Antes de que Liv me dijera lo que tenia pensado, la puerta del comedor se abrió, volteé a ver quien era, la chica que paso era alguien a quien conocía, era la rara de la prepa, baja, de cabello castaño claro y como siempre muy extraña.

-¿Que es esto?- dije poniéndome de pie- ¿Acaso ahora aparecerá mamá y Drea?- pregunté fruncido el ceño.

-No, ellas son humanas- dijo Destiny, la chica rara.

-¿Hay algún otro guardián que no este aquí?- pregunté cruzándome de brazos.

-No, ya estamos todos- respondió papá, o más bien el papá de Liv, apenas término de decir eso la puerta se volvió a abrir, por esta apareció una chica, no aparentaba más de veintiséis años, era pelirroja y obviamente tenía los ojos violeta, ella sonrió y se acercó corriendo a mi, se abalanzó sobre mi dandome un fuerte abrazo.

-Megara, Meg, hija ya estas aquí- dijo ella ¿Megara? ¿hija? ¿como podía ser su hija?, sólo era unos siete u ocho años mayor que yo.

-¿Disculpa?- pregunte confusa aún entre sus brazos, ella se separó de mi y tocó mi mejilla.

-Estas hermosa- dijo ella.

-Mamá, ¿que haces aquí?- preguntó Jaison, lo miré con los ojos muy abiertos.

-¿Mamá?- pregunte confundida, Jaison rasco su cabeza y asintió- ¿Estas bromeando? es casi de tu edad- dije recordando que Jaison tenía veintitrés.

-No es broma, en nuestro mundo envejecemos de manera distinta a los humanos de la Tierra, hay algunos que viven mas de diez siglos, dije que tenia veintitrés pero en verdad tengo doscientos veintitrés años, casi todos los de esta sala no sobrepasamos los trecientos años - respondió mi hermano.

-¿Que, es enserio? pero entonces... ¿Que edad tengo?- pregunté ya que al decir todos, también estaba incluida yo, ¿verdad?

-Tu eres diez años menor que yo- dijo él.

-¿QUE?- dije mirándolo alterada, eso quería decir que yo tenía... -¿Entonces yo tengo doscientos trece? - el asintió- Esto es una locura, espera, entonces ¿porque papá, digo, el papá de Liv se ve como de cincuenta?- pregunté mirando a mi falso padre.

-Es por un hechizo, no podían tener un padre que se viera como de vuestra edad- respondió el papá de Liv- Aunque yo ya tengo cuatrocientos cincuenta y dos.

-Ya, entiendo, no, en realidad no entiendo nada, todo esto es una locura- dije pasando mis manos por mi cara.

-Por eso teníamos que ir lento- escuche que decía Graham.

-¿Graham, aún no le has..?- preguntó la que decía ser mi madre.

-No aún no, primero tengo que hablar con los ancianos.

-Esta bien- respondió ella sonriendo.

-Aún quedan muchas cosas que no me han dicho- dije mirando a Graham.

-Lo se, pero ahora tenemos que ir al consejo- dijo Graham.

-Ah, donde los ancianos, que al parecer tampoco serán tan ancianos que digamos- dije frunciendo el ceño.

-Exacto- respondió Graham- Bien, vámonos- dijo acercándose a mi, antes de que pudiera protestara el tocó mi hombro y aparecimos en una especie de sala enorme, con una mesa redonda al medio y varias personas ocupando los asientos.

-¿Es broma?- dije viendo la mesa redonda, por lo que había visto en la televisión se suponía que la mesa redonda pertenecía al Rey Arturo y a sus caballeros.

-Ya están aquí- dijo uno de los "ancianos".

-Tomen asiento - dijo otro, Graham hizo que me sentara y luego se sentó a mi lado.

-¿Que es todo esto?- pregunté mirándolos seria, ellos me miraron confundidos.

-¿No le has devuelto su memoria?- preguntó un "anciano" de negros y largos cabellos.

-No es el momento- respondió Graham.

-¿Que no es el momento? ella ya debería recordar, pronto los brujos sabrán que ella esta aquí- dijo el mismo sujeto.

-¿Mi memoria?- pregunté pero me ignoraron.

-Yo sabré cuando devolverle los recuerdos, aún no esta lista- dijo Graham enfadado.

-¿Pueden dejar de ignorarme?- les grite poniéndome de pie, todos me miraron y luego se miraron entre ellos.

-Creo que Graham tiene razón, ella no esta lista- dijo ¿una chica? aunque mirándolo bien era un chico, solo que me había confundido por su largo cabello rojizo, pero por su voz era obvio que era un chico.

-Aún no esta lista- dijo uno de los hombres.

-No, aún no lo esta, ahora es mucho mas molesta que antes- repuso otro.

-Estoy harta- dije enfadada- Cuando quieran hablar conmigo me llaman- camine a la salida, para largarme de la estúpida reunión, con los estúpidos ancianos.

-Adhuc, sedere retro et- escuche que decía uno de ellos, sentí como volé por los aire y me sentaban en el lugar de antes.

-¿Pueden dejar de utilizar su magia conmigo?- pregunte entre dientes, ya que aún no me podía mover.

-¿Que tienes pensado hacer con ella?- preguntó uno de los ancianos, otra vez me ignoraban estos malditos.

-Enseñarle toda la historia, de nuevo- respondió Graham, los ancianos se miraron y luego asintieron- Bien, nos retiramos.

-Malditos brujos- murmuré, pero al parecer no tan bajo ya que todos me miraron sorprendidos, pero luego se enojaron, sentí como unas manos invisibles me tomaban del cuello y comenzaban a ahorcarme- ¡Ah!- logre gritar, no podía respirar bien.

-Suficiente- dijo Graham muy molesto, el dolor cesó y la inmovilidad también- Lo vuelves a hacer y no respondo de mis actos- dijo tomando mi mano y levantandome, ¿no se suponía que era un perro del consejo, o mas bien de estos ancianos?

-Idiota- murmuré mirando enfadada al tipo que supuse había usado esa magia en mi, un segundo después aparecimos en una habitación en la cual habían dos mesas y dos sillas.

-Sientate- ordenó apuntando a la mesa y la silla que estaba en medio de la habitación.

-¿Para que?- pregunté aún enfadada.

-Empezaremos con tu lección- respondió.

-¿Lección? ¿de que lección me hablas?- dije alzando una ceja.

-Tienes que aprender la historia de Merlín- dijo él.

-Si es la historia de Merlín ya me la se, vi todas las películas y series que salieron de él- conteste.

-Eso no sirve- respondió, pero no me moví de donde estaba- Vamos, lo tendrás que hacer si o si- dijo Graham, me cruce de brazos y lo miré desafiante, Graham se paso la mano por la cara y suspiro- No quiero recurrir a la magia, por favor, sientate.

-No quiero- dije desafiante, si, muy buena idea, desafía al hechicero, me dije siendo sarcástica internamente.

-Obedire et sede- dijo él, sin que yo quisiera tome la silla y me senté, odiaba eso, pero tu fuiste la que lo desafío, no te quejes, me dije a mi misma, resople y espere a que el diera inició a la historia - Bien, comenzaré.

-Adelante, te escuchó- dije de mala gana.

-A ver, eres descendiente directa de Merlín...

-Ok, ¿puedes decirme como es que soy descendiente de Merlín?- pregunté interrumpiéndolo.

-Pues tu padre era el hijo de...- lo volví a interrumpir.

-¿Porque tengo esta marca en mi muñeca?- pregunté volviendo a interrumpirlo, Graham se sentó sobre la otra mesa y fruncio el ceño.

-El oráculo dijo...

-¿Hay un oráculo?- pregunté.

-Si- respondió molesto.

*"*

Llevábamos como dos horas en la habitación, Graham trataba de contarme la historia pero yo lo interrumpía no dejándolo terminar y al parecer ya se estaba hartando.

-Bien, empezaremos con la muerte del Rey- dijo él.

-Esta bien- dije sonriendo.

-Tras el fallecimiento del Rey Balinor, se desato una guerra por el trono de Ealdor, los dos herederos Merlín y Mordred, pelearon para poder acceder al trono...- lo interrumpí.

-Espera, ¿Mordred? ¿él no era un druida?- Graham paso la palma de su mano por su cara y me miró.

-Deberías olvidar todo lo que aprendiste en la televisión ¿y, puedes dejar de interrumpir?- me dijo él, resople e hice un gesto para que él siguiese con la lección -Bien, la guerra entre Merlín y Mordred...

-No entiendo- lo volví a interrumpir.

-¡Claro que no entiendes, llevo horas tratando de explicarte, pero tu te la pasas interrumpiendo!- me dijo enfadado.

-Bueno si me lo explicaras mejor, podría entenderlo- respondi haciendo un puchero, patetico, ¿no?- Por que no empiezas a explicarme como es que Merlín y Mordred son hermanos, ¿si?

-Esta bien, tú ganas, volveremos aun mas al pasado- dijo Graham entornando los ojos.

-Estupendo- dije acomodándome ya que llevaba horas sentada de la misma posición.

-Pero te advierto que si me vuelves a interrumpir, me veré obligado a usar la magia- dijo amenazante.

-Ok- musite encogiendome de hombros, había tratado de fastidiarlo todas estas horas, para que así se cansara y me dejara en paz, pero no daba resultado, no me quedaba de otra que escuchar lo que tenía que decir.

-Bien, ehmm, el Rey Balinor se caso con Denae, una hechicera de clase noble- iba a preguntarle a que se refería con clase noble, pero él me miró mal así que no dije nada- Con ella tuvo gemelos, Merlín y Mordred, Denae murió cuando los niños cumplieron trece años, un Mago que practicaba las artes oscuras la envenenó, buscaron por todo el reino a tal Mago pero no dieron con él.

<<Cuando los gemelos tenían ciento veinticinco años se casaron, Mordred se caso con Morgana, una hechicera de clase noble que a escondidas practicaba las artes oscuras, pero Merlín se caso con una plebeya, llamada Guinevere más conocida como Gwen- de nuevo tuve curiosidad por lo de noble y plebeyo, también porque según las historias de la Tierra Gwen era la chica que se quedaba con Arturo y Morgana era su hermana o prima, ya no estaba segura, pero cuando le iba a preguntar él me hizo un gesto para que no dijera nada, bufé y espere a que continuara- Las princesas tuvieron hijos y todo se complicó, Mordred quería que el Rey Balinor lo dejara a acargo del reino y no a Merlín, que era el primer hijo y el que debía acceder al trono. El Rey dijo que él decidiría quien iba a tomar su puesto, pasaron semanas y el Mago oscuro volvió a atacar, matando al Rey Balinor cuando este dormía, días después de su funeral Mordred trató de usurpar el trono, pero el testamento del Rey decía que Merlín era su sucesor. Merlín se regía por las órdenes del Rey, nunca quiso ser Rey pero él conocía el corazón de su hermano y sabia lo que hacía la esposa de éste, por eso sabía porque su padre le encargaba a él el reino y no a Mordred.

<<Mordred quería el trono a como diera lugar, nadie sabe como paso, pero se puso en contacto con el Mago oscuro e hicieron un trató, el Mago mataba a Merlín y Mordred por fin accedería al trono, pero no era tan fácil como Mordred pensaba, si el Mago mataba a Merlín, Mordred le entregaría su alma, pero si no lo hacía y lo dejaba vivo pero en donde nadie lo pudiese encontrar, Mordred podría conservar su alma a cambio de la mitad del reino. Él aceptó y el Mago oscuro atacó a Merlín, hubo una fuerte lucha entre ellos pero con la ayuda de Mordred y Morgana el Mago logró encerrar a Merlín en una burbuja de cristal, la cual envió a un sitio que nadie a podido encontrar, después de eso, el reino se separó, los que siguieron a Mordred fueron llamados brujos ya que comenzaron a practicar las artes oscuras, y los que siguieron al Rey Balinor y Merlín nos seguimos llamando hechiceros. Mordred tenía en su poder la mitad del reino más al Mago oscuro, el Mago oscuro quería la mitad del reino que le correspondía pero los ancianos se quedaron con la otra mitad y la defendieron, hubieron muchas pérdidas, pero con mucho esfuerzo lograron proteger todo esto, los ancianos fueron a consultar con el antiguo oráculo, para saber como podían recuperar a Merlín, a lo que este les dijo que sólo una persona lo podría salvar, o morir en el intento y perder todo por lo que hemos estado luchado...

-Espera, ¿esa persona soy yo?- pregunté algo asustada por lo último que había dicho.

-Exacto, el oráculo dijo que nacería un descendiente directo de Merlín el cual tendría blancos cabellos y una marca en forma de media luna la cual cambiaba de color, mucho tiempo esperaron por el nacimiento de tal hechicero, hasta que naciste tú, eras tal cual había dicho el oráculo...

-Pero, mi cabello es algo gris, no blanco- dije mirando un mechón de cabello.

-Eso es por lo que paso después- dijo Graham mientras miraba el suelo.

-¿Que fue lo que paso?- pregunté curiosa.

-Cuando tenías diez años, ya todos sabían que eras la descendiente de Merlín, la cual lo rescataría y nos salvaría a todos, de alguna manera los brujos también lo supieron y trataron de eliminarte, tus padres lograron esconderte por ciento cinco años, hasta que Mordred los encontró- estaba muy nerviosa, quería saber que era lo que había pasado, por un momento me sentí mareada y mi vista se comenzó a nublar- Tu padre...- mi cabeza dolía.

-Gra-Graham...- fue lo ultimo que dije y entonces todo se oscureció.

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Glosario:

*Adhuc, sedere retro et: Quieta, regresa y sientate.

*Obedire et sede: Obedece y sientate.

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Hola, yo aquí de nuevo, esperó les este gustando el libro, este cap se lo dedicó a @AbbyKirin una muy buena amiga, esperó te guste, les dejó una imagen de la mamá de Nixie, voten y comenten.

♠HarunaNanami.