todo el lugar.

-¡Megara!

-Tranquilo Graham, no los matare- los gritos dejaron de oírse- Solo los deje inconscientes- los deje caer y me voltee a ver a Graham.

-Saquen a los brujos antes de que despierten, luego vuelvan a poner el campo de fuerza- camine junto a Graham de vuelta al templo, fui directo a mi habitación, la niña estaba acurrucada en la esquina de la habitación, me acerque a ella con cuidado de no asustarla, cuando levanto la vista se levanto de golpe.

-Princesa- le sonrei- ¿Como..?

-Esta bien, los brujos ya se fueron- ella me abrazo las piernas.

-Gracias princesa- me soltó y salio corriendo, seguramente a buscar a sus padres, pensé en Graham y aparecí frente a él, antes de decirle cualquier cosa la hoja de una espada atravesó su pecho, Graham cayó al suelo y pude ver al hombre que lo acababa de apuñalar, este estaba vestido todo de negro y sus ojos eran del mismo color de sus ropas, mis piernas temblaban, el dolor de la marca quemandome no era nada comparado al dolor que sentía en mi pecho, Gaham, él acababa de ser asesinado por este hombre, era incapaz de producir sonido alguno, tenia miedo, el hombre comenzó a acercarse a mi, no pude retroceder ya que mis piernas no me respondían, ¿acaso yo también moriría? mi vista se nublo y luego todo era negro, ¿me había desmayado?

-¡Graham!- grite al despertar, me senté en la cama, mi corazón latía a gran velocidad.

-Megara, tranquila- la chica de ojos claros se acerco a mi, se sentó a mi lado y tomo mis manos.

-Des... Adara, Graham, él...- no podía creerlo, ¿como era que esto terminara así?

-Él esta bien- mire a la chica a mi lado.

-¿Como puede estar bien? le atravesaron el corazón con una espada- quería llorar, puse mi mano en mi pecho, me dolía.

-Eso, Meg, tuviste una visión- ¿una visión? Pero se había sentido tan real, ¿como era eso posible?

-¿Una visión?- pregunte confundida.

-Si, mientras dormías, conjuraste una hechizo para tener visiones.

-¿Que hice que?- ¿yo podía hacer ese tipo de hechizos?- Espera, ¿entonces Graham esta bien?

-Por ahora- Adara soltó mis manos y se levanto.

-¿Por ahora? ¿a que te refieres con eso?

-Tuviste una visión, eso quiere decir que todo lo que viste pasara en algún momento- se quedó pensativa- Cuantame lo que viste.

Le conté a Adara todo lo que había pasado, más bien lo que aún no pasaba, cada pequeño detalle, hasta llegar al momento en que vi morir a Graham.

-Él hombre que lo apuñalo, estaba vestido de negro, pero... Sus ojos, estos eran completamente negros, no había ningún color más en ellos.

-Él es el mago oscuro- dijo frunciendo el ceño.

-¿El mago oscuro?

-Si, lo bueno es que, por lo que me contaste falta mucho para que eso pase.

-¿A que te refieres?- quise saber.

-Dijiste que pudiste usar magia sin necesidad de encantamientos- asentí- Solo los magos pueden usar magia sin encantamientos ni pociones.

-¿Eh?- ¿a que se refería con eso? Yo ni siquiera sabia usar encantamientos.

-Eres la descendiente de Merlín, todos en el reino saben que puedes usar la magia a tu antojo, como el mismísimo Merlín, solo que cuando sellaron tus recuerdos, también sellaron tus poderes, pero ahora que te devolvieron tus recuerdos podrás volver a usar magia como antes.

-Pero, yo apenas recuerdo partes de mi infancia, aún no recuperó toda mi memoria.

-Lo se, tomara algo más de tiempo- camino hacia la puerta- Por ahora llamare a Ariadna para que prepare tu baño, hay muchas cosas que debes saber ahora que despertaste, pronto nos iremos.

-¿Irnos? ¿a donde?- pregunte levantándome.

-Al mar de los muertos- un escalofrío recorrió mi espina dorsal, el nombre de aquel lugar daba miedo, ¿porque teníamos que ir ahí?

-¿Porque?- pregunte.

-Eso te lo dirá Graham, nos vemos luego- tras decir esto desapareció, no pasaron ni dos minutos y la puerta sonó.

-Adelante- Ariadna entro a la estancia y al verme sonrió.

-Su baño esta listo- suspire, ¿que diablos estaba pasando? ¿cuanto tiempo había estado dormida? ¿porque teníamos que ir a ese lugar de nombre espeluznante?

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N/A:

Lamento no haber subido ayer, (aunque no se si se haya notado, ya que tengo muy pocos lectores en esta historia 😢😢)

Les doy las gracias a los que están leyendo esto, enserio se los agradezco.

Glosario:

*Ignis vero umbrae fines metu illuminet somniat aperit possum videre audireque quae mihi visa ventum orientalem profundum labitur somniorum.
Ignis vero umbrae fines metu illuminet somniat aperit possum videre audireque quae mihi visa ventum orientalem profundum labitur somniorum.:

La llama alumbra las sombras y la verdad acaba con el miedo, así abre los sueños para que yo pueda verlos y oírlos, que el viento del este se deslice trayéndome como visiones los mas recónditos sueños.

*Altmar akbar zansibar calendula:

Este es un hechizo para despejar y relajar la mente.

♥HarunaNanami😘