Un sonido de ultratumba hizo que despertara de golpe, mire asustada para todos lados y ahí estaba mi hermano, de pie bajo el marco de mi puerta con su celular en la mano (de donde provenía el sonido endemoniado) mientras se reía de mi, tome una de las almohadas y se la lance, lo que mas odiaba era el día de las brujas, mi hermano se dedicaba a asustarme todo el día y por si fuera poco, mis padres adornaban la casa de una manera escalofriante, casi macabra.

Suspire y me dispuse a salir de la cama, lo bueno era que había convencido a mis padres (los cuales eran muy sobre protectores y no dejaban que yo saliese sola) para que hoy me dejaran ir de compras con mis amigas, al igual que a mi a ellas no les gustaba el día de las brujas, nos disfrazábamos e íbamos a fiestas que hacían en mi casa, si como ya dije, me cuesta mucho convencer a mis padres para salir a algún otro lado, eso era lo que odiábamos, las fiestas en casa, bueno, no eran malas, pero no podíamos hacer lo que queríamos ya que mis padres y hermano estaban constantemente vigilándonos, mi hermano y sus amigos nos daban sustos de muerte, lo cual detestaba profundamente, a pesar de no demostrarlo me asustaba por muchas cosas.

Sacudí la cabeza para alejar esos pensamientos de mi mente, me levante y fui a bañarme, ya lista me vestí con unos jeans ajustados, unos botines de medio taco, me puse una camiseta de tiros negra y encima una blusa a cuadros (fucsia, amarillo y verde) la cual deje abierta, me mire al espejo para inspeccionar que todo estuviera bien, quede mirando mis ojos, ya estaba acostumbrada a ver este color aunque nunca se lo había visto a otra persona, quizás era alguna anomalía, también miré mi cabello por un largo tiempo, tome el brazalete que estaba en el escritorio y lo coloque en mi muñeca izquierda, me mire por ultima vez al espejo y luego salí.

Como ya sabia mis padres habían adornado la casa tan espeluznante que parecía una verdadera casa embrujada, casi como un cementerio, salí de casa después de despedirme de mis padres. Con las chicas habíamos decidido juntarnos en el centro comercial, así que espere un momento hasta que paso un taxi, el cual me llevo a mi ansiado destino, cuando llegue camine hasta el punto de encuentro y ahí estaban mis dos queridas amigas Drea y Liverty, cuando me vieron corrieron a mi, bueno exagero, solo Drea corrió.

-Nixie, me alegra que te dejaran venir- dijo mi castaña amiga, mientras me daba un abrazo.

-Drea, ya te había dicho que esta vez si lo lograría- respondí sonriendo, el verdadero nombre de Drea era Valerie, Drea era su sobrenombre ya que ella era fanática de Dr Dre y decía que si el fuese mujer seria Dra Drea, así que quedo como Drea.

-Lo bueno es que estas aquí Nixie, ahora hagamos lo que vinimos a hacer - sonrei por lo que acababa de decir Liv, ella siempre andaba con un color distinto de cabello, ahora lo traía rosa con dos pequeños mechones lilas y para ser honesta se le veía muy bien, cualquier color se le veía bien a ella.

-Bien, pues andando- dije tomando sus antebrazos y comenzando a caminar.

Estuvimos hasta tarde en cada tienda del centro comercial, hoy nos escaparíamos a la fiesta de Will, uno de los chicos mas populares de la preparatoria, con las chicas ya habíamos elegido nuestros disfraces, Drea se vestiría de pocahontas, Liv de bruja y yo de pirata. Ya con nuestras compras listas salimos del centro comercial, Liv fue la primera en despedirse.

-Bien chiquitas, yo llego hasta aquí, y por favor no lloren mi partida, pues volveré- dramatizó y tras decir esto, hizo una pequeña reverencia y comenzó a alejarse.

-Adios Livy, nos vemos en la fiesta- le grito Drea, yo sonrei y también le grite un adiós. Luego de eso caminamos un poco con Drea y ella se detuvo al recibir un mensaje, miró la pantalla de su celular y sonrió, luego se dio la vuelta y me miro con cara de cachorrito- Nixie, ¿te importa si me voy primero? se que te dije que nos iríamos juntas a tu casa pero...- la mire y sonrei, conociéndola sabia perfectamente lo que me quería decir.

-Esta bien, no hay problema- la interrumpi y ella me dio una amplia sonrisa- Saluda a Max de mi parte.

-Por supuesto- dijo mientras me abrazaba y en menos de un segundo se fue corriendo, Max era un buen chico y me caía súper bien, su relación era reciente pero lo prefería a él que a Frankie, su ex novio.

Esta vez camine a casa, con todas las cosas que había comprado, ya no me alcanzaba para el taxi, el centro comercial no quedaba tan lejos de mi casa, diez cuadras no era mucho, o ¿si?. Ya solo me faltaba la mitad de camino para llegar a casa, habían personas ya disfrazadas y cada vez estaba mas oscuro así que apresure el paso.

Sentía como si me estuviesen vigilando, mire hacia atrás solo por precaución, detrás de mi venia un chico, no demostraba mas de veinte o tal vez veintitrés, volví a mirar al frente y seguí caminando a paso rápido, me faltaban solo dos cuadras para llegar y por curiosidad mire sobre mi hombro, el chico seguía aun detrás de mi, algo que me pareció muy sospechoso, mi corazón comenzó a latir a gran velocidad, corrí para poder perderlo y en un momento de estupidez me metí en un callejón sin salida, al darme la vuelta para salir del callejón vi al chico acercándose a mi.

-¿Quien eres? ¿y porque me estas siguiendo?- me atreví a preguntar, el chico se comenzó a acercar a paso lento hacia donde estaba yo- No des ni un paso mas- le advertí, él solo sonrió y dio los pasos suficientes para estar a menos de un metro de mi.

-Debes venir conmigo- dijo sin mas.

-¿Ir contigo? ¿a donde?- pregunte, su sonrisa me pareció macabra como si de un psicópata o un violador se tratara, tal vez era por la sombra de la poca luz que le daba la farola, aun así di un paso hacia atrás- No te conozco, ni sueñes que iré contigo a algún lugar.

-Debes venir conmigo - repitió- Debemos ir a Ealdor.

-¿Ealdor?- pregunté- ¿Eso siquiera existe?.

-Claro que existe, es donde naciste- ¿donde nací? ¿de que estaba hablando?- Es hora de que vuelvas y salves a tu pueblo, tú eres nuestra única esperanza.

-¿Que? ¿crees que soy una especie de jedi como Luke Skywalker o Obi-wan kenobi?– pregunte riendome.

-Pues eres mucho mas poderosa que esos dos juntos -respondió él. ¿Que? ¿era enserio? ¿que le pasaba a este tipo?.

-¿Mucho mas poderosa dices? entonces, ¿porque no puedo hacer que un psicópata violador como tu se aleje? ¿y que es eso de que debo salvar a mi pueblo?- él solo me miraba serio- Mira, no se quien creas que soy o que tan loco estas, pero es mejor que te mantengas alejado de mi.

-¿Crees que me intimidas?, con tu poder sellado no puedes hacerme nada- se río de mi, me dio algo de miedo su risa- Antes preguntaste porque tu debías salvar a tú pueblo, pues la respuesta es fácil.

-¿Ah, si? ¿y cual es esa respuesta?- le pregunté- Ah, ¿y a que te refieres con que mi supuesto poder esta sellado?, no lo entiendo.

-Bueno te lo resumiré, tú naciste en Ealdor, eres descendiente de Merlín...-lo interrumpí al escuchar ese nombre.

-¿Merlín?.

-Si, Merlín- dijo rodando los ojos, lo que me faltaba, ¿él pensaba que yo creería semejante barbarie? - Siguiendo con lo que te decía, hay una profecía que dice que un descendiente de Merlín, el cual nacería con una marca y el cabello blanco seria la salvación o la perdición de su pueblo, tú fuiste la única que nació con esa marca y ni hablar de tu cabello, ya que todos los días te lo ves en el espejo o agarras los mechones más largos para observarlo.

-¿Qu.. Que?- tartamudie, ¿como sabía lo que hacia por las mañanas? ¿acaso era un acosador que me seguía a casa y me espiaba todos los días?- Estas loco, ¿sabias?- le dije, el suspiro, me asustaba que supiese tanto de mi- No tengo tiempo para estupideces, ya me voy- dije tratando de irme, pero él se puso en mi camino.

-Mira niña, no estoy jugando, ya es hora de volver- dijo con una cara que en realidad era bastante aterradora- No tienes otra opción.

-No soy una niña, y claro que tengo otra, si te atreves a tocarme uno solo de mis cabellos, gritare que un pervertido me quiere violar- lo amenace tratando de no sonar asustada.

-Hey niña, como ya te dije, sin tu poder no puedes hacer nada.

- ¿Que poder? ¡¡no tengo ningún maldito poder!!- le grite, ya estaba comenzando a exasperarme.

-Como descendiente de Merlín, tu eres una hechicera, aunque selle tu poder cuando te traje al mundo humano.

-¿El mundo humano? ¿hechicera? ¿Merlín?, esto suena realmente loco, puede que esto sea contagioso así que mejor me voy a casa- dije algo confundida y alterada.

Pasé por al lado de él y comencé a alejarme, nunca pensé que alguien tan guapo pudiese estar tan demente, iba a la mitad del callejón y en sólo un abrir y cerrar de ojos él chico estaba delante de mi, lo mire aterrada, no sentí en ningún momento que él me siguiera.

-¿De... De donde saliste?- tartamudie, frunci el ceño y le apunte con el dedo índice- Te advertí de lo que haría, ¿verdad?- lo mire a los ojos por unos segundos y luego comencé a gritar- ¡Auxilio! ¡que alguien me ayude!, ¡Que alguien me salve de este maldito loco, me quiere violar!, auxi...

-Silentium- me interrumpió, trate de seguir gritando pero no salia sonido alguno de mi garganta- ¿No me crees verdad?, pues te demostraré que es verdad lo que digo, primero, tú eres la hechicera de la marca, la marca la tienes en la muñeca izquierda, tus ojos son de un color que nunca has visto en nadie más, aunque para nosotros es algo normal- dijo acercándose, con la luz de luna pude ver sus ojos, el color de estos eran muy parecidos a los mios, solo que un poco mas oscuros, ¿como no los había visto antes?- Y se que cubres esa marca por que cambia de color, Et cum volueritis potestis loqui.- murmuró y por fin pude sentir que podía volver a hablar, aunque no dije nada en aquel momento, yo estaba realmente confundida no tenia idea como él sabía lo de mi marca y el por que él también tenia los ojos color violeta, y por sobre todo como había hecho para que yo no hablara.

-Eh... ¿Como sabes lo que hay en mi muñeca?- pregunte luego de unos minutos aun confundida.

-Lo se, ya que me otorgaron el puesto de cuidador, protector, guarda espaldas o como quieras decirle, creo que la palabra no era otorgaron, mas bien condenaron- lo ultimo apenas lo pude escuchar, me miro y me sonrió- Mira, para que entiendas mejor debes venir conmigo.

Estiro su mano, estuve apunto de tomarla pero me arrepentí, él volvió a sonreír y se dio la vuelta, se acerco al muro e hizo algo con sus manos, también murmuro algo que no logre oír, luego se volteó a mirarme.

-¿Qu... Que pasa?- pregunte asustada.

-He abierto un portal a nuestro mundo, ahora entra- lo mire y di un paso hacia atrás.

-Oh por Dios, es mas serio de lo que pensé, ¿no me digas que te escapaste del manicomio?- dije aterrada y él fruncio el ceño- Estas loco si piensas que jugare a tu estúpido juego del portal mágico.

-No es un juego, y no estoy loco- repuso serio.

-Si como digas, loco- me burle.

-Apresurate, el portal se cerrara- hablo enfurecido.

-Como ya te dije, no pasare por tu estúpido portal, Uno: porque es falso y Dos: porque si hubiese una pequeñisima posibilidad de que fuese real, no quiero que me metas a la Era de los dinosaurios, o a la época de las cavernas, no gracias, no quiero pertenecer a la prehistoria- dije volviendo a dar otro paso atrás.

-Dejate de juegos y pasa por el portal, de lo contrario me obligaras a que yo te meta dentro- trate de cruzarme de brazos con las bolsas en las manos, espera, ¿aún existían?, con tanta locura ni sentía las bolsas- Vamos, debes hacerlo, por lo menos así te darás cuenta de que no miento- lo mire con desconfianza, pero mi curiosidad me estaba ganando, me acerqué de a poco y estaba a punto de tocar el muro- ¿Que estas haciendo?.

-¿Como que, que estoy haciendo?, dijiste que cruzara el estúpido y falso portal- respondí frunciendo el ceño.

-El portal no es falso, y así no es como se cruzan los portales.

-¿Ah, no? ¿entonces como?- pregunte fruncido los labios.

-Debes correr para atravesarlo, de otro modo quedaras atrapada en el muro- respondió serio.

-¿Qué, que? ¿como crees que voy a correr a un portal falso? de seguro que si lo hago no obtendré mas que un golpe en la cara, ¿porque no pasas tu primero?.

-¿Y arriesgarme a que no me sigas?, pues no, tú seras la primera en pasar, ahora debes hacerlo rápido antes que el portal se cierre.

-¿Sabes que? ¿porque no vuelves mañana?, quizás este de ánimo para ir contigo al país de las maravillas, porque hoy tengo una fiesta y no pienso perdermela- dije comenzando a alejarme del extraño chico.

-Ya no queda tiempo- dijo él.

-Me da igual que el portal se cierre- respondí sin mirarlo, de pronto él estaba frente a mi.

-No es por eso, los brujos están por dar contigo, si lo hacen, no dudaran en matarte- dijo afirmandome de los hombros.

-¿Brujos? ¿que no eran hechiceros?- pregunte enmarcando una ceja.

-¡Nixie no tenemos tiempo para hablar!- dijo casi en un grito, esperen, ¿cuando le dije mi nombre? bueno, si era un acosador era obvio que se lo supiese- Juró que cuando pasemos el portal te lo contaré todo.

-Pero yo...

-Hey Nixie, el templo es el único lugar seguro para ti ahora, si atraviesas el portal llegaremos al templo- dijo él, no se porque pero me gano la curiosidad que sentía por saber si lo que él decía era cierto, de lo contrario era para probar que el chico estaba loco.

-Juró que si me golpeo contra la pared me levantare y te haré pagar por eso- lo amenace.

Me aleje del muro y deje las bolsas de compra en el suelo, hice unas cuantas flexiones y me prepare mentalmente para recibir un golpe en mi cara, tome impulso y corrí hacia el muro con mis brazos al frente para proteger mi cara, esperando el golpe que nunca llegó.

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Glosarios:

*Silentium: Silencio.

*Et cum volueritis potestis loqui: Ya puedes hablar.

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Hola, esperó les guste mi nuevo inventó, si, se que ya lo había subido antes, pero he arreglado algunas cuantas cosas😅
voten y comenten si les gusto, subiré los caps todos los jueves.
En el multimedia esta la imagen del cabello de Liverty!.

-HarunaNanami.